Heriberto Araujo y Juan Pablo Cardenal

¡Y Estados Unidos qué!

Por: | 23 de enero de 2012

Los zarpazos de la crisis actual, que han puesto al descubierto las debilidades, excesos y falta de respuestas del sistema occidental además de las carencias de su clase política, coincide con el renacer de China como potencia mundial. Ello dispensa una munición preciosa a quienes ensalzan las bondades del sistema chino, al conjugar los logros del llamado ‘milagro chino’ con la supuesta decadencia occidental para presentarlos como prueba del algodón de la infalibilidad y eficacia del modelo chino.

Quizá habría que empezar diciendo que sólo hay ‘milagro’ porque en la ecuación no se incluyen los efectos secundarios. Las deslumbrantes estadísticas, de hecho, no incluyen a los cientos de millones de chinos que no salen nunca en la foto; ni capturan tantas variables no cuantificables económicamente que también contribuyen de forma decisiva al bienestar. Ello sin mencionar otros factores como la explotación laboral o la represión financiera que sufren los ahorradores chinos, cuestión ésta a la que nos referiremos próximamente desde este mismo blog.

Milagro Crema de 'milagro chino', ideal para la piel.

Por tanto, que el modelo chino sea –por su naturaleza- indiscutiblemente efectivo, no implica que sea necesariamente mejor. De ahí que, ahora que China está desplegando por todo el planeta los tentáculos de sus -legítimos- intereses, se hace imprescindible saber qué y quién hay detrás de semejante expansión. Hay poderosas razones para ello: la opacidad que rodea al régimen chino, la apariencia de normalidad de éste ahora que emerge como tabla de salvación de nuestros desaguisados y la ausencia en el sistema chino de los contrapesos que son habituales en las democracias.

Es por ello que, ahora, en una época en la que los gobiernos de medio mundo rinden inusitada pleitesía a sus homólogos mandarines, la prensa y las ONG quedan como último recurso para afearle la conducta a China cuando ésta sea responsable -o cómplice- de los excesos y abusos. Lo vimos en muchos países durante nuestra investigación: desde el saqueo de recursos y sus nefastas consecuencias en el estado de Kachín, al norte de Birmania, a la pasividad del gobierno peruano para frenar los excesos en el proyecto minero chino en San Juan de Marcona.

Peru pintadas ok
Pintada en una calle de San Juan de Marcona, Perú. (Marco Garro).

En Kachín y en Marcona nadie ampara a las víctimas, que sufren en silencio. En Birmania, denunciar los tejemanejes de los militares birmanos con los empresarios chinos conlleva la cárcel. En Perú, en medio del vital oxígeno económico que brinda China en estos tiempos de crisis, nadie osa poner coto a los desmanes laborales y medioambientales de la minera estatal china Shougang. Y ya que en China es del todo improbable que un medio de comunicación o una ONG denuncie la actuación impropia de sus empresas estatales, la fiscalización de la expansión internacional del gigante es ahora más necesaria que nunca.

Y no porque las empresas chinas sean necesariamente peores que las occidentales, sino porque el sistema chino carece de los contrapesos (imperio de la ley, sociedad civil, pluralidad política, prensa libre, instituciones fuertes, participación, separación de poderes) que sí tiene el occidental; contrapesos que, ciertamente, marcan la diferencia en el sentido de que hacen que la irresponsabilidad de las empresas occidentales esté mucho más vigilada.

En este contexto, no deja de sorprenderme la ferocidad de las críticas y descalificaciones personales que suelen -solemos- recibir quienes osen censurar o denunciar los excesos y abusos que China comete dentro y fuera de sus fronteras. Muchas de estas críticas usan la coartada de la comparación histórica en la colonización para relativizar los atropellos que China hace hoy, medio siglo después, en el mundo en desarrollo. La pregunta es obligada: ¿acaso el negro historial de Occidente en África y otros lugares concede a los chinos derecho para hacer lo mismo? ¿Les legitima lo más mínimo?

