José Ignacio Torreblanca

Secesión de terciopelo, adhesión de terciopelo

Por: | 15 de abril de 2014

Captura de pantalla 2014-04-14 22.55.32Leo con sumo interés el informe del Consell Assesor per a la Transició Nacional sobre los escenarios posibles de adhesión a la Unión Europea que seguirían a una secesión de Cataluña y su conversión en un estado independiente [ Descargar INFORME 6. Les vies d'integració de Catalunya a la Unió Europea]

El informe examine cuatro escenarios: uno, permanencia automática del nuevo Estado en la UE, sin salida; dos, salida temporal pero entrada exprés mediante un procedimiento de adhesión ad hoc; tres, salida de la Unión y sometimiento a un procedimiento, dilatado, de adhesión ordinaria; y, cuatro, exclusión definitiva del nuevo Estado catalán de la UE.

Los cuatro escenarios son posibles. Desde ese punto de vista, el informe cumple con sus objetivos pues a un encargo de este estilo lo que se le debe exigir es dibujar correctamente los escenarios posibles. Otra cosa bien distinta es que el orden en el que se presentan estos escenarios se corresponda con sus posibilidades reales de materialización, lo que no es el caso.

Pese a las conclusiones que apresuradamente ha querido sacar el Govern, no parece que ni la permanencia tal cual en la UE, sin salida de la UE, ni la adhesión ad hoc a la UE tras una fugaz salida sean hoy por hoy escenarios posibles. Esto se debe a que los expertos que han redactado el informe se amparan en la combinación de dos supuestos que les llevan a una conclusión que refleja más los deseos de los ponentes que la realidad de los hechos.

Se amparan los expertos para convencerse a sí mismos de que esos escenarios son los más posibles en la falta de precedente jurídico y, en paralelo, en la flexibilidad de la que tradicionalmente ha hecho gala la UE para situaciones novedosas. Pero yerran los expertos en, primero, suponer que la ausencia de precedentes para un caso como el que eventualmente plantearía Cataluña les beneficia y, segundo, en pensar que, en las actuales circunstancias se beneficiarían de esa flexibilidad.

Porque esa falta de precedente sólo podría desencadenar un procedimiento de adhesión exprés para Cataluña, y lo haría sólo de forma hipotética, si se diera bajo un tercer supuesto que el Consell omite: el de el consenso entre todas las partes (España, Cataluña y el resto de los gobiernos e instituciones de la UE). Dicho de otra manera: si el gobierno de España y el de Cataluña acudieran de la mano a Bruselas y plantearan el deseo de lograr que la secesión de Cataluña no implicara su salida de la UE, entonces es bastante probable que las autoridades europeas estuvieran dispuestas a establecer un procedimiento y un plazo para lograr que el proceso de secesión y el de adhesión se solaparan.

No se trata por tanto como dicen el Consell de que España vetara o no vetara el proceso, sino de algo que va mucho más allá: de que apoyara activamente ese proceso y lo liderara políticamente dentro de las instituciones europeas. Una adhesión de terciopelo sólo sería posible tras una secesión de terciopelo, lo que no parece el caso e incluso, dirían algunos, sería pedir demasiado después de un proceso no pactado.

Pero incluso en ese supuesto de secesión de terciopelo no podríamos hablar de un procedimiento exprés pues, necesariamente, la Unión Europea tendría que verificar que las nuevas instituciones catalanas y las leyes emanadas de ellas (desde una Constitución catalana hasta su desarrollo legislativo) cumplieran el derecho comunitario, un enorme mamotreco de legislación que se estima entre ochenta y doscientas mil páginas. Es decir, Cataluña no podría librarse del proceso de escrutinio y certificación del acervo comunitario (screening, en la jerga al uso) al que se somete a todo Estado candidato, lo que llevaría un tiempo considerable pues esas instituciones y legislación serían nuevas o ni siquiera estarían creadas.

En consecuencia, lo más sorprendente del informe del Consell, y también de las conclusiones del Govern, no es su desconocimiento de cómo funciona la Unión Europea sino de las implicaciones de la estatalidad a la que aspiran. Dice el Govern que carece de sentido suponer que la Unión Europea expulsaría de su seno a ciudadanos europeos que ya lo son, pero ese es precisamente el asunto central: que los ciudadanos de Cataluña gozan hoy de esos derechos en tanto en cuanto ciudadanos de un Estado, el español, que cumple con los requisitos exigibles a los estados de la Unión en cuanto a protección y garantía del catálogo de derechos más avanzados del mundo.

