La trágica muerte de Oswaldo Payá, el dirigente de la disidencia cubana con más impacto internacional, en compañía del colectivo de las Damas del Blanco, presenta algunas notables incógnitas. Una son los datos fríos y objetivos del accidente de tránsito que acabó con su vida, detalles que en el momento de redactar esta nota no están suficientemente aclarados. La otra dimensión está acaparada por las consecuencias de la muerte del líder de tendencia democristiana, tanto en el seno de la oposición al régimen, como en el interior del mismo. Ambos temas están íntimamente relacionados.
El misterio inicial acerca de los hechos, y su inmediata interpretación por parte de su familia y otros opositores, ha sido ya amplificado comprensiblemente por amplios sectores del exilio. El accidente, según estas fuentes, habría sido provocado. La embestida brutal de otro vehículo, por lo tanto, estaría impelida por sectores interiores del país. En un régimen donde impera una seguridad impresionante, donde los delitos de menor y alta cuantía son raros y no hay núcleos que puedan ser calificados como “crimen organizado”, un accidente provocado de tal manera que pudiera ser calificado de asesinato premeditado solamente podría ejecutarse por decisión o tolerancia del gobierno.
También podría ser reflejo de tensiones interiores y la agresión habría sido ejecutada por una corriente de de acción hiperactivista, más allá del “espíritu revolucionario” que todavía impera en la cúpula del poder presidida por Raúl Castro, inmerso en una apariencia reformista. En suma, tanto si el accidente se trata de un ataque frontal como si es producto de la “disidencia” interna “revolucionaria”, el más perjudicado a corto, mediano y largo plazo es el propio régimen, al que no le conviene verse señalado con las manos todavía más manchadas de sangre.
Hay que tener en cuenta que la aparición de las diversas variantes de la “disidencia” ante el regimen, a la que no se puede considerar como “oposición”, ya que este papel pertenece a organizaciones con agendas de índole decididamente política, benefició (por darle un calificativo práctico) paradójicamente al propio régimen. Su tolerancia (corregida periódica y selectivamente con arrestos y prisión) le servia al gobierno para presumir de un liberalismo en realidad inexistente. El hecho de que los propios dirigentes disidentes, especialmente los más conocidos, tuvieran cierta libertad de movimiento le servía al castrismo de coartada. Recuérdese que el propio Proyecto Varela, inspirado por Payá, presentado en el contexto de la visita de Jimmy Carter en 2002, por que se proponía la aplicación de la propia constitución en la liberalización del régimen, no fue respondido por una represión sumaria, aparte de la declaración del parlamento cubano de considerar la “revolución irrevocable".
La publicidad de las acciones de algunos líderes (Damas, el mismo Payá, Elizario Sánchez Santacruz, algunos socialdemócratas) eran moderadamente represaliada con restricciones interiores y prohibición de viajes al exterior, pero en esos casos no se cruzaba una sutil línea roja en el vecindario del asesinato, prisión, “desaparición”. La excepción fue la desproporcionada medida de 2003 con las sentencias contra más de setenta opositores, que a la larga fue considerada como una contraproducente, con el desenlace de la liberación con el apoyo de la Iglesia y el gobierno español.
Ante novedosas medidas de reprimenda por parte de algunos gobiernos extranjeros, la Unión Europea y sobre todo el gobierno español, además de la sistemática política de las sucesivas administraciones norteamericanas, el régimen cubano contestaba con un calculado diente por diente. La Posición Común inspirada por el gobierno de Aznar en 1996 proporcionó al régimen cubano la pretendida aparición del “segundo embargo”. Si las decisiones de la UE en el 2003 implicaban la invitación a los disidentes a las fiestas nacionales en las embajadas, el régimen contestaba con el boicot, en lo que se convirtió en la llamada “guerra del canapé”. Si las diplomacias europeas expresaban deseos explícitos de visitas a la disidencia, el castrismo no contestaba al teléfono y se generaba una ruptura virtual del vínculo diplomático. Al final, el diferendo se resolvía por contactos directos, efectivos y discretos, con la consiguiente canalización de ayuda. El papa Benedicto XVI se adhirió a ese pacto. Un hipócrita modus vivendi era la solución.
