El Palomero

3 de Septiembre de 2006

Por: EL PAÍS

03 sep 2011

El negro Montes no paraba de pegar gritos y yo tenía un nudo en la garganta. Muy cerca de nuestra posición de comentaristas se iban amontonando los jugadores de la selección española de baloncesto para recibir medallas y la Copa que les acreditaba como nuevos campeones del mundo (copa que por cierto terminó levantando por primera vez Pau Gasol en lugar del capitán Carlos Jiménez). Sí, campeones del mundo. Cinco años después ya nos hemos acostumbrado, vamos, que hasta lo somos de fútbol, pero aquel día, aquel día lo que estaba ocurriendo en aquel pabellón de Saitama, a una hora de metro del centro de Tokio, parecía irreal.
Hoy se cumple el quinto aniversario y qué menos que aprovechando además que estamos en día de descanso competitivo, echar un poco la vista hacia atrás y revisar de nuevo y con todo el placer del mundo lo ocurrido en aquellos últimos días de Agosto y principios de Septiembre de 2006. Porque fue tanto y tan bueno lo que se vivió, tan intensas las emociones y tan sorprendente el desarrollo y resultado que para los todos los que lo disputaron, para los que tuvimos la suerte de ir a contarlo, y para los millones que terminaron enganchados a su seguimiento, resulta uno de esos recuerdos que ni siquiera los estragos que hace la memoria con el paso de los años debería hacer olvidar.
Pasado este primer lustro, sigo sin encontrar un guión mejor para un película deportiva como la que vimos en Japón. La comenzamos con cierta prevención, como a verlas venir. Los protagonistas principales ya habían demostrado anteriormente que formaban un grupo capaz, pero en Indianápolis durante el Mundial 2002, en los Juegos de Atenas de 2004 o en el Europeo de 2005, siempre se había cruzado algo que terminaba derribándonos. Buenas películas en su inicio con flnales decepcionantes. En Japón el inicio fue el habitual. El grupo de Hiroshima fue arrasado por un juego espectacular, en lo práctico y en lo estético. De aquellos días en la sufrida Hiroshima recuerdo cómo después de cada partido subía Pau Gasol hasta un pequeño set de televisión montado en una de las bocanas del pabellón y asistíamos divertidos a las surrealistas entrevistas que le realizaba Andrés, capaz de comenzarlas, después de ganar a la Alemania de Nowitzki con un , “bueno, Pau, y en el hotel, la comida bien ¿no?”. Pau le miraba con una media sonrisa y contestaba con la mejor de las disposiciones, seguramente pensando por donde le iba a venir la siguiente cuestión.
Volamos (en tren bala) a Tokio y comenzaron los cruces. Primero cayó Serbia, luego Lituania, al que le pasamos por encima sin ningún miramiento. Quedaban dos pasitos. Bueno, dos pasazos. Argentina y EEUU. O al menos eso creíamos todos viendo que los yanquis se habían traído a gente como Lebron James o Dwayne Wade, entre otros artistas. El 3 de Septiembre, domingo, día que hoy recordamos, es el que ha pasado a la historia, pero esa historia no se podría contar sin tener en cuenta lo que ocurrió dos días antes en dos partidos singulares, dramáticos, sorprendentes. El primero fue el EEUU-Grecia. Siempre he sido fan de la competitividad de la Grecia baloncestística desde la generación de Gallis, Iannakis o Fasoulas, aquella que en el Europeo del 87 fue capaz de derrotar en una legendaria final a un URSS inmensa de talento baloncestístico. Pero ese día en Japón, la mousaka pasó a formar parte definitivamente de mis comidas favoritas. Lo que hicieron Papaolukas y compañía con el equipo estadounidense fue de libro. Aguantaron el chaparrón y a partir del tercer cuarto comenzaron a explotar los muchos defectos colectivos que tenía EEUU para terminar dando una exhibición. Aquel día, Schortianitis se incorporó al altar de mis favoritos y mientras se retiraban a los vestuarios, los unos más felices que unas perdices y los otros con la cabeza gacha, todos estábamos pensando que el cielo se nos había abierto de par en par. El camino hacia el campeonato ya no era una quimera a la espera de la heroicidad que siempre resulta ganar a EEUU. No, ahora sólo quedaba Argentina y Grecia. Difíciles, sin duda, pero ni mucho menos imposibles.
Lo mismo debió pensar Argentina, pues salieron con el cuchillo entre los dientes, sabedores que la mejor forma de parar a España y su vivaz juego era proponer un encuentro duro, muy físico, sin dejar que cogiese ni velocidad ni vuelo. Las cosas estaban muy negras hasta que Sergio Rodríguez empezó a acometer la mejor y más trascendental faena que se le recuerda. Remontamos la desventaja y a partir de entonces el partido se encaminó a un esperado y dramático final. Pero estamos hablamos de un guión excepcional, por lo que una simple resolución en dos tres jugadas no hubiese sido tan especial. Faltaba un gran golpe de efecto, y este se produjo cuando en un juego uno contra uno de espaldas a canasta, Pau Gasol salió cojeando. Después de las dudas que siempre genera una jugada de este tipo y una vez comprobado que la cosa era seria, la tierra se nos abrió justo debajo de los pies. Nos íbamos a jugar la mejor oportunidad de la historia del baloncesto español sin el mejor jugador de la historia del baloncesto español. Nos pinchan en ese momento y no nos sale sangre. Finalmente falló Nocioni, alabado sea el señor, y estábamos en la final. Pero la emoción ya estaba empañada por la lesión de Pau, cuya pinta empeoraba según pasaban los minutos. Tanto que una hora después Pepu Hernández nos contaba que el ambiente en el vestuario era más cercano a un funeral que a una fiesta. A veces hay cosas más importantes que el éxito deportivo, y este grupo lo demostraba.
El factor lesión Pau, lejos de convertirse en un hándicap, fue todo lo contrario. Lo intenté explicar en el artículo que escribí después de la final.
Deuda saldada