Precisamente porque las nuevas autoridades catalanas pondrían en marcha nuevas instituciones político-jurídicas, las instituciones europeas tendrían que verificar que no hubiera menoscabo en los derechos que como europeos les corresponden. Pero ahí, en los derechos ciudadanos, es donde el argumento secesionista da la vuelta y se vuelve contra sus promotores pues si los ciudadanos catalanes gozan hoy de plenitud de derechos en el marco europeo, ¿qué sentido último tiene la secesión desde el punto de vista de esos derechos? ¿Y qué otra justificación para la secesión hay si no es la basada en derechos?

Hasta la fecha, ni el Consell ni el Govern han planteado a las instituciones europeas queja ni demanda alguna respecto a la privación de derecho alguno de los habitantes de Cataluña en razón de su pertenencia al Reino de España. En ausencia de una caso secesionista claro y en ausencia de consenso entre las partes, ¿por qué debería la Unión Europea diseñar un procedimiento ad hoc?

Hay 64 Comentarios

Estados pequeños, Estados manejables ¿desde fuera, o desde dentro?)

Sr Torreblanca,
Agradezco el tono de su artículo. Hasta ahora, muchos textos escritos desde Madrid evitaban el fondo de la cuestión.
Dos comentarios:
1. Éste es un non-issue. Cataluña y los catalanes seguirán formando parte de la UE hasta que el Estado español reconozca el nuevo Estado catalán, lo que sólo se producirá como resultado de una negociación, en la que todo estará sobre la mesa (reparto de activos y pasivos, pertenencia a organizaciones internacionales, etc).
2. En caso que España reconociera la República de Cataluña y se concluyera que ésta última debe negociar el acceso a la UE, cómo se la expulsaría? En base a qué artículo? Supongo que lo debería proponer un Estado miembro y conseguir el apoyo unánime del resto... Eso es tan fácil? Cuánto durarían las negociaciones? En el caso de Groenlandia, duraron 2 años largos (y querían marcharse de la CEE...).
En resumen, a la hora de la verdad, coincido con que se encontrarán soluciones imaginativas que no dañen losintereses económicos de nadie.
Gracias.

Esto solo tiene dos finales posibles: el harakiri politico de Mas, antes o despues de declarar el EstatCatala, que por supuesto durará 10 horas, como en el 34. Lo demás, juegos florales, y Junqueras como Dencàs.

"la Unión Europea tendría que verificar que las nuevas instituciones catalanas y las leyes emanadas de ellas (desde una Constitución catalana hasta su desarrollo legislativo) cumplieran el derecho comunitario".

Precisamente es esto lo que no habría que hacer en el supuesto de secesión interna y lo que distinguiría la negociación de las anteriores. Puesto que la Cataluña independiente YA cumple con toda la legislación comunitaria, por el hecho de escindirse de un Estado Miembro.

Además debe tenerse en cuenta que la negociación podría realizarse DURANTE el periodo de transición desde el Estado español al Estado catalán.

Aquí lo que cuenta es la pela. Si el gobierno catalán consigue del español, mediante unas negociaciones, un pacto fiscal o un Concierto económico, tipo al del País Vasco, se acabaría el problema. Todo se basa en la economía. Mas ha precipitado el asunto de la independencia porque la crisis le ha pillado en pelotas y ha sido incapaz de gobernar si no ha sido por la austeridad extrema. Su deuda y su déficit no cuadran con una nación reflexiva, rica y bien gobernada, todo esto le ha atropellado y cuando ha ido a Madrid a negociar más dinero, le han dicho que no hay más, que hay que arreglárselas con lo que hay. Todo esto y la presión popular, por el exceso de tributos y tasas, le ha llevado a Mas, sin reflexionar, a que la independencia es el mejor camino para salir de ésta.
Si una región se deslinda de un país y se hace independiente, no puede ocurrir de la noche a la mañana. Hay que negociar el debe y el haber de cada Estado que quede. Cataluña tendría que asumir su deuda en solitario, también tendría que asumir los pagos por jubilación. Si se cierra la caja única se cierran los pagos a jubilados.
En definitiva, existe una maraña de acuerdos, ajustes, negociaciones, lo que corresponde a cada cual, etc., que en año y medio no se podría conceder la independencia hasta que todo no estuviera resuelto. España no estaría dispuesta a perder ni un ápice en la transacción. Hablando hipotéticamente.
Por otro lado está si una exigua mayoría podría someter a la independencia a una minoría, pongamos, del 48%. Creo que esto España no lo permitiría de ninguna manera.
Aún así, Bruselas se ha manifestado claramente, para el que lo quiera entender, que la salida de la UE es automática y hay que volver a empezar. ¿No se quiere ver desde parte de Cataluña? Bien, eso es otra cosa. Pero Mas tiene una gran responsabilidad por cómo está llevando a su país al extremo. Para luego no conseguir nada.

