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Por: | 05 de abril de 2012

Cristóbal Montoro explica los presupuestos.


¿Qué está pasando? La prima de riesgo, termómetro de la desconfianza de los mercados, está disparada y ya alcanza los máximos del año. Nada vale para frenar esta alarmante tendencia. Reforma laboral, reforma del sistema financiero, ley de estabilidad presupuestaria... un recorte de 27.300 millones de euros en los presupuestos generales para reducir el déficit.. Y pese a todo, cada día nos exigen más intereses para prestarnos dinero. Cuatro puntos más que a Alemania. Hace aenas dos meses eran menos de tres.  De mantenerse en el tiempo esta tendencia, ya puede Cristóbal Montoro ir revisando la partida destinada a financiar los intereses de la deuda en los presupuestos que acaba de presentar porque ésta saldrá más cara. Y para financiarla, ¿qué será lo siguiente: un ajuste adicional para no desviarnos del objetivo de déficit? Esta es la peligrosa espiral en la que está metida España y de la que no parece que vaya a salir a menos que Europa afloje en sus exigencias de disciplina fiscal.

¿Por qué no cesa la presión sobre España? ¿Será que los mercados temen que el esfuerzo de consolidación fiscal que nos pide Bruselas, cinco puntos del PIB en veinte meses, el más alto de la UE (ver gráfico publicado por The Economist), va a contraer tanto la economía que esta acabará intervenida como los están ya Grecia o Portugal? ¿O será que creen que dados los insostenibles niveles de de endeudamiento del sector privado y los graves problemas de solvencia de la banca, el Estado acabará asumiendo parte de esa deuda privada y el esfuerzo de consolidación fiscal será mayor aún? ¿O acaso dudan de que se cumpla el objetivo de déficit del 5,5% del PIB pues los presupuestos se basan en unas previsiones de ingresos fiscales y de gasto social que la caída del PIB va a impedir conseguir? Los efectos del ciclo sobre los ingresos y los gastos, como advierte el profesor Ángel Laborda, pueden suponer de hecho un ajuste real superior a los 50.000 millones sólo en este año.

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Y bien, las previsiones del presupuesto sobre las prestaciones por desempleo y el servicio de la deuda, que ya suponen más del 50% del presupuesto, (¡qué triste realidad la nuestra y qué pena de recursos no destinados a la educación y a la investigación y desarrollo!), van camino de convertirse en papel mojado si las cosas siguen así. ¿Les suena familiar? Es lo que ha ocurrido en Grecia: ninguna de las previsiones de reducción de déficit o deuda hechas por la troika se han cumplido porque ninguno de los planes contemplaba una caída del PIB tan fuerte (en 2011 se contrajo un 7% tras tres años de caída). Pero Europa, erre que erre...

Así que España está atada de pies y manos: no tiene cómo hacerle frente a la recesión. La política fiscal la dicta la unión Europea y lo que nos dicta es un calendario suicida de consolidación fiscal. No tiene posibilidad de influir en su tipo de cambio por su pertenencia al euro. Y en cuanto a la política monetaria, las dudas sobre el futuro de la economía española son tales que los efectos balsámicos del billón largo de euros dados por el Banco Central Europeo a la banca, que prometían darnos unos meses de tregua, ¡parecen haberse evaporado a tan solo un mes de la última inyección!

Nadie duda de que la reducción del déficit es imprescindble para recuperar la confianza de los inversores y seguir accediendo a la financiación exterior. Al fin y al cabo, como cualquier economía abierta, dependemos de los mercados, que tan de cabeza nos traen, para financiarnos y poder crecer. No está mal recordarlo. Pero ¿por qué empeñarse en el 2013? ¿No será más sensato dar un margen a la economía para crecer al tiempo que van surtiendo efecto las reformas puestas en marcha?

