Desde hace unos días, los mercados no paran de demostrar que están perdiendo la fe en la economía española. A pesar de la reforma laboral y los recortes que el PP ha puesto en marcha, la confianza está en mínimos y la prima de riesgo vuelve a tocar niveles máximos. Parece que los analistas no se fían de las medidas aprobadas por 3 razones: primero, creen que la reforma financiera es tímida y no servirá para resolver de manera definitiva el problema de nuestros bancos (algunos de los cuáles podrían necesitar más dinero público); segundo, no les convence un presupuesto que ha exprimido al máximo los ministerios, pero ha dejado intactas las pensiones, los subsidios de desempleo, la sanidad y la educación (por eso Guindos ha salido ya avisando que irá por esas partidas en breve); y en último lugar, pero de manera más importante, los mercados no ven de qué forma va a volver el crecimiento económico y el empleo a nuestro país.
En este sentido, los datos que confirman que ya estamos en recesión otra vez (la segunda desde 2009) no ayudan a mejorar el panorama. Con toda lógica, el sentimiento de los ciudadanos es de zozobra. Y en el caso de las empresas, de desconcierto. Ahora la crisis va a dar de lleno a aquellos que lograron superar con cierta dignidad el primer embate de 2009. Entonces los más afectados fueron los trabajadores y empresas ligados al sector de la construcción y los trabajadores temporales del sector servicios. Ahora, los despidos alcanzarán al sector público y el cierre de empresas también se cebará con las medianas y las grandes de otros sectores. Industrias dependientes del apoyo público, como las energías renovables, el automóvil, las industrias culturales o el sector de servicios sociales pasarán un año terrible, y el sector de la construcción no logrará revivir a pesar de los esfuerzos del gobierno por cebar de nuevo la burbuja a base de recuperar la deducción por compra de vivienda. A diferencia del año 96, cuando el PP abonó el terreno para la peor crisis que haya sufrido la economía española, ahora el crédito no fluye a nuestros bancos y los ciudadanos prefieren pagar sus hipotecas pasadas, antes de meterse en otras nuevas. Da igual lo que intente, pero el PP no obtendrá la deseada recuperación económica por la inmobiliaria.
Lo peor de la situación es que nadie es capaz de responder a la pregunta que se hacen todos los ciudadanos, y que también empieza a preocupar a los mercados que financian nuestras deudas. Durante 15 años nos hemos dedicado a construir casas, hacer infraestructuras, a explotar nuestro turismo y a exportar servicios financieros y energéticos a Latinoamérica. Pero, ¿a qué nos vamos a dedicar los próximos 15 años? Cualquier gobierno debería estar más preocupado de responder a esa pregunta, que de cualquier otra cosa. La confianza y el esfuerzo colectivo sólo se multiplican cuando uno tiene claro hacia donde tiene que remar. De lo contrario, la incertidumbre y la melancolía acaban echando por tierra cualquier sacrificio colectivo. Por eso, cuando alguien me pregunta por mi opinión sobre la política económica actual, le respondo que equilibrar el presupuesto y reformar el mercado de trabajo o el sector financiero está bien. Es verdad que son medidas muy necesarias pero no dejan de ser instrumentales. Lo importante es fijar bien los objetivos, imaginar en qué tipo de país queremos convertirnos, y entonces se podrá hacer una narrativa creíble e ilusionante con la que comenzar a subir los duros escalones de la recuperación.
Cuando el gobierno socialista anunció una Estrategia de Economía Sostenible en 2009, intentó dar respuesta a esa pregunta existencial, aunque la pobre Ley que trató de vehicular aquel proyecto terminó deslegitimándolo. El país que aquella estrategia imaginaba era un país en que los vehículos eléctricos sustituirían a los motores contaminantes, los molinos de viento y los techos solares se extenderían hasta nuestros edificios; era un país en el que los contenidos culturales en español se extenderían por la red, y en el que el cuidado de nuestros mayores y nuestros dependientes sería una industria productiva más. En ese modelo, el turismo seguiría siendo una parte importante de nuestra actividad colectiva, pero sería más sostenible, y nuestras multinacionales apostarían también por Asia. Además, los emprendedores tecnológicos tendrían las máximas facilidades y seríamos tan conocidos por nuestros avances en biotecnología y telecomunicaciones como hoy los somos por nuestros deportistas.
