Bebeor de baile

Una vez Julio Iglesias me dijo que él de vinos no sabía nada pero que se los bebía todos. A mí me ocurre lo mismo con el baile flamenco.

Es una parte de la danza muy curiosa porque por un lado está el análisis de los aficionados al baile, ballet español o clásico, danza contemporánea y otras disciplinas de esta arte. Y por otro está el análisis de los flamencos, callejeros o de salón, que es totalmente diferente.

A un flamenco le interesa más una buena patadita de 30 segundos que un despliegue técnico de 20 minutos. Sin dejar de valorar en ningún momento toda la dificultad que conlleva la técnica de la danza y siendo gran admirador e incluso un habitual a la emoción de su belleza soy de los que muere por un buen remate. Vamos que prefiero una pataíta del Morao que 20 piruetas seguidas de... sigamos.

Una vez definido el lado en el que mejor me siento y el profundo respeto e inluso la intermitente complicidad con el otro, he de decir que a veces, y sólo a veces, aparecen bailaores o bailaoras que nos llenan a todos y que hacen masa común. Ponen a todo el mundo de acuerdo. Indudablemente todos tenemos en la mente a Carmen Amaya, o a la Soleá del Güito o Manuela, o al maestro Gades.

Llevaba mucho tiempo sin sentir algo fuerte viendo bailar y, al margen de los Farruco, hacía años que una mujer no me levantaba de la silla. El otro día en un pequeño local de Madrid vi algo descomunal. Una bailaora completa, definitiva, con una estampa brutal, un conocimiento del compás al nivel de cualquier percusionista latino de fama mundial, un saber flamenco jondo y un respeto por el cante y la guitarra inusual para su edad. Belén López. Hay artistas que se hacen grandes en el escenario, ésta mujer además hace el escenario más grande, más difícil.

Belén es un trago de agua fresca para el baile flamenco. Supongo que lo correcto sería que a partir de ahora empezase a crecer y acabara llenando los teatros de medio mundo. Eso sería lo correcto pero no lo normal, porque ella no sigue la norma.

En cualquier caso recomiendo a cualquiera que tenga un poquito de ganas de emocionarse que vaya a verla bailar. Suele actuar en el Corral de la Morería, Café Chinitas... Merece la pena y es otra experiencia NO pirateable por falta de formato. O la ves o no la ves. El ancho de su duende no cabe en la pantalla de un Mac, por suerte para el duende, y para el Mac claro.

La noche que Julio me dijo aquello del vino, llamó al sommelier le preguntó por el precio del vino para el público y el precio al que lo adquirían ellos. Cuando le dio la respuesta, Julio le corrigió. Le explicó al detalle que la bodega propietaria de esa marca había vendido 3 años antes la reserva de vino que nos estaba sirviendo por problemas financieros y que por esa razón (y otras tantas que ahora no recuerdo) había llegado a la conclusión de que los precios que nos estaba ofreciendo, desde un punto de vista industrial, eran incorrectos en un 10% aproximadamente.

Vamos que se los bebía todos. Brindo por Belén López.

Comments

[Publicado por: Arte flamenco universal]

esta niña tiene que triunfar, lleva el arte dentro

[Publicado por: Lola]

Si FESTIMAD apuesta por una artista y dos anos despues sigue en un tablao....

[Publicado por: Antón]

Javier Limón acaba de descubrir a una bailaora que ya programó FESTIMAD en su edición de hace dos años. Nunca es tarde si la dicha es buena y enhorabuena a Belen, primero, y después a FESTIMAD por seguir apostando por la diversidad musical de calidad.

[Publicado por: Ikira Baru]

Que padre e hijo Iglesias son grandes comerciantes no me sorprende. Acabo de comprobar en youtube el gran talento y la increible pasión de Belén Lopez. Gracias por compartir Javier. Voy a retwittear tu blog. Ikira (ikirabaru.com)

[Publicado por: Martingame]

que belleza! como se puede transmitir tanto solo con esa mirada. Voy a ir a verla seguro.

[Publicado por: Mariamaria]

yo la he visto bailar y te corta la respiración. Qué ritmo!!!