Cuando el remedio es peor que la enfermedad. La identificación sin previo aviso de los usuarios de eskup provoca una oleada de quejas

Por: | 25 de octubre de 2014

Todos conocemos casos de enfermos que han perdido la vida al serles aplicada una terapia de choque demasiado fuerte. Temo que, salvando las distancias, algo así ocurrió el jueves 23 de octubre con el sistema de comentarios a la edición digital de EL PAÍS. Para evitar que el diálogo en los foros alcanzara niveles demasiado agresivos, el equipo que los gestiona optó por una nueva fórmula: requerir la identidad real a cada usuario de Eskup. La intención era buena, pero se puso en práctica sin avisar a los interesados que han reaccionado con lógica indignación. A mediodía del viernes, el buzón de esta Defensora comenzó a llenarse de mensajes de queja. Quiero reproducir algunos aunque omitiré los nombres para evitar nuevos agravios.

"Acabo de advertir que mi nombre ha sido revelado en la plataforma “gestionada” por eskup dedicada a recoger las opiniones de los lectores del diario en su versión electrónica”, me escribe uno de los afectados.  “Mire, supongo que usted conocerá la legislación, y yo jamás he autorizado que se publique mi nombre completo asociado a unas opiniones que, aceptando de antemano las condiciones impuestas por ustedes, hice de modo anónimo. Solo una autoridad judicial puede ordenar escrutar mis aportaciones, y, leguleyo de mí, presupongo que el proceder siendo tal la situación, no iría por el camino que ustedes han indicado”.

 Otra usuaria de Eskup se queja de lo mismo. "Les pido explicaciones de por qué en mi caso y el de alguna otra persona que he detectado, se ha desvelado nuestra verdadera identidad, y no en el caso de todos los participantes en esa sesión de discusión”.

Otro lector que frecuenta los foros se añade a la protesta. "Hoy, 23 de Octubre de 2014, observo que al participar en un foro de las noticias de El PAIS, aparece como remitente de mi mensaje mi propio nombre, en lugar del nick que comunique al administrador del foro. Es inaceptable este hecho, y espero sus explicaciones sobre el particular". Otra usuaria responsabiliza al periódico por las eventuales repercusiones de que su identidad haya aparecido en uno de los comentarios que hacia bajo la cobertura de un alias. "Les hago responsables a partir de ahora de lo que suceda en mi familia”.

          La decisión merece este comentario de otro usuario: “Violar la intimidad de los lectores dando a conocer su nombre verdadero en posts ya publicados es una aberración tan espantosa que nunca se había visto nada igual en Internet. Tienen ustedes la suerte de estar en España porque en un país anglosajón los habrían crucificado”.

 Bernardo Marín, subdirector del diario y responsable del área digital asume la responsabilidad de lo ocurrido, y aclara que si la medida no ha afectado a todos los usuarios de Eskup, es porque no todos facilitan su identidad. Es decir, los gestores de los foros sencillamente no han podido revelar lo que no sabían. Marín explica cómo se produje el error de comunicación que ha causado tanto disgusto.

"Nuestra idea es acabar progresivamente con el anonimato en nuestros foros de Internet, a cuyo amparo se estaba deteriorando rápidamente el tono de las conversaciones.Un primer paso en esa dirección era sustituir el alias con que se firman los comentarios en eskup por el nombre y apellido aportados por el lector. Tampoco se garantiza así que la identidad del usuario sea cierta, puesto que no se comprueba que ese nombre y ese apellido sean reales. Es más, si el lector no suministró en su día esos datos, o si los eliminó, saldrá por defecto el alias. Pero nos parecía una forma de concienciar al usuario sobre su responsabilidad en los comentarios que vierte en Internet y de mejorar el nivel del diálogo. 

La medida fue consultada con el departamento jurídico del periódico. En ningún lugar se dice que al comentar una noticia aparezca solo el alias, lo que permite, tal y como se ha hecho, mostrar en su lugar el nombre y apellidos aportados por el lector.

Pero no cabe duda de que el cambio debió comunicarse a todos los usuarios antes de ponerlo en marcha para que conocieran la nueva regla. Si no se hizo así fue por un lamentable problema de coordinación interna cuya responsabilidad asumo en su totalidad".

