Como no podía ser de otra manera, el vino también se ha hecho un hueco entre las aplicaciones del smartphone o tableta. Un hueco nada despreciable, con cerca de 500 para el iPhone de Apple, y menos de la mitad para los que llevan el sistema Android. Una cantidad ingente, que puede disuadirnos a la hora de decantarnos por alguna de ellas. Venturosamente, la inmensa mayoría son gratuitas. Así que no cuesta nada bajarse la que más nos guste, probar y… ¡desecharla!. Porque la mayoría no aportan nada, o muy poco. Son simples remedos de las guías de vinos, pero mucho más pobres. O adaptaciones de tiendas online. En muchas de las aplicaciones extranjeras dedicadas a los vinos españoles hay notables ausencias, algunas son lentas y poco atractivas estéticamente, y otras solo aportan la información básica.
Pero llevarlas en nuestro móvil tiene sus ventajas. Por ejemplo, informarse algo mejor del vino que nos ofrecen en el restaurante, o del que está en oferta en el supermercado. Claro que eso mismo se puede conseguir, y a veces con mayor rapidez y rigor, consultando en Internet con el navegador del móvil. También podemos conocer los datos, valoraciones, notas de cata de otros usuarios, lugares de compra, información sobre la bodega, armonías gastronómicas, etc., solo con hacer una foto a la etiqueta de la botella, como ocurre con Vivino o Drync, lamentablemente ambas en inglés. Y hablando de inglés, es una pena que aplicaciones tan buenas como Cor.kz, con 31 millones de usuarios y más de 1,5 millones de etiquetas de vino registradas, tengan una representación bastante pobre de nuestra realidad vitivinícola.
Pero la comodidad de utilizar una aplicación específica para vino puede justificar sus deficiencias. Para mí, lo que las hace más atractivas es la posibilidad de llevar tu propio registro de compra, con catas y puntuaciones personales. Y, mucho más, si toda esa información la puedes compartir en las redes sociales, que es hoy el ecosistema de los “conectados”. La gestión de nuestra bodega también es un buen argumento para su uso, aunque eso mismo lo podemos hacer con programas para el ordenador, mucho más completos.
El interesado en convertir su smartphone en un gestor de vinos puede consultar algunas de las seleccionadas por los expertos. Estas son sus direcciones:
En estas selecciones hay bastantes coincidencias, lo que no deja de ser una garantía. Pero insisto: bajarse, probar... y si no gusta ¡tirar!
Mi pequeña selección
Para el que no quiera tener que probar una oferta tan grande, le ofrezco mi selección personal. Cuatro aplicaciones que cubren adecuadamente las necesidades de información, gestión y relación social. Y, ya que hablamos de vino, jugar y divertirnos.
VINO 10
El compañero ideal de la comida o la vinoteca. Rápida, divertida y rigurosa. Pensada para la gente joven y con pocos conocimientos de vino. Incluye un juego por el que se decide el que paga el vino. Gratis, y 2,69 € usuario Premium. Apple y Android.
www.vino-10.com
VINTHINK
La red social más amplia, con 55.000 vinos y 11.000 bodegas de España, Francia, Italia y EEUU. Para relacionarse y consultar opiniones de otros usuarios. La geolocalización permite conocer las bodegas o eventos de vino cercanos. Gratis. Apple.
vinthink.com
WS-VINO Y BODEGA
Para llevar el control de los vinos catados, comentarlos, puntuarlos y gestionar la bodega. Amplia base de datos, con más 900.000 puntuaciones, revisiones y precios. Se puede consultar su diccionario. Gratis. Android
play.google.com/store/apps/details?id=winesecretary.com&hl=es
VINO, MI VINOTECA
Para llevar un registro de los vinos probados, sus características principales, y notas de cata. También lo puedes compartir con otros usuarios, y en Facebook. Tiene mas de 11000 fichas de vino. Gratis. Android.
play.google.com/store/apps/details?id=com.dalonso.regvinos
Un último consejo. Debemos aprovechar que estas aplicaciones son todavía gratuitas. La tendencia es que las de mayor calidad tengan un precio, aunque sea bajo, para garantizar su supervivencia.