Después de darle tantas vueltas a los efectos que podía producir la baja de Pau Gasol, va el equipo español y reduce a cenizas a una Grecia exultante por su gran triunfo ante EEUU. De todas las posibilidades barajadas, el convertir en una caricatura de equipo al campeón de Europa no era una de las más previsibles y sólo manejando las cuestiones sicológicas que gravitan sobre cualquier partido de esta envergadura pueden explicar tamaña diferencia. Una vez visto lo ocurrido, resulta más fácil de explicar. La baja de Pau tuvo un efecto tan saludable en los españoles como dañino en los griegos. Su ausencia planteó un escenario diferente al previsto. De repente, los griegos estaban obligados a aprovecharse del supuesto golpe de suerte y en cambio España llegaba el partido con coartada. No es este grupo amigo de buscar excusas, pero la había. Pero en lugar de recordar al ausente los once jugadores de Pepu Hernández encontraron el momento propicio de saldar una deuda. La que tienen con el maravilloso Pau. Ellos saben que son un equipo, conocen la fuerza que les da el colectivo, pero de la misma manera comprenden a la perfección que la extraordinaria racha que vive la selección española de baloncesto no sería tal sin el concurso de Gasol. Su determinación para venir a representar a España, su convencimiento de que el título no era un sueño y su rendimiento fuera de serie han sido otros de los elementos de cohesión que ha dado como resultado este grupo ejemplar. Por eso, y por supuesto por la amistad y admiración que le profesan, todos se conjuraron en devolverle la sonrisa. Igual no se puede ganar un campeonato del mundo sin Gasol, pero sí un partido. Con esta situación emocional tan particular, el equipo español salió dispuesto a comerse a los griegos. Y vaya que si lo consiguieron. Sobre todo en defensa. Entre el impecable planteamiento táctico y el ardor que pusieron todos, Grecia se vio tan sorprendida que, cuando se quiso dar cuenta, tenía medio partido perdido. Al principio se podía pensar que cuando saliesen del banquillo Papaloukas y Spanoulis, unido al angelito Schortsianitis la cosa no sería tan sencilla. Había ocurrido en otras ocasiones. Iannakis les da unos minutos para que puedan observar desde fuera el desarrollo del partido y luego les otorga mando en plaza para que aprovechen esa mirada externa. Pero esta vez quizás se le fue la mano. Cuando entraron en cancha, el equipo español estaba lanzado y más convencido que nunca de que su sueño estaba cerca de cumplirse. Ni con unos ni con otros Grecia encontraba un resquicio donde poder llegar a unos números mínimamente presentables en ataque. Iban entrando los reemplazos españoles y aquello se ponía cada vez más difícil. Muy inteligente la opción Cabezas-Berni, en lugar de la de Sergio-Rudy, más lógica si se tenía en cuenta lo ocurrido en la semifinal. Pero Pepu entendió con acierto que para lo que pretendía, que los griegos siguiesen sin encontrar donde estaba el aro, los malagueños eran mejor elección. Y allí estaban Felipe y Marc Gasol para pegarse con Schortsianitis, y Jiménez para coger todos los rebotes, Navarro para poner el marcador fuera de alcance y Garbajosa para todo. Vaya partido se cascó el futuro Raptor. Estuvo en misa y repicando, cuando dice el refrán que eso es imposible. Pero esta vez lo consiguió. Triples, defensa, intimidación, prácticamente todo lo que hizo tuvo sentido y oportunidad. Con una actuación ejemplar se ganó el derecho de formar parte del quinteto ideal del campeonato.
Al final de tercer cuarto, el pescado estaba todo vendido, por lo que de ahí hasta el final, fiesta. Llegaba el momento de acercarse uno por uno a Pau, de decirle que aquello iba por él, de que se abrazasen los hermanos llorando, se desatase la locura y todos, jugadores, demás componentes del equipo, periodistas y aficionados disfrutásemos de un éxito sin precedentes. España es campeón del mundo. Cuesta hasta escribirlo.

