Minicuento, o minidrama, nayarita

Vista desde La Cumbre, en la sierra nayarita.

Un día muchacho se enamora de muchacha, en Nayarit (Oeste de México). Poco después, en el pueblo de la muchacha, un día llovieron flores. Muchacho había dispuesto que todos supieran de su amor. Las calles amanecieron ese día llenas de pétalos arrojados desde una avioneta. Obvio: muchacha se casó con muchacho. Cuando la familia creció, para festejarlo, muchacho hizo que lloviera de nuevo en el pueblo. Ahora la avioneta dejó caer dinero, billetes bajaban del cielo. Felicidad total. El nayarita que me cuenta la historia, y que ha sido prolijo en detalles que es mejor pasar por alto, me dice: ¿no has adivinado quién es ahora ese muchacho?

La paradoja de marchar un miércoles

Ya alguien dijo antes lo raro que son los miércoles. El de ayer en México fue un día de paradojas. Paradoja porque al son de las palabrotas, de las groserías, al canto de "Estamos hasta la madre", en Cuernavaca nació ayer un nuevo y muy civilizado movimiento social, en el que un poeta ha decidido callar ante la injusticia, y paradójicamente, cada que toma el micrófono estremece a quienes escuchan su arenga, mensaje al mismo tiempo demoledor e institucional, discurso cívico y místico, trémulo y viril, grosero y pacífico, con lágrimas y algunos toques de alegría.

Un poeta, siete asesinatos y una protesta

Javier Sicilia. Foto: EFE

Este 6 de abril, por las calles de varias ciudades mexicanas marcharán cientos de ciudadanos que están, en palabras del poeta Javier Sicilia, "hasta la madre" de la situación de inseguridad y violencia que vive México. Escribo "cientos de ciudadanos" con ganas --lo reconozco-- de equivocarme por mucho, con el deseo de que la noche del miércoles podamos reportar que fueron miles, muchos miles los que en todo el país hicieron suya la voz del poeta Sicilia, al que le han matado un hijo y que escribe que llegó la hora de "devolverle la dignidad a esta nación".

La proclama de Javier Sicilia se publica 7 días después del asesinato de igual número de personas en Morelos; entre las víctimas estaba su hijo. Se titula "Carta abierta a políticos y criminales" y apareció en la revista Proceso de esta semana.