Otras críticas defienden a ultranza a la dictadura china directamente desde la trinchera del antiamericanismo. Arrinconados por la evidencia de los hechos, asestan un último embate casi a la desesperada, apoderándose en el fragor de la batalla del estilete que guardan escondido en el calcetín: ¡¿Y Estados Unidos qué?!, exclaman de forma recurrente.

Ante lo cual, qué quieren que les diga. Juzgar y, en su caso, criticar a China, realmente, no tiene nada que ver con Estados Unidos. Tiene que ver -únicamente- con cómo ve uno el mundo y la vida.

Hay 27 Comentarios

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Y no porque las empresas chinas sean necesariamente peores que las occidentales, sino porque el sistema chino carece de los contrapesos (imperio de la ley, sociedad civil, pluralidad política, prensa libre, instituciones fuertes, participación, separación de poderes) que sí tiene el occidental; contrapesos que, ciertamente, marcan la diferencia en el sentido de que hacen que la irresponsabilidad de las empresas occidentales esté mucho más vigilada.

Juan Pablo Cardenal , tengo que contactar con
Ignacio García Saenz de Samaniego,que vive en China,porque su amigo Arsenio Diaz, Piti, tiene que hablar con el, no tengo forma de localizarle, Iñaki estudio medicina con Piti,por favor si me puede enviar su correo electronico, o su telefono se lo agradecere, le hizo usted al menos una entrevista. Mi telefono 629363549.Lola Villar

Ah, no argumentos de autoridad no!!!!

Que los autores hayan escrito un libro, que hayan viajado por 25 países y que hablen chino (no creo que lo lean, eso sí) no es una respuesta a las críticas vertidas en los comentarios precedentes a este blog.

La crítica que he expresado a este blog es de carácter político, no técnico, y dice relación con la idea preconcebida de que toda la expansión comercial china es de por sí negativa y peligrosa. Mal que mal, el propio título habla de la"silenciosa conquista" china, un título muy sugestivo y que da cuenta del objetivo político de los autores.


Sus diplomas no justifican la escritura de panfletos como este blog. Porque a la larga esto no es más que un panfleto despojado de todo equilibrio informativo.


Nosotros en América Latina estamos muy contentos con la "silenciosa conquista china". En general ha sido beneficiosa, ha subido el valor de las materias primas que exportamos, ha aumentado la inversión extranjera directa (no en derivados financieros como sucedía con los gringos o en empresas de servicios con los españoles) y los niveles de pobreza han caído en general de manera bastante notable, con ciertas excepciones.


Que la inversión china tiene sus claroscuros, claro está. Pero el rebalance del poder mundial nos ha sido favorable, por lo menos en Sudamérica (no tanto en México y centroamérica). EEUU y Europa ya no pueden ponernos el pie encima así como así, porque cada vez dependemos menos de ellos. Y mientras más diversificados estén nuestros mercados, mejor.

Es una pena que muchos que critiquen los articulos de este blog, no se enteren que los autores han publicado un libro muy minucioso y extramadamente documentado sobre la expansión comercial china en el resto del mundo. Bueno, vayan enterándose. "La silenciosa conquista china" se consigue en librerías y lo recomiendo ya que lo he leído. Cardenal y Araújo han viajado durante dos años por 25 países donde las empresas estatales chinas tienen obras adjudicadas o donde directamente el gobierno chino tiene acuerdos de país a país (por ej. Congo). El libro se dedica a desmenuzar las causas del avance chino, las financieras, las políticas, las de idioscincracia, y además está relatado de manera muy amena, casi en el estilo de un diario de viajes. Cita constantemente fuentes de todo orígen y su documentación es más que abundante. Los autores viven en China y en Hong Kong, por lo tanto se saben expresar en chino. Conocen a la gente de la calle, tienen contacto con ellos y entienden a la perfección una particular manera de pensar (la de la civilización china). Me ofende tanta falta de respeto por parte de algunos comentaristas en este foro y además desaprovechan una fuente de información única y valiosa que nos ilustra en tiempo real sobre la gran noticia del siglo. Por favor, apuntad más alto en los comentarios. Gracias.