Efectivamente, costaba hasta escribirlo. Pau Gasol, esta vez sin jugar, había vuelto a desarrollar un papel principal. En mitad de las celebraciones nos fuimos enterando de otro elemento que añadió grandeza al triunfo colectivo y sobre todo al entrenador de la selección Pepu Hernández. La noche anterior a la final, su padre había fallecido y Pepu no quiso que se supiese para no distraer la atención en un asunto que desgraciadamente no tenía remedio.
Muchas cosas y la mayoría buenas han ido llegando de la mano de aquel éxito. La selección se convirtió en un modelo a seguir, incluso por la de fútbol (lo dijo Casillas, no yo) y salvo pequeños sinsabores (la final de Madrid, la polémica destitución de Pepu o el traspiés de Turquía del año pasado) hemos disfrutado de cinco años difícilmente repetibles.
El negro Montes no paraba de pegar gritos y yo tenía un nudo en la garganta. Fue un 3 de Septiembre de 2006, el día que fuimos campeones del mundo de baloncesto con Calderón, Cabezas, Sergio Rodriguez, Navarro, Rudy, Berni Rodríguez, Mumbrú, Garbajosa, Carlos Jimenez, Felipe Reyes, Pau Gasol y Marc Gasol. En la banda, Pepu Hernández. Ya se lo hemos dicho muchas veces pero en tal fecha como hoy, muchas gracias de nuevo.

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Itu, me encantan estos post de recuerdos. Sabes que guardo en mi casa como un tesoro un magnífico libro llamado "Plata en Los Ángeles", que escribió Martín Tello y no sé quién más, y que editó el entonces patrocinador Banco Exterior de España??? Este post tuyo me lo ha recordado...

Este equipo es una montaña rusa, tan pronto está arriba como está abajo del todo, capaz de meter 62 puntos en dos cuartos, como meter 57 puntos en 40 minutos y sólo 2 puntos en un cuarto. Y así es muy difícil, por no decir imposible, ganar un torneo de estas características.Vale la excusa de reservar a Pau, lógico si está con un esguince y con la clasificación conseguida para la siguiente fase. Pero el hecho de tener solamente 7 jugadores para jugar los partidos y 4 que aportan poco o nada y uno que solo calienta banquillo (y van tres torneos así) pues es lógico que los aficionado tengamos muchas dudas sobre esta selección.Itu, espero que si esto sigue mal, le metas caña al Scariolo y al que lo ha puesto ahí, los dos máximos responsables. Y si ganamos, nos callamos como p....

Fue fantástico y todavía difícil de creer. Parece que fue un sueño.

