Eros

Amores imaginarios (1): 'El último tango en París'

Por: | 04 de enero de 2012

Autor invitado: Josep Giralt (periodista, Barcelona).

"Lo permitido no atrae; lo que no lo está, excita nuestro deseo". (Ovidio, Amores, II, XIX, 3)

 Se puede entrar en el amor y en la muerte una única vez. Es lo que que ocurre cuando uno descubre por vez primera en la pantalla el que será para siempre el amor de su vida. Los franceses siempre tan evolucionados e inspiradores suelen decir: “El placer nunca esta en casa”. Como considero que el amor real es como un préstamo hipotecario a cuenta de un futuro incierto, concentraré mis energías en hablar aquí de amores imaginarios, que definitivamente suelen ser más duraderos.


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Encuentro furtivo, Maria Schneider y Marlon Brando se tropiezan un buen día en un piso. Y fuera sólo está París.
 
El amor no encuentra su sentido en el ansia de cosas ya hechas, completas y terminadas, sino en el impulso y en la fuerza de la imaginación. Por un lado tenemos el amor trascendente, el real, el que debería otorgar más peso y sentido a nuestras vidas y por otro lado, el de nuestros fantasías.
Pero finalmente ¿qué preferimos los hombres para divertirnos? ¿Para vivir? ¿Qué buscamos realmente? ¿Es posible que el deseo sexual por nuestros mitos sea más duradero que el real? ¿Qué es verdad y qué no? ¿Cuándo hacemos el amor con nuestra pareja pensamos en nuestra cónyuge o en Scarlett Johansson? Según los expertos, para los  hombres, una escena subida de tono o un comentario malicioso puede ser mucho más efectivo que algunas cenas a la luz de la luna. 
Por consiguiente, ¿es cierto que somos capaces de vibrar ante una escena no demasiado explícita, ante un gesto? ¿Puede estimularnos simplemente una conversación picante?
 
En lo que sí parecen estar de acuerdo la mayoría de los pensadores es en que las pasiones suelen ser siempre atropelladoras, se llevan casi siempre nuestros razonamientos. Entendemos, por tanto, que la pasión por nuestros mitos eróticos y por el cine, no debe ser racionalizada. La pasión cinematográfica es una “demencia” que penetra en nosotros cada vez más profundamente.
 
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Escena de El último tango en París. Prohíbida en España, fue moda cruzar a Francia para verla; o mejor, verlo. La fotografía del filme tenía la firma de un grande del gremio: Vittorio Storaro.

Desde que era pequeño me dí cuenta, yendo de película en película, de cuánto desengaño subyacía acerca de la vida, del amor o de la muerte. El cine y su capacidad de diversión y reflexión me ha enseñado que entre muchos se sufre igual, pero se soporta mucho mejor. Tras ver miles de películas llegué a la conclusión, de que el cine, los libros y el sexo compartido, son la antítesis de la soledad. Desde aquí rendimos un sentido homenaje a todas aquellas mujeres, hombres, escenas, diálogos, frases, canciones y conversaciones que han iluminado y estimulado nuestra (mi) necesidad de pensar, sentir y gozar. En definitiva, de existir.

  

 

Nuestra primer recuerdo es para un clásico coproducido por Francia e Italia, El último tango en París, de Bernardo Bertolucci (1973), que marcó época y generación. Entre otras cosas con diálogos como éste:

- ¿Qué estoy haciendo contigo en este piso? ¿El amor?        

- Bueno, digamos que... prácticamente lo que estamos haciendo... es darnos gusto.        

- Ya veo que me tomas por una cualquiera.        

- ¿Qué?... que te tomo por una ¿qué?        

- Por una zorra.        

- ¡Aaah!, ¿te refieres a una prostituta?        

- Sí, una prostituta.        

- Nooo, sólo eres una jovencita anticuada y complaciente que intenta parecerlo.        

- Prefiero ser una puta.        

La acción dramática transcurre en un piso burgués destartalado, sucio, lóbrego. De enormes dimensiones, abandonado y roto como si se tratase de una persona herida. El escenario es fundamental  y parece indicarnos la importancia del espacio para llevar a cabo una aventura sexual que no quiere conocer límites. Brando es un norteamericano de mediana edad, que arrastra el peso de una vida saturada de frustraciones y dolor. Schneider, es una parisiense de 20 años, de familia acomodada, que trabaja como actriz aficionada y que apenas es capaz de comprender la magnitud de la herida que arrastra él.

