La fotografía está más de moda que nunca en este país. Exposiciones a porrillo en todos los rincones de España, rescate de los olvidados que ya no están, y de los no tan olvidados y que siguen estando. Ferias, congresos, seminarios. Salas de arte dedicadas y las de siempre con más fotografías que nunca. Y todo esto, a pesar de la consabida crisis. ¿Qué más se puede pedir?
Pues un Centro Nacional de Fotografía. Dicho y hecho.
La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, de visita oficial por Soria, anunció este sábado que será la sede del Centro Nacional la Fotografía y el Paisaje, un centro de nueva creación que se ubicará en el antiguo edificio del Banco de España. Convirtiéndose así en una de las subsedes del Museo del Prado, tal como preveía el Plan de Actuación Específico para Soria (Paes). Aunque ese final añadido de "y el Paisaje" no se exactamente que quiere decir. ¿Es un tipo de fotografía? ¿Se refiere a pintura? ¿Son los fotografía panorámicas de paisajes?. No lo se. Cuando me entere lo cuento.
En cualquier caso, no nos podemos quejar los amantes de la fotografía de este país, al fin el Ministerio de Cultura se decide a unificar todos sus fondos fotográficos en un único centro y albergará colecciones fotográficas que el Ministerio de Cultura tiene dispersas en diversas instituciones como el Reina Sofía, Archivo de la Memoria Histórica, Archivo Nacional, Instituto de Patrimonio y otros museos que dependen de la Dirección General de Bellas Artes.
Hasta aquí muy bien pero, se han parado a pensar, con el mayor de mis respetos a Soria y a sus gentes, la cantidad de público real que va a tener el Centro más importante de fotografía que habrá en España. Lo de descentralizar la cultura (y todo lo demás también), me parece no sólo justo, sino muy necesario, hay que poner al alcance de quien menos lo tiene, cualquier forma de cultura, y puede que Soria sea una magnífica elección. Es una inversión importante, aumentarán la visitas a la ciudad, se hablará más de ella, etcétera. Pero esperemos que esto no sea todo. El Centro puede guardar todo el fondo fotográfico y, por supuesto, mantener exposiciones permanentes en él. Pero también, ha de contemplar una continua itinerancia de las obras. La visita a la ciudad es muy recomendable, y lo será más con el Centro, pero no a todo el mundo le pilla de paso.