Economistas y analistas anglosajones ven claramente que esta insistencia en imponer un ajuste fiscal tan inflexible y rápido en la zona euro en un contexto de fuerte recesión económica y sin la posibilidad de devaluar la moneda para impulsar la demanda externa, es sencillamente una locura. Así lo explicaban en un debate recientemente organizado por el think tank Bruegel, para analizar los paralelismos entre el patrón oro, que saltó por los aires tras la Gran Depresión de los años 30, y la crisis de la unión monetaria. Barry Eichengreen, Peter Temin y Jeffrey Sachs destacan que las asimetrías en las posiciones fiscales y balanza de pagos de las economías que formaban parte del patrón oro, al igual que ocurre hoy en Europa entre los países del Sur y los del Norte, desató tal proceso de deflación en algunos de ellos que hizo que la crisis se convirtiera en depresión. Finalmente, este sistema de cambios fijos, como hoy el euro, tuvo que ser abandonado.

Nuestros socios europeos saben que España, la cuarta economía de la eurozona en peso, es demasiado grande para caer y demasiado grande para ser salvada. Los mercados también lo saben y por eso, a falta de que cambien las cosas, los nervios van en aumento. No hay hoy por hoy un cortafuegoscreible en Europa capz de rescatarla. El apaño que han hecho para presentar una dotación creible para el nuevo mecanismo, sumando fondos de aquí y de allá, incluyendo los ya comprometidos con Grecia, Irlanda y Portugal, ahora intervenidas, no es suficiente. Europa, y sobre todo los bancos europeos, no puede permitirse que la situación española se les vaya de las manos como ha ocurrido con Grecia. España debe aprovechar esa circunstancia para presionar y negociar un calendario más razonable para recuperar el equilibrio fiscal.

Mario Monti, que hace pocos días señalaba a España como el foco de problemas de la Unión, haría bien en ponerse de nuestro lado: Italia tiene un déficit muy inferior pero su deuda pública es mucho más alta (120% del PIB frente al 70% de España) y sería la siguiente en ser atacada (de hecho, ya lo estamos viendo) si a España le siguen castigando así en los mercados. España e Italia ya hicieron frente común al presentar una carta para recordar a la Unión Europea que con la reducción del déficit no basta para salir de la crisis, que hay que potenciar el crecimiento.

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El candidato socialista a la presidencia francesa, François Hollande, ha dicho claramente que si gana las eleciones pedirá la revisión del estricto pacto de disciplina fiscal que han firmado 25 de los 27 países de la Unión Europea. Hollande, a quien Merkel ya ha aproximado para sentar las bases de una futura alianza ante la evidencia de las encuestas, se ha convertido paradójicamente la esperanza del Gobierno del PP para frenar las poco razonables exigencias de Europa. ¿Quién lo iba a decir? Necesitamos su ayuda. Help! Y para justificar el título de esta entrada (¿o era al revés?), incluyo a continuación un video de los Beatles interpretando el tema con mi John de voz principal.

 

 

 



 

Hay 20 Comentarios

primer comentario es el trio de periodistas que participan en la encuesta- uno de antena tres, otro del diario la razon y otro del diario el mundo. Entiendo que estos medios de csdaa ideologia. Es decir, que hablamos de medios de comunicacion que no disponen de una independencia total, ni de una veracidad total en temas relacionados con ideologia conservadora.

Pero bueno!!!
lo que faltaba!!! Después de que su yerno jugara a pistoleros con su nieto ( con ingreso hospitalario para el nieto) , nuestro jefe de estado se rompe la cadera en una cacería ( más bien asesinato, pero bueno) de elefantes en Botswana??? en plena crisis??? Y el gobierno no sabía esto? anda Ya!!!
Claro que los recortes del Sr Rajoy solo le afectan un 2% y mientras los españoles las pasan canutas, el aún se lo puede permitir.
Pero eso si, los españoles le pagarán su prótesis de cadera....
Quien puede dar credibilidad a un país semejante? nos merecemos la ruina que se nos viene encima!! Coño! ( perdón por el taco pero es que hay momentos en que hay que soltarlo!) por indolentes!

Hola Victoria,

Aparte de negociar un calendario más razonable para recuperar el equilibrio fiscal, que otras medidas crees que haría falta en España para mejorar la situación económica?

