“Yo sobreviví a una visita a la fábrica de Jägermeister”. Así se titulaba el reportaje –con vídeo incorporado- que figuraba el 19 de mayo al pie de la portada de la edición digital de EL PAÍS. Era un artículo de la revista Tentaciones, en el que se relataba una visita a la fábrica donde se elabora el licor del mismo nombre. Un par de lectores me escribieron de inmediato para protestar por la frecuencia con la que, en su opinión, dicha marcha de bebida aparece en elpais.com. Ambos avanzan la sospecha de que se trate de publicidad encubierta. Algo absolutamente prohibido en EL PAÍS.