Empiezan los encuentros carnales entre dos personajes que no se conocen, ni quieren conocerse. El sexo entre desconocidos es para ellos el recurso a través del cual buscan un exceso salvaje, la trasgresión de los convencionalismos, la libertad y la plenitud física. No existe más comunicación que la de sus cuerpos, apenas unas frases que tan sólo utilizan como recurso para aumentar la tensión sexual.

Es el sueño erótico de todo hombre: puro sexo, exento de responsabilidades y de convencionalismos morales. El encuentro de dos seres donde no existe más freno que sus propios deseos ni otras leyes que la de sus caprichos. No hay nadie entre esas paredes desiertas que dictamine qué placeres son puramente masculinos o cuáles femeninos. El peso de la existencia y de ataduras absurdas pierden su importancia al cruzar el umbral de la calle Jules Verne.

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Maria Schneider y Marlon Brando en escena.

- Oh! Yo soy caperucita roja y tu el lobo feroz. Uhh... que brazos tan fuertes tienes... 

- Son para estrujarte mejor pequeña mía.        

- Que uñas tan largas tienes.        
 - Son para arañarte mejor el culo.        
- Uh... que cantidad de vello tienes.        
- Es para que tus ladillas puedan esconderse mejor.        
- Uuuh... que lengua tan larga tienes.        
- Es para metértela mejor, querida mía.        
- Y esto ¿para qué es?        
- Esto es para tu felicidad y mi... ¡mi falocidad!        
- ¿Falocidad?        
- Falo, pene...

La película nos ofrece diversas reflexiones interesantes que bien podrían ser planteadas por cualquiera de nosotros: ¿es el hombre dueño de sus gustos?, ¿no es para este fin para el que nosotros hemos nacido?, ¿no debería una muchacha bonita preocuparse más de disfrutar, que de engendrar?, ¿de qué puede servirle al ser humano una vida sin placer? La falta de autocontrol, de moderación ¿puede perjudicar más que una vida plena de inseguridades y  miedos?

Marlon Brando en su personaje más nihilista, nos muestra que un hombre vulnerable, frágil y derrotado, todavía es capaz, como último acto existencial, de no resistirse a la tentación. El sexo como último episodio lúdico de la vida.

Hay 24 Comentarios

Gracias a todos por vuestras respuestas.
La informacion de la violación de Maria Schneider en el Último Tango (que rodó cuando contaba 19 años), se publicó en 2007 en una entrevista a la actriz que recoge el periodista Salvador Llopart en su obituario publicado el 4/2/2011 y que podéis encontrar en la Red. Dice así: El último tango en París hizo de ella una estrella, a pesar de ella misma, Maria Schneider, que odiaba el filme de Bertolucci profundamente. Pasados los años, acusaría al director italiano de "gángster y de chulo", y diría que Brando la violó en el plató, directamente. Y que, de aquella película, sólo había aprendido una lección, una sola: "Nunca te desnudes delante de un hombre como Brando, aunque este te jure que lo estás haciendo por el arte cinematográfico".

Sobre la escena de la mantequilla la actriz también afirmó: "Fue una idea de Marlon Brando. Y Bertolucci me dijo lo que tenía que hacer poco antes. Me engañaron. Casi me violaron. Esa escena no estaba prevista. Las lágrimas que se ven en la película son verdaderas". (El País, 3/2/2011). Por su parte Bertolucci afirmó: "Su muerte ha llegado demasiado pronto, antes de que pudiera volver a abrazarla, y al menos por una vez pedirle perdón" (El País, 3/2/2011).

No estuvimos allí para conocer la veracidad de los hechos, pero podemos pensar que en 2007, cuatro años antes de su muerte, pocos beneficios obtendría Maria Schneider de lanzar un bulo así, contra dos grandes tótems del Séptimo Arte. Y, en cualquier caso, todo hombre o mujer que afirme haber sido violado merece un respeto a su dolor y a su vivencia.

Grandisimo artículo alrededor de una gran película que pienso ver con una jovencita de 19 años. Cada vez, creo en el destino.