En mi anterior mensaje escribí campos de golf sin comillas. Pido excusas: fue un error. Debía haber escrito "campos de golf", entrecomillado. En los países del centro y el norte de Europa, en los que llueve mucho y no hay que preocuparse por regar la hierba, un campo de golf es un club donde se juega al golf y alternan las clases altas y medias-altas. Allí no vive nadie, salvo tal vez el encargado y el guarda. En España un "campo de golf", entre comillas, es un eufemismo para designar un producto de la especulación urbanística encubierta en el engaño del llamado "turismo de calidad"; una macrourbanización cerrada a cal y canto, construida a menudo en un paraje natural recalificado, en la que se juega muy poco al golf y en la que suelen vivir jubilados extranjeros y (pseudo) nuevos ricos españoles. (Los verdaderos ricos considerarán una horterada vivir en un "campo de golf".) La aparición, como quien dice de la noche a la mañana, de 450 "campos de golf" como 450 hongos verdes en medio de un secarral, tiene un gran interés hitórico y sociológico, porque esas islas especulativas han sido tal vez el símbolo más emblemático de la España del disparate, la ostentación y el ladrillazo.

La verdad Gollum es que estuve dudando cuando al final me decidí por acotar el proceso de deterioro de principios del país a la última década. Pero tiene usted toda la razón, no es una década, son tres, desde los tiempos de Felipe González. Y recuerdo perfectamente todos los hitos y pelotazos que comenta en su apunte, todos los cuales siguen el mismo patrón moral que ha llevado a la situación económica actual. Es cierto que la entrada en el euro y de ahí lo de la última década, hizo que todo el proceso de huida hacia delante en la espiral de despilfarro se acelerara sin control alguno. Solo por poner un ejemplo me parece que de la misma manera que el último gobierno no computó correctamente la previsión de déficit, las cifras de inflación me temo que han sido deliberadamente subestimadas sistemáticamente durante años con la consiguiente pérdida de competitividad real frente a otros países que se lo han tomado mas en serio. Y es cierto que nuestros gobernantes no solo han ignorado los riesgos de una política económica expansionista desquiciada y sin base estructural sino que la han azuzado de forma irresponsable. Solo la megalomanía puede explicar semejante conducta, condición que ha permeado de arriba a abajo todas las capas de la sociedad consolidando una pirámide de Ponzi nacional. La bancarrota del país es la consecuencia natural de una apuesta de casino colosal en la creencia temeraria que todo sube y nunca baja. Otros países han sufrido grávemente la crisis, algunos de ellos por méritos propios, mientras que otros la han vadeado decentemente, así que no vale la excusa de que la crisis viene de fuera. Los efectos de la crisis financiera internacional solo han puesto al descubierto una situación precaria e inestable al mínimo contratiempo. La pertenencia a un club con reglas como el euro ha acabado por obturar la solución histórica habitual de una economía débil como la nuestra como es la devaluación de la moneda, así que España se encuentra empantanada en medio de la nada.
En fin, recalcar otra vez que tiene usted razón y que con independendencia del supuesto color político de las últimas administraciones españolas, todas ellas son responsables en igual medida de habernos arrastrado por delirios imprudentes de grandeza, despilfarro incontrolado, corrupción generalizada y en fin, falta de los mínimos principios morales que aconsejan prudencia y equilibrio.

Salir de la crisis actual en un solo día es posible: http://elpais.com/diario/2012/01/06/opinion/1325804405_850215.html