Quienes integran hoy el gobierno del PP se rieron de aquello, pero nos están avocando a un esfuerzo sin rumbo. No sabemos si imaginan un futuro alternativo o no saben lo que quieren. Sería bueno que lo aclararan pronto porque los datos dicen que cuando se alumbra un poco de luz al final del túnel, todo el mundo, dentro y fuera, vuelve a creer en la economía española.
Si no, que miren a los datos de inversión extranjera directa que hemos conocido la semana pasada, la misma en que se disparaba otra vez nuestra prima de riesgo. En 2011, las inversiones procedentes del exterior en actividades productivas aumentaron un 18% (cuando la economía no crecía ni un 1%). El dato es realmente impresionante, porque indica que los capitales productivos siguieron confiando en nuestro país a pesar de que los capitales financieros dudaran sobre nuestros títulos de deuda. Los mayores flujos se concentraron en los primeros meses, justo cuando parecía que los brotes verdes se convertirían en tallos consistentes, y se dirigieron al sector aéreo y al de telecomunicaciones. Es cierto, que cuando surgieron de nuevo las turbulencias en la zona euro en verano y la recesión apareció en el horizonte, los flujos de entrada de inversión productiva se ralentizaron.
Pero la señal es lo que importa. En medio de la incertidumbre y el pesimismo se necesitan recortes y reformas, sí, pero como demuestran los datos mencionados, es mucho más importante contar pronto con un dibujo de futuro claro e ilusionante con el que dar sentido al esfuerzo colectivo. Cuando antes recuperemos el debate público en torno “a qué se va a dedicar España”, más cerca estaremos de salir de la crisis, y las dudas de los mercados y de los ciudadanos se acabarán.
Hay 81 Comentarios
todavía recuerdo la presencia fuera de Espana del entonces ministro de trabajo del psoe de Béjar cuyo nombre no quiero recordar jactándose del eldorado de Espana superando a Alemania la renta per capita y haciendo risas y risitas del malvivir en Alemania. Con esta clase de politiquillos y equipo que les asesora no se va a ninguna parte, prepotentes creídos y tontos de capirote.La historia del crecimiento económico y fortaleza del marco alemán DM así como posteriormente el euro se encuadra dentro de la figura de una personalidad extraordinaria Otmar Issing y de sus acólitos y discípulos destacando de forma especial Weidmann y los Jefes económicos del BCE y de él aprenden la austeridad y rigor de una contabilidad y de una economía nacional previsible y fuerte. Y éso es sencillamente lo que se pide a Espana, ese desasosiego político de las Autonomías no debe significar necesariamente una exlusividad de mi terrenode mi pequena parcela autonómica olvidando la unidad del país. La diversidda se entiende pariendo de la unidad, pero recalcando la unidad de un Estado y no un simple reinado de taifas.
Publicado por: j.lopez | 25/04/2012 10:16:32
Una economía a la deriva, un gobierno conservador abrumado, un deterioro sociolaboral impactante, un sistema bancario al borde del colapso, una elite empresaria inmune y una política de “austeridad”, como denominan a lo que se conoce como ajuste neoliberal. Esta es hoy la “Marca España”. Un sentido diferente a la presuntuosa propaganda que Mariano Rajoy tiene previsto presentar en el Congreso como sello de calidad que asocie al país con la expansión de sus empresas, a iniciativas culturales y de cooperación en el exterior. La situación de España se encuentra en el mismo punto de desesperación de la de Grecia en 2010. Nuevo gobierno, agresivos recortes presupuestarios, respaldo financiero del Banco Central Europeo, la Comisión Europea (Alemania) y el Fondo Monetario Internacional, protestas sociales, versiones de megapaquetes de rescate para salvar bancos, ataques especulativos sobre su deuda y un default ordenado que se acerca. El recorrido griego ya se conoce, y sólo la Europa dominada por la prepotencia alemana persiste en esa política que hoy tiene a España en la cornisa.
