El salto del ángel

Sencillamente mejor

Por: | 02 de abril de 2012

 

Sencillamente1La sencillez es deseable, la simpleza, no. En tiempos difíciles y complejos, lo razonable parece ser reorganizar la escala de valores y, como cuando se complica la salud, aprender a apreciar lo que en la vida resulta más determinante. Incluso hace falta que el comportamiento, las maneras y el estilo se depuren hacia un modo de ser menos engolado y pomposo. Quedan más en evidencia las grandilocuencias y los engreimientos. Y, sobre todo, las complicaciones son una ocasión para apreciar lo que realmente merece la pena, para buscar lo que nos reconforta y precisamos.

La necesaria organización del tiempo, de los recursos y de las fuerzas obliga a una reorientación que no conviene dejar simplemente en manos de la coyuntura de los momentos. Se trata de establecer prioridades. Y no es preciso insistir en que suelen resultar decisivos los afectos, los entornos, la proximidad cordial. Y las condiciones dignas de vida. La sencillez es también la búsqueda de lo fundamental.

La sencillez es un saber, no un acopio de conocimientos, sino una forma de vida. Podríamos decir sin exceso que es una sabiduría que se busca. Resulta extraordinariamente agradable encontrarse con quien la entiende como una forma de  de entrega, sin ostentación, de dedicación intensa sin aspavientos, sin reclamar permanentemente reconocimiento, y sin medir permanentemente el poder de los demás o el interés. Pero sencillo no significa falto de exigencia o tibio.

Por eso resulta tan llamativa la autosuficiencia. También se es incauto, que es un modo de ser simple, por exceso de confianza o por prepotencia. No faltan quienes aún hablan como si ya estuviera todo claro, como si no dudaran, como si siempre supieran perfectamente lo que hay que hacer, como si todo estuviera en sus manos, todo y todos, como si fuera la gran ocasión para la frase ocurrente, la determinación que todo lo zanja. Tal vez no es sólo falta de sencillez, también lo es de modestia. Otra cosa es que, por lo visto, es importante dar una imagen de contundencia, de dominio, pero la sencillez no impide la cuidada firmeza.

 

Sencillamente3La sencillez no es una forma de resignación, ni de conformismo. No es una claudicación ante la complejidad, ni un desinterés por lo sofisticado o de múltiples raíces, ni la incapacidad para el análisis pormenorizado. Sin ostentación ni artificios, es cuestión de expresar con naturalidad los conceptos. La sencillez no ha de ser una coartada para la indiferencia, ni desatención para con lo refinado, ni falta de implicación.

Nos sentimos respetados por quienes son sencillos, por quienes no se dirigen a nosotros exhibiéndose, propalando sus conocimientos, sino ofreciéndonos caminos o solicitando compañía para procurárnoslos conjuntamente. En el peor de los casos, algunos nos dictan permanentemente lo que ha de hacerse, lo que nos conviene, lo que es y cómo es, porque a su juicio somos nosotros quienes hemos de cambiar. Su supuesta superioridad carece de sencillez.

La sencillez es un desafío para todos. Nos permite tratar de comprender el alcance y el sentido del vivir, y el carácter pleno y efímero de la existencia, que se expresa en las experiencias cotidianas. Este saber tan sentido y labrado en personas admirables nos enseña a no pretender el permanente deslumbramiento de una presunta brillantez, siempre con acciones de impacto. Ello nos conduciría a la parálisis que Hegel atribuye al alma bella. Tan convencida está de la importancia de las acciones determinantes, que no encuentra ninguna que esté a la altura de su voluntad. Y así, con su arrogancia, no hace nada y “el alma bella se deshace en una nostálgica tuberculosis”.

Detalles8 RogerMcLassus
Esa supuesta ambición es finalmente más ineficaz que la tarea permanente, diaria, pormenorizada, cuidadosa, de lo sencillamente bien hecho. Es difícil lograrlo. Es un desafío para todos ya que, como señalamos, precisa gran sabiduría. E intensidad. E insistencia.

En definitiva, ello nos permite escuchar limpiamente lo que nos dice el oráculo de Delfos, “conócete a ti mismo”, no como una llamada anacrónica a la introspección, sino como la convocatoria a asumir los propios límites y limitaciones de nuestra condición humana que, por cierto, no es poca cosa. Pero el oráculo nos recuerda que no somos dioses. Así es, somos mortales. Puede resultar llamativo que nos veamos en la necesidad de recordárnoslo. Nos ayuda la reescritura y la relectura entonada de las conocidas preguntas de Kant, que todo ilustrado ha de plantearse: ¿Qué otra cosa se puede esperar si somos seres humanos, sencillamente humanos? Y esto no nos frena, nos convoca.