Cuando el sr. Tajnum dice que "es preciso poner coto a la silenciosa conquista china", ¿a qué se refiere?

¿Quiere que EEUU invada China? ¿Que la bombardee hasta dejarla en ruinas?


¿Quiere que China sea expulsada de la OMC? Porque si así sucediera, China podría hacer quebrar a los EEUU en menos de un día, y el dólar perdería 75% de su valor en el mercado...


¿Que sugiere?

Es preciso poner coto a la Silenciosa conquista china. No veo que esta tendencia económica favorezca más que únicamente a un reducido sector de la sociedad china y sus contados socios extranjeros.
Quiero decir con esto que la calidad media de los productos de todos aquellos sectores en los que penetran desciende tremebundamente. El mercado está practicamente polarizado en dos: Uno con artículos de origen del sureste asiático de penosa kalidad (con "k" por que "calidad" sería devaluar un vocablo del diccionario de la R.A.E., y así hago un homenaje a la insultante falta al detalle del packing de nuestros protagonistas) y otro mercado de alta gama a la que solo pueden acceder contados usuarios.
Quiero decir con esto que los trabajadores chinos son explotados sin diferencia desde hace siglos, ya no por británicos, portugueses u holandeses, sino por su propio Gobierno.
Quiero decir que mientras las condiciones laborales de la amplia mayoría china son lamentables, las de los países como España sufren una merma sin parangón.
Quiero decir que la apertura de fronteras a los peores productos que jamás hayan tenido el privilegio de cruzar el planeta no son sino un peligro evidente, excepto para un reducto de empresarios (muy dignos y emprededores, no lo discuto, pues simplemente aprovechan la complaciencia y la falta de resolución de instituciones y gobiernos).
Lo lamento, pero esto pasa de ser una observación con pretensiones objetivas a ser claramente un exposición de hechos, de que a pesar nuestro, estamos ya no en vísperas, si no de lleno en un conflicto económico en el que está en juego nuestra supervivencia como sociedad industrial.

Estimado Sr. Gonzalez:
¿Podría usted aclararme el trasfondo (verdadero) de su intento de ocultar lo evidente? Debo suponer que no hemos superado los vestigios del ciertamente pasados maltratos de europeos a otras regiones del mundo, como América del Sur, para que usted los emplee como patrón al compararlas con las criminales y provechosas prácticas de las Compañías-TentáculosDelEstado y que estas últimas tengan su visto bueno, o al menos más amable.

Jan Pablo, estoy totalmente de acuerdo contigo en todo lo que dices y, yendo a lo práctico e improrrogable, en que la fiscalización de la expansión internacional del gigante es ahora más necesaria que nunca.
He leído con verdadero interés vuestro libro, y creo que debería de ser de obligada lectura en los colegios, empresas, gobiernos y blogueros con una concepción simple del mundo y las cosas de comer.
Me parece encomiable vuestra decisión de ir tras las huellas que está dejando China por el mundo, ahora en que todavía podríamos estar a tiempo de intentar mejorar algo no dejando vía libre a la fiera, y también entiendo, por tanto, vuestra sorpresa ante la ferocidad de las críticas y descalificaciones personales que srecibís al censurar o denunciar los excesos y abusos que China comete dentro y fuera de sus fronteras.
Yo he vivido y he viajado muchos años por China y sé de lo que hablásis y desde hace muchos años vengo sintiendo la misma presión en la boca del estómago al ver la facilidad con la que el el gobierno chino está manejando la situación dentro y fuera del país. Por mi parte, como profesora de chino, intento abrir los ojos a muchos alumnos que empiezan a estudiar el idioma con una concepción idealista de China, eso, e intentr estar bien informada, creo que es lo mejor que puedo hacer.