La principal diferencia con el desastre griego es que la clase dirigente política y empresaria en España está padeciendo el síndrome de nuevo rico en quiebra. Ya no son lo que se imaginaban que eran al desmoronarse la economía basada en la especulación inmobiliaria, en servicios financieros y de turismo y en las crecientes ganancias provenientes de la Segunda Conquista de América en los noventa. Esto último es lo único que les queda del modelo tan elogiado por analistas y economistas de la ortodoxia. Las utilidades de las filiales latinoamericanas de las corporaciones españoles son el flotador en medio del naufragio. El Banco Santander, que en 2011 tuvo un beneficio neto 35 por ciento menor al año anterior, contabilizó en Latinoamérica más de la mitad de sus ganancias totales. La española Telefónica, que registró una caída de 69 por ciento en sus utilidades globales por el fuerte ajuste en su país, aumentó en ese mismo período 18 por ciento sus ventas en la región, donde reúne casi 195 millones de clientes y casi la mitad de sus ganancias.
Si bien comparten la reacción de Rajoy en defensa de Repsol, no deja de ser llamativo el prudente silencio de los otros grupos españoles que operan en Argentina. Saben lo relevante que es para sus balances el mercado argentino y no tienen intención de rifarlo en el altar de la indignación. La importancia de los negocios españoles en América latina explica el desborde de la administración Rajoy por la expropiación de acciones de YPF en manos de Repsol. Pero no es sólo por la postura neocolonial del conquistador herido. Existe otro motivo más pedestre. La confusión entre funcionarios del gobierno y empresarios que provoca que la “Marca España” hoy se traduzca “Marca Repsol”.
En esa asociación participan políticos del PP y del PSOE, puesto que en España funciona muy aceitada la famosa “puerta giratoria”, donde se confunden intereses públicos y privados de forma permanente. Funcionarios en puestos clave del gobierno de Rajoy participaron antes en consejos de administración de conglomerados españoles. Cuando dejen el cargo aspiran volver a la actividad privada. El ex presidente del gobierno del PP José María Aznar cobra 200 mil euros anuales como asesor de Endesa, que en Argentina maneja Edesur, entre otras inversiones. El ex presidente del PSOE Felipe González fue contratado por Gas Natural, controlada por Repsol, para que ejerza la tarea de lobbista por 126 mil euros al año. Rodrigo Rato, ex vicepresidente segundo y ministro de Economía, es actual titular de la Caja de Madrid y Bankia (fusión de siete cajas de ahorro), y los ex ministros Eduardo Zaplana, trabaja para Telefónica, y Javier Solana, asesora a la constructora Acciona. La lista es larga de ex funcionarios que hoy son parte de compañías privadas; y de ex ejecutivos de grupos españoles que hoy son funcionarios.
La economía española está siendo conducida a la quiebra por esa nomenklatura. El estallido de la burbuja inmobiliaria dejó al descubierto el disparate de un mercado alimentado por un frenesí crediticio financiado por un sistema bancario sobredimensionado. España logró el record de ser un país con más viviendas construidas que familias. Según datos de la banca central de ese país, 17 millones de familias están registradas y existe un stock de viviendas cercano a las 27 millones. Muchos de los que se endeudaron para comprar sus casas no tienen trabajo, con una tasa de desempleo cercana al 25 por ciento, que se eleva a casi el 50 por ciento en los jóvenes, y no pueden pagar el crédito, de un monto hoy más elevado que el valor actual de la vivienda, que la terminaron perdieron a manos de los bancos. O sea, no tienen trabajo, se quedaron sin casa y con la deuda. Esta es una de las manifestaciones más desastrosa de la economía española. La crisis de la deuda soberana y privada no es la causa de la crisis financiera sino su consecuencia. Al decidir profundizar políticas de austeridad persiguiendo el ilusorio voto de confianza de los mercados se profundiza la recesión, la merma de ingresos fiscales y, por lo tanto, aumenta el endeudamiento, que para renovar sus vencimientos el mercado exige tasas de interés cada vez más elevadas. Así transitan como corderitos obedientes a la insolvencia. La última colocación de deuda del gobierno de España fue a una tasa del 6 por ciento por bonos a 10 años, elevando a una diferencia máxima con la tasa alemana (prima de riesgo), que actúa de referencia en Europa y se ubica en 1,75 por ciento anual para ese plazo.
En ese contexto, la última reunión de Consejos de Ministros decidió agudizar las medidas de ajuste sobre los grupos más vulnerables, en Educación y Salud, por unos 10 mil millones de euros, en un presupuesto general que ya se había recortado en 27.300 millones de euros. En ese mismo encuentro el gobierno de Rajoy anunció represalias comerciales por la expropiación de acciones de YPF al limitar la compra de biodiésel argentino. Es una reacción patética de un gobierno desorientado por su crisis. Pese a la sobreactuación de recortes y más recortes presupuestarios, el nivel de deuda pública y privada es un dato que asfixia a la economía española.