 Con independencia de los asuntos penales, considero imperdonable que se haya actuado así. Los lectores que participan en la plataforma de comunicación de EL PAÍS, Eskup, tendrían que haber sido informados con antelación de la medida que se había decidido tomar. Eso les habría permitido decidir si querían seguir en ella o no, sin tener que enfrentarse a la desagradable sorpresa de ver que su identidad real aparecía desde el jueves en comentarios que ellos habían confiado a sus alias.

Actualización a las 21.14 del sábado

El subdirector del área digital, Bernardo Marín, me envía el siguiente mensaje: “De momento se ha paralizado la medida. El diario mantiene su intención de fomentar la participación responsable del lector en Internet pero quiere darse un tiempo para madurar la iniciativa”.

Espero que la próxima iniciativa, sea cual sea, venga precedida de una seria meditación.

 

 

Hay 80 Comentarios

No es lo mismo escribir comentarios bajo el nombre Atilano Herdeguez ,que con el de José Sánchez, ambos pueden corresponder a identidades reales, pero con la diferencia que, el primero, está manifestándose con su plena identidad y el segundo puede ampararse en el mas absoluto anonimato. Viene esto a cuento en el requerimiento de figurar en los comentarios de El país con el nombre real de cada uno. Me parece una temeridad; si yo firmo, porqué lo pueda tener, con un nombre corriente, estaré protegiendo involuntariamente mi identidad y de cualquier tipo de represalia ¿No es suficiente, para los comentaristas, estar plenamente registrados e identificados en el foro de El País?. Estoy de acuerdo en defenderse de los anonimatos cobardes, pero eso es muy diferente a la proclamación de las ideas u opiniones de personas con identidades y nombres poco corrientes.

Me hace gracia que haya gente que se queje de libertad de expresión cuando los muy"progresistas" censuran y denuncian comentarios respetuosos y sin insultos pero que no concuerdan con su manera de pensar.
Los mismos que se quejan de libertad de expresión , son los mismos que exigen recortársela a quien hable bien o critique según que temas, ideología o personajes(por ejemplo hablar bien de Franco)

La deriva derechista de este periódico (¿lo sigue siendo?) es espeluznante para quienes siempre hemos sido sus lectores, compradores y defensores a pesar de no compartir su ideología.
Los últimos artículos sobre América Latina, la manipulación sobre las elecciones en Brasil y Uruguay, el publirreportaje del EPS sobre la Primera Dama de Perú, fotografiada por la hija de Vargas Llosa, el comentario de hoy sobre Dilma Roussef, "entrenada para hacer bombas y montar fusiles" es más propio de El (In) Mundo. ¿Qué nos queda? Leer en otro idioma, porque aquí todo es tierra quemada, manipulación pura y dura.
¿Se atrevería el Señor Cebrián a publicar su patrimonio antes y después de ser el Conejero Delegado de Prisa?