En lugar de una mirada precipitada, atolondrada, excesiva, obsesiva en acaparar, dominar y consumir, se requiere la intensidad sencilla, y no menos ambiciosa, de vivir libre, adecuada y justamente. Cuando eso ocurre, se distingue más claramente lo que nos falta y lo que nos sobra. No es preciso enmascarar ni envolver cada acción con más de lo que es. A ver si queriendo otra cosa, acabamos deseando ser antes simples que sencillos. Como el agua moja, el sol brilla y el verso dice, la sencillez tiene su propia elocuencia.

(Imágenes: Kitagawa Utamaro ( 1753-1806), Pescadoras de mariscos;  cuadro de Lola Abellán;  y fotografía de Roger McLassus)

Hay 44 Comentarios

nevitablemente hay dos momentos en la vida: una etapa más o menos larga en la que buscamos “algo” y otra en la que no
buscamos nada. Cuando buscamos algo lo hacemos para intentar experimentar menos dolor e inevitablemente, mientras buscamos liberarnos del dolor, cualquier cosa que nos llegue la metabolizamos en función de eso, en aras de aplacarlo. Es como si cualquier cosa que nos llegara necesariamente tuviera que ser una “pastilla” para resolver el problema del dolor. Da igual que hablemos de exigencias evangélicas, religiosas, morales o filosóficas, en último término buscamos quitarnos un dolor y, entonces, cualquier cosa que escuchamos la intentamos conectar con esa necesidad que sentimos. Esa es la manera inevitable entretanto no amamos el dolor por igual que la alegría, aunque esa es justo la manera de no vivir esta otra dimensión del Silencio. Se trataría más bien de dejar estar, la vida tiene dolor y alegría y no hay problema ni en lo uno ni en lo otro, salvo que yo lo haga; y cuando dejo de hacerlo es
cuando puedo por fin empezar a comprender, pero no con la cabeza, sino más bien desde la intuición, estas otras cosas.

¿Qué ocurre el día que dices?: “Cielos, todo el dolor que he acumulado durante años, estaba sólo en mí”. “el Universo entero
no gira en relación con tus con conceptos mentales, ni tampoco nadie que esté en tu vida. Tú escogiste esto y lo hiciste cuando eras pequeñito y probablemente no podías hacer otra cosa, porque en tu familia era la manera en que esto se concebía y asumías mucho riesgo y desprotección, pero ahora es una elección… TODO”. Claro, el día que te das cuenta de eso, el dolor es muy profundo. Cuando nos acercamos a esto, nos queda una sensación como de desazón, de soledad, de sinsentido, y yo ahí añado que es verdad, claro que de momento así es, porque de repente, darse cuenta de eso… se las trae.
La vida humana sería algo parecido a esto: cuando yo pego mi nariz a la pared, casi veo borroso y diría que toda la realidad es blanca y que además tiene rugosidades. A lo largo de la vida me voy separando y entonces empiezo a ver que toda la realidad no es blanca, que hay también verde, azul y color violeta, y si sigo retrocediendo, cada vez voy viendo más matices. Imaginad que pudiera retroceder con respecto a la pared a unos 10100 kilómetros. Tendría una visión cada vez más global, vería (es una manera de hablar) el Universo entero. “Pegado a la pared” es una analogía que simboliza estar viendo sólo en el plano de la mente, es decir, separando, analizando, juzgando, comparando y dando ese tipo de vueltas. A 1 metro de la pared ya empiezo a vislumbrar mis sentimientos: experimento dolor, gozo, tristeza, alegría… A unos 10 metros de la pared, ya se me empiezan a diluir también pensamientos y sentimientos. ¿Os imagináis como veríamos a 10100 kms? La mayor parte de la gente y todos nosotros
no estamos más allá de 1 metro de la pared y en esta distancia todo es un problema; como mi mente está hecha para pensar, clasificar, juzgar y comparar, ¿imagináis lo que puede alcanzar a juzgar con la nariz pegada a la pared? no es que esto esté mal o bien; no hay ningún problema en vivir pegado a la pared, puedes hacerlo si quieres. Es simplemente que admitamos la posibilidad de que existe más.

Sencillamente exquisito!!