Buen análisis, Victoria. Y gracias por su comentario, Cuchillero (07/04/2012). Su interés es doble porque se hace desde la perspectiva de alguien que enfoca la realidad tomado una cierta distancia, como el zoom óptico de una buena Canon (no digital) y un buen objetivo. Pero me va a permitir un comentario. Dice usted: "algo muy grave ha ocurrido en España en la última década que ha hecho del país un lugar económicamente disfuncional y no competitivo". Vistos los resultados, lo que ha ocurrido ha de ser, en efecto, grave. Pero no ha ocurrido solo en la última década. Los falsos análisis interesados de la derecha acotan los orígenes del problema a los últimos ocho años, esto es, a la gestión de Zapatero y sus pajines. Los análisis interesados --y tan falsos como los anteriores-- de la izquierda buscan el origen de todos los problemas en la gestión de Aznar y sus neocons (desregulación, ley del suelo, santificación del glamuroso modelo económico y social americano, proclamación del ladrillo ibérico como el más sólido fundamento de toda economía, etc.). Esos planteamientos son miopes, ya que se limitan a una perspectiva de, como mucho, 14 años. Pero el problema tiene raíces algo más lejanas; y creo que, si no se entiende que hay que añadir una década más, no se entiende la crisis española en toda su dimensión. Enfoquemos con el teleobjetivo de la Canon los años ochenta, la gestión de los sucesivos gobiernos de González, con la traca final de corrupción y pelotazos de su última legislatura. Todos los problemas estructurales, todos los vicios, todos los errores de los últimos diez años apuntaban ya a partir de 1984, desde la recta final de la negociación con la UE hasta los años de la resaca postolímpica: una época marcada por los Conde, los De la Rosa, los Rubio, los Guerra, los Roldán, los Casinos de Catalunya... ¿Hemos olvidado todos aquellos casos y todos aquellos nombres? ¿Hemos olvidado ya el maná de 140 mil millones de euros (netos) que la UE derramó en España en 25 años? ¿Hemos olvidado ya lo que González, Guerra, Borrell & Cia decidieron hacer con aquel chorro de dinero? ¿Hemos olvidado las opciones en infraestructuras? ¿Nos hemos olvidado del AVE Madrid-Sevilla... para conectar a España, se supone, con el eje del Rin? ¿De las maravillas de la Expo 92? ¿Del "parque de excelencia" Cartuja 93, con el apeadero aún parado 20 años después y la demolición y el abandono de edificios emblemáticos? ¿De las rotondas de diseño y los puentes de Calatrava en Mérida, el Alamillo, la Alameda, Bach de Roda, Manrique, Ripoll y en cualquier barrio o pequeña ciudad que se preciara? El primer aviso del batacazo en 1993 y la resaca postolímpica y postcorrupción hasta 1996 no fueron más que un pequeño inciso, una pausa para darse un respiro, tomar carrerilla y dar el gran salto a la modernidad de la mano de Aznar, el nuevo mesías neocon. Para intentar el trasvase del Ebro (un río sin agua), construir más de 400 campos de golf y más de 4.000 km de AVE (si no hubiera sido porque el estallido de la burbuja financiera ha parado los pies en seco a la necedad y la codicia, España habría construido 10.000 km --sic!-- de alta velocidad hasta 2020). ¿Para ir en AVE adónde? ¿A los más de 1.000 pueblos de Castilla-Leon con menos de 10 habitantes? Entretanto, varios poblados ibéricos competían por abrir el mayor prostíbulo de Europa, y España atesoraba el mayor número de billetes de 500 por habitante de toda la eurozona. Hay que reconocer que la gestión de Zapatero y sus pajines ha sido peor que una nube de langostas del antiguo Egipto, pero es iluso o malintencionado achacarle solo a él todos esos males. Sus luces no habrían dado para cometer tantos errores juntos, ni queriendo. Y remontándonos solo hasta Aznar nos quedamos demasiado cortos. Ha tenido que ser --no hay otra explicación-- el desastre acumulado a lo largo de un cuarto de siglo, de 1985 a 2010. Encadenando tres presidentes muy distintos, pero a cuál más nefasto, cada uno a su manera: un pseudoestadista-trilero, un chulo-playa-neocon y un bobo-indocumentado. Y no parece que este país, tan castigado, haya aprendido la lección: las dos ciudades insignia, los dos faros de la economía y la sociedad españolas, están pugnando ahora mismo a cara de perro por llevarse el mayor complejo de ocio, juego y prostitución que jamás hayan visto las Europas. A perro sarnoso...

Buen análisis. Da gusto leer un post así. Por otro lado, la situación es lamentable: "España cañí", la de la pandereta, esta en ebullición, con Madrid y Catalunya en reñida pelea por un complejo de ocio y juego que recuerda al ridículo España-Francia por Eurodisney. Competimos a nivel regional por una especie de isla fiscal en un momento en el que se solicita (a la fuerza) mayor aportación de impuestos directos e indirectos. España, potencia futbolística presente en las semifinales de todas las categorías y miles de universitarios sin horizonte. Y para rematar la España de la pandereta, el 'laboratorio' FAES haciendo sus experimentos en las instituciones públicas. País.

