Son parte del paisaje norteamericano: esos hombres –y crecientemente también mujeres- de rostros impenetrables, eternas gafas de sol, trajes oscuros que cantan tanto como un uniforme y pinganillos en el oído que trotan al lado del presidente de Estados Unidos tanto si este va a pie como si va en limusina. Son los agentes del Secret Service (Servicio Secreto), el organismo encargado de la protección del titular de la Casa Blanca, y en las últimas dos décadas han sido encarnados en el cine por actores tan populares como Clint Eastwood, Nicolas Cage y Michel Douglas.
Ahora, sin embargo, un buen puñado de estos héroes del imaginario colectivo de sus compatriotas son los villanos del último gran escándalo estadounidense. Ya estarán al corriente de la historia: un mínimo de 11 miembros del Servicio Secreto, y de paso también algunos militares, contrataron (presuntamente, por supuesto) a una veintena larga de prostitutas en Cartagena de Indias, la ciudad colombiana donde habían ido de avanzadilla para garantizar la seguridad del presidente Obama durante la Cumbre de las Américas. Los agentes, que han sido suspendidos de empleo y sueldo, se llevaron (presuntamente) a las prostitutas a sus habitaciones en el hotel Caribe.
Obama ha declarado que se sentiría “enfadado” de confirmarse estas acusaciones.
A los más jóvenes, esta noticia puede parecerles sorprendente. Hollywood ha hecho últimamente un gran trabajo de propaganda de la imagen más heroica de estos investigadores y guardaespaldas. En sus películas han sido presentados como hombres -y crecientemente también mujeres- dispuestos a recibir una balacera con tal de salvar a su jefe: el presidente de Estados Unidos y “líder del mundo libre”.
Los garrafales errores del asesinato en Dallas de John F. Kennedy (1963) y el atentado en el que resultó herido Ronald Reagan (1981) en pleno Washington, quedaban atrás. (En 2010 también se supo que un agente del Servicio Secreto había estado a punto de matar por error a Lyndon B. Johnson horas después de la muerte de Kennedy).
El primero en dar vida en la gran pantalla a esta imagen épica fue el gran Clint Eastwood. En un buen thriller de 1993, In the Line of Fire (En la línea de fuego), dirigido por Wolfgang Petersen, Eastwood interpretaba a un veterano, fatigado y desencantado agente del Servicio Secreto, el último que seguía en activo de los tiempos del fracaso colectivo que supuso para el departamento el asesinato de Kennedy. Pero eran su experiencia, su tesón y su profesionalidad lo que terminaba impidiendo que el presidente del momento fuera asesinado por un peligroso lobo solitario encarnado por otro tremendo actor, John Malkovich.
En 1994, este personaje heroico, sin dejar de serlo, tomó un sesgo más cómico en Guarding Tess (El guardaespaldas y la Primera Dama). Allí Nicolas Cage hacía de jefe de un equipo del Servicio Secreto encargado de proteger a la simpática y rebelde, tierna e insoportable viuda de un presidente, interpretada por Shirley Mac Laine.
En la mediocre The Sentinel (La sombra de una sospecha), Michel Douglas daba vida a un curtido agente del Servicio Secreto que, veinte años atrás, había salvado la vida de un presidente interponiéndose ante una lluvia de balas. Pero el popular y respetado agente iba a ser acusado de ser miembro de una conspiración para asesinar al actual titular de la Casa Blanca. ¿Tenía, además, un lío con la Primera Dama, interpretada por la bellísima Kin Basinger?
Hasta aquí el último cine de Hollywood sobre este departamento. Pero el escándalo de Cartagena de Indias ha traído a la memoria de los más viejos aquellos tiempos en que el Servicio Secreto también era identificado con alcohol, sexo, drogas y abuso de poder, como ha señalado un artículo de The New York Times. En 2002 un reportaje de investigación de US News and World Report presentaba así al departamento.
Y viajando a los tiempos de Kennedy y Johnson, dos presidentes con merecida reputación de mujeriegos, vuelve la imagen de los hombres del Servicio Secreto como encubridores –y hasta proveedores- de los pecadillos de alcoba de sus jefes. Sobre eso el genial James Ellroy ha escrito escenas muy potentes en American Tabloid y sus otras novelas negras ambientadas en los años 1960 estadounidenses.