Gracias por su blog
Aquí se siente uno seguro
Un saludo

Este escrito es sencillamente espléndido, propio de una persona sabia. He seguido y sigo el pensamiento de Ángel Gabilondo como un camino de moralidad sin imposturas, sin engreímiento, sin aleccionamientos. Admiro en lo que la conozco su conducta dialogante y la sencillez -precisamente-con la que transmite ideas filosóficas.

@FF
Eso y el Purple Haze

@FF
Evidentemente

@FF
el agua

SENCILLAMENTE MEJOR
En el plano psico-emocional: la sencillez en cuanto a mi aceptacion de mi lado emocional, lo aparentamente irracional: la necesidad de comer, gratificarse sexualmente, de actuar a veces de una forma egoista, de no hacer absolutamente nada porque no me apetece. Un parroco de un pueblo de Cordoba (tio de un amigo mio): siempre traia un saco grande de chanquetes cuando venia a comer pese a cualquier prohibicion de comerlos y tenia-increiblemente, me parecio a mi entonces- un piso en Marbella; bien pudiera haber dicho-si que de hecho no lo dijera-algo asi como, "es que eres pecador; esta en tu naturaleza" ("y por eso me pagan" hubiera seguido en un aparte para si). Si me presentan folletos explicando las ventajas de los distintos credos religiosos me quedo con dos: el del culto judio y el de los catolicos. El judio por la fuerte base vital en el racionalismo y el catolico por la humanidad que uno/a ha de asumir respecto a su propia naturaleza-y de ahi, la del projimo-. Como se es pecador, se confiesa, pues siempre hay perdon, y vuelves al ruedo! Si que hay un experiencia historica cuestionable y no quisiera llegar a la caricatura, pero hay una gran leccion de humanidad, de ser hombre o mujer en cierta parte de la vision catolica contemporanea (el unico problema para mi es la necesidad de que haya que haber un dios que considero una proyeccion de la figura del padre dentro del alma humano: en este sentido digo que dios no ha muerto mientras haya personas todavia en la tierra pues dios es en una fabricacion-proyeccion-del hombre.) Y como consecuencia de la sencillez interna respecto a tus emociones e impulsos, te vuelves sencillo/a en el trato que tienes respecto a los demas.
"Una persona de trato sencillo": lo mejor que puedan decir de ti en la vida.

@manuel garcia, @seth knight:
Me han gustado las cosas que expresáis, tienen mucha chispa.
Las personas encantadas de conocerse y que son tan abrasadoras como el fuego, ¡QUEMAN! es su naturaleza.
El agua te va ahogando poco a poco, al igual que la falsa modestia.
¿Qué os resulta más terrorífico?

Interesante y hermoso.

La vida es bella en tanto en cuanto nosotros seamos capaces de apreciarla con sencillez, de aceptarnos a nosotros mismos con sencillez, de aceptar al otro con sencillez. Para mí, ahí radica la verdadera belleza. Y es algo tan difícil de conseguir...nos gusta complicarnos tanto la vida que...
Gracias por un buen artículo y una mejor reflexión

LA SENCILLEZ EN LA CULTURA ESPANNOLA
El realismo, algo asi como ROMA en las ideas de Octavio Paz: el trazo de lineas descartianas, rectas y perpendiculars; el hecho de que los Reyes Magos tardan dos semanas en llegar a Belen una vez que hayan visto la estrella (y las consiguientes complicaciones para los ninnos en Navidad pues no cuentan historicamente con un sennor que en 24 horas, circula el planeta repartiendo regalos). En el lenguaje: “las cosas bien hechas”, “como Dios manda”: una idosincrasia en las personas tendente al orden, la pulcritud, la vida ordenada; la vestimenta con tendencia tradicional hacia los colores escuros, de estilo mas bien conservador (salvo –o con alguna variacion-Catalunna). Cierta tirania del grupo sobre el que se aparta o se destaque de alguna forma de los demas.
En la ensennanza: obsesiva atencion a letra de los ninnos (incluso hoy en dia, cuando no tiene importancia ya alguna!); el intento de “correcion” de los alumnos desordenados; la ensennanza basicamente como instrumento de transmission cultural, con poca atencion a las habilides mas abstracts como el fomentar la curiosidad, por ejemplo, y el pensamiento creativo incluso en un entorno academico superior.
Prueba de todo ello: la reaccion historica en contra, en cierto sentido, de la norma cultural predomiante que se pudiera observar en el arte tanto pictorico, ciertos directores de cine (Bunnuel, Berlanga, Almodovar….) como muchos escritores. Y particularmente en el Modernismo: que Octavio Paz lo define como el verdadero romanticismo de mundo hispano salvo que el nivel de industrializacion, aunque bien establiblecido no era realmente comparable a la de Alemania o Inglaterra. Podria haber sido tambien una froma de reaccion en contra de cierta logica cultural de la “sencillez” y “equilibrio”, la de “cada cosa en su sitio”?
LA POLITICA EXTERIOR DE ESPANNA A PARTIR DEL PSOE
Basicamente la de Franco al principio, salvo las maniobras por parte de FG respecto a la OTAN y CEE, maniobras politicas nada sencillas desde luego. Pero de la situacion mundial durante la Guerra Fria se mantuvo cierta “sencillez” para Espanna y el resto de Europa: un gasto militar mucho menor y unas economias que dependian de hecho de cierto mundo “exterior” de capitalismo puro y duro en EEUU, mientras la “sencillez” de la vida europea del Estado del Bienestar seguia adelanate dentro de las murallas de “Fortaleza Europa” (hasta que el suenno se hizo pesadilla, claro.)
Disculpen la sencillez de la vision que expuesta, lo somero de los ejemplos, y que vaya por delante el perdon por el atrevamiento, que no poca ofensa causara a alguno, que el tema ya me lo conozco.
Eso que tiene la sencillez, en mi opinion.
Un abrazo