Los que ya veníamos diciendo desde hace años que la descompensación de las políticas monetaria y fiscal en la “zona euro” nos iban a conducir al desastre, sobre todo a aquellos países con grandes desequilibrios en el sector exterior (véase la balanza de pagos de España de los últimos 10 años), hemos acabado por tener razón, mal que nos pese.
Me voy a explicar, para los profanos (que en este blog son los menos): un desequilibrio continuado en el sector exterior implica, a grandes rasgos, que las importaciones superan a las exportaciones durante varios años consecutivos. En principio, su diferencia es un saldo negativo, que puntualmente no tiene importancia excesiva, y lo que revela es que la economía en su conjunto es prestataria neta de recursos procedentes del resto del mundo (en términos de contabilidad nacional). El problema viene cuando el saldo es acumulativo año tras año, lo que pone de manifiesto la incapacidad del país para financiar su actividad económica, y la necesidad de captar financiación más allá de la que es capaz de generar. El saldo negativo acumulado, por tanto, deviene en deuda acumulada para todos los agentes económicos.
No voy a entrar en las causas que han acentuado esta situación (algo que ya comenté en mis anteriores comentarios sobre tipos de interés reales inferiores a la inflación), pero ya desde antes de la entrada en el euro, España ya arrastraba situaciones continuadas de desequilibrio en el sector exterior.
El ahorro nacional no era suficiente para financiar a la economía, y en el momento en que ya no tuvimos en nuestra mano la herramienta de la política monetaria para devaluar la moneda nacional y ganar competitividad en los mercados internacionales, algunos nos echamos a temblar…
Efectivamente Victoria, España está atada de pies y manos: no tiene cómo hacerle frente a la recesión, pero yo no creo que sea tanto un problema de tiempos (que lo es con estos deadlines que nos han impuesto) como un problema de forma. Las herramientas no sirven en ningún escenario y a ningún plazo de tiempo. El Estado no se puede “defender” con las “armas” que posee actualmente. Por eso, como dije en su día: Los Estados no son empresas porque realizan inversiones sociales (educación, sanidad, servicios sociales) que no generan retornos financieros o de mercado, y el modelo que se (nos) ha impuesto nos ha obligado a pagar estas inversiones con financiación de mercado (por las que los acreedores nos exigen un interés mayor). Estas asimetrías son las que deben corregirse.
Por ello no me queda sino concluir como lo hice anteriormente: lo que debe hacerse es replantear el esquema de financiación […], permitiendo a los Estados descontar su financiación directamente del Banco Central Europeo pero sólo para las inversiones sociales, incluidas determinadas transferencias. Las propias inversiones públicas generadoras de retorno financiero sí deberían financiarse con deuda en condiciones de mercado. Con este sistema ambivalente, coordinado con una política fiscal simétrica (o única), se controlaría la inflación sin poner en riesgo la deuda soberana ni los recursos propios de los Estados necesarios para financiar, por la vía de los estabilizadores automáticos, las políticas sociales contracíclicas.

Siento repetirme, pero es que cada día que pasa estoy más convencido de que este es el camino.

Gracias, Victoria, una vez más, por tu artículo.

Es hora de pegar un portazo y salir del Euro. Así dejaremos de financiar a Alemania su deuda y, si vamos al hoyo pues todos juntos (si somos los PIGS que se queden con su maniqueismo y veamos si ellos no tienen que pagar también por sus pecados). Lo pasaríamos muy mal pero poco a poco saldríamos de la depresión. Ahora solo estamos alargando el sufrimiento,a costa de meternos en una depresión que durará decadas.

A diferencia de un ama de casa que cada día ha de salir adelante con lo que tiene.
Los políticos solo saben administrar y de paso sacar beneficios y rentabilidades de la gestión.
Solo son gestores que cobran todo lo que pueden por su gestión.
Mientras sobra el dinero con el viento de cara todo va bien.
Partir y repartir lo hace cualquiera.
Defender los derechos de los ciudadanos es otra cosa.
Cuando hay que ejercer de buen administrador con el viento en contra, es cuando empieza a verse quienes sirven y quienes valen.
En España hace mucho que para salir adelante se tiraba del dinero fácil prestado de los bancos.
A cuenta de los ciudadanos, que ya pagarán el año que viene, dame más dinero.
Y el banco daba y se ponía el interés a tono con las circunstancias.
Que los ciudadanos ya pagarán el año que viene.
Así estamos en la deuda inmensa en que estamos metidos en manos de los mercados que nos prestan dinero.
Y si no pueden pagar los ciudadanos, se les recortan sus sueldos o sus servicios o sus bienes.
En España aun tenemos suelo y playas.
Porque la banca nunca pierde.
En democracia se puede votar, pero es penoso que no se presenten las amas de casa.
Porque son ellas las únicas que defienden a su familia.
Los políticos solo viven de ello.
El ciudadano ya pagará.