La deuda española era de apenas 36 por ciento del PIB en 2007; se duplicó en cuatro años de crisis, al superar los 590 mil millones de euros. Sumando la deuda privada (familias y empresas) el total asciende a 3,8 billones de euros, el 366 por ciento del PIB. La magnitud de esta deuda la convierte en impagable con una economía en recesión empujada a la depresión con más ajustes fiscales. España se mantiene a flote porque la Unión Europea evalúa que un default de esa deuda tiene un costo mayor para el euro que continuar con la asistencia que le está proporcionando el Banco Central Europeo. Esta entidad se ha convertido en su vehículo de financiamiento al sumar el 10 por ciento del total de la deuda externa, que a fines de 2011 era de 1,8 billón de euros. Además, la banca central española debe 250 mil millones de euros (23 por ciento del PIB) al BCE.
Todo ese dinero fue a financiar a los bancos españoles que están en serios problemas, transitando de una situación de iliquidez a una de insolvencia por el aumento de la morosidad y la acumulación de desvalorizados activos inmobiliarios por la imposibilidad del recobro de los créditos hipotecarios. La asistencia de la banca central a las entidades financieras aumentó de 50 mil a 227 mil millones de dólares de junio del año pasado a marzo de éste.
Publicado por: G | 22/04/2012 18:50:32
qué quien son los mercados? pregúntale al gerente de PIMCO que ya había anticipado en la tv y públicamente con exactitud este período crítico hace unas semanas. Como PIMCO así como otros hedgebonds hay bastantes que son los que mueven el catarro y los que tienen el dinero que Espana necesita para su financiación.
Publicado por: j.lopez | 18/04/2012 23:30:32
Perdonad mi ignorancia. Puede alguien decirme por favor, ¿quiénes son los mercados?
Gracias
Publicado por: Yolanda | 14/04/2012 16:39:17
A mí me parece bien que adoptemos una forma de vida más modesta (sostenible, se dice ahora) y virtuosa. Lo que me ofende es que quien me pida este sacrificio sea el dichoso mercado, cuya única cualidad, que no virtud, es poseer una avidez insaciable.
Publicado por: Diego Buendía | 13/04/2012 15:20:38
Mensaje para los jóvenes:...Usen el pasaporte, no se quejen... emigren.nuestros mayores ya lo hicieron antes y sobrevivieron!!!....Dejaros de tanta Play Station, XBox y hostia!!!!!!! ...entre curas folladores de niños, monjas ladronas de bebés,políticos de todo signo corruptos hasta la médula, periodistas que no saben ni cuando se corren, el país está apañado. Aire, que corra el aire!!!!!!
Publicado por: Parménides | 13/04/2012 14:41:21
Salir de la crisis actual en un solo día es posible, evitar que el paro siga subiendo, que bajen las pensiones y que los mercados sigan ejerciendo presión sobre nuestra economía. Nos lo han explicado Pierre Larroutourou, economista, y Michel Rocard, ex primer ministro francés: http://elpais.com/diario/2012/01/06/opinion/1325804405_850215.html
Publicado por: Felipe de la Roche | 11/04/2012 17:26:24
¿Realmente los mercados se leen todas las leyes del Congreso y los decretos del Gobierno? ¿Reciben los mercados una traducción de la normativa al inglés?¿Quién se la explica?¿Las asesorías tipo PwC, donde por cierto trabajó Guindos?
Publicado por: Enrique | 11/04/2012 6:49:29
Bueno, pero "abocado" se escribe con be. "Avocado" es como se llaman los aguacates en algunos idiomas. Respecto a la crisis: de la del 29 se salió con la segunda guerra mundial. Hasta que no se aplique un poco de patíbulo (que es el lugar que merecen desde MAFO hasta Aznar, pasando por ZP) no veo posibilidades. Ya sé que el patíbulo no es una variable de los modelos económicos: por eso no funcionan.