Agradable reflexión. Gracias de nuevo.

LOS INTERESES DE LA COCA COLA
Dicho de forma franca y directa: la simpleza existencial. No hay otra cosa entre bastidores en cuanto al teatro Planeta USA. Esto, amigos, es uno de los problemas de la sencillez: acaba siendo parte de la complejidad mecanica que mueven otros. Y tambien dicho con franqueza: casi contemplaria morirme de cancer que vivir tal y como la plannidera aquella de FACEBOOK se plantea la vida: anda que se lo meta donde le quepa! Pero, de eso nos hemos beneficiado todos en los ultimos 20/30 annos: la patetica vision de la vida del FB (incluso antes de que esto existiera); la falta de critero por parte de la mayoria de las personas, esto que llaman "el mercado", clave de nuestro bien estar material de hoy en dia. No se fien de la sencillez del todo: te acabaras entrerrando vivo/a en ella. El autismo espirtual: SALUD!

Aaah! verdad! no es que este articulo pretenda elevar nuestra imaginacion a una utopia es luchar con todas las turbulencias y extremos de esta era tan desordenada en materia de tener mas y lo mejor para asi sentirnos satisfechos con nosotros mismos. lo entendi! (no es presumiendo de buen entendedor)

muy bueno. que bueno que hizo incapie en la indiferencia y la sencillez. en ser conforme y esforzarse por exigir mas o ser ambicioso a la vez. demasiado claro!! creo que es mas bien un nuevo concepto del antiguo concepto de la palabra sencillez. ni sumes esto pero tampoco restes aquello ni te excedas en esto pero no des por terminado aquello. Mis felicitaciones para los autores.

QUE, GRANDE ES LA CULTURA, Y QUE LEJOS, ESTA DE ENCONTRARSE, CON LA HUMILDAD, FRENTE, A FRENTE !!!!!!!

Ya, y tu amigo Zapatero, de sencillez nada de nada. Ahora en París, expiando sus culpas con el acarreo de los caprichitos de su moza...