Por estos motivos la interpretación de que el accidente ha sido parte de un guión redactado por la dictadura cubana y ejecutado por sus agentes no se sostiene lógicamente. Tal medida, tanto de probarse como de quedar colgada en las sospechas, solamente tendría una victima (aparte del propio Payá y su compañero pasajero): el régimen presidido por Raúl. Las acciones de la disidencia no se pueden comparar en peligrosidad para la supervivencia del régimen con la gravísima crisis económica, delicada situación social con la tenaz (re)aparición de las clases sociales, los huracanes y la dependencia de las ayudas del régimen de Hugo Chávez, en precario estado físico y afectado de interrogantes políticos. Pero, de confirmarse la interpretación de la confabulación y connivencia del régimen, tal estupidez política apuntaría a una extrema debilidad interna del propio sistema, de consecuencias impredecibles.
En cuanto a las consecuencias de la propia desaparición de Payá, es obvio que el movimiento de la disidencia ha perdido un sólido pilar, que disfrutaba de un prestigio insuperable. Que el Parlamento Europeo (dominado, hay que decirlo, por el sector del Partido Popular que cobija al democristiano) le concediera el Premio Sajarov y que el régimen castrista le permitiera viajar a Estrasburgo y otras capitales europeas, no son nímios detalles. Surge ahora con mayor fuerza la pregunta de si los diversos núcleos de la disidencia tienen el potencial de convertirse en sólidos grupos políticos que algún día sean llamados “partidos”. Se ignora cuál puede ser el futuro del Movimiento Cristiano Liberación (MCL), sin su líder natural.
No tienen una labor fácil, especialmente si persisten la infiltración del propio régimen y la división interna, lógica consecuencia de la variedad de corrientes ideológicas. Con un mundo exterior (sobre todo el europeo) precisamente atenazado por la estupefacción de los ciudadanos hacia la ineficiencia de los partidos políticos, el futuro de la disidencia en Cuba está más que nunca sujeto a los esfuerzos interiores
Hay 23 Comentarios
Arza , arza, que maricones no quiero en mi casa !
Publicado por: Francisco | 28/07/2012 22:26:03
Lanzaflor me encanta su razonamiento, seguro que es usted un hombre atractivo, o una mujer bellísima....
Publicado por: Farah y los Clones | 28/07/2012 1:58:29
Si ese ‘accidente’ hubiese sido un accidente en realidad, los mejores voceros para la tirania cubana, fuesen esos dos ciudadanos europeos, que si ya hubiesen llegado a Europa, hubiesen dado la historia veridica de lo que ocurrio en Bayamo. A que se debe que el sueco no pueda abandonar a Cuba, pues si en verdad la tirania quisiese, al igual que el lo podria haber hecho en Cuba, llamaria a una conferencia de prensa en Suecia, y decir en ambos lugares, que las muertes de Paya y Codero se debieron a un accidente fortuito ?
Asesinos alevosos son los castros, y tambien esos que desde Europa se unen a sus mentiras infructuosas.
Publicado por: Francisco | 27/07/2012 18:44:38
"También podría ser reflejo de tensiones interiores y la agresión habría sido ejecutada por una corriente de de acción hiperactivista, más allá del “espíritu revolucionario” que todavía impera en la cúpula del poder presidida por Raúl Castro, inmerso en una apariencia reformista. En suma, tanto si el accidente se trata de un ataque frontal como si es producto de la “disidencia” interna “revolucionaria”... Con perdón del señor catedrático, pero de qué subtrama inédita de Vázquez Montalbán sacó la parrafada. No me haga reír usted. Actualice esos manuales, y olvide la acción hiperactivistay el espíritu revolucionario, porque el ajilimójilis (o ajiaco) de los Castro no tiene nada que ver con el análisis ni la teoría política. Se cargan al incómodo y les importa un pingón las consecuencias. Si al final, y empezando por España, todos terminan regresando al mojito en la playa y a la teta mulata.