"Conductor ejemplar", hemos percibido "el nucleo" del tema de la misma manera: EL PAIS es juez y parte y dispone los canales adecuados a cada función, amén de su "guardia pretoriana", encargada - igualito que la policía moral iraní - de dejar los foros orwellianamente "impolutos" a los poco minutos de haber publicado un comentario o, si no, horas más tarde, cuando se debe operar un repaso nocturno "en profundidad": Tiempo y dinero perdidos en eliminar comentarios "díscolos", borrados con frecuencia por moderadores que no suelen ser lumbreras, de esos que cuando señala uno la luna, se fijan en el dedo. "Ese comentario nunca existió". Ni los Jemeres Rojos, vamos.
La jugadita del jueves pasado ha sido una atrocidad que sólo puede perpetrar quien se percibe a si mismo como una sorta de Mogul, o quienes se han acostumbrado a la mercantilización de la opinión, tratando a las personas con los mismos parámetros: "Más maderaaa! Más maderaaa!".
1) EL PAIS ha roto un pacto de confianza con sus lectores, desvelando información - la identidad de la mayoría de ellos - que era confidencial y que debía permanecer como tal. El delito equivale a revelar las propias fuentes, un atentado ajeno a toda deontología profesional.
2) La Defensora del lector escribe al respecto que "[...] el equipo que los gestiona optó por una nueva fórmula: REQUERIR la identidad real a cada usuario de Eskup [...]". Mentira. Nunca hubo requerimiento, que es previo; Se nos impuso la "salida del armario" sin previo aviso. Por lo tanto, la defensora está defendiendo al diario, no al lector. Entiendo que la pobre llega recién estrenada y le ha caído encima el "marrón" del siglo. Malabarismos, los posibles sin renunciar a la paga.
3) La dirección del diario alega que esta jugada está motivada por un intento de bajar el nivel de agresividad de los foros. No sólo constituye un reconocimiento tácito del fracaso de la política de moderación tal y como ha sido llevada a cabo hasta ahora, sino que es un síntoma de un porquesianismo ortopédico que pretende, sí o sí, llevar a la opinión por donde platónicamente se desea que esta vaya, caiga quien caiga. Quizás estén avergonzados de ver que en los foros de los diarios "gemelos" (Repubblica, Monde, Libé...) el nivel de los lectores parece ser más "fino" y menos virulento que el que hay en casa... ignorando que el nivel de virulencia lo dictan las noticias, tal y como se impostan, redactan y priorizan, amén de cómo luego se moderan.
Porque no se pueden sacar a diario los "jugosos" temas polémicos de catalunya, ETA, latrocinios nacionales, infantitas guays y todo un meltpot de agravios comparativos y luego pretender que muchos foreros de diferentes opiniones se comporten como exquisitos contertulios debatiendo sobre filosofía de la estética ante una taza de té. Saben de sobra que cuando se escribe "ETA" o la palabra "Rey", muchos foreros reaccionan como cuando los moderadores ven escrita la palabra "culo", es decir, con automatismos de virulencia incontenible, en función de sus afinidades ideológicas.

Venimos de un país en que la tercera generación después de la Guerra Civil se sigue alineando, en su gran mayoría, con los postulados de sus abuelos. La "clase" (no soy de los de "casta") de los vencedores, que sigue acaparando la mayoría de los poderes sociales, incluído el mediático, ya transubstanciado en "viable y por 40 años más, renovables", apoya sus manejos en el mito que fabricó para uso del pobre respetable: " La reconcialiación". Para la derecha, se tiene el eterno ABC y otros dos de "nuevo" cuño ( el liberal y el ultra) y para la "izquierda", un producto willybrandtiano adecuado a reconducir sus tardopulsiones marxistoides hacia derroteros de economía de mercado: El rebaño PSOE y aledaños, vamos.
Pregúntense si la trayectoria de Juan Luís Cebrián no es análoga a la de Hubert Beuve-Méry y, si hubieran durado 15 años más los regímenes en que ambos crecieron profesionalmente, no hubiese acabado constituyendo la "nueva élite" de los mismos - una sorta de "Penenes" mediáticos - en vez de ser los puntales de opinión de los regímenes del mañana. La pulsión subyacente en ambos personajes es la misma, y así se la transmiten a sus ayudantes y colaboradores: Elitismo, ser "facedores de reyes" (en ese apartado el maestro es Eugenio Scalfari) y un toque snob dictado por quien se cree sin competencia y con una clientela maleable (y desde el jueves, fusilable sin juicio previo).
Cuántos foreros han defendido su condición homosexual amparados por el anonimato ? Cuántos trabajadores han denunciado irregularidades en sus empleos y quedan ahora a merced de sus jefes y de legiones de chivatos ? Cuántas mujeres habrán comentado violencias domésticas - o sus afinidades eróticas en la vida conyugal o extra-conyugal - y son ahora identificables por sus maridos o amigos de éstos ?
La iniciativa de "Esther" es la única viable, en espera de aplaudir a algún redactor de este diario que decida dimitir por incompatibilidad ética, como lo hiciera ataño (es un ejemplo) el delicioso Forges del diario rival.
No espero mucho, no espero casi nada. La "democracia" que ustedes han diseñado para nosotros - y miren que era precaria, apenas viable - se la están cargando a hachazos. No me extraña que tanta gente vea en Podemos o en la mística del nacionalismo no españolista la única vía de desahogo ante tanta tropelía. Dudo que puedan ustedes de EL PAIS seguir convenciendo a alguien tras lo que han hecho con sus fieles lectores ( en mi caso, desde hace 30 y pico años). Yo, ahora, como Jorge Riechmann. Punto final.