Vivimos, creo, en una época de excesos, barroca y la austeridad impuesta no puede ser de ningún modo sencillez. Sería confundir pobreza con sobriedad, necesidad con virtud. Es cierto, y me meto a mí el primero, que incluso en nuestra forma de escribir, de expresarnos, pretenciosamente, con términos alambicados, pretendiendo ser originales, no se hace, la mayoría de las veces, sino un ridículo ejercicio de narcisismo. La comunicación, es decir, la comprensión, el pensamiento, la reflexión quedan en un segundo término ante la exhibición de los bíceps intelectuales, de la pirueta conceptual, con que no pocos nos comportamos en nuestras apariciones circenses en estos blogs (imagen orteguiana). Nada más alejado del saber que la verborrea del autista intelectual. Sin embargo, creo que el ámbito del pensamiento y el lenguaje no hace más que reflejar los valores sociales del exceso, la exhibición y la vanidad. “Antes muerta que sencilla” decía una canción popular. Y es que si lo pensamos, el consumo, clave para el mantenimiento del sistema económico y social, requiere de esos valores. Cualquier anuncio publicitario no hace sino fortalecer la idea de que la felicidad y el éxito están en el exceso, la exhibición y la vanidad. No obstante dichos valores son consustanciales a la naturaleza humana como seres sociales que somos. Ya en el siglo XV Tomás Moro imaginaba a los utópicos en una sociedad ideal donde la vanidad de la apariencia, de los lujos pueriles, que tantos quebraderos de cabeza y tantos necios esfuerzos costaban a sus contemporáneos, habían sido definitivamente olvidados por los habitantes de Utopía. Dichos ciudadanos, no obstante, valoraban la alegría y los placeres y hacían todo lo posible por ser felices, pero habían descubierto la alegría y el placer no en la ridícula exhibición de riquezas para provocar la envidia y el sentimiento de inferioridad de sus conciudadanos, lo que neciamente hace creerse a los hombres que exhiben su riqueza como superiores y a ello dedican todas sus fuerzas y tiempo, sino que los utópicos valoraban el tiempo libre (sólo trabajaban seis horas al día) para dedicarlo a cultivar su espíritu leyendo, estudiando, conversando, paseando…Algo vería Tomás Moro en su época cuando imaginó Utopía como una sociedad ideal en contraposición a la real en la que él vivía.
Sin embargo, nuestra época ha llevado hasta el extremo la promoción de la vanidad, el lujo y exceso y ello porque, como decía, es necesario para el mantenimiento de nuestro sistema económico. Si en tal época uno intentara vivir como los utópicos posiblemente se expondría a la incomprensión y burla de sus contemporáneos. Sería calificado de “perdedor”, de “muerto de hambre”, de “fracasado” y apartado del trato respetuoso de sus vecinos. Sólo le quedaría pues seguir la “escondida senda” de que nos hablaba Fray Luís de León y apartarse del “mundanal ruído”.

SENCILLEZ COMO ARCADIA?
Cuidado con eso que el tema no es tan "sencillo" y la vida nunca ha sido no ni va ser asi!

tanto hablar de austeridad y era precisamente la sencillez lo que mejor nos puede conducir a ese otro modelo de vida al que al parecer estamos abocados¡¡¡¡ cuanto ganaría la política con más sencillez y menos protocolo, con más sencillez y menos demagogia, con más sencillez y menos lecciones de responsabilidad....gracias de nuevo angel por la reflexión...isabel martinez

¡Cuánta falta hace que la sencillez nos permita llegar a la clarividencia de la poesía! En este mundo de voces prepotentes y definitivas, celebramos, profesor Gabilondo, su intensa voz poética.

EN BUSCA DE LA CONTUNDENCIA
Es que la hay en la vida: cierto que hay algo bello en "lo pleno" a la vez que "efimero" de la vida cotidiana; pero no renuncio nunca al destello emocional de la estetica, el calor de los demas y el toparme una y otra vez con el bocado de salomillo que viene a ser la logica-las inferencias a partir de ella-todo aquello que me lleva a un paso mas hacia el porque de las cosas y del comportamiento humano. Y a veces la contundencia te la sirven cuando menos la esperas, como que das la vuelta y la tienes a mesa puesta!
(En la carta figura como PERSPECACIA, y esta un precio razonable. Sugiero que la pidan poca hecha!)

De lo que hablas es Universal e Intemporal, aunque hay que ver entre líneas para reconocerlo.Todos los ministros pueden ser blogueros, aunque pocos blogueros pueden ser ministros.Hay tantas citas y tantos libros en la historia de la humanidad en los que que se relatan y transmiten estos mismos mensajes, que ya suenan vacíos, aun cuando reconozco, Angel, la tupida formación que tienes y lo correctamente que compilas todas las ideas; máxime siendo Catedrático de Metafísica, que escribes de esta materia casi de corrido, como sin pensar. Aun así, "En tiempos difíciles y complejos..." necesitamos hechos y no palabras. Te preferiría en el anonimato "haciendo" que en este lírico blog dando pases mágicos. Gracias

la sencillez es libertad!! pip...

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Sobre el blog

El salto del ángel es un espacio de reflexión, de pensamiento sobre la dimensión social y política de los asuntos públicos, sobre la educación, la Universidad, la formación y la empleabilidad. Busca analizar los procesos de democratización, de internacionalización y de modernización como tarea permanente, con una actitud de convicción y de compromiso.

Sobre el autor

Angel Gabilondo

Ángel Gabilondo Pujol es Catedrático de Metafísica de la Universidad Autónoma de Madrid, de la que fue Rector. Tras ser Presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas, ha sido Ministro de Educación.

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