Ilustración: Enrique Cortés
“El proyecto es para el arquitecto como el personaje para un novelista: le sobrepasa, debe esforzarse en no perderlo”. El que habla es Álvaro Siza. En 1994, en el texto Vivir una casa reflexionó no solo sobre la dificultad de pensar y dibujar una vivienda, también sobre las responsabilidades de habitarla. Para él “Vivir en una casa, en una casa auténtica, es oficio a jornada completa”. Estas son algunas de sus ideas:
“La idea que tengo de una casa es la de una máquina complicada en la que cada día se avería algo: bombilla, grifo, desagüe, cerradura, enchufe (…) Los cajones se atascan, se rompen las alfombras (…) Todas las camisas, calcetines, pañuelos… yacen rotos junto a la tabla de planchar cuya tela de protección presenta un aspecto lamentable. Vivir en una casa es un trabajo a jornada completa. Su dueño es al mismo tiempo bombero de guardia, enfermero y socorrista: domina todas las artes”.
Por eso para Siza es heroico poseer, mantener y renovar una casa. Hasta el punto de que propone dar un premio al mejor cuidador, aquel cuyo esfuerzo de mantenimiento no se note: el que mantiene la casa bien ventilada,
Construir una casa es una aventura. Precisa paciencia, coraje y entusiasmo. Habitarla es parecido. Lejos de la meta, es el principio de una nueva vida repleta de exigencia, cuidado, vigilancia, disfrute y entrega.
Hay 5 Comentarios
Buenísima la viñeta
Publicado por: Carlos | 13/08/2013 11:59:00
Chicos/as : la "vida" es un oficio a jornada completa !
Y Alvaro Siza un gran maestro...
Publicado por: QOTSA /EODM | 09/08/2013 14:33:11
totalmente de acuerdo con Jose y, por supuesto con Siza, "vivir en una casa es oficio a jornada completa"
Publicado por: render-arquitectura | 09/08/2013 11:33:02
Y pueden llegar a agotar. Hay casas que, como el título de la célebre película, no son para viejos. Las juveniles, llenas de escaleras y de complicados techos de vigas y pilares de madera vieja, al envejecer su dueño llegan a sobrepasar al otrora aguerrido arreglalolotodo. Dónde está la casa sencilla, sin mantenimiento o solo con mantenimientos interiores, de escasa importancia. Esa es la mía, mi sueño.
Publicado por: PPRodés | 09/08/2013 8:42:54
Ahora en nuestro verano las casas son un trajín que no para. Mi casa me recuerda un barco. Hora de subir las persianas, de bajarlas para parar el sol, de abrir las ventanas y que entre el aire, de cerrar las escotillas, bajar los toldos, hora de arriar las velas, todos al patio al levantarse, la hora de la cocina, la de la siesta, la de regar las plantas. Y así todos los días. La casa no se mueve pero el verano va pasando.
Publicado por: Jose | 09/08/2013 8:20:43