Publicado por: Lanzaflor | 26/07/2012 17:57:24
Ah, y a los que van a perder el tiempo insultándome desde el anonimato de un seudónimo, sepan que no les voy a parar bolas, así que mejor dedíquense a analizar las cosas sin apasionamientos, que a ustedes los capitalistas de verdad no les van a dar un centavo por hacerse a los ciegos. Mejor ocúpense de sus propios problemas, que en el mundo actual de crisis globalizada deben ser muchos, jajajaja.
Publicado por: Vicente Manuel | 26/07/2012 17:39:30
Pareciera, según muchos de estos comentarios, que los disidentes son "dioses" o "semidioses" que no pueden morir, por accidentes, por enfermedades o por cualquier causa natural. ¿Quién "asesinó" a Polo Montañés dejando delante de su auto, en la autopista, un trailer detenido? ¿Quién asesinó a mis amigos Hermes y Carlitos, funcionarios del Ministerio del Interior, cuando viajaban en una moto entre dos municipios? Podríamos acusar a la "disidencia", porque los tres, uno desde las artes y los otros desde un ministerio gubernamental, defendían al Gobierno Revolucionario cubano. Lamentable la muerte de cualquier ciudadano del mundo en cualquier tipo de circunstancias, pero tanta algarabía por el deceso de una persona (líder o no) me parece demasiado, en Cuba y fuera de ella hay millones de cubanos que defienden la Revolución, que saben que tiene problemas como TODOS LOS PAÍSES DEL MUNDO hoy en día y no precisamente por culpa de gobiernos socialistas, comunistas o como quiera que les llaméis.
Dejen que los cubanos solucionen sus problemas en su país, de la manera que más le convenga a LA MAYORÍA DE LOS CUBANOS. Los que están fuera, por favor, resuelvan sus problemas de trabajo y deseos de vivir como los millonarios traficantes de armas y vidas de Washington y otros lugares afines. Con griteríos como este no lograrán que el sistema social cubano se derrumbe, ¿saben por qué? Porque los cubanos de Cuba no quieren.
Publicado por: Vicente Manuel | 26/07/2012 17:35:03
Pareciera, según muchos de estos comentarios, que los disidentes son "dioses" o "semidioses" que no pueden morir, por accidentes, por enfermedades o por cualquier causa natural. ¿Quién "asesinó" a Polo Montañés dejando delante de su auto, en la autopista, un trailer detenido? ¿Quién asesinó a mis amigos Hermes y Carlitos, funcionarios del Ministerio del Interior, cuando viajaban en una moto entre dos municipios? Podríamos acusar a la "disidencia", porque los tres, uno desde las artes y los otros desde un ministerio gubernamental, defendían al Gobierno Revolucionario cubano. Lamentable la muerte de cualquier ciudadano del mundo en cualquier tipo de circunstancias, pero tanta algarabía por el deceso de una persona (líder o no) me parece demasiado, en Cuba y fuera de ella hay millones de cubanos que defienden la Revolución, que saben que tiene problemas como TODOS LOS PAÍSES DEL MUNDO hoy en día y no precisamente por culpa de gobiernos socialistas, comunistas o como quiera que les llaméis.
Dejen que los cubanos solucionen sus problemas en su país, de la manera que más le convenga a LA MAYORÍA DE LOS CUBANOS. Los que están fuera, por favor, resuelvan sus problemas de trabajo y deseos de vivir como los millonarios traficantes de armas y vidas de Washington y otros lugares afines. Con griteríos como este no lograrán que el sistema social cubano se derrumbe, ¿saben por qué? Porque los cubanos de Cuba no quieren.
Publicado por: Vicente Manuel | 26/07/2012 17:34:58
"Por estos motivos la interpretación de que el accidente ha sido parte de un guión redactado por la dictadura cubana y ejecutado por sus agentes no se sostiene lógicamente... " Pero en qué mundo vive este periodista y esta periódico: Es insultante una y otra vez observar cómo la unica lógica que se sostiene dentro del El P(a)ís, es el abrillantamiento de las botas del Tirano Supremo y su Don Segundo Sombra. No por gusto lograron mantener al mismo corresponsal durante casi dos décadas, cuando sabemos que los corresponsales extranjeros en Cuba se queman a los seis meses de estancia allí. Vergüenza!
