Pedro Morenés con la primera ministra australiana, Julia Gillard, antes de viajar a Abu Dhabi./ EFE
“Es muy importante que las empresas españolas estén aquí. La solución para las empresas españolas pasa por salir fuera, y cooperar [internacionalmente] para crear tejido industrial en nuestro país”, afirma el ministro de Defensa, Pedro Morenés, al concluir su visita a IDEX, la segunda feria mundial del ramo, que estos días se celebra en Abu Dhabi. Morenés ha hecho escala en este emirato, a su regreso de Indonesia y Australia, para apoyar a las participantes, y dejar claro el interés español en un mercado que ahora mismo lidera las inversiones en defensa.
IDEX, lugar de encuentro de representantes de gobiernos, empresas y fuerzas armadas sobre todo de Oriente Próximo y norte de África, se celebra cada dos años y entre el millar largo de compañías de más de 50 países presentes en la actual edición figuran las españolas Amper, EINSA, ESF (European Security Fencing), INDRA, Instalaza, Navantia, Rodman Polyships, Sener y URO, así como las participadas Eurofighter y EADS. El ministro ha visitado sus stands y se ha interesado por la marcha y las perspectivas comerciales de su presencia aquí.
Pero hay algo más que la posibilidad de obtener contratos para la industria nacional. Esta ha sido la segunda visita a Emiratos Árabes Unidos (EAU) que Morenés lleva a cabo en las últimas dos semanas. “No salgo de Abu Dhabi”, ha bromeado el ministro que entre ambos viajes también hizo una escala técnica en la capital emiratí. Durante el primero, se entrevistó con el príncipe heredero, Mohamed Bin Zayed al Nahyan, y con el primer ministro y ministro de Defensa, Mohamed Bin Rashid al Maktum, para ultimar los detalles de un acuerdo que permita utilizar EAU, en concreto Dubái, para el repliegue de las tropas españolas de Afganistán.
Aunque el memorando de entendimiento aún no está firmado, Morenés se ha mostrado convencido de que no va a haber ningún problema. “Tengo la promesa del príncipe heredero y del jefe del Estado Mayor conjunto”, ha señalado tras destacar las buenas relaciones políticas y militares entre ambos países. Ese beneplácito será fundamental para facilitar la retirada de un país como Afganistán, sin acceso al mar y con unos vecinos cuando menos complicados.
Tres días antes, en Australia, el ministro participó en la entrega del navío Canberra, el primero de los dos que construye Navantia para la Armada australiana y que se presenta como modelo de cooperación internacional. “Tenemos cuatro fragatas-destructores que construir con ellos con el sistema AEGIS, y estamos en ello”, ha recordado. Pero sobre todo ha destacado una novedosa fórmula de colaboración por la que la Armada española ha puesto “a disposición del Gobierno australiano el buque de aprovisionamiento en combate Cantabria”, que durante los próximos meses desarrollará misiones para la Armada australiana con una dotación española. La esperanza es que si les gusta terminen comprando un navío similar a la industria naval española.