Saludos

Lizzie B, POLANSKI?...si me olvidé de mencionarlo. Ya ve usted, con una causa abierta en el Estado de California por delitos contra menores (que no prescriben) y siguió recibiendo Premios Oscar en la propia Ciudad de Los Ángeles (claro, no asistió porque si no lo metían preso).Por eso le comento a SIRI y ahora también a usted: el arte...esta mas allá de la moral, las buenas costumbres y algunas veces… también de la Ley. Hace poco a Polansky lo detuvieron en Zúrich, Suiza con la pretensión de extraditarlo a los EU…imposible LizzieB. El mundo del arte se movilizó inmediatamente, incluso la joven drogada y violada en la casa de Jack Nicholson por Román Polanski en 1977, Samantha Geimer, pidió desde Hawái(donde reside junto a su familia) que pongan en libertad al gran polaco, francés, universal director de cine.sc

Brando,Bertolucci de los grandes entre los grandes y por algunos comentarios veo que muchos no entienden de qué va el cine...No creas todo lo que ves, no creas todo lo que lees, cree sólo en la mitad de que experimentas...que el mundo es sueño.

No he insultado a nadie y menos que a nadie a usted.Eso lo primero.Segundo: está muy feo lo de mentir.Que haya insinuado con algunas palabritas a ese posible "grupo" que dices, un "grupo" por otra parte que no representa a nadie ( y por lo tanto a nadie en particular mentaba ni insultaba yo) como es el "feminista", eso no quiere decir insultar.Primera acepción de la RAE: Insultar: " Ofender a alguien provocándolo e irritándolo con palabras o acciones." Quédate con lo de "alguien". Es decir, nadie puede sentirse agraviado( repito, no daba nombres) a no ser que represente lo que le molesta que un día venga uno y lo critique, pero no dando nombres ni refiriéndome a nadie en particular, como era el caso, ¿cómo puede ser que insultar venga a ser meterse con un ente como es el feminismo? ¿Qué criterio usas? ¿Acaso te he nombrado sin saberlo? ¿O es que cuando se dice de los políticos que son todos unos corruptos, pueden darse por aludidos Rajoy o Rubalcaba y censurar a quienes así hablan? ¿Desde cuándo?

LizzieB, saludos. Y como sabe usted que ocurrió? sc

La película es de dos grandes y por ello no voy a menospreciarla. Pero según declaraciones de la propia actriz la escena de la mantequilla fue algo planeado entre Brando y Bertolucci, y q a ella le provocó muchos problemas mentales y psicológicos, se sentía humillada y utilizada. Porq no dijo nada en su momento? No sé, quizás porque era una niña casi desconocida actuando con dos grandes? Por qué no demandó? Quizás por la época en q se desarrolló? No sé. Admiro a Brando y a Bertolucci, pero eso no quita q no lo hayan hecho "por amor al arte". Tampoco voy a exagerar como Sergio Carioni hablando de Picasso o Chaplin, por favor! como sabe usted q aquello no ocurrió? Por ser los grandes nombres del cine q todos reconocemos eso no los hace menos humanos que a mi o a ustedes y por ende capaz de cometer errores o excesos.
A Polanski lo reconocen por ser un gran cineasta y así y todo violó a una menor de edad y huyó el muy cobarde, y...?

SIRI, saludos. Antes de contestarle fui a revisar la escena en el film en cuestión (todo Brando y Bertolucci están en mi colección) y lamentablemente debo decirle que discrepo de su hipótesis de violación de María S. por parte de Marlon B. En la escena, María no grita, sino que repite textualmente lo que Brando le pide que diga: básicamente son ataques contra la Iglesia Católica (que no transcribiré para que no se me acuse de anticlerical). Es muy probable que “la leyenda” se haya tejido a partir de esos mensajes…no sería la primera, verdad? Si María S., como usted afirma, hubiera sido forzada contra su voluntad por Brando con la complicidad de Bertolucci y las 8 o 12 personas entre asistentes y técnicos que se encontraban en el plató (¿) la demanda millonaria no se hubiera hecho esperar. María S. recientemente fallecida de cáncer a los 58 años de edad, pasará a la historia del arte no por los papeles que interpretó antes y después del Ultimo Tango…sino precisamente por haber estado una vez en un film junto a Marlon Brando. Nada ni nadie invalidará nunca al Ultimo Tango en Paris como referente del Arte Universal. Sería como pretender invalidar a Chaplin por comunista, a Bogart por borracho, a Marilyn por suicida, a la Piaff por promiscua, a Picasso por mujeriego o a Oscar Wilde por gay. El arte va más allá, mucho más allá de la moral y las buenas costumbres. Nota: el tiempo que María S. se alejó de su trabajo, no fue por el “síndrome de la mantequilla”, fue por sus problemas con la heroína y el alcohol.sc

Cositas Lindas: los insultos a personas o grupos de ellas no están permitidos ni en los textos ni en los comentarios. Mil gracias por escribir.

