El viernes pasado se presentó en Madrid la segunda edición del Índice Elcano de Presencia Global (IEPG), un trabajo que impresiona por su utilidad, relevancia, valor y recursos empleados. La idea es tan simple de imaginar como compleja de llevar a la práctica: se trata de proporcionar datos útiles, válidos y comparables que midan la posición internacional de los países y que permitan debatir de forma contrastada y argumentada sobre quién influye más, quién tiene más poder, quién emerge y quién decae.
Hacer esto con una sola variable es relativamente sencillo: agrupar a los países por PIB, gasto militar o reservas energéticas no tiene ningún misterio. Pero intentar agrupar dieciséis indicadores que nos hablan de la posición internacional de los estados y no morir en el intento no es tan fácil: desde la energía al turismo, pasando por la cooperación al desarrollo o el número de tropas, el Índice Elcano es uno de los más ricos del mundo en cuanto al número de variables y su ambición.
Puedo asegurarles, porque he participado como asesor externo en alguno de los grupos de trabajo que lo ha desarrollado, que llevar a cabo esta tarea con éxito y de forma rigurosa y honesta es sumamente difícil ya que hay que tomar multitud de decisiones metodológicas, conceptuales y prácticas que pueden afectar a la calidad del producto final y dañar su credibilidad. Sólo la selección de las variables y la exclusión de unas u otras ya representa un sesgo considerable. Por no hablar de qué datos se usarán y cómo se cuantificarán. Pero en la mayoría de los índices compuestos la ponderación es siempre el principal problema: unos pequeños cambios aquí, unos pequeños cambios allá y el índice puede decir prácticamente lo que uno quiere que diga. En ese sentido, lo que me parece más relevante y meritorio del Índice Elcano es su transparencia. La página web que lanzan junto con el informe contiene un simulador que permite a cualquiera jugar con los pesos relativos de cada variable.
Más allá de los aspectos metodológicos, que me parecen muy importantes, los resultados están a la altura de las expectativas: vean si no el análisis que presenta Iliana Olivié bajo el título: "Decadentes, no decaídos, emergentes pero no emergidos", con unos gráficos muy interesantes sobre el ascenso de China, la posición de España o el permamente poder de Estados Unidos.
El Índice Elcano no mide el poder de los estados, ni la influencia, ya que por extraño que parezca, los politólogos sabemos qué es el poder (A tiene poder sobre B en la medida que consigue que este haga algo que de otra manera no haría) pero no cómo medirlo eficazmente. Por no hablar de la “influencia” o “soft power” un concepto que riza el rizo de lo inaprensible. Pero el IEPG sí que mide la presencia y posición, permitiendo así comenzar a discutir cómo se traduce y relaciona la presencia con el poder. Intuitivamente, sabemos que hay países que tienen mucha influencia en relación al (menor) poder que tienen, y también que hay países que son muy poderosos pero que influyen o quieren influir muy poco. El índice Elcano ofrece una manera de comenzar a hablar de esto de una manera ordenada. Pasen, véanlo, jueguen con él y lleguen a sus propias conclusiones.
Hay 11 Comentarios
Jorge:
América Latina es un muerto vivo. Si Usa no le dona miles de millones anuales, y le permite exportar a la mitad de la población se muere de hambre. ¿Acaso no te da asco la pobreza de las fabelas de Brasil, o los barrios bajos de Buenos Aires, o las cabolas que rodean Caracas? Mira que hay que ser ignorante para creer que éste es el futuro del Mundo. América Latina es africana.
Ojalá escogiera ser aliada de España, se merecen mutuamente.
Publicado por: Antoni de Sallas | 27/07/2012 23:35:30
Antoni de Sallas
Ya dije que América Latina tendrá que decidir qué es lo que quiere ser y escoger a sus aliados.
Publicado por: Jorge | 25/07/2012 22:00:27
Ana, el autor del blog es politólogo, sí, es profesor de ciencias políticas en una universidad española. Te lo digo yo, porque si esperas que te lo responda él creo que necesitaría una vida jajaja. Aqui no es como en "Vientos de Brasil", el autor del blog no comparece, porque al no estar jubilado tiene más que hacer que estar perdiendo el tiempo con los lectores.
Un saludo.
Publicado por: Jorge | 25/07/2012 21:59:00
"Europa y Norteamérica deberían unirse en un solo país."
Ay, Dios, ¿Y qué haremos con los mexicanos?
Publicado por: Antoni de Sallas | 25/07/2012 18:40:49
hola Jorge, la pregunta no era contigo sino con el autor de blog, tenía entendido que es periodista, unsaludos a ambos ;)
Publicado por: anna | 25/07/2012 16:29:25
Anna, no soy politólogo ¿Por qué?
Publicado por: Jorge | 25/07/2012 5:02:31
¿eres politólogo?
Publicado por: anna | 25/07/2012 4:26:34
Europa y Norteamérica deberían unirse en un solo país. Claro que, primero, habrá que conseguir que Eiropa se una (risas)
Publicado por: Jorge | 24/07/2012 21:43:30
ESTADOS UNIDOS-CANADA-UNIÓN EUROPEA-JAPÓN-AUSTRALIA-NUEVA ZELANDA sigue siendo el eje o columna vertebral del planet , a pesar de los emergentes. Podíamos agrupar estnas rbegiones en una sola: OCCIDENTE (con la excepción de Japón, si bien el país nipón parece una simulación de Occidente). Todos ellos juntos representan aproximadamente la poblacióin de China. Sigo apostando por Occidente, que creo que a finales del actual siglo XXI debería intentar formar una Federación. A Rusia le cabe escoger entre Occidente o China, porque tarde o temprana tendrá que elegir. América Latina, con su conflicto de identidad permanente, debería decantarse por Occidente en toda lógica, pero sus fantasmas muchas veces ls pueden, habrá que esperar a ver. India podría hacer de Estado tapón-avanzadilla de Occidente sin quererlo.
Publicado por: Jorge | 24/07/2012 21:41:24
¿España numero ONCE? Bah, sueños de quimeras. España no cuenta ni en Cataluña, menos ha de contar en el mundo. Prueba: Argentina le roba, y Bolivia la expulsa. ¿Qué más se necesita saber?
Publicado por: Antoni de Sallas | 23/07/2012 20:04:29
Me suelen gustar los estudios que alabora el Real Instituto el Elcano, pero este me parece muy complejo y poco útil, debido a que entre otras cosas basa el IEPG únicamente en la proyección exterior de los países en un momento puntual no considerando su potencial interno, algo fundamental a la hora de valorar el poder mundial de los diferentes países. A la hora de valorar el poder de los países considero que es tan importante o más quien lo tiene que quien lo ejerce, algo que no siempre se corresponde.
Es interesante el puesto que le asigna a Holanda, país que no participa en las reuniones del G-20 y cuyo poder mundial considerando indicadores como el PIB, capacidad militar, población, etc., es mucho inferior.
Los miembros permanentes del Consejo de Seguridad, los países que integran el G-8, países mas industrializados y Rusia, siguen de acuerdo a este indicador ocupando los primeros puestos en la esfera internacional, dando a entender que exceptuando la anomalía de Holanda la cúpula mundial sigue siendo la misma que hace un par de décadas, poco ha cambiado al respecto.
Publicado por: ECO | 23/07/2012 13:35:14