Querido Itu y demás lectores del blog,Ayer, en la derrota ante Turquía, pasó un hecho que creo pasó desapercibido en los momentos cruciales (desconozco si luego se habló del tema porque cerré la TV a falta de 20 segundos por terminar) y que a mi entender fue la clave principal de la derota (obviamente hubo otros factores que influyeron pero ya se han dicho...). Me explico:ASIK en el último cuarto fue la clave de la victoria Turca. ASIK, lejos de ser Pau Gasol, es uno de los mejores pivots europeos actuales. Mide 2,12cm/2,13cm, es agil, no tiene miedo, juega ya en la NBA con los Bulls, y no es ahora mismo lo que podríamos llamar novato promesa. Mi pregunta es ... por que le defendió FELIPE en esos 5 minutos más importantes del partido donde nos machacó, estando IBAKA emparejado con YLIASOVA ????????????FELIPE hizo un gran partido ofensivo, sobretodo en esos momentos que ASIK nos estaba metiendo la de dios en nuestro aro, pero bajo mi punto de vista no se le podía pedir que en defensa hiciera de 5 marcando a ASIK, le supera casi en 10cm y en 15cm de envergadura !!!!!!!!!!!!!!! estan difícil que unos profesionales técnicos del baloncesto, de primera linea mundial, no vean que en el s.XXI Felipe ya no puede jugar de 5 en defensa con tios que le sacan 10 y 15 cm ???????????????????? que un Mundial, Olimpiadas o Europeo no es la ADDECO plata señor Scariolo !!!!!!!!!!!!!!!!!!Teniendo a IBAKA en cancha en ese momento (aunque tuviera 4 faltas, no recuerdo muy bien, teníamos que jugárnosla) fue un error que en ese momento IBAKA marcara a YLIASOVA que és más bien un 4 abierto.Y a todo ésto... con Pau lesionado, CLAVER 0 minutos teniendo a los 3 pivots restantes con 4 faltas personales en el último cuarto... no hubiera sido interesante rotarle a final de 1r y 2o o 3r cuarto de 4 faltando Pau en la rotación ???????????NO LO ENTIENDO. en resumen... SCARIOLO y Cia (Orenga incluído) NO OS ENTIENDO. Gracias, almenos me he desfogado y no se si alguien más piensa como yo...Un saludo.

No se lo ha dicho nadie Chevi77, se lo cree él.

Empecé viendo baloncesto con los Corbalán, Iturriaga, Rullan, Epi, De la Cruz, etc. Recuerdo la plata de Los Ángeles, donde Corbalán flotaba sobre el parquet, y teníamos una mezcla de veteranía, juventud y coraje, muy admirables. De aquella, recuerdo que, principalmente, Epi, era de los que más tiraba del carro en ataque. Luego vinieron tiempos obscuros (Villacampa, Jofresa, Herreros …), y aunque la selección, jugador por jugador no era mala, siempre nos faltaba, el “killer” que se echara el equipo a la espalda cuando las cosas se ponían tiesas, y a todo el mundo le empezaba a temblar la mano. Y de golpe y porrazo, hemos tenido dos jugadores franquicia, que además se complementan, en una misma “camada”. Que nadie se engañe, el éxito de la selección tiene nombre y apellidos.Después de ver más de 30 años de básquet llegó a la conclusión, que está muy bien lo del equipo, la jugada, el pick&roll… pero cuando las cosas se ponen tiesas, son muy pocos los que la meten dentro de aro, con cierta garantía, y ahí es donde está la diferencia, cuando viene el viento en contra.Ayer contra Lituania, y funcionando las cosas bien, todos vimos de lo que éramos capaces, y recordamos el Oro de Japón y aquella trituradora que gobernaba Pepu. Hoy, también hemos recordado otros tiempos, que también son nuestros, y, posiblemente, nos esperan a la vuelta de la esquina, en cuanto nuestros dos superhéroes cuelguen las espadas. Volveremos a ser una selección de notables….

Ah, y lo de Rudy de 3... sin comentarios. Se me lo meriendan al pobre, menos mal que salta mucho...