Este domingo no ha habido en la edición en papel ninguna referencia al tema en cuestión...
Es una tomadura de pelo al lector, por cierto, su cliente, no el PP y sus amiguetes poderosos.
De tanto girar a la derecha, se van a quedar ustedes sin nadie que les aguante...

Me alegro de haberme dado de baja de eskup hace ya meses. Lo último sucedido me confirma la panda de incompetentes que manejan El País.

Gran comentario, pepinus. Sabes que el ombudsman llama QUEJOSO, en su jerga, al que solicita su protección. Creo que aquí se toma la acepción más despectiva de la palabra dada la esterilidad de la respuesta.

Como persona afectada por la la revelación no autorizada de su identidad, he leído con atención su respuesta. También he leído algunos de los artículos de la política de privacidad de su periódico. como por ejemplo:

"PRISA mantiene una Política de Privacidad sobre los datos personales, en la que se describe, principalmente, el uso que PRISA hace de los datos de carácter personal, garantizando su confidencialidad. Se informa al Usuario detalladamente de las circunstancias esenciales del uso de los datos, y de las medidas de seguridad que se aplican para evitar que terceros no autorizados puedan acceder a ellos"
Aunque he consultado otros artículos, no me extenderé. Resulta evidente que Uds. no han garantizado, precisamente, "las medidas de seguridad para evitar que terceros no autorizados puedan acceder a ellos", para empezar.
Por otra parte debo manifestarle que en general sus explicaciones parecen excusas de mal pagador.
Como Ud. misma comenta, el cambio debiera haber sido previamente anunciado; la excusa de sus servicios jurídicos contradice simplemente el párrafo citado anteriormente sobre privacidad.
La desvelación de datos privados parece más bien una amenaza del estilo : "sé quién eres y tengo tus datos".
Sus argumentos sobre la agresividad de algunos comentarios para justificar la medida podrían ser válidos, pero siempre bajo previo aviso.
Particularmente, siempre he intentado rebatir con educación y sin insultos. Si Uds. pensaban que eso me hacía proclive a aceptar el uso de mi nombre real, se han equivocado. Si alguien lo ha hecho por el contenido de mis opiniones, es una discriminación real. Lo que sí pude comprobar es que la revelación de datos personales no afectaba a todos los usuarios; por tanto Uds. revelan la personalidad real de algunos usuarios conscientemente, sin su consentimiento y guíados tal vez por algún criterio desconocido para los usuarios. Encima en mi perfil ni siquiera tenía señalada mi autorización para "Eskup!
Un caso de neguiglencia total.
Por último, su artículo más que defensor del lector, es defensor de PRISA. Ya puede Ud. imaginar que no pienso volver a intervenir en ninguno de los foros de su periódico, de cualquiera que sea su edición, catalana, o china y que el próximo paso que efectuaré es darme de baja como usuaria.,por si acaso, a parte de desaconsejar a mis amistades cualquier intervención en las discusiones de sus artículos. Será como un grano de arena en la playa, pero lo haré.
Su actuación ha sido simplemente burda, intolerable. Provocan Uds. un peligroso antecedente para otros periódicos.

Si alguien desea contactarme,para algún tipo de actuación, y una vez desvelada mi identidad: [email protected]

Un profesor al que recuerdo con cariño, tremendamente crítico, independiente, ecléctico y muy culto, nos decía una mañana: "no se olviden, en la dinámica social cada mafia genera siempre a su contraria." Uno pensaba rápidamente en la policía y los gánsters en la américa de los años 20 o algo así. Pero a poco que uno se detenga observa que impregna casi todo lo que nos rodea.

Hay una organización inquisitoria de censores que imparte justicia sin medios ni criterios; y ante ella se erige una defensora del lector que todavía no ha denunciado ante los tribunales al responsable del atropello que sufrimos, absolutamente impensable en otros países, como si no supiese -- ¿no lo sabes? -- que esto no es un delito privado, a denunciar por el afectado si se autopercibe como tal, sino una violación de la privacidad, de ley constituida, más íntima de cualquier persona. ¿Defensora de qué? Tú pon el pan que yo pongo la mantequilla. Poli bueno poli malo.

