por JESÚS RUIZ MANTILLA
Como bien clamaba Forges hace unos meses en una viñeta memorable sobre la crisis: “He visto cosas que vosotros ni creeríais, puestos de trabajo de por vida, he visto cestas de navidad de la empresa hasta con paletilla…”. Emular el espíritu de Blade Runner nunca está de más en esta época de carencias, cierres por derribo y múltiples miserias. Mucho menos en el ámbito de la música clásica, donde la crisis destroza paso a paso las endebles pero deslumbrantes estructuras creadas a lo largo de los últimos 30 años.