El pasado lunes 5 de septiembre, el que fuera cabecera del equipo de inspección en BFA-Bankia, el inspector del Banco de España José Antonio Casaus, prestó declaración en calidad de testigo ante el juez Fernando Andreu (en la imagen) en la Audiencia Nacional durante dos horas. La propuesta inicial de citarle a declarar partió de Andrés Herzog, abogado que representa a la acusación popular Confederación Intersindical de Crédito (CIC), a la que se adhirió el fiscal Alejandro Luzón. En su testimonio, Casaus explica que el grupo BFA-Bankia era inviable porque ya en aquellos momentos, antes de salir a Bolsa, constituía "una máquina de perder dinero", puntualiza que la salida a Bolsa no era la solución y que acabaría -como ocurrió- con su "nacionalización". Casaus cuestiona la honradez de equipo gestor encabezado por Rodrigo Rato y apunta que sin un cambio de control en el grupo BFA-Bankia en aquel momento (la fusión o integración con una entidad más potente), la crisis sería inevitable.
Uno
A continuación, las respuestas del testigo a las preguntas del abogado Andrés Herzog.
“Yo me incorporo a Caja Madrid, que fue una de las siete cajas integrantes, me incorporo como responsable del seguimiento continuado del grupo Caja Madrid en noviembre de 2009. En junio de 2010 se anuncia la constitución de Caja Madrid, Bancaja y las otras cinco cajas más pequeñas y me mantengo del seguimiento continuado in situ del nuevo grupo, del grupo BFA Bankia y así permanezco hasta hasta septiembre de 2011 cuando se incorpora otro compañero que pasa a ser corresponsable del equipo de seguimiento del grupo BFA Bankia. Nos dividimos las funciones aunque evidentemente lo compartimos todo, además de una gran amistad con ese compañero, y me mantengo como responsable o corresponsable del grupo de seguimiento in situ del grupo BFA Bankia hasta julio de 2013 en el que llaman del Banco de España a desempeñar otras responsabilidades en la supervisión. En julio de 2013 fui promocionado a jefe de grupo de unas entidades de banca extranjera y de algunas cooperativas de crédito.
Yo era “cabecera” en el grupo BFA Bankia. El inspector de cabecera es el responsable del equipo de inspección continuado y este desarrolla su actuación supervisora en la sede de la entidad. El cabecera tiene que coordinar al equipo de seguimiento y este tiene como objetivo fundamental 1) analizar bien una entidad de crédito y sus aspectos clave que son la liquidez, la solvencia, la rentabilidad y la gobernanza, 2) concluir el perfil del riesgo supervisor que tiene dicha entidad de crédito y 3) informar debidamente de todo a la jefatura en Cibeles [Banco de España], que empieza por jefatura de grupo, coordinador ejecutivo de departamento, jefe de departamento, director adjunto de supervisión, director general de supervisión, comisión ejecutiva y consejo de gobierno del Banco de España. El equipo de seguimiento es analítico, la jefatura es toma de decisiones, cada uno en su nivel dentro de la escala.
La relación con los jefes de grupo eran flexibles en cuanto a la forma de las comunicaciones. Es decir, lo importante del equipo de seguimiento es analizar y concluir el perfil supervisor e informar debidamente a la jefatura, pero no hay una rigidez en cuanto a qué instrumento deba utilizarse para informar a la jefatura, desde una llamada de teléfono, oye que nos han dicho esto, puede ser un correo electrónico, un email, puede ser el informe de seguimiento con periodicidad definida para informar a la jefatura, pero no tiene que por qué ser el único, puede ser una reunión en Cibeles, que te llaman y lo cuentas de manera verbal, con o sin un soporte documental. A esas reuniones asistía a veces el jefe de grupo. En ese caso no mandábamos un correo porque lógicamente se había enterado personalmente. Y luego, por ejemplo, las de liquidez, por ejemplo, recuerdo que las hacía una compañera, no las hacía yo.