@RICARDO BURTON - "La parálisis mental, aparentemente, se ha apoderado de la política europea, donde satisfacer el ego electoralista parece ser el único objetivo de Montis, Draghis, Merkel Sharkos, por nombrar solamente y unos pocos de la gentuza exterior... Mientras tanto los pequeños y medianos empresarios europeos se suicidan por la calle, por negarse a alimentarse de los contenedores de basura.... " - No dramatice, por favor. El tecnócrata Mario Monti tiene limitada su gobernanza, está teniendo éxito con su gestión, ha logrado bajar el déficit de Italia al 4,3% y la prima de riesgo está a 30 puntos por debajo de la española, le pondrá un impuesto a la iglesia, se ha iniciado una persecusión a los evasores de impuestos, la reforma laboral está en vías de aprobarse y tiene proyectado incrementar el IVA al 23%. Cuando un país está en serias dificultades, sea por la culpa de quién sea, medidas de ajuste hay que tomar, sin que tiemble la mano. En la mayoría de los casos, ciudadanías que han vivido despreocupadas, endeudándose y siempre de juerga al igual que los que las han gobernado, les aterra tener que ajustarse el cinturón. Mario Draghi está haciendo su labor, de acuerdo a lo que manda los estatutos. Angela Merkel se debe a su electorado y éste le responde dándole el 64% de aceptación y, no es para menos, Alemania le va bien, tiene un déficit del 1% y un paro de 5,7%. Nicolas Sarkozy tiene aún que convencer a los franceses de que el socialismo puede llevar al país a una situación como la de España. No sé porqué algunos les molesta? O, no es verdad? Francia tiene un paro del 9% y su déficit pasa del 4%, pero, tiene una industria que no la tiene España. En deuda pública España está por alcanzar el 80%, lo que significa que estará muy pronto cerca de Alemania y Francia, con la diferencia de que ambos países para financiarse, Alemania lo hace casi a 0% y Francia a poco más del 2%. Una muestra de la solvencia de ambos países que, desafortunadamente, no es la situación del país ibérico. Por supuesto, que es lamentable lo que acaba de suceder en Grecia, habría que investigar los motivos verdaderos del suicidio, el hombre poseía una farmacia y, con ésto quiero decir que no se trataba de una persona que hubiese perdido lo indecible. Ahora, que cuando una persona llega a esos extremos por la situación de crisis de endeudamiento de su país, es a sus gobernantes a quienes habría que pedir explicaciones y responsabilidades. No han sido acaso los gobernantes de determinados países europeos los que han llevado a la ruina a sus países? Qué fácil se les hace a ciertas personas el estar culpando a los demás - pura cobardía para reconocer sus culpas y de los que los gobiernan.

