La mayoría de Latinoamérica sostiene el crecimiento, pero Brasil y Argentina lo reducen, según la CEPAL

Por: | 03 de octubre de 2012

El lento crecimiento de Brasil y Argentina en 2012 llevará a que Latinoamérica en su conjunto desacelere su expansión, del 4,3% de 2011 al 3,2%. Este es el pronóstico que difundió ayer la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Según este organismo de Naciones Unidas, Brasil crecerá el 1,6% y Argentina, el 2%. El gigante sudamericano venía de expandirse el 2,7% el año pasado y la tercera economía latinoamericana, el 8,9%, según su Gobierno, o el 7%, según las consultoras privadas.

 

La CEPAL atribuye la ralentización del conjunto de la economía latinoamericana al deterioro del contexto internacional, entre la recesión europea, el tenue crecimiento de EE UU y la desaceleración de China, pero también la adjudica a “elementos particulares de los países”. No obstante, no precisa qué le ha sucedido exactamente a Brasil y a Argentina para que crecieran menos que el resto de la región. Algunos economistas consideran que estos dos países han adoptado medidas que desalentaron la actividad económica, como el ajuste fiscal y monetario de Brasil en 2011 o los controles cambiarios con su consiguiente impacto en el mercado inmobiliario en Argentina.

La agencia que dirige la mexicana Alicia Bárcena y que históricamente se ha diferenciado por su pensamiento heterodoxo destaca que, pese a la crisis de los países desarrollados, la mayoría de las economías latinoamericanas verá cómo sus PIB mantienen el mismo nivel de 2011 o apenas lo rebajan. Incluso algunas aumentarán más del 5%. Unas son de Sudamérica, pese a que esta subregión depende más de los precios de las materias primas, ya no tan boyantes por la desaceleración china. Se trata de Bolivia (5%), Chile (5%), Perú (5,9%) y Venezuela (5%). Otras son de Centroamérica, más dependientes de la demanda estadounidense, como Costa Rica (5%), Nicaragua (5%) y Panamá (9,5%), donde también influyen las obras de ampliación del canal interoceánico.

Colombia crecería el 4,5%, igual que Ecuador y República Dominicana, donde el ingreso de divisas por el turismo norteamericano reviste importancia. Detrás aparecería México, más dependiente de EE UU, con una expansión del 4%. Guatemala y Uruguay -cuya suerte está atada a Brasil y Argentina- estarían en el 3,5%, apenas por encima del 3,2% de Honduras. Cuba se situaría en el 3%. El Salvador se expandiría solo el 2% y Paraguay, afectado por una fuerte sequía, sería la única economía de la región que se contraiga, un 2%.

El ritmo de crecimiento de la mayoría de los países latinoamericanos en 2012 es la envidia de las economías europeas. Pese al deterioro internacional, América Latina mantiene su expansión por la fortaleza de la demanda interna, sobre todo del consumo y, en menor medida, de la inversión. La reducción del paro, la mejora en la calidad del empleo (trabajadores que consiguen empleadores que les hacen las contribuciones a la Seguridad Social) y el aumento de las nóminas han contribuido a que los latinoamericanos cuenten con más dinero y eleven su consumo, lo que compensó la debilidad de las exportaciones. Las ventas externas a la Unión Europea cayeron en el segundo trimestre de 2012, mientras las destinadas a EE UU y China reducían su ritmo de incremento.

Otros factores que alentaron la expansión económica han sido los aumentos del crédito y de las remesas provenientes de EE UU. En cambio, los giros de dinero de inmigrantes colombianos y ecuatorianos en España sufrieron una caída en la primera mitad del año.

 

Sufren los sectores exportadores, desde los agrícolas y mineros hasta los industriales, mientras se expanden los de servicios, que son clave en la creación de empleo. No por nada la CEPAL prevé que el paro latinoamericano disminuya del 6,7% en 2011 al 6,5% en 2012.

Para 2013, serían precisamente Brasil y Argentina los motores de la aceleración del crecimiento latinoamericano, siempre y cuando no empeore la crisis europea. La CEPAL predice un alza del PIB regional del 4% el año próximo, con Brasil alcanzando esa misma cifra  y Argentina, un 3,5%. México se mantendría en el 4%. Otras economías se desacelerarían levemente. Chile, que deberá afrontar elecciones presidenciales, crecería el 4,8%. Colombia, el 4,5%; Perú, el 5,5% y Venezuela, después del impulso fiscal del actual año electoral, el 3%.

“El desempeño económico de América Latina y el Caribe en 2012 y 2013 está sujeto en buena parte a la forma que tomen los procesos de ajuste de los países desarrollados así como la desaceleración de China, pero también dependerá de la propia capacidad de respuesta de la región”, declaró Bárcena en la presentación del estudio, en Santiago de Chile. A diferencia de las crisis anteriores a la mundial de 2008/2009, en esa oportunidad Latinoamérica pudo desplegar una serie de medidas para contrarrestarla, desde la expansión del gasto, la rebaja de impuestos, la disminución de los tipos de interés, la depreciación de las monedas, la protección de los puestos de trabajo mediante subvenciones y la adopción de ayudas sociales. La CEPAL considera que, ante un escenario europeo que puede agravarse e impactar en una crisis global tan grande como aquella, “la mayoría de los países tiene hoy espacio fiscal para reaccionar con políticas contracíclicas que permitan estabilizar la trayectoria del empleo, la inversión y el crecimiento”.

 

El organismo argumenta su opinión al señalar que, pese a las turbulencias en el entorno financiero internacional, en general la región ha mantenido su acceso a los mercados globales de deuda y sus reservas monetarias continúan aumentando, mientras que los resultados fiscales han mejorado levemente en la mayoría de los países y existe espacio para las reducciones de los tipos en un “contexto de inflación baja”,  con las excepciones de Argentina y Venezuela, según aclara la CEPAL. El organismo sugiere que los países respondan a la crisis con políticas contracíclicas, ya sea fiscales, monetarias, cambiarias, industriales, laborales y comerciales, de modo de favorecer el crecimiento, la inversión, el empleo, pero la diversificación productiva y la igualdad.

 

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Sobre el blog

Novedades, tendencias y debates sobre el devenir de la economía y el desarrollo de Latinoamérica y los latinoamericanos.

Sobre el autor

Alejandro Rebossio es periodista. Su especialidad es la economía y trabaja en la corresponsalía de El País en Buenos Aires. Coautor del libro Estoy verde. Dólar, una pasión argentina (Aguilar) y Vaca Muerta (Planeta) junto con Alejandro Bercovich.

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