Publicado por: jorgplaza | 11/04/2012 0:24:47
En china, 50 estudiantes por aula y tan solo la educacion primaria es gratuita y obligatoria (pareciera que a Esperanza Aguirre le gusta la politica comunista China ... Comunista? ) Para que formar a la plebe si lo que necesitamos son esclavos. En china un doctor por cada mil habitantes, y los pobres, los chinos pobres, mueren como pollos cada vez que les toca pasar la epoca de la gripe aviar --sera por algo. Sera por algo que en esta economia globalizada, el capital fluye hacia China;obviamente sera donde mas reditos obtiene. La crisis finaciera del sector publico de los viejos paises sociales es un pequeño reflejo de las consecuencia de la gran locomotora capitalista. Lamentablemente, a mi no se me ocurre otra, si hay que competir en terminos capitalistas en una cancha global, habra que trabajar y vivir como los chinos en Europa. De otra manera, habra que romper las reglas del juego del WTO.
Publicado por: motxo | 11/04/2012 0:18:17
Disculpe, pero "abocando" se escribe con b.
Publicado por: C. | 11/04/2012 0:12:02
Es inaudito. No veo, en este país, ningún atisbo de profesionalidad que no sea aquélla con la que un cirujano o un grupo de ellos afrontan la operación de un paciente. El panorama periodístico, que es a la postre el que me llega, el que llega al común de los ciudadanos, no deja de ser un esperpento. Todo por, hablando en plata, la puta ideología política. No sé qué me parece o me parecía más triste, si un votante que pensaba que con Rajoy íbamos a estar mejor u otro votante que piensa que con Zapatero estaríamos mejor. Ojalá pudiese emigrar mañana.
Publicado por: Jose | 11/04/2012 0:08:02
También los mercados se han hecho eco de que Iran ya no nos vende petroleo. Y somos un importador mayusculo de petroleo de ese pais... igual la bolsa se desploma toda la semana.
Publicado por: esenabet | 10/04/2012 21:38:28
Menuda chufla de artículo de la fundación IDEAS (PSOE), parece firmado por el mismísimo ZParo.
Publicado por: AnnaG | 10/04/2012 20:54:53
La afirmación "En medio de la incertidumbre y el pesimismo se necesitan recortes y reformas, sí" la verdad es que duele. ¿Sabe usted quiénes son los mercados?, porque con la respuesta se rechaza dicha afirmación.
Publicado por: Daniel | 10/04/2012 20:44:03
Cuando dice "Lo peor de la situación es que nadie es capaz de responder a la pregunta que se hacen todos los ciudadanos" se equivoca. Somos muchos los que tenemos muchas respuestas. Nuestras ideas están en internet. Si quiere que se lo conteste, escríbame un mail. Lo tengo en la web www.lademocraciaparticipativa.com
Publicado por: Daniel | 10/04/2012 20:42:28
Difícil saber el camino, pero lo que si sabemos es por dónde no hay que pasar. Descartemos la construcción -edificación, no copiaría la mayoría de los modelos del resto de Europa, que también huele a tufillo y parece que su sistema neoliberal se va agotando, agricultura sostenible la que nos dejen, turismo a mejorar y somos líderes, construcción civil, telecomunicaciones, energías alternativas, somos muy competitivos,...y sobre todo dar gran apoyo al espíritu científico, innovador, creativo, emprendedor y exportador, que creo es nuestra gran reserva. Tenemos gente muy preparada, la mayoría deseando cada vez más arremangarse y sacrificarse lo que haga falta, si al menos se le ilusiona con un objetivo viable y positivo. Creo que el gran reto lo van a tener los políticos, que han de convertir el problema en oportunidad. La oportunidad ya está casi asumida por la mayoría de los españoles, lo que esperamos que nos digan es ¿dónde esta? para ir a por ella.
Publicado por: Ignacio | 10/04/2012 20:28:31
De los comentarios aquí vertidos estoy de acuerdo en que no debemos vender nuestra alma al diablo. Privatizar parcialmente los bienes públicos es como prostituirse, perder el estado del bienestar, que es lo más valioso que tenemos. Como dice Juliana, proteger a los ciudadanos debe ser la prioridad. Con "eco3t" estoy de acuerdo en que no somos un país productor de nada, y debemos fijar otros objetivos. ¿las energías renovables? Desde luego, no la creación de casinos. Ya se está invirtiendo, lenta y pobremente, en el bilingüismo en las escuelas públicas, que ya es un paso. Efectivamente, bajar la ratio de alumnos y emplear a más maestros creando más colegios es una inversión de futuro, pero hay que tener el valor de sembrar a largo plazo. Gracias a todos por vuestras opiniones!
