Miguel Mora

En busca de la 'grandeur' perdida

Por: | 21 de diciembre de 2011

Carla-noel

Dulce Navidad en el Elíseo.

Francia ha perdido la 'grandeur', y casi ha dejado ya de buscarla para limitarse a un papel de segundón proactivo, más voluntarista que eficaz, más resultón que influyente.

Este sería un posible resumen de los tres meses pasados en París. El país está cerrado en sí mismo, obsesionado con sus asuntos domésticos, ensimismado en el bucle de su decadencia. El poder de compra, el paro y el mantenimiento del Estado social son los tres grandes temas de interés. Lo francofrancés se impone y ciega todo lo demás. Europa interesa entre nada y muy poco, y las noticias sobre la crisis del euro suelen silenciar cuidadosamente el ruinoso estado de la economía y la banca nacional. Por el disimulo y la autocensura hasta la victoria final, parece el lema colectivo. Los medios son otro gran misterio: cualquier querella entre políticos de segunda fila ocupa más espacio que la crisis europea. El mismo ombliguismo italiano, o español, o británico, elevado a la enésima potencia. Hexagonal.

Quizá la culpa es del momentum: estamos ya en plena campaña electoral, aunque el presidente-candidato todavía no ha dicho que será candidato. Las presidenciales son en abril y mayo, y los aspirantes tratan de conquistar a la llamada Francia del no, la que tumbó en el referéndum de 2005 la constitución europea. La lucha electoral será cosa de cuatro, parece. Hollande sigue en cabeza, pero su aparente talla de estadista sigue ofreciendo dudas, y su gran fijación parece consistir en oponerse a la Europa alemana de la disciplina y la cesión de soberanía. En vez de más Europa federal, Hollande quiere más nacionalismo central, y una cesión de soberanía menos evidente para buscar el voto de la Francia profunda, rural, reconcentrada, asustada y eurófoba.

Sarkozy llegaría hoy con el normalísimo candidato socialista al segundo turno, pese a que su pésima gestión económica y su vulgaridad 'blin bling' han suscitado un amplio movimiento subterráneo de repulsa, y mucha gente apaga la tele en cuanto aparece, como pasaba con el Aznar de la última época.

La tercera en discordia será Marine Le Pen, la ultraderechista líder del Frente Nacional, que azota a los candidatos del sistema y agita el descontento de los indignados pidiendo la salida del euro. Y cuarto según las encuestas es el centrista François Bayrou, un democristiano que trata de comerle espacio y votos al presidente con un discurso solidario, y a Hollande con una vía federalista para Europa.

Si la opinión de los taxistas sirve de termómetro, los conductores creen por amplia mayoría que madame Le Pen llegará al segundo turno, según revela una encuesta casera. Pero los sondeos reales ofrecen un resultado muy incierto. Mucho dependerá de la famosa triple A. Si las agencias deciden degradar por fin a Francia, Sarkozy, aunque intente desmarcarse con su proverbial habilidad, debería sucumbir a ese fracaso y suceder a Zapatero, Berlusconi y Papandreu en la larga lista de bajas colaterales de la crisis.

Al fin y al cabo, durante su mandato, la deuda ha crecido en medio billón de euros, el paro ha batido un récord tras otro y sigue subiendo, el déficit comercial ha superado todas las marcas. En Europa se ha plegado en todo a los deseos de Merkel resucitando en la oposición los viejos fantasmas de la germanofobia, y de paso en el propio Gobierno los de la anglofobia. Todos los síntomas del miedo y la debilidad de los años 30 están de vuelta.

Sarkozy está intentando frenar la hemorragia de empleos pidiendo a las empresas en las que el Estado tiene acciones que dejen de anunciar despidos hasta después de las presidenciales, pero la tendencia es que el desempleo superará el 10% el año próximo. Por eso ha convocado para mediados de enero una cumbre sobre empleo, y quince días después tendrá otra cumbre en Bruselas sobre crecimiento y empleo. Pero si por fin cae la triple A, un tercer ajuste presupuestario sería indispensable.

En año electoral...

Cuando todas las trampas fallan, solo queda coger la pluma y escribir. De manera que Sarko ha decidido pasar las vacaciones escribiendo. Todavía no sabe si le saldrá una carta o un libro, pero seguramente será un testimonio de su grandiosa capacidad para salvarnos de la ruina. Como propagandista, el gran refundador es un verdadero hacha. Solo Berlusca es comparable a la hora de quitarse responsabilidades y culpar a los demás de lo que es básicamente culpa suya.

Y mientras tanto, DSK, el marido de la mujer del año, ha reaparecido en público en Pekín, y en una conferencia ha afirmado que Merkel y Sarkozy no se entienden y que si esto sigue así al euro le quedan unas semanas de vida...

Menos mal que la pobre camarera guineana se cruzó en su camino hacia la gloria, si no a estas horas estaba tomando el BCE con las tropas de Dodo la Salmuera...

Creo que por este año es suficiente.

Pasen unas felices vacaciones.

Ahí les dejo un lindo vídeo navideño del Elíseo. Atención al último infante entrevistado...

 

Hay 5 Comentarios

Francia, entre otras razones por su localizacion, aun por muitos años sera protagonista, o actora importante en todos os echos nel viejo continente. Non se puede veer las cosas com ojos tapados... e sobretodo, tentar bajar la pelota de los franceses para intentar mejorar la pelota española.... Viva El Rey.... o Napoléon.... aun non estoy cierto!!!

Vaticalia fue uno de los mejores blogs. Este "Aquí París" comienza a despuntar.

No soy conocedor de la realidad francesa, y es por ello que agradezco la informacion que el Sr. Mota nos suministra. La misma ignorancia que tengo me confirma que el análisis es real. Aun recuendo cuando, en mis tiempos mozos, Fracnia era el espejo del este sur de Europa. Ahora oimos hablar de Francia cuando se reune con Alemania o la primera dama de turno tien un vástago.
Gracia por su periodismo Sr. Mota.

Grandeur et décadence.
Me parece un análisis realista , parecerá severo a muchos. !Ojalá que este estado de ánimo sea causado por las elecciones! A mí, francesa y europea convencida, me gustaría que sea sólo un momento difícil y que cambie este ombliguismo hexagonal.
Felices vacaciones, en Francia, España, Italia o por doquier.

A diez años del 2001: La gesta de una nueva traición
http://elruidoenelhormiguero.blogspot.com/2011/12/diez-anos-del-2001-la-gesta-de-una.html
Entrevista a Yusseff Mohammad al-Arjentiny: Una ráfaga de verdad. http://elruidoenelhormiguero.blogspot.com/2011/12/entrevista-yusseff-mohammad-al.html

Los comentarios de esta entrada están cerrados.

Sobre el autor

es corresponsal en París, antes en Roma y Lisboa, fue redactor en la sección de Cultura y la Edición Internacional. Trabaja en EL PAÍS desde 1992, y es autor del libro ‘La voz de los flamencos’ (Siruela, 2008).

El País

EDICIONES EL PAIS, S.L. - Miguel Yuste 40 – 28037 – Madrid [España] | Aviso Legal