Lo último que me esperaba es que me censuraran la mitad del comentario que me he MOLESTADO hoy en escribir. Y siendo el blog escrito por cuatro féminas, ¿a quién tengo que echarle la culpa, al invitado Josep Giralt? Adiós.

¡Hay encuentros inesperados que de tan reales parecen soñados!

a Siri: Según una entrevista que le hicieron a Bertolucci, la escena en cuestión la repitieron 6 veces y se quedaron la última y de más, digamos, violencia-dramatismo, así que no sé donde ves lo que ves o que lo quieres ver en una película excepcional.

Siri, es muy probable que Schneider se quedara "traumatizada" porque se acabara la película, porque se le hubiera acabado el roce con el gran Marlon y no quisiera sucedaneos una vez roto el contrato del Último tango...La última foto( que no "invalidan el filme" precisamente) que aquí se cuelga así lo indica, un pacto que a qué vamos a engañarnos, en una mente sensible, a cierta edad, contemplarlo no deja de resultar todo un acto violento.

Brando sera por siempre uno de los grandes actores(volvera otro como el?)...Bertolucci genial,el trabajo de Storaro impecable,la musica del Gato Barbieri(oscar)...en fin, un film que mas alla del sexo y del "ruido" que causo en aquellos dias...pasara a la historia por haber tenido el coraje de "ir mas alla" de las concepciones petite burguesas dominantes tambien en el arte, el concepto de "lo bueno y lo malo" y el pecado.En 3 palabras:un film REVOLUCIONARIO para su epoca.sc

...el comentario anterior no pretende ser más que algo escrito con humor -¿qué es el humor para unos y para otros?-, un poco al límite quizás...

No pretendo que se vincule con lo expuesto por Siri acerca de la "violación" de Schneider por Brando, cosa que desconocía hasta ahora.

Aprovecho para preguntar si ese hecho está probado y, de ser así, que consecuencias legales tuvo para el señor Brando, si es que las hubo.

Señor Giralt, ¿era mantequilla o margarina?
Parece que María Schneider era vegetariana y le sentaban mal las grasas animales...

En la escena de la mantequilla, Marlon Brando violó a Maria Schneider ante la complaciente mirada de Bertolucci, que no dejo de filmar; es más, ninguno de los presentes en el rodaje hizo caso de los gritos de Maria y de su petición de ayuda. Profundamente traumatizada, la actriz se retiró durante años de la profesión.
Estos hechos invalidan el filme como referente de cualquier tipo.

No hubo amor más duradero que áquel que nunca fue correspondido.

El placer siempre se encuentra fuera de casa, porque la casa sólo la habitamos nosotros aunque vivamos en pareja. No existen las casas compartidas ni las vidas en común, por ello, el placer y el amor nunca nos pertenecen realmente, no son espacios habitables.

Saludos.

Por lo que leo, a la gente le sigue resultando difícil hablar de deseo, sexo, imaginación... Parece que se siguen "removiendo las tripas" más profundas en cuanto se aborda el tema con cierto rigor intelectual. Y además hay que leer expresiones como "desfogue sexual" con una carga peyorativa y silogismos con trampa en el planteamiento y en la conclusión: "...dos seres que sólo buscan saciar sus necesidades y que cada encuentro es un lazo al desgaste..."
¡Ni Rouco lo diría mejor...! ¿No sobra moralina y falta valentía moral...? Oigo demasiadas veces lo de que "el sexo ya no es un tema tabú"... ¡precisamente en boca de quienes hacen afirmaciones como las señaladas al inicio...!

En este artículo no se habla de amor imaginario sino de deseos. Un típico encuentro sexual en entre dos seres que sólo buscan saciar sus necesidades y que cada encuentro es un lazo al desgaste.
El amor enciende luces en cualquier lugar. El desfogue sexual apaga solamente represiones enterradas en el subconsciente.
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#####Twitter: @ElAireDulce
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http:// www.elairedulce.com

Muy buena la primera frase... pero vaya!


