Preparativos del Día de la Mujer

El tráfico no era intenso. Llegué a mi oficina hacia las 8.00. Hubo un enfrentamiento entre la Guardia Nacional y un grupo de hombres armados en la calle al-Haifa desde las 6.00 hasta las 8.15. Oí intercambios esporádicos de fuego durante unos minutos. Los guardias nacionales arrestaron a 36 hombres armados, después de registrar la zona casa por casa. También desactivaron un coche-bomba en Bab Al-mudham, cerca de la Biblioteca Nacional.

Nuestros técnicos han empezado a reparar algunas ventanas que se rompieron el lunes con los ataques a la calle al-Mutanabi. Al fin he podido firmar un importante memorándum entre la Librería del Congreso de EE UU y la Biblioteca y Archivos Nacionales de Irak. El documento establece las bases de la cooperación entre las dos instituciones en el proyecto ‘World Digital Library’. El memorándum se completará con un acuerdo técnico que indica el equipo y la formación que se necesita para implementar el proyecto. Tengo puestas mis esperanzas en este proyecto para escanear una gran parte de nuestras colecciones de valiosos periódicos y revistas históricas antes de que se pierdan para siempre. El color de los periódicos se ha tornado amarillo oscuro, y se han vuelto extremadamente frágiles. En otras palabras, estas colecciones están a un paso de la destrucción total. Esta situación es producto de varios factores, principalmente la negligencia de los antiguos directores, la inexperiencia del personal, los efectos negativos de los incendios de abril de 2003 y los cortes de electricidad, que nos han impedido mantener una temperatura y humedad adecuada en las zonas de almacenamiento.

Antes de irme de la oficina, tres miembros de la asociación de mujeres al-Ferdos me invitaron a su fiesta para celebrar el Día de la Mujer. La celebración del Día de la Mujer se ha convertido en parte de las tradiciones de la Biblioteca desde mi nombramiento en 2003. La asociación al-Ferdos fue fundada hace dos años por un grupo de bibliotecarias y documentalistas para defender sus derechos y tener voz en la administración de la Biblioteca Nacional. Es otro experimento, que ha ayudado a elevar la confianza y la moral de mi personal femenino, en un país en el que los valores masculinos dominan totalmente todos los aspectos de la vida.

A las 15.00 llevé a mi mujer y a mi hijo a casa de mis suegros. Ella quería pasar algunos días con sus padres. Me quedé 40 minutos y después me marché a ver a mis amigos. El día antes mi mujer había preparado varias comidas ¡y me explicó lo que debía comer cada día!

Después del boletín de noticias de la noche, el viceministro apareció en un programa cultural, en donde renovó su ataque al ministro de Cultura.

Comments

[Publicado por: Elyse.BlackRose]

Aunque no etsoy deacuerdo con firmar tratados con EEUU, estoy deacuerdo en que hay que preservar la cultura, los libros, esa historia que callan los dictadores con fuego.