Pues visto en el campo (menudo gustazo aparcar en la puerta del pabellon, por cierto) lo visto hoy, me parece que lo de ayer fue un espejismo. Parece que ayer la canasta era una bañera y hoy (sobre todo en el ultimo cuarto) un llavero, y no creo que nos podamos permitir semejantes lindezas si queremos llegar a la final. Me gusto que saliera Sada mas minutos hoy, y me gusto mucho la actitud de Reyes, pero no entendi que si le das descanso a Pau, Marc e Ibaka se te saturan de faltas (con lo que los ultimos 6-7 minutos solo intentaban molestar, y poco) y Claver (que se supone que lo llevo de 4) y San M viendolo desde el banquillo, y sin un amago de meterles a jugar, ni siquiera cuando ganabamos de 10...pues vaya entrenador mas bueno este...Coincido en lo del mal uso de los tiempos muertos (que implica mala lectura del partido) y que aun sigo sin entender quien le ha dicho a Llull que el solo va a arreglar los partidos... En fin, veremos que pasa en play-offs, pero esto lo veo, como diria Julio Iglesias Sr., raroraroraro...

Una pregunta,me lo parece a mi o ¿todos los ultimos cuartos de España en el europeo son pesimos? obviado el desastre de hoy¿2 puntos? lo pienso y me sube la bilis ....

¿Recuerdo de esa final?revolcarme por el sofá, coger una bandera de españa y salir a la calle pitando con el coche, la gente nos miraba raro a mi hermano y a mi,hasta que me cruce con un antiguo compañero de basket que también iba "haciendo ruido", en un pueblo de 30000 habitantes solo nosotros salimos a celebrarlo. Lo de Turquía ....indignante,no entiendo a Scariolo,no voy a entrar en si tenia que haber sacado a Claver o pedir tiempo muerto, ayer España estuvo centrada y hoy no, Pepu hizo equipo, gominolo,viendo la cara de Claver en los partidos...obviamente no.Espero que Alemania nos de una alegría

Se me caían las lágrimas viendo defender a España en la final del 2006.

Menuda cara de gilipollas que se nos ha quedado a algunos... a él no, esta vaina no va con él

Vaya palito cuando menos lo esperábamos algunos! por qué Scariolo no ha pedido algún tiempo muerto antes del triple de Onan? Menuda cara de gilipollas que se nos ha quedado a algunos... a él no, esta vaina no va con él

Ahh, se me pasaba, pero es que ya tengo los pelos del escroto quemaos con el dichoso anuncio del samsung galaxy, o la maravillosa que es la vida si tienes uno....Me presto voluntario para ir a Lituania y meterselo por el c**o a Scariolo y de paso presentarle a los jugadores 10, 11 y 12 de la seleccion...

Buenas!Acabamos de perder contra Turquía, y contrastar definitivamente que Scariolo, al igual que Claver, SanM y Sada, también está de turismo. Creo que los tod@s los que hemos estado viendo el partido, viendo que no se atacaba bien y con éxito y que no se defendía, hubiéramos pedido un tiempo muerto antes del triple de Onan, más que nada, para evitar que los turcos, que son bastante animosos, se vinieran arriba poniéndose por delante.Pero no, ¿para qué?. Vale que no ha habido en este último cuarto el acierto de la primera mitad de ayer, y que Pau ha descansado. Pero con todo hoy España tendría que haber ganado.De pasar con dos victorias, y con Turquía que no nos cogía ya seguro, ahora vamos en igualdad de condiciones con turcos, lituanos, alemanes, y serbios o franceses... Es decir, en vez de clarificar notoriamente el cruce, hoy lo hemos complicado ostensiblemente.Eso sí después del tiempo muerto, la solución para desatascar vuelve a ser LLull y un triple de Marc Gasol. En fin, Itu, yo lo sigo viendo mal y no soy nada optimista, pese a que anoche disfrute mucho con la primera mitad. No es que ayer fuéramos la hostia, y hoy unos negados. Son las sensaciones. Si hay acierto ofensivo hay victoria, sino no, y eso antes no pasaba, porque la defensa era la seña de entidad de la selección, ahora sólo es un espijismo, en el que si hay intensidad fisica, se responde, sino no.Ah, por cierto contra Lituania no hubo amenaza en el rebote defensivo por parte exterior (Jasaitis no iba a disputar el rebote con Rudy ni con nadie), pero hoy entre Turkoglu, Pdrelzic y Onan si nos han comido la tostada. Eso sí SanM y Claver viéndolo desde el banco.Scariolo, dimisión ya. Saéz, dimisión ya, porque Scariolo no tenía que haber llegado aquí...

Corrijo....Por supuesto tienes razón. Navarro tambien debe estar ahí. Es tambien una opinión.