La mafia censora y delatora se confabula con otros que viven de su mismo cuento, llámese el defensor que no defiende más que de boquilla; el que escurre. Lo que menos importa es lo que ocurra a los afectados.

Recuerdos al profesor

Hola, me acabo de enterar de lo que ha pasado y sinceramente me parece que no se han dado cuenta de la gravedad. Las personas no se escudan tras un seudónimo para molestar/insultar/trollear o como quieran llamarlo. Hay muchas personas como yo misma que no queremos compartir con nuestros jefes y puede que “conocidos” o compañeros de trabajo nuestra ideología política o ciertos aspectos de nuestra vida. Al publicar los nombres y apellidos han “desnudado” , si, dejados desnudos a muchas personas serias que se sentían libres opinando en este medio. Ha sido una violación de sus derechos y su libertad de expresión. Esto no tiene nombre y con una palmadita y la hemos cag*do (pido disculpas por esta palabra) no es suficiente. Muchos van a querer una explicación mas elaborada y alguna que otra dimisión.
Menos mal que justo dos días antes había dado de baja mi perfil y cambiado el nombre y borrado los mensajes después de las falsas acusaciones que recibí y de las cuales usted no me defendió ni respondió a mis quejas. Sigo manteniendo lo que le expuse.
Siento no entrar porque durante el poco tiempo que participé conocí a grandes personas tras alias que me aportaron mucho y con los cuales compartí diferencias y afinidades tanto políticas como personales. Si alguno de ellos me identifica puede seguir en contacto conmigo en otros medios con el mismo nick y foto de perfil tanto de prensa española como extranjera donde participo ANONIMAMENTE tras dejar este foro.
Sin embargo no echo de menos a cierto grupo, que todos conocemos y que básicamente no aporta nada y van a ser los únicos en el foro a este paso que si no eres afín a su ideología política te incordian, molestan, vigilan y te acusan de ser unos u otros, hostigan hasta que les respondes y envían el pantallazo a participación para que ese usuario quede baneado del foro. Así es como los verdaderos “trolls” se están haciendo con este foro. Donde debería haber diversidad de opiniones con personas serias debatiendo e intercambiando opiniones de forma razonada ha quedado un patio de colegio con vigilantes asegurados con teléfono directo a participación.
Gracias por leerme y espero que lo publiquen.
Un atento saludo

Precioso. La sola mención de que "no figura en el contrato de forma expresa" es puro ejercicio de cinismo. Si quieren acabar con los trolls, que busquen una forma de dificultar dar múltiples pseudónimos. Hay métodos, pero aunque uno esté opinando de forma respetuosa y bien fundamentada, hay múltiples razones por las que no quiera ver su nombre expuesto. La decadencia de este periódico esta siendo terrible.

Sra. defensora del lector, dice usted al final del artículo que ayer, sábado, paralizaron la medida, pero hoy domingo siguen apareciendo públicamente los nombres de los usuarios y no sus seudónimos, como es mi caso. Rectifiquen de verdad y no añadan la mentira a la fechoría.

