Diversas organizaciones sociales de Latinoamérica han alzado su voz en estos días contra los ejes del debate que comenzará hoy en Río de Janeiro en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sustentable, la cumbre llamada Río+20. Veamos aquí algunas de esas reclamaciones.
La organización Amigos de la Tierra América Latina y el Caribe ha elaborado un manifiesto con la Alianza Biodiversidad y el Movimiento Mundial por los Bosques Tropicales en el que tachan a la llamada economía verde que pretende impulsar la ONU como de “asalto final a los bienes comunes”. “Enfrentamos tiempos difíciles. Pero somos parte de un número creciente de personas, organizaciones, comunidades y pueblos que vamos tomando conciencia que lo que el mercado explotó y destruyó no puede ser reparado por una expansión del mercado. Somos parte de una mayoría que tiene en sus manos la experiencia y la disposición para fortalecer o poner en marcha las soluciones reales, desde formas de vida digna que no dependen del consumo ni las ganancias desenfrenadas, hasta sistemas locales de agricultura y alimentación en base a la soberanía de los pueblos y la permanencia de los pueblos indígenas y campesinos en los espacios rurales”, enuncian las tres organizaciones.
En Argentina, el Movimiento Nacional Campesino Indígena dijo “no al capitalismo verde”. “El desarrollo no ha sido sustentable ni la economía capitalista, verde. Es tiempo de soberanía alimentaria y de la reforma agraria integral. La economía verde es una falsa solución, o más bien una nueva estrategia de acumulación del capital. Proponemos la agricultura campesina que enfría el planeta y alimenta a los pueblos”, pregonan los campesinos e indígenas de Argentina. En este país, la Red Nacional de Acción Ecologista destaca que al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner rechace la llamada “economía verde”, pero califica su postura de “tremenda hipocresía” y “profunda contradicción”.
La Red por una América Latina Libre de Transgénicos pidió a los líderes reunidos en Río+20 que “no se permita el maquillaje verde de los trangénicos bajo la argucia de una supuesta vía campesina”, “se frene definitivamente la expansión” de estos cultivos en la región y reparen a los presuntos afectados por el modelo de agricultura basada en semillas modificadas genéticamente. En su proclama, la red carga contra las multinacionales de semillas transgénicos, como Monsanto, Syngenta, DuPont, Dow, Bayer y BASF.
Organizaciones defensoras de la agricultura familiar de Brasil, Nicaragua, Colombia, Bolivia y de países de otros continentes han elaborado una lista de 20 medidas que podría adoptar Río+20 para solucionar los problemas medioambientales mediante los cultivos. Estas políticas incluyen medidas para transformar la “cadena” alimentaria mundial en una “red”, la reducción de la “huella ecológica” de la agricultura y la innovación y diversificación de la producción.
“Liberemos a la ONU de la cooptación empresarial”, es el lema de una campaña que comenzó a principios de junio. "Queremos que reduzcan el cabildeo de las empresas en la ONU, que pongan fin a las asociaciones entre la ONU y las empresas", advierten una serie de organizaciones que han adherido a la campaña en todo el mundo, incluidas algunas de la región anfitriona de Río+20, como Jubileo Sur/Américas, el Servicio de Justicia y Paz (SERPAJ) en América Latina, la boliviana Fundación Solón, Planete Amazone, el brasileño Grupo de Mulheres Maria Quitéria y el Comité Resistencia y Dignidad Adolfina Villanueva, de Puerto Rico.
"Consideramos que el capital está organizándose para apropiarse de los territorios de los pueblos del mundo para transformar a la naturaleza en una mercancía más, aumentando las bases de explotación y privatización", enunció la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo-Vía Campesina. En esa misma dirección apunta la Sociedad Científica Latinoamericana de Agroecología.
En la Cumbre de los Pueblos paralela a la de jefes de Estado y de Gobierno, el teólogo y filósofo brasileño Leonardo Boff se ha sumado al coro de voces críticas. "El documento cero de la ONU para la Río+20 todavía es rehén del viejo paradigma de la dominación de la naturaleza para extraer de ella los mayores beneficios posibles para los negocios y para el mercado. Como alternativa a esta economía de devastación, si queremos tener futuro, necesitamos oponerle otro paradigma de economía de preservación, conservación y sostenimiento de toda la vida", reclama Boff.
Hay 2 Comentarios
debemos debatir +
Publicado por: Social | 14/01/2016 4:20:37
ES UNA ESTAFA………………………………………………
STOP HOMOFOBIA EN AMERICA LATINA…………………
SOLIDARIDAD…………………………………………………………http://www.junglerias.com/2012/06/justos-x-pecadores.html
Publicado por: JUNGLERX | 23/06/2012 17:35:52