Elegía a Mohamed Abdelaziz

Por: | 02 de junio de 2016

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Mohamed Abdelaziz

Esta entrada ha sido escrita por Salka Embarek.

Querido Presidente, te has ido el último día de mayo, el mes en el que conmemoramos la creación del Frente Polisario y los años de lucha del Pueblo Saharaui. Te has despedido en cuerpo, pero no en alma, justo cuando comenzamos los preparativos del 9 de junio, el Día Nacional de los Mártires. El destino nos ha dejado clara su señal.

Te has ido de la misma forma que viviste, con humildad y  discreción, como solo los grandes hombres saben hacerlo, los líderes reconocidos, dejando un vacío en nuestros corazones que solo encontrará alivio en la lucha por la independencia, el único motivo de tu vida, lograr la libertad de todo tu pueblo.

Querido presidente, nuestro hermano y compañero, hoy me conmuevo ante el sacrificio que durante más de cuarenta años has hecho por tu pueblo. Solo luchando por nuestra causa justa te reconozco, dando más de lo que se puede dar, porque tú no  pensaste en otra cosa que no fueran los demás.

Querido amigo, hemos conocido tu fortaleza como ser humano, tu integridad y tu convencida firmeza, valores que no escondieron tu carácter humilde, alegre y afectuoso. Fuiste un político de gran talla, un combatiente heroico y un diplomático experimentado, que supo dirigir con maestría a su pueblo, sin escatimar un solo esfuerzo para lograr que nuestra causa alcanzara su victoria. Incluso herido de guerra o soportando el sufrimiento de una enfermedad terminal, nunca te rendiste, nunca abandonaste, jamás pensaste en descansar de la lucha, siempre en el lugar que te correspondía, sin quejas ni dudas de tu responsabilidad.

Tu formación y bagaje no impidió que entre los jóvenes fueras el joven más entusiasta, y sentado con los ancianos, fueras el hijo educado y respetuoso. Tu sacrificio y el honor que has demostrado en esta travesía como presidente, te ha hecho merecedor de elogios y reconocimientos por todo el mundo. Has logrado abrir tantos caminos y tan sólidos, que ni muriendo mil veces podrían cerrarse.

Tu simpatía, reconocimiento y apoyo al movimiento solidario hacen que hoy tu pérdida se sienta en muchos rincones del mundo.

Tus puertas siempre permanecieron abiertas para todos los que quisieron hablar contigo, porque tu cargo no fue impedimento para cumplir con tus responsabilidades hacia el huésped.

Tu legado es todo lo que fuiste y esa es nuestra herencia, querido amigo, estimado hermano.

Te escribo y te hablo con la convicción de que tu alma nos seguirá acompañando por el recto camino hacia la independencia y la libertad.

 Mi admirado presidente, tu alma la llevaremos con orgullo para siempre, todos los saharauis.

Salka Embarek. En este día, 31 de mayo de 2016.

Hay 1 Comentarios

EN LA MEMORIA
...Descansa en paz,Mohamed Abdelaziz,porque tú no has muerto,ya que tu recuerdo queda en la memoria de los hombres y las mujeres de tu pueblo,el Sáhara,la tierra que te vio nacer,por cuya libertad luchastes y en la que permanecerás siempre...pero un Sáhara independiente y libre,no subyugado y expoliado,como lo es ahora.J.M.

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Y… ¿dónde queda el Sáhara?

Sobre el blog

Intentar mostrar la riqueza de la cultura saharaui. Ese es el objetivo de este espacio. Una cultura nacida de la narración oral, de los bellos paisajes del desierto, de las vidas nómadas y el apego a la tierra, de su origen árabe, bereber y musulmán, de sus costumbres únicas y de la relación con España que se remonta a más de un siglo. Una cultura vitalista, condicionada por una historia en pelea por la supervivencia desde 1975. Coordina Sukeina Aali Taleb

Sobre los autores

Sukina Aali-Taleb Hija del exilio, Sukina Aali-Taleb nació en Madrid por casualidad, de padre saharaui y madre gallega. Es miembro del grupo de escritores La Generación de la Amistad Saharaui y coautora del libro "La primavera saharaui, los escritores saharauis con Gdeim Izik", tras los acontecimientos de El Aaiún, en 2010. Periodista y profesora de Lengua Castellana y Literatura en institutos públicos de Madrid. Como no puede ser de otra manera, apoya al Frente POLISARIO en proyectos de ayuda a su pueblo, refugiado y abandonado a su suerte en Tinduf (Argelia), desde hace cuatro décadas.

Roberto MajánRoberto Maján, ilustrador. Le gusta decir que fue el último humano nacido en su pueblo; piensa que eso lo hace especial. Y que su abuela se empeñó en llamarle Roberto en memoria de Robert Kennedy asesinado cuatro días antes. En la época en que nació y se bautizó, el Sahara era español, en el mal sentido de la palabra. El lo sabía por las cartas que recibía de su tío Ramón, destinado allí en su servicio militar. Los sellos que las franqueaban prefiguraron el universo imaginario que tratará de recrear en las imágenes de este blog.

