Las sardinillas, qué ricas sooon. / EL COMIDISTA
Comida de lata. Qué injustamente asociamos esa expresión con una alimentación cutre, cuando en el universo latero hay más joyas que en una convención de damas del PP. La comida fresca, por lo general, es mejor que la envasada, pero las buenas conservas son una excepción muy gorda para esa regla. Y más en España, donde tenemos la inmensa suerte de contar con una tradición conservera fastuosa.