@ismael esteban: lo siento, pero considero un delito que pongas a Rudy antes que a Navarro, hay años luz de diferencia a favor de Juan Carlos en mi opinión

Pues sí, por fin, gran primera mitad ayer contra Lituania, recuperando a (casi) todos los jugadores que creíamos perdidos, hay esperanza, coño.Y lo de Japón... Monk, qué bueno que estuvieras en NY, yo también, pero de otra manera. Si me permitís... lo cuento: Yo vivía en NY pero estaba de vacaciones en Madrid, volaba el viernes de la semifinal contra Argentina, sale Sergio Rodríguez (encima soy del Estu), revoluciona el partido, España ganando de poquito, quedan 5 minutos para que acabe y... llaman al telefonillo, el taxi para el aeropuerto está debajo de mi casa, mierda, me tengo que ir, bueno, lo oiré en la radio. Me monto en el taxi y... no tenía radio, dios, la primera vez en mi vida que veo un taxi sin radio. Llega a Barajas, yo todo nervioso, me bajo del taxi y un conductor de furgoneta al lado se pone a pitar como un loco porque han ganado a Argentina, ¡bien! Llego al día siguiente a NY, a mi barrio de allí, Astoria, Queens, ¡un barrio griego! Por supuesto en la tele nacional gratuita los yankis ni se dignan a televisar el partido, que por cierto Monk, era a las 7:30 de la mañana. Me bajo a dar una vuelta por el barrio a ver en qué bar lo televisan, en el único bar español me dicen que no, todos los demás, bares yankis (pasan de esto) o griegos. Me acerco al más grande, una cafetería llamada Athens y veo un cartel diciendo que lo van a televisar, ¡bien¡ ¿Bien? Joder, a un bar lleno de griegos a ver el partido yo solo, ufff. Extrañamente convenzo a mi (ex)novia que pasa totalmente, para acompañarme a verlo (a las 7 de la mañana arriba y con el jet lag). Llego al bar, lleno a rebosar de griegos, con camisetas, banderas y cara de haber dormido poco celebrándolo. Nos sentamos en una esquinita, calladitos, celebrando los triples (cuántos metieron) casi en silencio. Sólo los de al lado se debieron dar cuenta de que éramos españoles, pero no dijeron nada. Los más exaltados estaban "lejos". A mitad de partido ya vieron que perdían y se relajaron bastante. Eso casi fue una pena, no hubo emoción en los dos últimos cuartos. Acabó el partido, pagamos nuestro café y salimos a dar un paseo por el barrio lleno de camisetas azules cabizbajos, y yo con una alegría tremenda, no se me olvidará nunca, no.

Recuerdos imborrables lo que consiguieron estos tios hace 5 años... Psicológicamente lo de Pau y lo del entrenador hizo que fuéramos una muralla para los griegos. Qué bonito. Pero como ha hecho otra persona quiero aquí recordar otros tios que nos hicieron pasar unos momentos inolvidables con aquella medalla de plata del 84 que nos puso en el mapa y consagró a toda una generación de jugadores EXTRAORDINARIOS...... Fernando Martin, Corbalan,Epi, Jimenez, etc... decidme alguien que los vió si estos cuatro no estarían ahora jugando en el quinteto titular de la selección... salvando las distancias... A ver:QUINTETO TITULARBases: Calderón-CorbalánEscolta: Rudy-EpiAleros: JimenezPivots: Los dos GasolDecidme por favor si este equipo no habría hecho pupa a la España actual....Monstruos los de ahora pero esos jugadorazos eran de quitarse el sombrero.Animo y a estar concentrados en el cruce.

3 de Septiembre..., vamos a jugar al acertijo, ¿Qué distinguido baloncestista, para mas señas maño, cumple años ese mismo día?..., fué medalla de plata en Los Ángeles..., creo que ya lo sabeis no?, jeje...

También me gustaría que Sada,aumentara, ampliara o estrenara su glorioso marcador. [;)]

#José Ignacio, el partido EEUU - Grecia fue antes. De hecho no me lo creía cuando vi el resultado en la TV de aquel bar de Manhattan justo antes de empezar el partido España - Argentina. Ahí me puse un poco más nervioso. El Campeonato estaba muuuucho más cerca.