Estoy muy de acuerdo con Nacho Torreblanca (tiendo a estarlo con mucha frecuencia, la verdad): la argumentación del informe es de una calidad técnica francamente baja. Ya se sabe que los consultores suelen tratar de complacer a su contratante, pero cualquier consultor razonablemente profesional procura no pillarse los dedos diciendo cosas que chocan manifiestamente con la realidad. Se ve que en este caso...
Porque la verdad es que no hace falta darle demasiadas vueltas al asunto. O dicho de otro modo, no es necesario saber interpretar normas jurídicas: basta con saber leer. Los tratados de la UE están firmados por Estados, que son sus únicos Miembros (artículo 1 TUE, artículos 48, 49, 50...); no por todas y cada una de las subestructuras territoriales, políticas, sociales, culturales... que articulan a los Estados Miembros; ni tampoco por sus ciudadanos. Los ciudadanos de los Estados Miembros son CIUDADANOS, no MIEMBROS. Dos categorías jurídicas bien diferentes, con derechos y obligaciones bien distintos. Así pues, para añadir cualquier nombre a la lista de 28 Estados Miembros actuales (¡y este, el de quiénes son las partes, es un elemento esencial de cualquier acuerdo jurídico!) no hay más remedio que modificar los tratados. ¿Cómo se hace eso? ¡Pues cómo va a ser!: como dice el artículo 48 del Tratado de la Unión Europea. En particular, su párrafo 4 establece que "las modificaciones [de los Tratados] entrarán en vigor después de haber sido ratificadas por todos los Estados miembros de conformidad con sus respectivas normas constitucionales. O sea: por unanimidad.
Siento repetirme, pero ¿hay algo que interpretar aquí, o basta con saber leer?

Este tema continuará por parte del nacionalismo catalán mientras necesiten dinero extra para cubrir su déficit y deuda. Por una parte es una presión al Gobierno Central para que financie a Cataluña, y por otra parte es una enorme cortina de humo que se coloca sobre Cat para que la población tenga su circo mientras pasan por una gravisima crisis.

La apuesta del independentista Partido Quebequés (PQ) para obtener la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional [Parlamento] de la provincia canadiense y recobrar así los bríos perdidos del soberanismo se ha saldado con su peor resultado electoral en 40 años. Tras solo 18 meses fuera del Gobierno, el federalista Partido Liberal ha ganado 70 de los 125 escaños en liza en las elecciones legislativas celebradas este lunes en la región, la mayoría absoluta. (El País, 8-4-14

Croacia adquirió la independencia en junio de 1991, tras el violento desgarramiento de la antigua Yugoslavia, e ingresó en la Unión Europea, veintidós años después, en junio de 2013. Y eso, que no contaba con ningún veto previo, porque la nación matriz, Yugoslavia, desapareció.

Me parece que su medio de comuncación ha hecho en todos estos años una política totalmente equivocada con respecto de Cataluña, siempre elogiandolos de manera desmesurada y a veces sonrojante. Es un cierto reflejo del complejo de inferioridad de la intelectualidad española. Ahora se creen capaces de todo. Ese es el resultado. Y no hay quien los pare. Es tarde para reaccionar.

Teniendo en cuenta el juego de intereses económicos que subyace en las negociaciones de adhesión entre los paises integrantes de la U. E. y de aquellos que aspiran a serlo, ¿no cabría pensar en la posibilidad de que aún dando España su beneplácito a la adhesión no habría terceros países interesados en mantener a Cataluña fuera de la U.E. el mayor tiempo posible?

