Esta entrada ha sido escrita por Tomás Pastor (@tomas_pastor).
No es fácil comerse un bocadillo en Níger en cuanto te alejas 10 kilómetros de Niamey. Conducir hacia el este desde allí es “costear” la frontera con Nigeria. En las paradas obligadas de Dosso, Dogondoutchi y Birnin Konni (a menos de 10 km del paso fronterizo) siempre se aprovecha para conseguir más bebida, algo de pan o comer unos trozos de carne a la brasa. Aún queda mucho para Maradi y muchos más para Zinder. Mucho más allá, en el último rincón del Níger está la región de Diffa, una de las más pobres, que también está hace frontera con el Chad. Desde Enero hasta Agosto de este año se aceleró la entrada de refugiados desde Nigeria a ritmo de 7.000 por mes. Es un movimiento natural dados los vínculos a ambos lados de la frontera: como mínimo la religión musulmana y algo por la lengua haussa.