OeeeeeeeeeeeeApareció la mejor versión de los jugadores, el primer cuarto es para enmarcar y no dejar de contemplarlo, a pesar de tu prudencia en la narración al finalizar los primeros diez minutos ya teníamos la victoria en el bolsillo. Gran Calde (ya tocaba recuperarlo), de Juanca y Pau ni qué decir, ya comentabas que la mejor noticia era que la primera canasta del pívot tardó en llegar (pedazo de alley hoop). Rudy intenso, Ibaka demostrando en qué liga se ha formado....En fin, dada la alegría ni comentaremos algunas rotaciones que hizo o no hizo Scariolo, le dejaremos tranquilo.No he podido esperar tu crónica para comentar.A por ellos!!!

Histórico, emocionante, bello, todos los adjetivos son pocos.Pero......por desmitificar un poco, recordemos que el nivel de aquel Mundial fue un tanto flojo, al menos fuera de los cuatro semifinalistas. Los rivales del grupo fueron mediocres. Luego España se midió a una Serbia en plena crisis, a una Lituania en cueros (no tenían creación, sin Jasikevicius y sin Siskauskas en el equipo, y era facilísimo ahogar su juego ofensivo).Luego las pasaron canutas contra Argentina, en lo que parecía iba encaminado al enésimo colapso español, resuelto en buena parte por el hoy olvidado (a nivel selección) Sergio Rodríguez. Posiblemente sea el partido clave de la historia del baloncesto español, el que hizo sacudirse fantasmas y complejos.Y la final se jugó de manera impecable y muy meritoria, pero los griegos estaban completamente fuera de partido a nivel psicológico. El subidón de la victoria contra EEUU había sido increíble. Fue un acontecimiento en Grecia de enormes proporciones. Encima no estaba Pau Gasol para jugar la final. No tenían tensión competitiva alguna. A España le sucedía lo contrario, ya que la motivación que tenía ese grupo tras la baja de Gasol creo que es muy difícilmente superable. Las dos grandes claves, creérselo para transformar las adversidades en motivación, y la habilidad transformar esa motivación en juego efectivo.De todas maneras, el juego de la selección fue espectacular, y yo sólo lamento que España no hubiera tenido rivales un poco más duros para que las victorias hubieran lucido un poco más, porque no me caben dudas de que ese año no había nadie (salvo quizás EEUU, y más por cuestiones psicológicas que de juego) que los parase.

Bueno, bueno, bueno... Pues parece que los dioses del baloncesto te han oido hablar de semejante Mundial donde jugamos de cine, porque menuda felpa que le hemos metido a los lituanos en su propio terreno.Y para que se vea el merito que ha tenido, y se vea lo grande que es el basket en Lituania, baste lo que me dijo el azafato (asistente de vuelo se dice ahora, no??) esta mañana al entrar al avion con destino a Kaunas segun vio en mi tarjeta de embarque lo de mi nacionalidad: Spain loses tonight (Esta noche pierde España).Cierto es que he visto el partido con emociones enfrentadas (yo pensaba que mi novia me pedia el divorcio en el descanso al ganar de 30) pero ha sido un gustazo que la seleccion se haya vuelto a encontrar con su juego. Aunque con la boca bien cerradita, no sea que me lincharan...Mañana Turquia, a ver si seguimos la racha...

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Sobre el blog

El palomerismo es toda una filosofía de vida que se basa, como la termodinámica, en tres principios. El de la eficiencia: “Mínimo esfuerzo, máximo rendimiento”. El del aprovechamiento. “Si alguien quiere hacer tu trabajo, hacerte un regalo o invitarte a comer, dejale”. Y el de la duda: “Desconfía de los que no dudan. La certeza es el principio de la tiranía”. A partir de ahí, a divertirse, que la seriedad es algo que ahora mismo, no nos podemos permitir.

Sobre el autor

Juanma López Iturriaga

Básicamente me considero un impostor. Engañé durante 14 años haciendo creer que era un buen jugador de baloncesto y llevo más de 30 años logrando que este periódico piense que merece la pena que escriba sobre lo que me dé la gana. Canales de televisión, emisoras de radio y publicaciones varias se cuentan entre mis víctimas, he logrado convencer a muchos lectores para que comprasen mis libros y a un montón de empresas que me llaman para impartir conferencias. Sé que algún día me descubrirán, pero mientras tanto, ¡que siga la fiesta!

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