Cuando se constituye el SIP [Sistema Institucional de Protección, llamado fusión fría], creo que fue el 14 de junio de 2010, era jefe de grupo Javier del Río, pocas semanas después accede Pedro Comín a la jefatura de grupo, y está hasta septiembre de 2011, que le nombran en el FROB, pero a efectos prácticos. Pedro Comín estuvo de finales de julio de 2010 a septiembre de 2011 como jefe de grupo.
Sobre la salida a Bolsa de Bankia hubo varios correos electrónicos. Hay que enmarcar el tema. En febrero de 2011 había salido una normativa que incrementaba los requerimientos de capital para las entidades de crédito y establecía la obligación de remitir un plan de capitalización en el que se definiera de manera cómo pensaba hacer frente a ese incremento de capital- Había un plazo para remitirlo, no sé si eran cuatro meses, hasta julio de 2011. Pero informalmente, antes de enviarlo, y [ser] aprobada por el consejo de administración de BFA-Bankia, este grupo se había decantado por la opción de salir a Bolsa como primera alternativa para cumplir con los requisitos de incremento de capital. La salida a Bolsa era la primera opción. La segunda opción era la entrada de un grupo de inversores institucionales con un 20% del capital y la tercera ponerse en manos de una intervención.
En ese contexto, este plan de capitalización tenía que ser aprobado o denegado por la comisión ejecutiva del Banco de España. Eso siempre lleva a unos trámites, unos informes previos, cuyo primer informe es a la comisión ejecutiva que, prepare quien lo prepare, lo firma el jefe de grupo y el jefe de departamento. A partir ahí hay un informe del director general que lo firma este y se dirige a la comisión ejecutiva. Y esta en base a estos dos documentos toma la decisión.
Nosotros no participamos en el informe a la comisión ejecutiva. Sí fuimos consultados sobre qué nos parecía ese camino adoptado por la entidad de cumplir los requisitos de la normativa vigente con la salida a Bolsa y en particular con la salida a Bolsa con la estructura de doble banco, que estaba pendiente de definir. Pero en aquellos momentos, abril, mayo, 2011, no había ni BFA ni Bankia.
Se nos consultó al equipo de seguimiento sobre qué nos parecía la salida a Bolsa con la estructura de doble banco. Nosotros lo que manifestamos en varios correos, yo al menos mandé dos en abril y dos en mayo de 2011 en los que veíamos que ese plan no nos parecía la solución para el grupo, porque nosotros veíamos que ese grupo no era viable, no era viable en estos momentos si no tenía un cambio de control.
No era viable por varias razones. El grupo BFA-Bankia, no estoy hablando de Bankia, no era viable como grupo si no tenía un cambio de control y por tanto que la salida a Bolsa con la estructura de doble banco podría solucionar temporalmente los problemas de capitalización del grupo en la medida en que consiguiera captar en el mercado la cantidad que preveían, entre 2.000 y 3.000 millones de euros, finalmente fueron 3.092 millones, pero eso no solucionaría loss problemas del grupo y acabaría, en más o menos meses, en la nacionalización del grupo.
¿Por qué creíamos que no era viable el grupo?
Porque nosotros, repito, que veníamos del equipo de seguimiento de Caja Madrid, teníamos una visión de solo la mitad del grupo, es decir, de lo que era Caja Madrid, no de las otras cajas. El grupo termina de constituirse a finales de 2010, el 28 o 29 de diciembre de 2010. Y no tenemos información contable del grupo hasta el primer trimestre, la información referida al 31 de marzo de 2011. Creo que fue el 8 o 10 de abril cuando vemos la evolución del grupo, su desarrollo, del primer trimestre de 2011. Estoy hablando del grupo BFA-Bankia.