¿ Y Estados Unidos qué?

Está claro que el blog trata sobre las inversiones chinas, no sobre las inversiones y depredaciones europeas en África, Asia y América Latina. En eso estamos de acuerdo.


Pero el tono de este blog, empezando por el propio título (que alude a una inminente la "conquista china", algo así como el "peligro amarillo" redivivo) es completamente parcializado e interesado, porque sólo muestra los "peligros" y los "problemas" de las inversiones chinas en el extranjero, no los beneficios de éstas. No hay que ser adivino para darse cuenta que lo que hay detrás de estas opiniones supuestamente "desinteresadas" es el interés por desacreditar a la competencia china que está desplazando a las empresas norteamericanas y europeas de sus tradicionales nichos -exclusivos- de negocios.


Por otra parte, los autores de este blog demuestran bastante ignorancia respecto a los elementos básicos del sistema político chino, sobre los cuales no hay que ser académico ni experto en China para tenerlos en cuenta. Llamar de régimen "sin contrapesos" al sistema político chino es una exageración, porque si bien es un país en el que no abunda la transparencia tampoco es una dictadura centralizada y despótica. La imagen de una sociedad china en la que desde arriba se decide algo y todos hacia abajo obedecen sin chistar es un cliché que deja de lado la infinidad de matices y colores de un país enorme.


En fin, al leer este blog a ratos pareciera estar escuchando a un político o empresario de un país (europeo de preferencia) que recientemente perdió un importante contrato en África a manos de la competencia china. Es más, a ratos todo esto parece un gran panfleto alertando de las inminencia de la llegada de los "bárbaros" de oriente, frente a los cual hay que precaverse.

La silenciosa conquista china y la bulliciosa conquista occidental tienen mucho en común... la explotación inhumana de la mano de obra barata. Y en política tienen mas semajanza.... la sed de poder. Ahora bien, la occidental la supera en hipocresía.

No puedo ser nada objetivo. No he visitado aún China. Su historia, tradición y ciencia son de las más fundamentales y dignas de estudio profundo por parte de aquel occidental que le interese conocer el mundo pasado y actual. Desconozco totalmente los pormenores de la economía china y su habilidad para penetrar en los mercados y absorber las materias primas en cualquier parte del mundo.
Lo único que si me permito es no conceder ni un mero halago a un sistema que deja mas pobreza en nuestro entorno.
Seré simplista, reduciré al máximo, más mis competencias intelectuales y académicas posiblemente no me posibiliten para ambicionar más, tal vez ni sea objetivo (ya poco me importa) pero es indudable que no jugar con las mismas reglas ni con los mismos obstáculos plantea más dudas y críticas de las que aquellos que son complacientes con el gobierno chino podrían disimular con sus comentarios sobre la amabilidad del pueblo chino y lo cumplidores y eficientes son en el trabajo (cualquier pueblo que desee hacer negocios con un mínimo de éxito lo será)

Soy un empresario inversor en China, y creo que el artículo es parcial y poco objetivo.
Precisamente la competitividad china se basa en mano de obra barata y condiciones de trabajo y vida duras.¿Qué esperaba? Ellos expanden su modelo.
Pretender fabricar productos cuya producción conlleva mucha intervención humana con costes occidentales es absurdo. Por otro lado los chinos, como fábrica del mundo, devoran materias primas, minerales, maderas, soja, etc.
¿Qué problema supone que los traigan de América o Africa? Nosotros hacemos lo mismo...

Los chinos son gente de orden, cumplidores, pagadores, y muy disciplinados.

Wo ai Zwong Quo he hanyen

No entiendo para que es la foto de la crema, cuando ni siguiera las letras son chinas. Por favor, investiga primero antes de pasar sentencia.

