¿Llegará el 'efecto Hollande' a Latinoamérica?

Por: | 09 de mayo de 2012

El futuro presidente de Francia, el socialista François Hollande, ha prometido en la campaña electoral que subiría el tipo máximo del impuesto a la renta a las personas físicas (IRPF) hasta el 75%, un nivel similar al que regía en ciertos países desarrollados en los 80. Hollande quiere quebrar así una tendencia mundial, que también incluyó a Latinoamérica, de rebajar los tipos máximos de este tributo de los últimos 30 años en una contienda de países por mostrarse más atractivos para los empresarios. Hace poco tiempo me tocó entrevistar al ministro de Hacienda de Colombia, Juan Carlos Echeverry, que justificaba que el Gobierno de Juan Manuel Santos bajará el tipo máximo del 33% a una cifra aún no especificada porque “está en el tope superior si se la compara con Europa o EE UU, y todo el mundo se mueve hacia abajo”. Pero no todos sus colegas opinan que los tipos máximos del IRPF sean altos en Latinoamérica.

 

En un artículo publicado en la nueva edición de la revista Voces en el Fénix, dos economistas de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Juan Pablo Jiménez y Andrea Podestá, advirtieron de que la paulatina reducción del tipo máximo del tributo a la renta en las últimas dos décadas en la región lo había situado “por debajo de los niveles internacionales”. En los 80 las alícuotas llegaban hasta el 49,5% para personas físicas y al 43,9% para sociedades y en la actualidad se sitúan ambos en una media del 27%. La mayoría de los países cobra entre el 25% y el 35%.

A finales del año pasado comentábamos en este blog un informe de la consultora KPMG sobre los impuestos a los ricos en el mundo. En él se precisan los tipos máximos del IRPF en diversos países de la región en 2011: Argentina, 35%; Brasil, 27,%; Costa Rica, 15%; Ecuador, 35%; Guatemala, 31%; Honduras, 25%; México, 30%; Panamá, 25%; Perú, 30% y Uruguay, 25%. La media mundial está en el 29,5%, pero el tipo máximo se encuentra en niveles más altos en EE UU (35%) y Europa: Suecia, 56,6%; Dinamarca, 55,4%; Holanda, 52%; Austria y Bélgica, 50%; Finlandia, 49,2%; Irlanda, 48%; Portugal, 46,5%; España, Alemania y Grecia, 45%; Italia, 43% y Francia, 41%. Reino Unido cobra hasta el 50%, pero su primer ministro, David Cameron, quiere bajarlo al 45%.

Otro problema del IRPF en Latinoamérica radica en el nivel de ingresos a partir del cual debe pagarse el tipo máximo. En los países desarrollados lo abonan los que perciben tres o cuatro veces el PIB per cápita. En Latinoamérica, los que ganan diez veces la renta per cápita, que de por sí es más pequeña que en sociedades ricas.

Podestá y Jiménez, que también es profesor de la Universidad de Columbia, recuerdan que la carga tributaria de Latinoamérica representa la mitad de la de los países ricos que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y que el peso de los impuestos directos (a la renta y al patrimonio) sobre el total de la recaudación de gravámenes es de apenas el 3,3% del PIB, frente al 9% en la OCDE. La débil imposición directa en la región no solo obedece, según los autores, a los reducidos tipos del IRPF sino también a las estrechas bases imponibles (es decir, hay muchas excepciones al tributo) y los altos niveles de fraude.

“La estrecha base imponible se relaciona tanto con el generoso tratamiento en materia de deducciones personales y ganancias no imponibles como con los numerosos regímenes de exención o beneficios tributarios”, dicen los autores. En los países de Latinoamérica se comienza a pagar el impuesto a la renta cuando las personas ganan el equivalente a 1,5 veces el PIB per cápita. En cambio, en Europa Occidental pagan los que tienen ingresos superiores al 0,30% de la renta personal media. El problema radica en que muchos latinoamericanos carecen de los recursos suficientes como para quedar incluidos en el impuesto. Si tuvieran un mejor pasar económico, tributarían.

 

El fraude en el impuesto a la renta en Latinoamérica llega al 51% de lo que debería pagarse. En el IVA solo alcanza al 27%.