Por alguna extraña razón, los nacionalistas catalanes están convencidos de que la misma imagen idealizada que tienen ellos de si mismos la tiene tambien en el resto del mundo, (excepto en Castilla, y "restospaña" en general, claro).
No se dan cuenta de que la UE (y sobre todo los estados que la componen) lo último que quieren y necesitan son nuevos embrollos nacionalistas, con cambios de fronteras, minorias y territorios reclamados. Crearían un precedente que rápidamente pondrían sobre la mesa los corsos, los venetos, los galeses, los bretones, los flamencos (de bélgica), los serbios de bosnia, los croatas de bosnia, los hungaros de rumanía, los...
Tampoco nadie se cree que porque Cataluña sea independiente se vaya a acabar la vaina. ¿Cuantos meses tardarán en reclamar "por vía pacífica y democrática" los "paises Catalanes", incluyendo el Rosellón francés y el Alguero italiano?. ¿Resistiría una Vasconia independiente con el subidón nacionalista correspondiente la tentación de hacer lo mismo con el Iparralde francés?. ¿De verdad se creen los catalanistas que los europeos, y más con lo que está pasando ahora mismo en Ucrania, tienen el más mínimo interés en que se abra ese melón?

Sisifo, verse abocada CAT a una DUI? Abocada? Santo Cielo !!!!! Y los demas ciudadanos de este (jodidisimo) pais que no le votamos al PP a que nos vemos abocados todos los puñeteros dias???? A emigrar? Por favor...El reto estrategico es como sortear las consecuencias del CAMBIO CLIMATICO, lo demas no son ni tacticismos...
Ya que vamos de acronimos...DUI? Snafu...

No solo España se opondría a una readmisión tras la secesión que nunca va ser pactada (el País Vasco la pediría después), sino todos los países de la Unión que padecen la lacra nacionalista: Francia, Bélgica,Italia, Reino Unido, etc.

@ Publicado por: Alex | 15/04/2014 14:07:27
Dialogo. Si todos estuvieramos dispuestos a poner encima de la mesa todo y hablarlo sin tabues (una constituyente), No estariamos aqui.
Un placer leerle. En un tiempo en q solo vacian camiones de basura sobre todo el q desafie el orden establecido, es vd. una burbuja de oxigeno.
A lo mejor, si le preguntaran a todos los espanoles q quieren, consiguirian abrir la caja de pandora y encontrarian soluciones.
Votar! Palabra magica q el PP quiere olvidar.
Un saludo muy cordial

El independentismo en Cataluña, hoy por hoy, es simplemente una moda. Hace unos años no llegaban ni al 30% y ahora en un corto periodo de tiempo lo doblan. Es como montar en bici, correr o ver series, ahora lo que se estila (por allí) es ver banderas esteladas como si no hubiera un mañana y dejarse llevar por los cantos de sirena. Cuando los de la moda se den cuenta de que lo que se lleva es tener unas gafas o relojes con android entonces a otra cosa. Las banderas, ay, las banderas, cómo os conocen los políticos.... Pon un trapo de colores en un palo y verás la de "patriotas" que te siguen. Eh, y hablo de cualquier nacionalismo, no sólo el catalán. Los nacionalistas habéis hecho tanto daño a lo largo de la historia que no sé porque seguís existiendo. COn Franco tuvimos sobredosis de españolismo y ahora de aldeanismo.

Muchos catalanes se piensan que con la independencia se librarán de la corrupción, cuando lo que único que pasará es que los corruptos que ya tienen allí (y hay para dar y tomar como en el resto del país, con perdón), se quedarán como los reyes del cortijo, con el agravante de que, al estar fuera de la UE, aunque sea temporal, podrán hacer ya sin cortapisas LO QUE LES DE LA GANA.

Italia tiene un 125% de deuda sobre el PIB y no ha ido a la ruina. Eso sí, sus bancos tienen acceso a la financiación del BCE.

