Hay hechos fundamentales en la historia del fotoperiodismo mundial, algunos tan cercanos como la Guerra Civil española. El seguimiento gráfico fue masivo y por muchos de los que se consideran maestros del reportaje de guerra. Los simpatizantes del bando republicano, como Agustí Centelles o Luis Ramón Marín, escondieron sus negativos para que no cayeran en manos de los franquistas aquí, al igual que los fotoperiodistas extranjeros trataron de esconderlos del avance nazi. Es posible que ésta fuera la razón que llevó a Robert Capa, a su compañera Gerda Taro y a David Seymour (cofundadores de la Agencia Magnum), a guardar tres cajas con 4.500 negativos de 35 milímetros disparados por ellos en la Guerra Civil española. Es lo que se conoce como "La maleta mexicana", por ser allí donde apareció.
"Las tres pequeñas cajas de cartón llegaron al Centro Internacional de Fotografía de la Ciudad de México después de un viaje largo y misterioso. Los rumores habían circulado durante años de la supervivencia de los negativos, que había desaparecido desde el estudio de Capa en París a comienzos de la Segunda Guerra Mundial. Cornell Capa, hermano de Robert y el fundador del ICP (Centro Internacional de Fotografía de Nueva York), había seguido infructuosamente todas las pistas de los negativos. Hasta que a los 89 años de edad, aparecieron en México los 126 rollos de película, no sólo de Robert Capa, sino también de Gerda Taro y David Seymour (conocido como "Chim"), tres de los fotógrafos más importantes de la Guerra Civil Española".
Este texto forma parte de la exposición que hoy se inaugura en Nueva York, en el ICP, y que mostrará por primera vez todas estas fotografías, algunas como hojas de contactos y otras ampliadas. Quien no pueda verla allí, podrá hacerlo en septiembre de 2011 en Museu Nacional d'Art de Catalunya de Barcelona, la ciudad que los tres fotógrafos visitaron en aquella época. Imprescindible.