Lamento tener que leer la sección de la "Ombudswoman" para comprender que la revelación de mi identidad real no fue debida a un fallo técnico, sino a una decisión unilateral, orwelliana y sin previo aviso. Un estilo, por así decir, "totalitario" y con un tufillo policial-inquisitorial. Supongo que, como decía Ninotchka : "Los lectores de el país será menos, pero mejores", a falta de comprender en qué consiste la "mejora" que impulsa esta lamentable maniobra. En la virtualidad de Eskup, nos conocíamos todos; los rojetes, los fachillas, los anarcos, los liberales, los intelectualillos, los provocadores, los trolls, los chistosos, los moderados y los radicales, los ceporros y las lumbreras. Era una ecosistema perfecto en que, amén de las divergencias, cada cual tenía su "personaje" más o menos elaborado. Primero suprimieron la posibilidad de ver directamente una imagen o chiste en los comentarios (con ello se cargaron no sólo "mi" linea estética - consistente en coger la foto que ilustrara el artículo y reinterpretarla a mi guisa, poniéndole bocadillos a los personajes que aparecían en ella - sino la de un forero tan popular como Koppy Pazzte, cuyo ingenio y sentido del humor calificaría de "vienés" y que era una delicia para casi todos los que coincidíamos con él)... y después llega esta jugarreta, tras un paulatino endurecimiento de la moderación de comentarios, cada vez más arbitraria e ideológicamente orientada hacia el vacuo consenso de adocenamiento conservador: Sólo pasan los comentarios de perfil "buen españolito honrado profident". A veces ni eso. La dirección de este diario, diario que cada día se parece más a las Selecciones del Reader's Digest, ha decidido cargarse todo lo que de abierto, plural y creativo había en estos foros. Si se supone que la Historia avanza hacia el bien, hacia el progreso y con espíritu de mejora, aquí vemos un retroceso inquisitorial que no se justifica bajo ningún prisma, a menos que algunos accionistas del grupo, ligados al Partido Republicano de los EEUU, estén dando una vuelta de tuerca a la linea editorial... O que, sencillamente, la dirección esté en manos de personal incompetente, lo que resultaría aún más preocupante vista la acción efectuada, que aplasta cualquier consideración de respeto hacia los derechos fundamentales del lector.
Queda, claro, la posibilidad de "patalear" en esta estéril columna, la del "consuelo paliativo", un poco como cuando se acudía al cura para que te consolara porque habían fusilado a tu padre o a tu marido. El "Cause toujours" que caracteriza cierta concepción porquesianista - orgánica ? - de la democracia bicéfala: Antes era Iglesia-Estado, ahora es Moderadores-Ombudsman, como si disponer símiles periodísticos de fiscalía y de defensa legal cuadrase el círculo a la perfección. "A la americana". No tienen ustedes vergüenza.

La señora defensora debería saber que no se puede poner una vela a Dios y otra al diablo y que tampoco se puede nadar y guardar la ropa. El revelar nuestros nombre es un acto tan burdo que empiezo a pensar que el verdadero origen no es una equivocación ni una manía de un incompetente. Creo más bien que nos han tomado como pretexto para las peleas internas que mantienen diferentes sectores de este periódico. La revelación de nuestros nombre es un gol que le han marcado a la defensora de reciente nombramiento. Estoy seguro que la señora está ya pensando en dimitir. Lo extraño es que nuestros nombres aún no hayan sido ocultados. ¿Van a seguir mostrados? De no ocultarse en la próximas horas juro que me iré de este periódico pa siempre. El País actual es una pálida y triste imagen de lo que fue. Es de pena y Cebrián tan campante...., como un músico del Titanic.

Una vez más, cuando escribo un comentario explicando las medidas legales que hay que adoptar contra El País, no lo publican. Defensora del lector ¿a quién defiende, al lector o al subdirector?

No soy partidaria de la medida que están madurando, en ese caso no comentaría. Es difícil medir donde empieza la agresividad y además hay muchos tipos de agresividad. Yo no tengo nada en contra de cierta agresividad, siempre que existan las normas de la educación para un espíritu agresivo o vehemente, diría yo mejor. Ahora bien, pensar que esa medida va a mejorar el nivel de los comentarios me parece algo ilusorio, ese nivel se "ha mamado" desde la niñez en los libros sobre todo y en el entorno de cada uno y tal medida llevaría la autoexclusión de una parte que querría seguir "comentando".

Parece que hoy ya no interesa tener este blog en la edición digital de El País. Bien, las medidas legales contra esta manifiesta ilegalidad son interponer denuncia contra El País ante la Agencia Española de Protección de Datos. Es muy sencillo, porque se puede hacer por Internet a través de la página web aepd, y es gratis. Si la AEPD considera que se ha cometido una infracción se puede imponer una sanción a El País. Otra posibilidad podría ser una denuncia judicial por revelación de secretos.

Ultimamente El País parece empeñado en perder cuantos más lectores mejor. Primero la manipulación progubernamental y contra los partidos nuevos que va aumentando cada semana y qye es zafia, obvia e indignante, luego el baboseo monárquico que alcanzó límites vergonzantes durante la proclamación de Felipe (Leticia niña y princesa pasará a los anales de la historia del País como punto de no retorno en su degradación) y ahora esta nueva metedura de pata de dejar a los usuarios de sus foros con el trasero al aire sin previo aviso. Si siguen a este ritmo de descomposición, no les van acabar leyendo ni en Moncloa...