En el problema de la deuda no hay que olvidar que España denunciará a Catalunya ante los Tribunales internacionales por no su asumir su parte y eso la devaluaría mucho (la deuda). Pues una reducción del PIB español del 20% aumentaría el ratio deuda/PIB en aprox un 25%. Es probable que eso devaluase el valor de la deuda española en un primer golpe, pero también es probable que el BCE proporcionase liquidez a los bancos europeos, lo que podrían aprovechar (entre ellos los españoles) para comprar esa deuda a precio de saldo a unos bancos catalanes quebrados (sin el recurso al BCE). También está claro que Catalunya tendría completamente cerrrado el grifo y que tendría que pagar intereses horrendos para financiarse, mientras la situación política no se clarificase (p. ej., algo tan simple como la pertenencia a la ONU, que hay que recordar que el caso de Kosovo sigue pendiente por el veto de más de una decena de paises).
Por supuesto, España podría aprovechar la negativa del autoproclamado Estado catalán a asumir la parte de su deuda para quedarse con todos los saldos a su alcance de instituciones y entidades financieras catalanes, también podría seguir administrando como suyos puertos, carreteras y todo tipo de infraestructuras e instituciones estatales en Catalunya. Reconducir todo esto a un proceso de terciopelo llevaría mucho tiempo. Sobre todo cuando está claro que en España lo que más votos aportaría sería la radicalidad (en Catalunya es probable que también)..No voy a seguir con todo lo que puede ir mal (y bastaría solo una parte para tener una situación muy crítica), pues la solución es mucho más fácil que todo esto: un concierto como el vasco o un cambio constitucional creando un pais confederal, pero el pp se niega pues sabe que con el choque de trenes va a salir ganando y el nacionalismo radical catalán lo mismo (y ni se plantea ceder en su apuesta independentista para forzar esa negociación), además, está la fracción sentimental-trasnochada (véase ANC y el 95% de ERC) a la que solo le importe la independencia cueste lo que cueste y a ser posible con la mayor humillación posible para „charnegos“ y „mesetarios“. Vamos, que todo esto del proceso acabará mal, a no ser que los catalanes sepan salirse a tiempo de la trampa como supieron salirse en Euskadi.

Si Catalunya no aceptase su parte en la deuda española, España tendría una razón más para oponerse a la entrada de Catalunya. Es muy, pero que muy dudoso que el Reino de España se sometiese a los deseos de una Catalunya independiente a la brava por el tema de la deuda. Hay varias razones 1) la titularidad del Reino de España de infraestructuras y propiedades en Catalunya (empezando por autopistas o aeropuestos) 2) Si Catalunya se negase a aceptar una parte de su deuda es muy dudoso que consiguiese financiación internacional 3) Para España no sería demasidado complicado conseguir que la UE le apoyase temporalmente con créditos o la ayuda del BCE hasta que se hubiese metido en cintura a los separatistas....Por cierto, curioso que desde la esquina nacionalista se apele al pragmatismo, cuando el nacionalismo tiene mucho de negación del pragmatismo.Por cierto, ya puestzos en plan pragmático. Nada mejor que definir el concepto de nación de manera pragmático y dejar que los habitantes de Tarragona, Salou, Barcelona o cualquier otra provincia, comarca o ciudad catalana puedan decidir también seguir en España en ese referendum que quiere el independentismo para decidir la separación de la parte a la que ellos otorgan un derecho a decidir que niegan a su vez a las subpartes de esa parte.
Esto es, no es nada pragmático y si muy teoricista aceptar el derecho a decidir de toda la Comunidad Autónoma pero negarselo a sus partes (ciudades, comarcas o provincias).

Varias dudas más:

Si Cataluña no es admitida en la Unión como de nuevo ha recordado hoy la Comisión: ¿es posible recomponer la convivencia o la secesión sería inevitable?

¿Las elecciones plebiscitarias en España a día de hoy no son un fraude de ley?

Están bien estos informes sobre limbos jurídicos y carambolas. Yo sigo esperando los de verdad, redactados por consultoras independientes, no independentistas: escenarios previsibles sobre el efecto de una secesión forzada en sectores clave no solo económica, sino también simbólicamente. Por supuesto en La Caixa y el Banco Sabadell: de momento a mi la primera no me ha preguntado qué haría con mis (pírricas) dos cuentas. También en el Barça, la principal marca Catalunya en el mundo, un verdadero motor. En un contexto de confrontación tal (beneficioso para el independentismo sin independencia) la exclusión de la liga española parece segura, ahí también es necesaria la unanimidad de los clubes y la normativa Fifa o Uefa son muy poco propicias. Dicen desde el voluntarismo, y esquivando descaradamente el debate, que jugarían en Francia como el Mónaco. Adelante, pregúntenles. El resultado de esa exclusión, siquiera por un par de años, sería desastroso e inmediato: toda la plantilla fuera, venta para cubrir deuda, caída drástica de ingresos por entradas, merchandising y contratos de TV, efecto en Bolsa y en todas las empresas y empleados directa o indirectamente vinculados con el negocio. En un caso tan simbólico como este, la fractura interna del frente independentista sería total: unos pedirían el generoso harakiri del club, otros se resistirían a muerte a la muerte, ¿negociar qué con el enemigo? Sería un ejemplo palmario de que la teoría une y la práctica desune, argumento sólido para quien advierte de las consecuencias imprevisibles de la confrontación, ricino para los indecisos, contradicciones largamente disimuladas como pretender que se es más que un club pero no asumir las consecuencias de dejar de serlo.