(segundo párrafo)

http://freudenelparquemexico.blogspot.com/2010/03/amor-y-muerte.html

el sexo explicito, el deseo y lo erotico, culturalmente el sexo llega a despertar indiferencias y extasis, canalizar emociones y hacer del amor algo crudo sin color y tal vez inhospito puede radicalizar los sentimientos, entre ellos los que producen placer.

Mea culpa. Yo fui de los que vi el film precisamente en Paris,cuando de emigrante trabajé para la compañía Hennesy en Cognac,no me pareció en un principio peor ni mejor que otras X ,que solíamos ver los que nos moviamos por Francia (entre otros paises) en busca de una libertad que se nos negaba en
España,ademas, si le añadimos las ganas de no ser paletos y saber algo mas,de que iba el sexo tan vilipendiado por la católica y apostólica España...¡Que tiempos!.No los hecho de menos pese ala famosa crisis, actualmente lo concerniente al sexo esta algo mas clarificado y aceptado,aunque seguirá habiendo tabúes en nuestra mal llamada 'sociedad', de ahí que se seguirá escribiendo sobre el y me alegro, ademas (no te sepa mal Giralt)¿a quien no le pone que sea comentado por mujeres?Os quierooooo.

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Sobre el blog

Ni enciclopedia ni consultorio sexual al uso. He aquí un rincón erótico festivo dedicado a las relaciones y la atracción entre seres humanos, esa faceta que nos hace la vida más placentera, tierna, amorosa, plena… Un blog coral, con cinco autoras de todo origen y condición, que apuesta por el juego, la provocación, lo sensual y el sexo como acto libre, adulto, compartido, real o ficticio, siempre divertido... Eso sí, si tu mirada no es amplia y tolerante, mejor no te detengas aquí. Coordina Analía Iglesias. No sólo se admiten firmas invitadas, sino que son deseadas.

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Esther Porta. Segoviana, fue becaria en el mítico Tentaciones y allí hizo de todo hasta que sus conocimientos de sexo la convirtieron en Beatriz Sanz. Y gracias a ella, publicó artículos semanales de sexo, dos libros y fue reclutada como sexperta guionista del programa de Canal +: 'Sex Pópuli'. Cuando casi se le había olvidado (lo de escribir de sexo...) se mete a bloguera. Y aquí está, con tantas ganas de sexo (del uno y del otro) como siempre...

Venus O'Hara, de Reino Unido, con raíces irlandesas. Modelo fetish, actriz y escritora. Licenciada en Ciencias Políticas y Francés, reside en Barcelona, ha sido columnista sexual en varias revistas, tiene su propio blog de fetichismo y es creadora de 'No sabes con quien duermes', un confesionario para personas que llevan una doble vida. Publicó su primer libro junto a Erika Lust, 'Deséame como si me odiaras', en 2010.

Tatiana Escobar, de Venezuela (1976), ha escrito ensayos y poesía en español. Traductora y editora, en 2004 abrió en Madrid junto a sus socios la primera boutique erótica de España, La Juguetería Erotic Toys, para no tener que vivir de la literatura. Desde entonces vive del sexo. Y escribe, a veces, para sus amigos.

. Madrileña. Soñó con escribir y pronto descubrió una vía: el periodismo. Pero como tampoco valía narrar sobre cualquier cosa, eligió suerte y remató la faena con un posgrado en Sexología. Ha trabajado en suplementos de salud y medios especializados. Con la práctica ha acabado por darle un toque más sensual a sus letras. Y con ellas sueña en escribir, ahora, un libro.

Ilustracion
Venus O'Hara, Anne Cé y Silvia C. Carpallo, según 'Mi Petit Madrid'.

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Lux eróticaLux erótica. "Escribir sobre sexo era la propuesta y me sentí estimulada. Después de tantos años como periodista cultural y con mucha vida hecha en torno a la información y a la actualidad, tenía ganas de ponerle carne a la crónica. Porque nuestra más genuina actualidad como personas pasa por el relato del erotismo. Porque de atracción y de relaciones hablamos todo el tiempo en este tiempo occidental con ciertas libertades individuales garantizadas y rebosante de espíritu lúdico pero también algo desafectado y con nuevos descompromisos adquiridos...". Anne Cé.

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