El Servicio Secreto fue creado en 1865 como una unidad de investigación policial del departamento del Tesoro especializada en la lucha contra la falsificación de moneda. Se cuenta que el documento de su creación estaba en el despacho de Abraham Lincoln, listo para ser firmado, la noche que el presidente fue asesinado en un teatro de Washington. A partir de otro magnicidio, el asesinato en 1901 del presidente William McKinley, al Servicio Secreto le sería adjudicada asimismo la protección del titular de la Casa Blanca y, con el tiempo, otros dignatarios estadounidenses o extranjeros de visita. Así que, antes que el FBI, la CIA y todas las demás, fue la primera agencia del Gobierno federal estadounidense especializada en inteligencia y contrainteligencia.
Bueno, ustedes ya saben que eso de “inteligencia” es un eufemismo para denominar a las pesquisas y/o el espionaje. Dado lo visto (presuntamente) en Cartagena de Indias, no pocos de los miembros del Servicio Secreto parecen guiarse más bien por órganos situados bastante por debajo del cerebro.
Hay 17 Comentarios
Gracias por eliminar mi comentario de su demagógia chabacana
Publicado por: Farah y los Clones | 25/04/2012 10:08:44
Si las paredes de la Casa Blanca pudieran contarle al mundo los desmanes de los que deben haber sido testigos ...
Publicado por: Alana | 20/04/2012 3:22:51
ahmed eso lo hacen americanos, japoneses, marroquis, españoles, y si marte estuviera habitado tb allí, anda que no hay poco puterohetero.
Publicado por: sozio | 19/04/2012 13:11:19
pues yo q creo q el q va de putas tiene algún problema: consigo mismo o con su pareja, mejor ir al pppppsiatra.
Publicado por: sozio | 19/04/2012 12:14:11
Lo macabro Emma, lo sórdido, es que hacen todo eso y nadie les puede JUZGAR. Por ser estadounidenses, gozan de inmunidad.
Publicado por: Ahmed | 19/04/2012 12:10:01
Los del Servicio Secreto contratan prostitutas en Colombia, los soldados en Afganistan se fotografían con muertos y queman coranes, los de Irak se retrataban con los torturados, sigue el campo de concetración de Guantánamo, los de Wall Street arruinan al mujndo y se gastan sus bonus en coca y, se cierra el círculo, prostitutas. ¿USA mejor que el resto?
Publicado por: Emma | 19/04/2012 11:30:11
Dejando a un lado las consideraciones morales de cada uno, es necesaria y se agradece la inteligencia para así poder hacer uso de todos los órganos del cuerpo con criterio.
Gracias por las referencias cinematográficas, hacen este blog muy ameno.
Publicado por: Angie | 19/04/2012 9:15:53
Se puede ser muy duro, muy macho, de sangre muy fría, impertérrito, incorruptible, infalible....... hasta que se tiene delante a una costeña de Cartagena, ahí toda la "dureza" del hombre le abandona para concentrarse en un único sitio.
Publicado por: Jordan | 19/04/2012 6:23:59
Me encantó la nota, bien escrita, con buen humor y con ese fino sarcasmo que me encanta.
Publicado por: María Verónica | 19/04/2012 4:46:47
Esta hueveando el periodista cuando dice "que los "Miembros" del sevicio secreto siempre estan alertas"
Publicado por: denis | 19/04/2012 3:46:50
Sólo hay una cosa más triste que irse de putas: querer irse de putas y no poder hacerlo.
Publicado por: Stímulax | 18/04/2012 23:42:05
Menudo referente moral están hechos los Estdos Unidos. Sus tiburones de Wall Street demandan y consumen la droga de América Latina y sus fabricantes y gun dealers les venden las armas a ls narcotraficanes de abajo. Y en cuando llegan a Colombia los tipos del Servicio Secreto empiezan a pedir putas al recepcionista del hotel.
Publicado por: Lorena | 18/04/2012 20:12:11
En el comportamiento del "miembro", no, desde luego
Publicado por: Juana | 18/04/2012 18:24:44
Pues a mí lo que me ha gustado más es el último párrafo del blog. Efectivamente, no parece ser el cerebro el órgano que prima siempre en el comportamiento de los miembros de la "Inteligencia".
Publicado por: Helena | 18/04/2012 18:23:58
Muy divertido y genial el titulo!!!
Publicado por: Alonso | 18/04/2012 16:53:29
Muy divertido y genial el titulo!!!
Publicado por: Alonso | 18/04/2012 16:53:28
si empezamos con puteros q sea con el real.
Publicado por: sozio | 18/04/2012 16:06:52