Publicado por: Lanzaflor | 26/07/2012 17:33:54
Enigma ninguno: se lo cargó Carramero. Los del PP son así, todo lo que tocan lo joden.
Publicado por: Ernesto | 26/07/2012 11:10:54
¿Qué no hay “crimen organizado”? El gobierno cubano ES el “crimen organizado”.
Publicado por: LECTOR | 24/07/2012 23:32:40
El mensaje enviado a la oposicion interna, tambien fue enviado a esos europeos que se han aliado a la causa de la libertad de Cuba, y que visitan e intercambian ideas con los que yacen presos en la Gran Carcel que es la isla de Cuba.
Lo mas probable sera, que esos amigos de la causa cubana se diran, si estos asesinos son capaces de hacerle un vil atentado a un opositor, ha sabienda de que en el auto viajaban dos jovenes politicos europeos, es mejor quedarme aqui tranquilo en Europa, que a mi en Cuba no se me ha perdido nada.
Publicado por: Francisco | 24/07/2012 20:46:47
Roy, y ya el Gobierno de su Majestad pidio acceso al ciudadano español herido en el choque ?
Cuando llegara este testigo a España ?
La Embajada Española lo esta cuidando para que no 'muera' repentinamente por motivo de algun coagulo cerebral causado por el golpe recibido ?
Esos mafiosos que desgobiernan en Cuba, no creen ni en su puta madre, si es que usted no lo sabia !!
Publicado por: Francisco | 24/07/2012 19:46:41
En Cuba hay crecientes tensiones y represiones por el completo fracaso de las reformas raulistas. El deceso de Payá es un fuerte golpe a los que buscan una salida pacífica y negociada.
Publicado por: rolandoc | 24/07/2012 5:45:34
coincido con la opinion de cubanoasupesar, desconocen la realidad cubana quien escribe este articulo, la racionalidad occidental no aplica a un regimen tiranico, la dictadura castrista prefiere que no haya opositores, si los tolera como afirma el articulista no es porque le convenga sino porque no le queda mas remedio. Ya vieron que represiones masivas los que les cuesta politicamente, lo mejor es sacarlos del pais o eliminarlos. Sin son activos, lideres y que no quieren abandonar el pais (como Paya) lo mejor es eliminarlos, nada mejor que una eliminacion selectiva (siempre son lideres de los grupos, Paya, Pollan antes) y poco a poco para levantar las menores sospechas. Esto fue un asesinato, es absurdo que que esperen explicaciones del mismo gobierno que los mando a matar. Algo estaba haciendo Paya, algun gran proyecto o acciones nuevas estaba haciendo que el regimen decidio acelerar sus planes de asesinato. Que casualidad que un mes anterior tuvo un accidente parecido.
Publicado por: tata | 24/07/2012 3:25:45
El señor Carromero podía hacer turismo, o visitar a sus amigos en Cuba como todo el mundo. ¿O los únicos que pueden moverse con libertad y sin dar explicaciones son el "sr." Cayo Lara o el "sr" Llamazares
Publicado por: Ateapiadosisima | 24/07/2012 2:55:34
Por favor usen correctamente el castellano. Un "sobretodo" es una pieza de vestuario. Se escribe en el contexto del artículo "sobre todo", separado. Sin duda en Cuba el idioma español es mejor tratado. Mis condolencias por la extraña muerte de Payá, que en poco beneficia al régimen ologocrático cubano.
Publicado por: Ricardo | 24/07/2012 1:59:28
El autor del artículo comete un error muy común en los análisis de la realidada cubana por parte de quienes no la conocen en carne propia: el de atribuirle a las acciones del régimen una lógica política tradicional, que funciona en el marco democrático pero no en una dictadura totalitaria. Si se probara que el gobierno mandó a matar a Payá seguramente eso afectaría al régimen, pero, ¿cómo se va a probar? ¿Qué investigación seria van a permitir? Lo mismo ocurrió con la muerte de Laura Pollán. Nadie va a sancionar al régimen por sospechas, si no los sancionan por crímenes obvios como el de Orlando Zapata. Por otro lado, estoy seguro de que cada disidente en Cuba siente ahora mismo un escalofrío, y tiene un poco más de miedo de salir a la calle, montarse en un coche, ir a un hospital si se siente enfermo/a. Y eso es invaluable para el régimen castrista. El miedo es su elemento y su alimento.