Lo que observamos, para que se entienda, es que era una máquina de perder dinero. No le daba, de manera recurrente, para sanear nada de su cartera crediticia y además la tendencia era muy negativa y muy decreciente. ¿Por qué? Porque los costes financieros cada vez eran mayores, había más dudas sobre la capacidad de repago, había una montaña de vencimientos mayoristas de 32.000 millones de euros para afrontar en dos años y, claro, cada renovación de financiación mayorista, en vez de pagar el 2% pagaba el 8%. Y los depósitos minoristas lo mismo. Era la época en la que pagaban por los depósitos un 4% o 5% en vez del 0,25% que se paga ahora.
Todo ello, junto con el hecho de los ingresos iban disminuyendo, originaba una tendencia claramente decreciente. Entonces nosotros, en nuestra labor analítica, que es nuestra actividad, no la contable, que también tiene su importancia, evidentemente, pero en el trabajo analítico veíamos que ese grupo iba para abajo y que por captar dinero no iba a invertirse la tendencia. Estábamos, por así decir, en un punto de no retorno.
Y nosotros predicábamos que tenía que haber un cambio de control [del grupo BFA-Bankia]
¿Por qué?
Porque en un cambio de control, si te absorbe un grupo grande con fortaleza financiera, los acreedores del mercado que te tienen que refinanciar posiciones que van venciendo, podrán confiar en la posibilidad de que les devuelvas el dinero y te pedirán un menor tipo de interés, por tanto la cuenta de resultados podría empezar a girar. Pero además porque la gobernanza [gobierno corporativo y gestión] que veíamos del grupo era, bueno, nosotros la calificábamos de mejorable en el informe.
¿Por qué? Nosotros pensamos que los gestores de un banco tienen que tener al menos cuatro cosas: compromiso, capacidad, credibilidad ante el mercado y honradez, definida, ojo, como anteponer los intereses de la entidad a los suyos.
La credibilidad ante el mercado la tenían perdida porque era un grupo que había necesitado ayudas públicas, habían conducido a la cajas a la situación de requerir ayudas públicas y en cuanto a la honestidad definida como anteponer los intereses de la entidad a los suyos propios, las políticas retributivas, digo en cuanto a variable, bonus, ya en la parte de Caja Madrid, en 2009 y 2010, como en Bankia, y las condiciones de reducción del personal en 3.000 personas con un coste de 1.300 o 1.400 millones de euros cuando podía haberse hecho de 500 millones demostraba claramente que estaban por la labor de tener una tranquilidad social y un relax que era contrario a lo que requería el grupo en esos momentos.
Entonces, en definitiva, veíamos que era un grupo no viable en tanto no hubiera un cambio de control. Por tanto, esa no era la propuesta en el plan de capitalización. Y eso lo dijimos al menos en cuatro ocasiones [cuatro correos electrónicos, dos en abril y dos en mayo de 2011]”
Dos
"Para mi unos buenos gestores tienen que tener capacidad. Capacidad, compromiso, credibilidad ante el mercado y honradez. Yo creo que he participado en el informe de 2010. ¿Cómo se puede decir que [unas entidades] son entidades sólidas y solventes? Fundamentalmente sólido y solvente es como guapo y feo, son conceptos relativos. Hay que determinar, son conceptos jurídicamente indeterminados en la jerga jurídica. Cumplía [según el informe de 2010] con determinados ratios de solvencia, los cumplían, el mantenimiento de determinados ratings externos de calificación, los cumplían, y por tanto cumplían con los determinados conceptos de solidez y solvencia tal y como está la norma, que es lo que debía interpretarse.
Y, dicho lo cual, no debemos olvidarnos que era una norma de ayudas públicas. O sea, entidades sólidas y solventes, dentro de que han requerido ayudas públicas. Es decir, yo no criticaría esa parte del informe. Creo que cumplía lo que definía la norma que debía entenderse por entidades sólidas y solventes. Cuando decimos viabilidad, lo primero es analizar la entidad, la viabilidad, la solvencia y la gobernanza.
