Es un sintetizador electrónico, construido sobre una estructura de papel desplegable como si se tratara de un acordeón o un libro infantil. Parece una contradicción en términos y sin embargo Concertina: máquinas de papel, un proyecto que relaciona el libro de artista con la electrónica sonora y los mecanismos pop-up de la ingeniería en papel, lo hace posible. Concertina es un instrumento compuesto por un oscilador, un divisor de frecuencia y un secuenciador, creado por la artista y profesora chilena Claudia González Godoy, que ha conseguido materializar un objeto interactivo, integralmente construido con materiales conductivos como cintas, tintas, hilos y telas.
Concertina, cuyas medidas alcanzan unos 60 centímetros de diámetro por 35 centímetros de altura, al desplegarse se abre en cinco secciones, creando un volumen que es posible recorrer a 360º y que permite a una o más personas contemplar, escuchar, jugar y componer música. Evidentemente se trata un instrumento inspirado en la filosofía DIY (Do It Yourself, “hágalo usted mismo”), de corte totalmente artesanal y con claros matices didácticos y educativos. “Concertina nació como un proyecto de investigación, pero también tiene un potencial creativo enorme para ser empleado en un marco artístico”, explica al Silicio Claudia González Godoy, una artista y profesora de la Universidad de Chile que desde 2006 desarrolla una propuesta en torno a la noción de materialidad en los soportes tecnológicos, analógicos y digitales, trabajando la relación entre alta y baja tecnología con procedimientos artesanales.
“Una concertina es un tipo de instrumento de lengüeta libre, que funciona mediante un fuelle. Sin embargo en la ingeniería en papel indica un tipo de estructura de libro pop-up, que se abre y se despliega en 360º, lo cual permite contar historias por escenas o módulos narrativos, en cada uno de sus ángulos. Concertina: máquinas de papel se adapta a este formato tomando la forma y la estructura de un libro, cuyo desarrollo narrativo -dividido en cinco escenas- es la estructura modular de un sintetizador DIY analógico, compuesto por un clock, un secuenciador, un oscilador en cascada, una patchera y una salida de audio, inter-conectados entre sí a través de una cinta de cobre como material conductivo”, indica Claudia González Godoy, explicando que cada elemento del instrumento puede ser controlado por un usuario o interprete, ya sea sólo o interactuando en sincronía con otros tres.
Cada elemento del artefacto tiene una función distinta. “El papel del secuenciador es darle ritmo al sonido, armar patrones y jugar con las melodías que se puedan presentar en el momento”, indica la creadora. El oscilador en cascada es un generador de frecuencia compuesto por cuatro compuertas, que representa la voz de Concertina, ya que permite alterar el pitch del sintetizador, generando sonidos más graves o agudos. En cambio la patchera es un módulo que recibe la señal enviada por el oscilador en cascada y la divide en diferentes frecuencias, permitiendo generar y combinar diversos sonidos al mismo tiempo. “Para experimentar estos sonidos el interprete tiene que interconectar cables de un lado hacia el otro, de esta manera va generando un patch cord con los parámetros del sonido que se escucha”, concluye Claudia González Godoy, destacando que en el caso de Concertina los cables son en realidad “circuitos blandos” por estar hechos con papel y materiales inteligentes como hilos, telas, tintas y cintas conductivas.
Como ganadora de una convocatoria de residencia artística, promovida por el Festival de la Imagen de Manizales en Colombia, Concertina: máquinas de papel se produjo entre abril y mayo de 2014 en la Imagoteca de la Universidad de Caldas en Manizales. Tras inaugurarse en la exhibición de Media Art del Festival de la Imagen, el proyecto se presentará después del verano en distintos eventos y festival internacionales.
Hay 1 Comentarios
Que ganas de verlo en directo!!!!
Publicado por: Paloma Ctrl | 07/07/2014 17:35:18