Como la recaudación impositiva resulta menor a la que debería ser, también es inferior el gasto público. Los Estados de los países latinoamericanos gastan el equivalente al 22% del PIB, frente al 34% en países desarrollados, pese a que sufren mayores urgencias en cuanto necesidades sociales, de equidad e infraestructura. Al igual que la recaudación, también mejoró el gasto público desde 1990 en toda la región: subió 5 puntos porcentuales del PIB como media. Ha subido la inversión pública y ha caído el pago de intereses de la deuda. La mayor redistribución del ingreso se practica mediantes subsidios, que alcanzan al 7% de la economía regional, con tasas de entre el 12% y el 14% del PIB en Argentina, Brasil, México y Venezuela.

Los economistas de CEPAL consideran que las variables fiscales de Latinoamérica deben seguir mejorando para continuar reduciendo la inequidad. Por eso, señalan que buena parte de los ingresos públicos de la actualidad están demasiado atados a los volátiles y por ahora altos precios de las materias primas, como los hidrocarburos en Bolivia, Colombia, Ecuador, México y Venezuela, los minerales en Chile y Perú y los alimentos en Argentina.

Hay 10 Comentarios

Muy buenooo!!!

Donde debería llegar el "efecto Hollande" es a ESPAÑA. Por qué debería hacerlo a tierras tan lejanas????? Tal vez España se contagiara un poco. Y se dieran cuenta de cómo se está recargando la crisis, en la espalda de los que más sufren y menos tienen. Y adquirieran más templanza, humildad e idoneidad.

Por favor donde va este y hasta donde quiere llegar a sofocar a hasta que llegue a suda américa la sangre de los Franceses.

Mujeres Chaqueta Belstaff

Ventas y bajos Con Envío Gratuito UNA región de español, cualquier

Nuestra tienda: http://www.belstaffsale.co.uk/

Roger Vivier Flats

Roger Vivier Heels

http://www.rogervivierflats.co.uk/

Bolsos de diseño venta barata

Nuestra tienda: http://www.bolsosoutlet.net/

Quousque tandem no se va a recuperar la carga impostiva que había en ESP para los tramos más altos?
http://bici-electrica.blogspot.com/

En nuestra opinión, las propuestas realizadas por François Hollande no creemos que tenga un efecto en el corto plazo sobre la política fiscal de países lationamericanos. Creemos, tal y como señala el artículo,
que existe una reducida política de persecución y control de pago de impuestos en estos países lo que contribuye a un incremento del fraude fiscal que afectará principalmente a dichas economías en el largo plazo, dado que sus ingresos públicos están muy vinculados a las exportaciones de materias primas "commodities". Sin embargo, a lo largo de los últimos años esta situación una menor presión fiscal sobre las empresas ha contribuido al establecimiento de empresas en dichos mercados lationamericanos, les recomendamos a las Pymes la lectura del siguiente artículo
http://www.legorburoconsultores.es/blog.aspx?where=8&id=1&art=158, que muestra el potencial del mercado brasileño como motor del crecimiento de las economías latinoamericanas.

Juega al mejor simulador político, económico, y militar; gratuito y por navegador web:

http://xurl.es/n2yw0

Oh Oh, Chile tuvo un crecimiento del 6% el año pasado y este va para el 5,5%. No está mal para ser efecto de la mala distribución de la carga impositiva.
Tal vez la diferencia es que aqui es muy dificil eludir los impuestos o no pagarlos.
Hay dos cosas inevitables, los impuestos y la muerte.

Vamo a ve Pepe, es que no te das cuenta de que en latinoamérica no paga impuestos casi nadie y lo que paga es poco y que no pagan los que más tienen, no ves la correlación entre esto y el subdesarrollo?

El impuesto confiscatorio es el sueño dorado de politicos e izquierdistas. Pero tiene un resultado negativo; Es disuasivo del empeño en enriqueserse legalmente, y por lo mismo, disminuye la inversión empresarial. Por otro lado, la trasparencia en la aplicación de los impuestos es muy opaca en latinoamerica.

Los comentarios de esta entrada están cerrados.

Eco Americano

Sobre el blog

Novedades, tendencias y debates sobre el devenir de la economía y el desarrollo de Latinoamérica y los latinoamericanos.

Sobre el autor

Alejandro Rebossio es periodista. Su especialidad es la economía y trabaja en la corresponsalía de El País en Buenos Aires. Coautor del libro Estoy verde. Dólar, una pasión argentina (Aguilar) y Vaca Muerta (Planeta) junto con Alejandro Bercovich.

Eskup

El País

EDICIONES EL PAIS, S.L. - Miguel Yuste 40 – 28037 – Madrid [España] | Aviso Legal