Pero el aspecto clave de cualquier negocio, digo yo, es la rentabilidad, que sea capaz de generar de manera recurrente beneficios con los que atender a sus acreedores y retribuir a los accionistas de manera apropiada. La generación recurrente de resultados. La generación recurrente de resultados. Cuando digo recurrente, quiero decir que nosotros depurábamos lo extraordinario. Usted puede hacer una venta de cartera que sea que genere mil millones de beneficio. Y está muy bien, y contablemente habrá que contabilizarlo. Insisto, nosotros contablemente no poníamos tanto énfasis. Analíticamente sí. Usted registraba un beneficio de mil millones y contablemente no hay nada que decir. Y bien, pero yo en mi análisis lo quito, porque eso es un one off, es hoy sí pero mañana ya no lo tienes.
La generación recurrente de resultados va a atender a las necesidades de tu cartera crediticia. Y nosotros lo que veíamos es que la generación recurrente de resultados del primer trimestre de 2011 del grupo BFA- Bankia era cero. No tenía capacidad para atender nada, ningún saneamiento. Además la tendencia era negativa. Con lo cual lo que iba era a generar pérdidas siquiera antes de sanear un solo euro de su cartera crediticia. Por lo tanto las dudas sobre la viabilidad o sobre la generación recurrente de resultados en principio no tienen nada que ver con que pensáramos, o no, que hubiera saneamientos adicionales. Ese es otro tema, que si quieren entraré, pero no tiene nada que ver.
Sobre el informe pericial [de los peritos Víctor Sánchez y Antonio Busquets, también inspectores del Banco de España]. Conozco su existencia porque vivo en el planeta tierra y trabajo en el Banco de España. Pero reconozco que sólo me leí en su momento, en diciembre de 2014, ocho páginas de resumen del informe de uno de los dos peritos. No he tenido ni tiempo, ni ganas, de leerme los informes.
Sobre las cuentas en la salida a Bolsa, nosotros no entrábamos en el aspecto técnico-contable. Ya he definido cuál es la labor del equipo de seguimiento, la función no es analizar las cuentas, [cosa que] que le compete a la entidad, y en concreto, al consejo de administración por imperativo legal. No es tampoco verificar si las cuentas anuales reflejan o no la imagen fiel, que es competencia de los auditores externos. No es tampoco la de formular observaciones a las cuentas anuales de la entidad, que es algo que le compete y que realiza la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Ni siquiera es pronunciarnos sobre si una determinada cartera crediticia de la entidad está bien clasificada y bien provisionada, que eso puede ser responsabilidad y naturalmente sí que importa, con esto no digo que la contabilidad no es que no importe, sería una barbaridad decir eso, pero el revisar si una cartera crediticia está correctamente contabilizada y provisionada puede ser responsabilidad del equipo de inspección cuando hay un procedimiento que se constituye en un equipo de inspección, como ha ocurrido en Caja Madrid.
El equipo de seguimiento nos constituímos en equipo de inspección e hicimos una labor concreta, revisando promotores, y demás que fue aquel informe de diciembre de 2010 por el que tuve que testificar hace 2 años. En aquel caso, fue un procedimiento totalmente distinto. En aquel caso es un procedimiento totalmente distinto, lleva un mandato [de la comisión ejecutiva del BE], tiene un informe que tiene la firma del inspector encargado de la inspección y demás.
Ahora bien, si la pregunta es: ¿a su juicio faltaban saneamientos?
A mi juicio, analíticamente, faltaba saneamiento. Pero una cosa es que para mi faltase, yo he analizado Caja Madrid, hemos analizado Caja Madrid, y dijimos: nosotros creemos que pueden faltar 8.000 millones antes de la integración pero, claro, eso no es requerible [carecían de mandato para exigirlo]. Aquí estamos haciendo potestades administrativas, que tienen que estar sujetas al derecho administrativo en todo el procedimiento y con toda la garantía y la cautela para el administrado.