Lo cierto es que China es una dictadura implacable que no ha dudado en subvertir sus propios ideales a cambio de inmensas cantidades de dinero provenientes del mundo capitalista y ha aplastado sin piedad a toda disidencia crítica como las manifestaciones en la plaza de Tiananmen hace unos años. Por otro lado es un pueblo tremendamente orgulloso de si mismo y bastante racista lo que hace que se nieguen a toda asimilación o mezcla con la población autóctona allí donde van. Recomendaría mucha cautela a quien vaya a hacer negocios con ellos.

No estoy de acuerdo con todo lo que se dice en este blog sobre China, pero seamos razonables: el título del blog es "La silenciosa conquista china", no "La silenciosa (o gritona) conquista occidental". Por lo tanto, es lógico que sus autores se concentren en lo que hace China. Si quieren acceder a información sobre los innumerables desmanes de las empresas europeas o USA en el mundo, tienen cientos de blogs y periodistas y ONGs trabajando en ello. En este blog se habla de China. Y como menciona el autor en el artículo, me parece repugnante intentar justificar abusos por la simple razón de que otros también los cometen; explotar, abusar, cargarse el medio ambiente no es un derecho a disposición de la nación que quiera ejercerlo. Hay que denunciar los abusos, vengan de donde vengan, y lo cierto es que tenemos montones de fuentes que denuncian la tropelías occidentales, pero no existe lo mismo para denunciar las de China.
por otro lado, nosotros podemos leer sobre los desmanes de las empresas occidentales con relativa facilidad -por mucho que lo oculten los grandes medios-, pero dudo que un chino pueda hacer lo propio.
No confundamos: criticar un sistema político y las empresas de un país no equivale a descalificar el país en su conjunto; eso es precisamente lo que intenta hacer el partido comunista chino: presentar cualquier ataque a su legitimidad o su labor como un ataque total a la nación y al pueblo ("herir los sentimientos del Pueblo CHino", lo llaman ellos...). No caigamos en eso y separemos al país del gobierno.

Coincido con Ud. "Tajnum", viviendo aquí en China, no puedo estar de acuerdo con lo que comentan los autores de este blog.

Si bien es cierto los "autores del blog" tienen todo el derecho a expresar sus opiniones, pero con todo respeto me parece un despropósito que dichos señores, se presenten con "autoridades sobre la materia".

Aprovecho por otro lado en sugerir a los interesados es temas sobre Asia leer Asia Times, el cual también es accesible de forma gratuita a través de Internet. Ahí podrán encontrar muchos puntos de vista de gente que realmente esta o hubo estado involucrada en la región.

A tajnum, el señor gonzalez solo señala el punto de vista parcial e interesado de los autores y que no dice nada acerca de china, más proximo a un entretenimiento que a un analisis periodistico serio

Estimado Sr. Juan A. González.
He querido entender que este blog esta dedicado a la publicación del punto de vista de unos profesionales del periodismo sobre un aspecto geopolítico actual en concreto: La expansión económica de empresas e instituciones chinas (hoy día).
Si usted tiene pretensiones de anexionar este tema a una, observo que previsibles, reinvidicación de los desmanes de corporaciones europeas y estadounidenses le recomiendo que inicie una actividad informativa similar a la aquí desarrollada. Y a decir verdad, tildar de ignorantes sobre la realidad china a unos residentes en tal nación y cuya labor profesional parece ser críticos y objetivos e algo presuntuoso, o al menos así me catalogaría yo mismo si fuese el caso.

Señor Cardenal, Ud. debería viajar a China más a menudo y, en lo posible, intentar aprender algo de mandarín.

No se puede hablar de un país sin conocerlo y menos sin hablar su idioma, manejando supuestos que no tiene ninguna relación con la realidad. El sistema político chino, si bien es claramente autoritario, no es un régimen despótico en el que el o los dirigentes hagan lo que les venga en gana sin ningún tipo de contrapesos. Eso es completamente falso y refleja un enorme desconocimiento (para no decir ignorancia) de cómo se maneja el poder político y económico en China.

