Sobre el autor

Miguel Gener

Fotoperiodista, editor gráfico, productor, curioso y ojo público en EL PAÍS hasta 2011. Trabajó en el diario, en Tentaciones, en El Viajero y en otros suplementos como Tierra, Salud, Motor...Veinticinco años merendando adrenalina, deprisa, deprisa, surfeando una enorme ola de papel.

Sobre el blog

Días por donde discurre el
pasado.
Días por donde discurre el
presente.
Días abiertos a lo inesperado.

Un blog de fotografías marcadas en la mesa de luz de mi memoria; un juego cruzado de palabras e imágenes; una evocación personal de mis vivencias en el periodismo.

Contacto

En Twitter: @miguelgenerg

En Facebook: Miguel Gener

E-mail: @gmail.com

Archivo

agosto 2014

Lun. Mar. Mie. Jue. Vie. Sáb. Dom.
        1 2 3
4 5 6 7 8 9 10
11 12 13 14 15 16 17
18 19 20 21 22 23 24
25 26 27 28 29 30 31

Días de Fotos

Más que mil palabras

Por: | 25 de abril de 2014

17 de noviembre de 2005. Ermita de Tiatel, México. Verónica celebra "La Quinceañera", tradicional misa de agradecimiento por el paso desde la infancia a la vida adulta. Una fiesta de puesta de largo en toda regla junto al drama del funeral de cuerpo presente, en su cajita blanca, por Guadalupe y Francisco: dos gemelos recién nacidos y fallecidos a las pocas horas. Fugaz momento de historias cruzadas vividas por las familias, con la naturalidad de quien ha padecido de todo.

Ceremonia de mayoria de edad junto a funeral de cuerpo presente. Méjico D.F.

Tiatel-Xochitenco (innegable ciudad de la basura) era un barrio formado al abrigo del gigantesco vertedero de Neza 1, en los suburbios de México DF. Un espacio irreal, un olor degradado y dulzón, que se acantona en la garganta y corrompe espíritus. Diez mil almas viviendo en la mierda y por la mierda,  aprovechando y apreciando lo despreciado por otros. Trabajo duro, auténticas historias de culebrones mejicanos sin glamour, sin sueños, sin happy end: violencia, droga, pobreza, caciques y mansedumbre.

Como en todo novelón que se precie, en las historias reales también hay esperanzas. Cuates como el jesuita Roberto Guevara, oficiante en la doble ceremonia de la fotografía, "El padre de los Basureros"; ahí no más: metiche, buenote, claridoso y valiente, dispuesto a pelear contra la resignación con sermones amotinados; auténticas arengas de cambio, compromiso y espíritu de lucha, para que felices niñas vestidas de princesas, sigan al menos soñando de adultas, con un futuro si no rosa, algo mejor.

Y aquí cierro con una imagen y menos de mil palabras, la perpetua (como una condena) telenovela..."Sí, ya sé, Armando Emiliano Montesinos del Valle; los ricos también lloran, pero los pobres lloran mucho más".

¿Continuará...?

 

 

 

La sexagenaria

Por: | 10 de abril de 2014

El jueves pasado, hace ya una semana, sucedió algo absolutamente trivial: un calentón de un personaje público con la policia. Con un "he cometido un error, lo siento mucho y asumiré lo que corresponda", hubiera sido suficiente. En vez de eso, escucho y leo por todas partes de su periplo mediático, los peros de Esperanza Aguirre. Pido perdón por aparcar en el carril bus de Gran Vía, pero, apenas fueron unos segundos…Perdón por tirar una moto de los funcionarios, pero, estaba muy mal aparcada…Perdón por no atender como debería a los requerimientos de la autoridad, pero, eran  agentes de chichinabo e “inmovilidad”, unos viciosos de las multas, unos machistas… ¿Se nos estará haciendo antisistema la lideresa?

1

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Rueda de prensa de Esperanza Aguirre, ministra de Educación y Cultura. Madrid, 1997

 

 

 

 

Me estaba reprimiendo de escribir algo, hasta que en sus últimas justificaciones de Kafka enamorado de sí mismo, ofreció dos nuevas perlas que ya no puedo pasar por alto. ¿Hay en España problemas más importantes que multar a una sexagenaria con su coche particular? Doña Esperanza, puedo entender titulares tipo: “Ejecutan el desahucio de una pareja de sexagenarios”. No es correcto, pues muchos sexagenarios pueden ampararse perfectamente, ser vigorosos y pudientes, pero lo entiendo. Usted no cumple el criterio, bajo ninguna perspectiva, de viejecita indefensa. Usted es grande de España, o grande consorte, que no sé muy bien cómo son estas cosas ni qué significan, pero que suena más chulo que un chotis. Usted ha sido ministra, presidenta del Senado, presidenta autonómica…Salió tan pancha de un atentado, de las coñas de Caiga quien caiga, del tamayazo, de un accidente de helicóptero, de desafíos a su presidente…Usted ha obligado a Gallardón a pedir ayuda al primo de Zumosol, porque sabía que a malas, sin darse a la “Botella”, no le dura ni cinco minutos...

Venerable señora, no pierda la perspectiva, los problemas los conocemos todos y los padecen muchos. Lleva una semana repartiendo patadas cada vez que pide perdón por su problemilla colmado de privilegios. ¡Tonterías las justas!

 

Los grandes:

Abbas

 

 

El diablo dijo sí

Por: | 02 de abril de 2014

Corazones…Assisi, hija de la embarazada Jade, hija de Bianca Jagger, dará a luz a su primer vástago, en el presente mes de abril. Los Rolling Stones vuelven a Madrid el próximo junio y para entonces, la mítica banda de septuagenarios malos, tendrá un bisabuelo entre ellos. ¡Satisfaction!

Jagger

27 de junio de 2003. Estadio Vicente Calderón, Madrid. Por un lado este fotógrafo de entonces 42 primaveras y buen estado físico, y por el otro, “Sus Satánicas Majestades” de unos 60 tacos de media. La rutina es concentrar a los gráficos y adoctrinarlos: dos canciones y fuera, un espacio delimitado, nada de meteorismo, evitar el flash, prohibidas armas o minas antipersonales en la bolsa. Ojito con  el primer tema en el que  sólo se puede fotografiar al público. Proceso vigilado en todo momento por un grupo de fornidos pastores.

Es la hora. Entramos en nuestra zona fronteriza a un metro del escenario, como si de Apocalypse Now se tratara: decibelios desbocados, ráfagas de batería, bombas de luces de racimo, un público en trance... Segundo tema: ahí están los abuelos del rock; sobre todo sigo a Mick Jagger. ¿Pero qué come este tío? ¿Qué pasa con esta banda y la biología? Sólo de mirar se me agarrota el cuello y gime mi tobillo artrósico. ¡Cómo se menea: coxis, saltos, muslos, cadera, muñecas, cuello, rodillas, codos, brazos…! Acaba la canción con un alarde de movimientos imposibles, acaba extenuada mi cámara autofocus. Salgo parpadeando compulsivamente al borde de una crisis entre epilepsia y autoestima. Al final, marcho con la sensación de que el escenario olía a despedida. ¿O era a azufre? ¿Volverán?...Volvieron a Madrid en 2007. ¿Es posible que vuelvan otra vez? Parece que el diablo dice sí.

 

Los grandes:

Vivian Maier

 

El País

EDICIONES EL PAIS, S.L. - Miguel Yuste 40 – 28037 – Madrid [España] | Aviso Legal