Yo puedo analíticamente decir que con los promotores se va a perder un 25% porque mi juicio experto dice esto: un perjuicio contabilizado al 10, le falta un 25% sobre tantos millones de promotores le faltan 4.000 millones. Y esta cantidad de hipotecas tienen que estar al cinco, y están a un tres, pues le falta un dos. Y esas cosas que analíticamente tienen todo el sentido del mundo y toda la defensa, yo, eso, no lo puedo requerir contablemente. Tengo que ponder cara y nombre y apellidos concretos: ¿qué promotores? ¿4.000 millones? Deme la factura concreta. ¿Cuánto es de Martinsa? ¿cuánto es de Sacyr?-
Para mí analíticamente si a Caja Madrid le faltaban ocho [8.000 millones] a todo el grupo le faltaban unos dieciséis, otros ocho [8.000 millones]. ¿Por qué? Porque Caja Madrid era un poquito más grande pero Bancaja tenía pinta de estar más deteriorada porque había crecido en cambio de al tres, había multiplicado por cuatro la expansión crediticia en los años del boom y el boom se centraba donde se centraba, que era en los promotores, y porque estaba mucho menos provisionada que Caja Madrid.
En un ejercicio simple que hicimos en media hora, a finales de junio de 2010, cuando se hizo la integración, para ver qué era lo que se nos venía, porque nosotros la parte de Bancaja y de las cinco cajas bancos pequeñas, porque el banco tenía conocimiento, pero el equipo de seguimiento, no.
Pues hicimos un ejercicio sencillo, que era de determinados créditos dudosos cuánto tenía contabilizado como dudosos, cuánto tenía contabilizado Caja Madrid, que tenía el 80%, y Bancaja el 20%. Entonces dijimos ha crecido más, tiene peor la cartera y menos provisiones. Está peor. Extrapolando y analíticamente, si se podría decir que al grupo le podían faltar unos 16.000 millones . Insisto, en un análisis para nosotros, no requerible [exigible a la entidad con mandato del Banco de España] contablemente.
Las cuentas anuales no sólo es el balance y la cuenta de resultados, incluye también la memoria y la memoria incluye un montón de información y en el folleto de salida a bolsa, de 450 páginas, se daba información detallada sobre la cartera inmobiliaria porque el Banco de España obligó no sólo en los episodios de salida a bolsa sino que de manera recurrente a partir de no sé que año, creo que de 2009, a que las entidades de crédito informaran de su exposición inmobiliaria: la bruta, las provisiones, y la neta. Entonces decir que no reflejaban una imagen fiel, ¿a qué nos estamos refiriendo?, ¿a la cuenta de resultados, al balance, a la memoria? Yo creo que si decimos las cuentas anuales tiene que ser todo.
En las cuentas anuales había información suficiente para calibrar, para calibrar, el quebranto….Es que un banco es muy complicado, estamos hablando de que en un banco la cuenta de resultados, la parte de arriba, es relativamente fácil y poco manipulable. Pero la de los saneamientos es muy complicada y requiere una valoración subjetiva.
Hay 6 Comentarios
thank you, the article was very useful for me
Publicado por: pompa air | 27/11/2016 4:31:27
siempre es bueno ir mas alla por lo menos mejorar muy buen contexto
Publicado por: slither | 22/09/2016 1:19:35
constructoras y energéticas, es un manual de como arruinar un país en tiempo récord y conducirlo al tercer mundo.
Publicado por: prj | 14/09/2016 4:19:46
good job nice article
Publicado por: kata mutiara bijak | 14/09/2016 4:17:32
La contribución de los políticos de los últimos 20 años de este país, con cargos en el gobierno, y los dirigentes de las bancas y cajas nacionales, ademas de unas cuantas compañías cotizada, constructoras y energéticas, es un manual de como arruinar un país en tiempo récord y conducirlo al tercer mundo.
Publicado por: Iván | 13/09/2016 11:54:11
Interesante declaración....
Publicado por: José Ramón | 12/09/2016 22:47:21