Autor invitado: Javier Sanz, autor del blog Historias de la Historia (*)
Precisamente a Benedicto XV le tocó uno de los peores días para la Iglesia o, mejor dicho, para Dios... el día que fue acusado, juzgado y condenado por genocida.
El protagonista de esta historia fue Anatoly Lunacharski, un marxista que tras la Revolución de Octubre (1917) -Revolución Bolchevique- se puso al frente del Comisariado Popular para la Instrucción Pública (Narkompros) encargado de la educación y la cultura en la URSS. Se convirtió en una especie de mecenas de la cultura y salvador de bienes culturales que los bolcheviques pretendía destruir; en materia educativa trató de que llegase a todos los rincones del vasto territorio soviético y disminuir el analfabetismo reinante; y en materia religiosa... persecución contra la Iglesia. Y como en el caos y en las revoluciones los fanáticos suelen hacer de las suyas, Lunacharsky fue un poco más allá... en 1918 montó un juicio a Dios con la acusación de genocidio.
Un juicio en toda regla: en ausencia de reo -no pudieron localizar a Dios porque tenía el móvil apagado o fuera de cobertura- pusieron en su lugar una Biblia; los fiscales acusadores se basaron en hechos históricos y los abogados defensores, lógicamente de oficio, pedían la absolución por enajenación mental. Aunque el tribunal popular que juzgaba el caso tenía claro el veredicto, deliberaron una cuantas horas junto a unas botellas de vodka. Se le declaró culpable de genocidio y Lunacharski, presidente del tribunal, lo condenó a morir fusilado. A las 6 de la mañana del 17 de enero de 1918, el reo era ejecutado... se dispararon varias ráfagas al cielo.
Años más tarde, Lunacharski se dio cuenta que aquello había sido demasiado...
La religión es como un clavo. Cuanto más se lo golpea en la cabeza, más penetra
Falleció en Francia en 1933 cuando viajaba hacia España para ocupar el puesto de embajador.
Nota: este es uno de los incluídos en el libro De lo Humano y lo Divino, de Javier Sanz, editado por Oberon. El autor fue colaborador del programa de la Cadena Ser A vivir que son dos días. Su blog Historias de la Historia fue votado como Mejor Blog Cultural 2011 en los premios Bitácoras.
Hay 5 Comentarios
Hola, amigos. Aprovecho para meter mi cuchara en este blog, porque el tema me parece pertinente e interesante. Me llevé la sorpresa de que mi aporte fue calificado de spam y la verdad es que les agradezco, porque ni siquiera sabía qué significaba esta palabra. Gracias a ellos por darme la oportunidad de ampliar mi cultura informática. Y es que todavía hay medios que, aunque hablen de LIBERACIÓN, son cerrados a la banda, inquisitoriales y enemigos de cualquier opinion que les disuene. El tema es la posible y casi segura canonización del papa Juan Pablo II.
Para comenzar, la misma comisión que dictamina sobre la santidad, los milagros y las virtudes ejemplares de un candidato, ha caído en un gran descrédito, por ejemplo, con la canonización del Marqués Escrivá de Balaguer. Solo tuvo en cuenta los testimonios que favorecían su canonización y no los que se oponían a ella o presentaban testimonios en contra, como era el caso del arquitecto Miguel Fisac, quien convivió muchos años con el fundador del Opus Dei. Para él, todo el proceso de canonización de monseñor Escrivá fue una farsa.
Por otra parte, la cuestión de los milagros suena completamente extraña: que un un grupo de hombres disciernna sobre si un cristiano hizo tal o cual milagro, no tiene sentido ninguno. Solo queda el testimonio de una vida cristiana ejemplar. Personalmente, pongo en duda la supuesta ejemplaridad del papa Juan Pablo II. Existen demasiados argumentos en contra de la misma y no voy a insistir en todos ellos. Pero hay dos especialmente decisivos no solo para anular la posible (segura) canonización sino incluso para dar reversa en la beatificación ya proclamada.