ES MUCHO MÁS SENCILLO QUE TODO ESTO, SEÑORES. Un amplia mayoría de españoles no estamos dispuestos a pedir perdón por algo que no harían el 99% de los países occidentales, incluido un hipotético estado catalán: el harakiri. Defendemos nuestra nación como ellos defienden la suya, y no queremos sacrificar la nuestra en aras de la suya. Si hay entendimiento, perfecto, y si no legítimamente cada parte defenderá sus intereses con las herramientas que tenga a su alcance en el contexto nacional y en el internacional. Y sin acritud, vaya. ¿Los secesionistas catalanes no pedirían respeto para la constitución catalana?. ¿Entenderían un referendum que pregunta sobre algo que no se reconoce?. ¿Aceptarían internamente el derecho de autodeterminación?. ¿Defenderían la lengua oficial común?.¿Admitirían 2 o 3 sistemas tributarios o judiciales en Cataluña?. ¿Y la independencia de los municipios que votasen "no" en ese referendum?. Quién más debe entender a un nacionalista español es precisamentre uno catalán. ¿O DE VERDAD alguien se cree que un Estado Catalán sería tan chachipiruli que no actuaría como el resto?.IGUAL.

Juan......pienso que muchos llegaríamos a las mismas o parecidas conclusiones: Por supuesto... Francia, Reino Unido, y tengo la impresión de que también Italia....... el resto de la Unión Europea (pienso que incluso Alemania) no sabe, no contesta, no se inmiscuye en asuntos externos.
Eso sí (y me gustaría muchísimo equivocarme) creo que ya no hay vuelta atrás: La opinión ampliamente mayoritaria en Cataluña ha derivado hacia un nacionalismo cuyo único horizonte visible es la secesión de España. Por otra parte, me da la impresión de que la opinión mayoritaria en el resto de España es la de hartazgo, y/o odio hacia Cataluña. Las dos únicas alternativas que nos ofrecen el nazionalismo catalán y el nazionalismo españolista, son: La secesión incondicional de Cataluña, y de regalo la inclusión inmediata en la UE, y el Euro, con la anuencia total y satisfactoria de España; y por la otra parte, la abolición de las autonomías, y la centralización total de la administración, además del sometimiento de las comunidades vasca y catalana.
La alternativa "democrática" y no nacionalista, está delante de las narices de todos los españoles (incluidos catalanes, y vascos).......... el respeto de la Constitución y los Estatutos de Autonomía. Los extremistas de uno y otro bando, copan el espectro mediático, social, político y de opinión actual; pero ni representan a todos los ciudadanos, y sobre todo no ofrecen una solución de consenso que no lleve a la destrucción de la democracia y el tejido social de España y Cataluña.

Esto es lo que he encontrado en el paper sobre cómo apoderarse de la recaudación de impuestos. Para mí , ésto es pasar de puntillas sobre el tema:


The ability to collect taxes is one of the defining features of the sovereign state. We contend that Catalonia should proceed in a clear and public manner to dismantle tax obligations to Madrid and transform the Catalan tax apparatus from an autonomous region to that of a sovereign state. Of course, these actions would violate Spanish law.Under the 1978 Constitution, Spain could choose to dismantle Catalan autonomy and incarcerate its government and most of the regional MPs. But such a move would be viewed by many as illegitimate after a clear majority had decided to support independence. Most importantly, it would force Spain to respond.

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Sobre el autor

es Profesor de Ciencia Política en la UNED, director de la oficina en Madrid del European Council on Foreign Relations y columnista de EL PAIS desde junio de 2008. Su último libro “Asaltar los cielos: Podemos o la política después de la crisis” (Debate) se publico en abril de 2015. Ha publicado también "¿Quién Gobierna en Europa?" (Catarata, 2014) y "La fragmentación del poder europeo" (Madrid / Icaria-Política Exterior, 2011). En 2014 fue galardonado con el Premio Salvador de Madariaga de periodismo.

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