Claramente la inversión china en el extranjero tiene sus claroscuros. China financia represas que destruyen el ecosistema y desplazan a decenas de miles de personas en África, opera minas de cobre, cobalto y platino sin la más mínima sensibilidad social, compra petróleo o proporciona préstamos a dictaduras nefastas... Pero ese es sólo un lado de la medalla, el lado que europeos y gringos quieren presentar para lavarse las manos de su horroroso pasado (y presente) colonial.

El barco que hace pocos años depositó residuos petroleros tóxicos que mataron a miles de personas en Abijján (Costa de Marfil) no era chino, sin europeo. Los barcos pesqueros que saquearon ilegalmente el mar territorial de Somalia (y que indirectamente causaron la piratería) eran españoles, no chinos, al uigual que los barcos que saquean HOY las costas de Senegal, Guinea Bissau o Mauritania. La compañía que ha depositado por décadas-y sigue haciéndolo- residuos radioactivos en Níger, matando a miles de personas (y causando indirectamente las rebeliones tuareg) es francesa, Areva. No era ni es china, sino europea.

De todo ello casi no se habla en la prensa. Los contrapesos de poder que supuestamente existen en las democracias occidentales no funcionan en estos caso, porque primero se trata de africanos (para la mayoría de los europeos, subhumanos), y segundo porque la mayoría de esas empresas tiene intereses en la propia prensa europea.

Y ojo, no estoy hablando del pasado colonial de Europa. Estoy hablando de AHORA; de cómo la flota pesquera española saquea la costa de África, de cómo Areva contamina con radiactividad las pocas fuentes de agua del norte de Níger, de cómo las multinacionales europeas y norteamericanas destruyen el ecosistema (lo que queda de él) del sureste de Nigeria, de cómo las empresas francesas trabajando para la dictadura birmana y utilizan trabajo esclavo proporcionado por los militares......

La denuncia periodística me parece muy buena, en especial en relación a empresas poco transparentes como las chinas. Pero si la denuncia sólo es para un lado y omite todo lo que dice relación con las empresas europeas, norteamericanas y japonesas, pierde toda credibilidad.


Cuando la denuncia es unilateral, como ocurre en este caso, uno sospecha de manipulación política. En el siglo XIX se hablaba del "peligro amarillo".... Parece que los europeos no han progresado mucho...

Por lo demás, los autores saben muy poco sobre la sociedad china y su sistema político. Menos deben saber hablar o leer mandarían, idioma en que están redactados todos los informe se que se realizan en China sobre las inversiones en ultramar.

Les recomiendo el siguiente blog sobre el sistema político chino, para que salgan un poco de su ignorancia:

http://blogs.cincodias.com/a-un-clic-de-china/2012/01/china-en-2011-y-2012-seg%C3%BAn-el-observatorio-de-la-pol%C3%ADtica-china.html

Saludos,

Juan Antonio Gonzalez
Valparaíso, Chile

Señor Cardenal, Ud. debería vaiajar a China más a menudo y, en lo posible, intentar aprender algo de mandarín.

No se puede hablar de un país sin conocerlo, manejando supuestos que no tiene ninguna relación con la realidad. El sistema político chino, si bien es claramente autoritario, no es un régimen despótico en el que el o los dirigentes hagan lo que les venga en gana sin ningún tipo de contrapesos. Eso es completamente falso y refleja un enorme desconocimiento (para no decir ignorancia) de cómo se maneja el poder político y económico en China.

Claramente la inversión china en el extranjero tiene sus claroscuros. China financia represas que destruyen el ecosistema y desplazan a decenas de miles de personas en África, opera minas de cobre, cobalto y platino sin la más mínima sensibilidad social, compra petróleo o proporciona préstamos a dictaduras nefastas... Pero ese es sólo un lado de la medalla, el lado que europeos y gringos quieren presentar para lavarse las manos de su horroroso pasado (y presente) colonial.