Se me olvidaba. En El País ahora se quiere ahorrar en becarios, esos que pagan un dineral por hacer el master y luego les ponen a censurar comentarios, mientras despiden a la plantilla de toda la vida. Si no, Cebrián no sería un potentado...

Vaya cagada, con perdón. Da pena ver a El País en caída libre, día sí y día también. Los beneficios de esta medida son discutibles, pero desde luego nunca se debería haber aplicado con efectos retroactivos. La gente que firma con nick lo hace por algún motivo, y éste no siempre es insultar. Nadie ha autorizado a El País a revelar esa identidad, y hacerlo creo que puede ser delito. En fin, a partir de ahora a utilizar los nombres verdaderos: Ernesto Mate, Aitor Menta, Macías Pajas, etc. etc.

Yo en cuanto vi mi identidad revelada lo que hice fue darme de alta en el foro. Lo que no sé es cuánto duraré, pero vamos, ya he dado el permiso. Y por lo demás, salvo casos rebuscados, que aquel que comente con o sin nick que comente lo mismo.

Si realmente comentáramos con sinceridad y con valentía, qué poco nos importaría este error. Además, qué hay más importante que la propia identidad.

Ya era hora de que empezaran a dar alguna explicación por el atropello de violar sin previo aviso ni consentimiento la privacidad de los registrados en Eskup, porque yo la misma noche del jueves reclamé a la dirección [email protected], como indican en el formulario, y he recibido la callada por respuesta. Como ya se ha dicho en otros comentarios, esa medida traicionera no va a impedir que sigan los insultos soeces en el foro, ni que el censor borre mensajes respetuosos y mantenga otros insultantes. Pero lo más indignante, y por lo que la defensora del lector no ha dado ninguna explicación, es por qué hay comentaristas a los que se mantiene con el seudónimo mientras se niega la privacidad a los demás, cuando en el formulario de inscripción del foro los campos "nombre" y "primer apellido" aparecen marcados con asteriscos como obligatorios para todos. Me sumo a la petición de asunción de responsabilidades para el responsable del atropello, y a la exigencia de que se trate a todos por igual y que se nos de la opción de mantener nuestra privacidad o darnos de baja en el foro sin exigir aún más datos confidenciales como el DNI.

Lo único que quiero es que me den automáticamente de baja en eskup sin necesidad de tener que recurrir a los alambicados procedimientos que indican en su política de privacidad. Puesto que han violado los términos que yo acepté (acabo de comprobar que mis comentarios antiguos aparecen firmados con mi nombre), tal aceptación es nula de derecho y no tengo necesidad alguna de mandar justificaciones (como el DNI escaneado) que no se me pidieron para darme de alta. Nada tengo que objetar a que las condiciones sean las que Prisa considere más oportunas a partir de ahora, pero que lo hayan aplicado con carácter retroactivo es no sólo una aberración legal, con las consecuencias que esto pueda acarrear, sino también una falta total y absoluta de respeto hacia quienes confiamos en Prisa y en Skup. Sinceramente, no quiero volver a tener la menor relación con ustedes, y espero que me borren de forma automática.

Vale, una pena que seais tan irresponsables. Luego,¿ y como se da uno de baja en Eskup? Que ni eso ponen fácil. Y todos los trolls listillos siguen estando ahí. Adiós ElPaís, como la habeis acabado se c.gar.

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Sobre el blog

La figura del Defensor del Lector fue creada por la Dirección de EL PAIS para garantizar los derechos de los lectores, atender a sus dudas, quejas y sugerencias sobre los contenidos del periódico, así como para vigilar que el tratamiento de las informaciones es acorde con las reglas éticas y profesionales del periodismo. Puede intervenir a instancia de cualquier lector o por iniciativa propia.
Principios éticos del diario EL PAÍS

Defensora del lector

Lola Galán

se incorporó a la plantilla de EL PAÍS en 1982, tras una etapa como colaboradora del diario. Ha sido redactora de las secciones de España y Sociedad, y reportera de la sección Domingo. Entre 1994 y 2003 ha ocupado las corresponsalías de Londres y Roma. En los últimos años ha trabajado para los suplementos del fin de semana, incluida la revista cultural Babelia. Madrileña, estudió Filosofía en la Universidad Complutense y Periodismo en la Escuela Oficial de Madrid.

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