Uno: la protección de años al arzobispo Marcinkus, reclamado por la Fiscalía de Roma por lavado de dinero, heterodoxos manejos y colaboración en la quiebra del Banco Ambrosiano de Milán. El papa Juan Pablo II conocía todos esos tejemanejes, que además tenían que ver con la mafia y la masonería italianas, como sabe la opinión pública de Italia. Y no obstante, pretegió al delincuente hasta su retiro por edad. El otro argumento se refiere a la relación del papa Juan Pablo II con el cura Marcial Maciel. Los testimonios gráficos de esta amistad los vio todo el mundo, incluso sabiendo que el cura Maciel llevaba una vida disoluta. Pero sus generosas donaciones (en dinero contante y regalos) hacían que el papa y la Curia Vaticana se hicieran los de la vista gorda, comenzando por los cardenales Bertone y Sodano y siguiendo por el mismo papa polaco.
Finalmente, como ha demostrado el padre Jesús López Sáez, habiendo sido asesinado el papa Juan Pablo I, su sucesor no hizo nada para aclarar los hechos; ocultó los resultados de la autopsia, contribuyó a desfigurar la imagen de su predecesor como una persona enfermiza a quien aplastó la responsabilidad papal; echó para atrás todas las reformas planeadas por "El papa de la sonrisa", diluyendo casi por completo el espíritu del Concilio Vaticano II. Etc.
En fin, la imagen de Juan Pablo II como candidato a los altares es obra de los medios de comunicación interesados, pero la realidad de Juan Pablo II dista mucho de hacer honor a la verdadera santidad cristiana.
Publicado por: Francisco Tostón de la Calle | 06/08/2013 17:38:53
Tenemos la tremenda suerte de saber leer y escribir ya desde muy antiguo.
Hoy contamos con hemerotecas, con estudios avanzados que comparan evoluciones, y con la investigación química de todo cuanto existe.
Todo se analiza y se compara, para entrar por la puerta de atrás, si no conocemos la entrada principal.
Por los resultados se deduce el planteamiento del problema y sus causas.
Otros dicen que es leer en la naturaleza que nos envuelve para entender nuestro medio a nosotros mismos y también nuestro entorno total.
Observando el mundo físico con los ojos y con los medios de que se disponen, ya se pueden sacar más y mejores conclusiones, que lo puramente intuido.
Sin fundamentalismos ni verborreas.
Como hormigas en su hormiguero desde hace desde hace millones de años.
Que se cuestionan por qué siguen acarreando granos de trigo permanentemente.
O como abejas en su colmena.
Es entonces cuando aparece la idea de Dios, con un plan en el que encuadrar tantos afanes a todos los niveles.
Personales, individuales, y colectivos.
¿Para que sirve tanto ajetreo?
Publicado por: Edurne | 05/08/2013 17:49:53
No podemos desde la precariedad transitoria de nuestra existencia, tratar tratar de cambiar el rumbo de la historia compartida.
Publicado por: S | 05/08/2013 10:17:28
Dios no es persona, por eso no puede ser fusilado. Es la mente humana la que ha convertido el UNO, el Principio Divino, en un sujeto con derechos y obligaciones. Y a partir de esa creación mental se han fabricado los sistemas religiosos, con su fuerte carga humana de bien y de mal, amores y odios, verdades y mentiras, perdones y venganzas, etc., etc. Conviene señalar que las antiguas filosofías orientales (del chino Lao Tsé y del indo Sidharta Ghautama) no tienen dioses; siempre se refieren al eterno devenir de los seres y las cosas y hablan del desapego a lo material como el fundamento de la verdadera liberación espiritual. Es decir, hablan del equilibrio, ni la mucha agua de las inundaciones ni tan poca agua que desertice... el justo medio.
Publicado por: RAMÓN | 03/08/2013 14:07:49
Curioso idiota el tal Lunacharski. No sabía nada de este tipo, pero está visto que la Historia supera siempre a la novela en lo tocante a cosas raras. Bueno, nadie ha podido con Dios -o con la ilusión de Dios, que no es lo mismo-. Son más preocupantes Sus amigos; por ejemplo, el primer Papa tonto, que quiere un entendimiento con los musulmanes. Y yo también..., pero un Papa -sin ir tan lejos: un Jefe de Estado cualquiera- debería conocer algo mejor el paño del Islam.
Publicado por: El Caballero del nabo florido | 02/08/2013 19:12:10