Acabo de regresar de España después de unas cortas vacaciones y la impresión que uno tiene al pasear por las calles se me antoja similar a la que evocan las películas sobre el ambiente en el Titanic. Parece que no ocurre nada. Los bares y restaurantes llenos, las calles a rebosar, todo parece normal y lo mas preocupante es que todo está muy caro. Tan caro que Gran Bretaña es una ganga para ir de compras. En nuestro país todo el mundo parece resignado a pagar precios desproprcionados; un helado en cucurucho, tres euro, 500 pelas, una mona 40 euros y así todo. Así que mientras una parte de la población ha caido al mar para ahogarse irremediablemente, es decir, se ha quedado sin empleo, otra parte sigue paseando por cubierta mientras el cuarteto de cuerda toca como si nada. Cierto es que en las miradas de la gente hay cierta ansiedad, y los comentarios denotan cierto grado de creciente incertidumbre y en vez de 100 euros de antes se gastan ahora solo 50 mientras la mayoría mira hacia otro lado cuando ve muchos comercios que han cerrado, y sabe de gente en la calle. En Alemania el coste de la vida es menor que en España y lo mismo en Gran Bretaña y uno no entiende como puede que esto sea posible. Algunos no quieren bajar sus márgenes porque aquí no pasa nada o quizás, no pueden porque la presión fiscal de los impuestos de todos las capas de la administración exigen los estrangulan. Y además tienen que pagar precios estratosféricos por servicios esenciales. Algo muy grave ha ocurrido en España en la última década que ha hecho del país un lugar económicamente disfuncional y no competitivo. Grecia está prácticmente fuera del euro, lo cual ya pronosticó The Economist hace tres años. Tres años de sufrimiento insoportable para la población a la que se ha sometido a un sufrimiento innecesario y ello particularmente a las capas menos favorecidas y sigue a peor. Visto lo ocurrido allí, hoy no me parece una barbaridad considerar para España que lo haga ahora, que vuelva a la peseta nueva, devalue y retorne a la competitividad a los sectores en los que siempre fue fuerte. Duro será sin duda, pero lo que Europa impone es insostenible y por tanto inaceptable, y es un camino en mi opinión seguro hacia el desastre total.



Enhorabuena por su artículo, Victoria.Es muy completo y explica perfectamente la dificilísima situación en la que nos encontramos. Se nos exige un ajuste fiscal sin precedentes, y además en un tiempo demasiado corto, lo cual sólo va a empeorar nuestras escasas posibilidades de recuperación. Esto lo saben los mercados y, paradójicamente, las drásticas medidas que se proponen para recuperar su confianza son justamente las que nos la hacen perder de nuevo. Estamos metidos en una dinámica perversa, de clara recesión, de la que sólo nos podría salvar un cambio de 180 grados en los criterios económicos que ahora predominan en Berlín y Bruselas, cosa que hoy por hoy parece bastante improbable.
Siempre he sido un europeísta convencido (quizá demasiado ingenuo), pero ahora siento envidia por el Reino Unido, que mantiene su propia moneda, su propia política fiscal y monetaria y, en definitiva, una autonomía infinitamente mayor que la nuestra. ¿Merece la pena seguir en el euro en estas condiciones? ¿Es razonable someternos a toda una serie de duros esfuerzos y sacrificios sin percibir siquiera la luz al final del túnel? ¿Acabaremos hundidos, sin recursos y sin futuro, como les ha pasado ya a Grecia y Portugal?

Leí en un periódico que el 60% del presupuesto español servirá este año para pagar pensiones y paro... Si esto es cierto, técnicamente vale decir que estamos arruinados... no?. Así que hablando de recortes, se me ocurren muchas cosas, que recortarles (de cuajo y con dolor) a nuestros genios economistas españoles, no solo los de ahora, los de antes por supuesto, y los anteriores sin lugar a duda.
En lugar de recortarnos a nosotros, los pocos que aún trabajamos, y que aún nos apasiona lo que hacemos, que recorten sus patéticos e inútiles ministerios, delegaciones, diputaciones, consejerías, subgobiernos y demás estamentos públicos que nunca han servido ni servirán para nada.
La parálisis mental, aparentemente, se ha apoderado de la política europea, donde satisfacer el ego electoralista parece ser el único objetivo de Montis, Draghis, Merkel Sharkos, por nombrar solamente y unos pocos de la gentuza exterior... Mientras tanto los pequeños y medianos empresarios europeos se suicidan por la calle, por negarse a alimentarse de los contenedores de basura....
No vamos bien!

...Ayuda? dice usted?...

hola victoria,

es pposible que esta hombre tenia razon?

http://www.informationclearinghouse.info/article30991.htm

a Europa lo que le pasa es que está en la ruina y en manos de Francia y Alemania y los demás no pintamos nada.
Yo me empiezo a preocupar, porque sin pena ni gloria la caixa ha comprado banca cívica y casi no se ha oído y mis padres ya mayores ellos, dicen que quieren sacar la pasta del banco por si acaso.....buffff que jaleo.
http://www.recetariodesirena.com

