Hace unas semanas hablábamos de la íntima relación entre el arte y lo erótico y de algunos museos del sexo instalados por doquier que intentan mostrarla de un modo u otro. Seguimos ahora con propuestas de algunos de estos sitios sugerentes donde uno/a puede aprender, curiosear o pasar un rato entretenido.
Modelo de vibrador femenino de 1928 del Good Vibrations Antique Vibrator Museum.
Si bien citamos un parque de esculturas eróticas como el Jeju Loveland o un museo dedicado exhibir los penes de todo de tipo de animales, en esta ocasión les toca turno a los vibradores.
Good Vibrations Antique Vibrator Museum está situado en la ciudad de San Francisco (California) y profundiza en la historia de tal aparatito a través de distintas piezas de coleccionista y bastante información. Podemos aprender, por ejemplo, lo de moda que se puso la entonces llamada histeria femenina en el siglo XIX y lo que supuso el vibrador como tratamiento. Así, se exhiben todo tipo de vibradores dedicados a este fin, para luego continuar con aquellos que se utilizaron como método para conseguir salud y belleza, y por último, como juguetes para un disfrute mucho más erótico.