FOTO: Héctor Santos-Díez/ Bisimages
Donde se levantó este centro social la hierba crece en las aceras. No es que el barrio de San Pablo, en la periferia de Ferrol, esté meticulosamente cuidado y ajardinado, es que algunas de sus calles están por pavimentar. Sin embargo, aquí había un teatro, poco más que un cobertizo con cubierta de uralita, que servía para las fiestas, los juegos y los cantes de los vecinos. Fue mejorar las condiciones del cobertizo y comenzar los robos. El edificio de Ismael Ameneiros Rodríguez y Santiago Rey Conde (Ameneiros-Rey/ HH arquitectos), y Jacobo Fernández Malde obedece así a la idea de proteger lo poco que se tiene (el espacio vacío de un patio). Por eso un muro perimetral enclaustra el patio. En ese muro se han construido algunos pabellones para que continúen las reuniones, las clases de baile y las fiestas de los vecinos.
Las condiciones del Ayuntamiento de Ferrol exigían un bajo mantenimiento y una solución al problema de los robos en el futuro centro cultural y social. Las celosías del muro perimetral cumplen esa doble función de comunicar protegiendo, de dejar pasar la luz y la mirada pero no las manos. Además, aguantan bien el paso del tiempo y el roce diario. Así, las instalaciones auxiliares –cafetería, enfermería y despacho- han quedado recogidas junto a las aulas en ese perímetro que rodea el patio de juegos. Ese espacio abierto sirve además como acceso al centro.
El edificio tiene una sola planta, pero su geometría quebrada y el aprovechamiento de la inclinación de la cubierta sirven para que los espaciosganen altura. También para que el inmueble tenga más identidad que un cubo o un prisma, como los de las viviendas sociales que ocupan los vecinos.
La exigencia de bajo mantenimiento está resuelta con una factura compacta y austera. Es pobre pero está bien hecho. Y eso lo saca de la miseria. Son los espacios y es el cuidado acabado de los materiales más sencillos: el hormigón texturizado, los ladrillos esmaltados a cara vista o la madera de pino colocada cerca de las personas lo que refuerza el carácter cercano y generoso del edificio. Con un trabajo conjunto entre la administración, los vecinos –que se turnaron en la vigilancia- y los arquitectos, un edificio puede abrir una nueva puerta y convertirse en el escenario en el que la vida empieza a mejorar.
Presupuesto según arquitectos:742 €/m2 edificación, 329 €/m2 pérgola, urbanización y cierre de patio. Presupuesto contratación: 499.998 €.
Hay 3 Comentarios
Cuando la construcción es el acabado, no hay adorno, solo hay arquitectura.
Publicado por: Dani | 13/05/2013 8:46:48
El proyecto es del desaparecido estudio iterare arquitectura, slp (https://www.facebook.com/iterare) del que formaban parte los tres arquitectos nombrados en el reportaje, siendo Jacobo Fernández Malde el responsable principal del trabajo.
Publicado por: Filo | 12/05/2013 13:55:57
"La arquitectura es silenciosa –no habla–. Está hecha de materia, tenazmente impermeable a nuestras opiniones. Ajena a los jirones de la vida, con ella comparte sólo una sensación de lacerante y continua pérdida."
Luis Moreno Mansilla.
Creo que la mayoría de los arquitectos tendríamos que tener mas presente la idea contenida en esta cita. Muchas veces proyectamos imágenes, simplemente. En el mejor de los casos proyectamos espacios, pero espacios inmaculados, imaginados como si fueran algo fuera del tiempo. Este centro cultural del Ferrol parece haber sido concebido desde la conciencia de que envejecerá, desde la conciencia de que es materia y tiempo. Como dice Anatxu, seguro que las condiciones del encargo han ayudado a esa conciencia.
Publicado por: http://milbarcelonas.blogspot.com.es/ | 11/05/2013 19:50:38