Publicado por: patricio | 10/04/2012 20:27:15
Hasta que no veamos como se puede invertir en deuda con facilidad http://porlajeta.es/dinero-porlajeta/6-dinero-porlajeta/1912-ique-es-el-forex.html no entenderemos que podemos hacer. El modelo de financiacion es erroneo, el resto nos sobra
Publicado por: tablon de anuncios | 10/04/2012 20:08:57
Sr . redactor el primero que se rio por intereses propios, de las energias renovables fue Miguel Sebastian y se ha visto su final trabajando de consejero en una gran compañia electrica como consejero delegado favorecio a lobbies energeticos que eran totalmente contrarios a todo lo que pinte a verde por cuestion de cifras, obvio, en deprimento de ayudar a crear pymes y inmpulsar una parte de la economia en generar empleos verdes ,como instalar en azoteas de edifcios energia solar ,eso que dice usted que en 2009 propuso el psoe ,en realidad es rotundamente falso ,informese y preguntale al sector de las renovables del que yo forme parte, ellos te diran lo que hizo Sebastian por generar empleo y dinazmizar su sector.
Publicado por: Antonio | 10/04/2012 20:07:59
a que hora juegan madrid-barsa?? todo lo demas es i-rre-le-van-te
Publicado por: mamon | 10/04/2012 20:04:04
Quizás lo que al final va a importar no son tanto los recortes sino la previsión de crecimiento. Quizás, en lugar de intentar equilibrar las cuentas a cualquier costo, deberíamos aplicar un programa con la única intención de lograr crecimiento. Establecer un plan, acudir a los mercados con él y explicarles que a pesar de todo el dinero que debemos, vamos a pedir mas porque es la única forma de lograr crecimiento en un país que no controla su moneda. Aumentar el gasto, tanto público como privado, reducir impuestos y otorgar beneficios por la contratación de personal. Es lo que hacen las grandes empresas que se ven comprometidas financieramente, establecer un plan de recuperación y acudir a los bancos a por el dinero.
Publicado por: Eligerman | 10/04/2012 20:03:59
Para contestar cual es el futuro de España en los próximos años debemos plantearnos que hacemos bien. Por ejemplo tenemos una de las mejores medicinas del mundo. Quitemos las barreras de entrada a la preciosa carrera, multipliquemos por 10 el número de alumnos, ayudemos a la creación de grandes gestoras de hospitales a nivel internacional y acerquemos nuestros médicos a los paises emergentes con muchos ricos y pocos hospitales. Eso sí limitemos nuestro conocimiento, a modo de barrera de entrada en el negocio, a nuestros hijos, eliminando el pago con fondos pùblicos a la formación de alumnos extranjeros . Por último eliminemos de la mente de los alumnos la idea de ser funcionarios y preparemosles para ser futuros empresarios de la medicina
Publicado por: MAMIAN | 10/04/2012 19:37:27
Para no alargarme mucho, voy a referirme solo a algunos de los temas que se han expuesto.
Se ha citado el problema de los servicios públicos. Los "mercados" llevan mucho tiempo detras de los servicios públicos europeos, después que se aprobara en la Organización Mundial de Comercio el Acuerdo General sobre Comercio de Servicios. Harán todo lo posible e imposible por privatizarlos, aunque, al principio, sólo sea parcialmente. Rota la primera puerta ... No es que no crean en países con sistemas públicos sociales, como creo que dice motxo.
Dice Azcona que "los mercados nos quieren como clientes perpetuos"; estoy de acuerdo. En nuestras manos está no serlo.
Existe la certeza de que participar en la carrera del crecimiento economico es suicida. En lugar de preocuparse por el crecimiento económico, que hace más ricos a los ricos y empobrece a los pobres, ¿por qué no se preocupan los gobiernos en procurar la cohesión social y preocuparse por mejorar la vida de sus ciudadanos?. Un saludo
Publicado por: Juliana Luisa González Hurtado | 10/04/2012 19:23:37
es un poco lamentable que tan pedante comentarista cometa faltas de ortografía de bulto. Ése es el nivel del progresismo en España: o tempora, o mores!!
Publicado por: malele | 10/04/2012 19:23:36