Cuando le insisten en el off the record, un reportero cree que está a punto de enterarse de algo interesante. La cosa queda muchas veces en una rueda de prensa privada con café o cerveza. En ocasiones, uno se ríe un rato. Otros encuentros dan para más. Un reciente artículo en el FT de Londres expone lo que quizá sea el contenido de un encuentro off the record con la canciller Angela Merkel, tal vez celebrado en Cancillería, acaso la semana pasada. Publicar lo que te cuentan off the record pasa por falta de respeto, tanto a los colegas que participaron en la ronda como al entrevistado. Pero quién sabe.