Fue un mal día desde el principio de todo. La Biblioteca Nacional sólo tuvo electricidad durante una hora y media.
Me reuní con un técnico del Ministerio de Cultura que ha sido asignado a la tarea de reparar nuestro generador. Inicialmente rechacé su propuesta de reparar las partes dañadas del generador, tales como el motor, en lugar del sustituirlas. Me explicó que primero necesitamos la aprobación del ministro, y después tenemos que pedir a las empresas locales oficiales que hagan sus propuestas. Aunque el proceso durará semanas, he decidido que se sustituyan las partes dañadas. Esto significa que perderemos los 39.000.000 de dinares adjudicados para la reparación del generador.