El barco que hace pocos años depositó residuos petroleros tóxicos que mataron a miles de personas en Abijján (Costa de Marfil) no era chino, sin europeo. Los barcos pesqueros que saquearon ilegalmente el mar territorial de Somalia (y que indirectamente causaron la piratería) eran españoles, no chinos, al uigual que los barcos que saquean HOY las costas de Senegal, Guinea Bissau o Mauritania. La compañía que ha depositado por décadas-y sigue haciéndolo- residuos radioactivos en Níger, matando a miles de personas (y causando indirectamente las rebeliones tuareg) es francesa, Areva. No era ni es china, sino europea.

De todo ello casi no se habla en la prensa. Los contrapesos de poder que supeydstamentee xisten en las democracias occidentales no funcionan en estos caso, porque primero se trata de africanos (para la mayoría de los europeos, subhumanos), y segundo porque la mayoría de esas empresas tiene intereses en la propia prensa europea.

Y ojo, noi estoy hablando del pasado colonial de Europa. Estopy hablando de AHORA; de cómo la flota pesquera española saquea la costa de África, de cómo Areva contamina con radiactividad las pocas fuentes de agua del norte de Níger, de cómo las multinacionales europeas y norteamericanas destruyen el ecosistema (lo que queda de él) del sureste de Nigeria, de cómo las empresas francesas trabajando para la dictadura birmana y utilizan trabajo esclavo proporcionado por los militares......

La denuncia periodística me parece muy buena, en especial en relación a empresas poco transparentes como las chinas. Pero si la denuncia sólo es para un lado y omiyte todo lo que dice relación con las empresas europeas, norteamericanas y japonesas, pierde toda credibilidad.


Cuando la denuncia es unilateral, como ocurre en este caso, uno sospecha de manipulación política. En el siglo XIX se hablaba del "peligro amarillo".... Parece que los europeos no han progresado mucho...

Por lo demás, los autores saben muy poco sobre la sociedad china y su sistema político. Menos deben saber hablar o leer mandarían, idioma en que están redactados todos los informe se que se realizan en China sobre las inversiones en ultramar.


http://blogs.cincodias.com/a-un-clic-de-china/2012/01/china-en-2011-y-2012-seg%C3%BAn-el-observatorio-de-la-pol%C3%ADtica-china.html

e recomiendo

Para casio: tienes un problema, chaval.
 
Para los autores: Permítanme que les haga la siguiente pregunta. A tenor de cómo se están sucediendo los movimientos económicos y empresariales de China por el planeta, ¿tenemos motivos para estar preocupados y temer que acabemos dominados, sino directamente sí indirectamente, por China? ¿O, po el contrario, creen ustedes que China acabará derrumbándose sobre sus propios pies de barro al no poder sostener este crecimiento brutal basado en la casi esclavitud de su sociedad, de modo que es sólo cuestión de tiempo que le explote en las manos una bomba formada por más de mil millones de piezas? Un saludo.

me encuentro perdido, no encuentro la palabra totalitario en el articulo

Y el gran problema para el que no quiere contribuir al "éxito" de China en el mundo? Que es imposible en la UE encontrar de donde provienen muchos de los alimentos, ropa, y bienes que consumimos.
Me dicen que puedo votar con mi bolsillo, pero es imposible discernir el origen de las cosas.
Qué se puede hacer para que la etiquetación de productos nos permita realmente tomar decisiones conscientes de compra?

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Sobre los autores

Heriberto Araujo y Juan Pablo Cardenal son periodistas españoles en China desde 2007 y 2003, respectivamente. Juntos han escrito el libro "La silenciosa conquista china" (disponible ya en español, mientras se traduce a cinco idiomas), una investigación de dos años por 25 países en el mundo en desarrollo para comprender la expansión del gigante asiático y sus consecuencias. Ahora le siguen los pasos también a la irrupción de China en Occidente.

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