Bahia Mahmud Awah Bahia Mahmud Awah. Escritor, poeta y profesor honorario de Antropología Social en la Universidad Autónoma de Madrid, natural de la República del Sahara Occidental. Nacido en los sesenta en la región sur del Sahara, Tiris, la patria del verso y los eruditos. Cursó estudios superiores entre La Habana y Madrid, donde reside. Pertenece al grupo de Escritores Saharauis en lengua castellana.

Willy Veleta Willy Veleta. Willy Veleta consiguió su licenciatura de periodismo de una universidad estadounidense (ahí queda eso) y ha trabajado en todos los canales privados de TV en España… de los que huyó cuando se dio cuenta de que querían becarios guapos. Ahora es profesor de periodismo en inglés y prepara su tercer libro, una novela sobre los medios.

Liman Boicha Liman Boicha. Se licenció en Periodismo en la Universidad de Oriente en Cuba. Después de una larga ausencia regresó a los campamentos de refugiados saharauis y durante cuatro años trabajó en la Radio Nacional Saharaui. Actualmente reside en Madrid. Ha publicado Los versos de la madera y ha participado en varias antologías de poesía saharaui: Añoranza, Um Draiga, Aaiún, gritando lo que se siente, entre otras. Forma parte del grupo poético Generación de la Amistad Saharaui y es miembro de la Asociación de Escritores por el Sahara-Bubisher.

Larosi Haidar Larosi Haidar. Tras el alto el fuego, se instaló en Granada, donde se licenció y doctoró en Traducción e Interpretación. Actualmente es profesor de esta misma disciplina en la Universidad de Granada y ha publicado varios trabajos relacionados con la cultura saharaui. También ha participado en varias antologías de poesía saharaui.

1000 voces para un poema

SANKARA SIDATI2
Poema de Bahia MH Awah, escritor, poeta y antropólogo. Imagen del archivo RASD, el poeta y diplomático saharaui Mohamed Sidati y el desaparecido líder africano Tomás Sankara en 1982 visitando a la República Saharaui y a los campos de refugiados saharauis. 

África vuelo California BA 279

En homenaje a mis hermanos y hermanas del

África negra que surcan por sus

sueños atravesando desiertos y

océanos por un mundo mejor.

 

Lejos y sin cosechas, allí dejo

mi África sin pan.

 

Repetía una y otra vez cuando despedía

tierra firme, su tambor, su mortero y su viejo arado.

Náufrago,

se marchó en busca de otros horizontes,

y el África atrás despedía, sumergida en tristes tinieblas,

de hambrunas,

de guerras de tripas,

de cayucos y pateras,

hundidos con todas las quimeras de la tribu.

 

El pan que un día partió para traer

costaba tanto como el caviar

del “Masa Time Warner Center de Manhattan”.

 

Bububakar, no dejó de llevar consigo un fardo

lleno de ilusiones,

se lo aconsejó el jefe de los saimara,

se lo aconsejó el chej de los bambara,

se lo aconsejó el patriarca de los zulú,

para que el día de la vuelta,

“si Dios navega

en tu habitual deriva de cada mar

viera su nueva chabola rebosando pan,

trigo, maíz, arados y el timbal de tambores”.

 

Desde mi ventanilla busco África y delibero para sofocar

la ira de mi conciencia.

 

Veo una Europa egoísta,

envuelta en oscuras nubes del porvenir,

veo gigantes rascacielos,

veo chimeneas de fábricas triturar mi virgen maíz,

y veo otras ensayar armas que destruyan

los verdes campos de mis trigales,

y al ver otras y otras aldeas de espigas segadas

el dolor remueve mis intestinos vacíos,

esos de quienes llegan la deriva.

 

Preocupados los ancianos del clan,

dicen, de España esta vez llegan al Atlas

blindados de guerra en vez de granos de cebada

para hacer el cuscús del Rif,

y de Francia estorban la vida muchos soldados,

que no dejan de molestar ¡Eh, tu outre ici!

En pleno vuelo,

no dejo de pensar en el viejo continente,

rezo para que esa humanidad vuelva a emerger

otra vez tras este siglo sin siembras

de maíz,

sin arrozales y sin el sagrado trigo de los hijos de Caín.

 

Ya sobre las nubes del Atlántico

siento franqueadas las fronteras,

y rotos los sueños,

los cayucos no cesarán de atravesar estos mares

porque creen que otro mundo más justo es posible.

¿A dónde vas humanidad de tez blanca?

De ojos miopes, azules, oscuros y verdes,

de hurtados cerebros enfermizos,

de vacíos y retuertos vocabularios

de postizos principios y corruptos amigos,

su mundo es tan alejado,

separado y diferente en valores de lucha,

de África y de la franca libertad al mío.

 

Y como africano le confieso que

ni una vez me inclino a la mano que se besa,

ni en mi corazón tengo lugar para cubrir al malvado.

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