Publicado por: cubanoasupesar | 24/07/2012 1:25:30
LO QUE ES MUY DIFICIL DE ENTENDER ES QUE EN UN PAIS DONDE TODO ESTA BAJO LA LUPA DE LOS ORGANOS DE LA SEGURIDAD DEL ESTADO Y LOS ORGANOS DE LA INTELIGENCIA
NADA MAS Y NADA MENOS QUE OSWALDO PAYA ESTUVIESE DANDO VUELTAS EN UN COCHE ALQUILADO POR ZONAS DE BAYAMO CON UN DIRIGENTE DE LAS JUVENTUDES DEL PP ESPAÑOL Y UN DIRIGENTE DEMOCRISTIANO DE OTRO PAIS Y OTRO DESTACADO DISIDENTE CUBANO SIN QUE TODOS ELLOS........ESTUVIESEN BAJO CONTROL Y SEGUIMIENTO DE LOS ORGANOS DE LA SEGURIDAD DEL ESTADO
IMPOSIBLE DE CREER PARA EL QUE HALLA CONOCIDO CUBA
SI TUVIERON UN ACCIDENTE LA INFORMACION LA POSEIA EL GOBIERNO AL MINUTO
Publicado por: RAUL GARCIA PAREDES | 24/07/2012 0:12:13
Lorca, cuánto te paga el régimen castrista por colgar tus alabanzas en estos medios?
Publicado por: sinnombre | 23/07/2012 23:04:06
Lo que le pasa el pueblo Cubano a diario en las calles de país le importa un bledo a la mayoría de los Españoles, y es entendible por la crisis que tienen, y esto es aún más real en los "partidarios" del gobierno de la Habana. Lo que preocupa y a la vez no sorprende es la incredulidad de las miles de denuncias que hacen los que en esas mismas calles también a diario arriesgan la vida para decir por cualquier vía estas cosas. La opinión pública internacional, lamentablemente, se inclina a creele más a los medios oficiales del único gobierno de la Isla, que como saben están completamente controlados por los comunistas. Qué debe hacer entonces un Cubano, de Cuba como yo? En quién puedo confiar? Si mi propio gobierno me persigue y me mata a placer y no le rinde cuentas a nadie. Joder, como dicen ustedes los Españoles, o me revelo y mato yo por igual, o me muero de esperar la solidaridad suya. Gracias, muchas gracias. La historia los absolvera?
Publicado por: Cubano, de Cuba. | 23/07/2012 21:40:54
Creo que es de una irresponsabilidad inaceptable dar pábulo a fuentes no contrastadas y alimentar una versión en la que se acusa al gobierno cubano de estar detrás de un accidente. A parte de sentir la muerte de una persona y a espera de una mayor información sobre el accidente, la cuestión es ¿qué hacía Angel Carromero, vicesecretario de Nuevas Generaciones del Partido Popular de Madrid, en Cuba? Sobre esta cuestión, el señor Joaquín Roy no dice ni una palabra.
Publicado por: gabalaui | 23/07/2012 18:49:51
Un gran articulo¡¡ acabo de leer la noticia de que Rajoy podria dimitir el lunes por la presion de los mercados, como Berlusconni http://goo.gl/P6sbR
Publicado por: Abogados Madrid | 23/07/2012 17:11:11
Las incognitas las inventan los grandes medios anti cubanos, para ellos en Cuba ningun disidente real o creado con dolares y euros muere de muerte natural. Por eso la ficcion no se sostiene y la conclusion es evidente, sobre todo ahora que hay petroleo en manos de Repsol.
Publicado por: Lorca | 23/07/2012 15:47:40