Tenemos que Italia con Mario Monti a la cabeza, aplicando rigurosas medidas de ajuste y reformas estructurales, va dando sus frutos; ha conseguido bajar el déficit al 4,3% en el 2011; ha bajado en gran medida su prima de riesgo; los ajustes en muchas de las partidas dan confianza a los mercados y se ha librado de los especuladores; el siguiente paso, será volver a incrementar el IVA al 23% y, no pierden el tiempo, culpando a Berlusconi de tanta metida de pata. Por el momento, no queda más que esperar el veredicto del comisario de asuntos económicos de la UE, Olli Rehn, quién se ha propuesto hacer una revisión exhaustiva de los presupuestos del 2012 presentados por Rajoy y su equipo. Y, ya está requeriendo los presupuestos para el 2013. La 'jugarreta' de Rajoy, De Guindos y Montoro con relación al incumplimiento del objetivo de déficit para el 2011, no sentó nada bien en Bruselas. El gobierno español queda bajo el control de los eurofuncionarios de Economía; no se confían ni un ápice de los políticos en La Moncloa, la conducta de los tres responsables de los presupuestos, es sumamente reprochable. Hasta Alemania envió a un comisionado a La Moncloa y, con todo su derecho, es el mayor contribuyente neto de la UE.

@carmennublo - Verdaderamente, el panorama es desolador en algunos de los países de la UE, por lo que no hay que generalizar. Muchos países olvidaron de que formar parte de un club, en este caso, la UE - representa no solo tener derechos, sino, también obligaciones; no solo extender la mano por las ayudas, sino, saber gestionar inteligentemente ese dinero. no destinarlo a construcciones faraónicas que, luego, están abandonadas, aeropuertos sin aviones y el 'orgullo' de tener más kilómetros de AVE de Europa, con rutas nada rentables, pero, careciendo de trenes de cercanía en muchas comunidades españolas y la gran falta de los trenes de mercancías, algo primordial. Y, encima está la corrupción en todos los niveles de la sociedad, malversación de fondos; todo un rosario de falta de moral. La juerga ha llegado a su fin, las deudas hay que pagarlas y, no queda, más que arrepentirse de haber tenido tan poca cabeza, haber perdido más de 30 años para lo único que han logrado es una débil industria,;poca inversión en I+D+i, sin mejoras en el sistema de educación y, otros tantos males, en los que se sigue haciendo recortes, cuando para recortar habría mucho que recortar en otras partidas e incentivar en otras tantas. Pero, claro, todos se creen muy astutos y hasta se han llenado la boca de tener la generación mejor preparada de todos los tiempos. Espero que haya leído lo sucedido en Martorell en dónde la multinacional Volkswagen llamó a selección a ingenieros industriales y electrónicos españoles; de 1.800 candidatos que se presentaron, TAN SOLO OCHO, la VW ha elegido para incluirlos en un proceso de formación, antes de enviarlos a la Audi en Alemania. No basta con llenarse la boca de tener más de un título académico y otro tanto de Masters, a la hora de la verdad, hay que saber demostrar lo que se vale como profesional cualificado. Un cambio total de mentalidad, es necesario!

El panorama es desolador. Esta no es la Europa en la que muchos creíamos. La Europa humanista, que protegía a sus ciudadanos, que creía en los derechos humanos, que apoyaba a los países menos ricos. ¿Qué le pasa a Europa?

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Con euros y a lo loco

Sobre el blog

La entrada en el euro de España y otras economías del Sur de Europa les permitió financiarse a unos tipos de interés históricamente bajos. Particulares y administraciones se endeudaron para gastar a lo loco. En el caso español, la fiesta acabó con el pinchazo de la burbuja inmobiliaria. Ahora toca pagar esos excesos, aprender del rigor fiscal y capacidad de ahorro de nuestros socios alemanes y reformar la economía para encontrar un nuevo modelo productivo que nos permita volver a crecer. Pero, ¿cuánta austeridad nos podemos permitir en medio de una recesión? Y ¿servirá esta para que Alemania se fíe de sus socios del sur y acceda a reforzar institucional y financieramente la deficitaria unión monetaria? El futuro del euro depende de ello.

Sobre la autora

Victoria Carvajal

Victoria Carvajal, economista por la New York University, fue redactora en la sección de Economía de El País en los años convulsos de la peseta en su recta final hacia la unión monetaria. Ahora en este blog pretende analizar el también convulso momento que vive la zona euro y otros temas relacionados con la economía internacional.

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