¿Qué es lo más ambicioso que te han propuesto antes de hacer el amor contigo? Es una pregunta que entenderán bien las chicas hetero, porque creo que el mundo gay no se rige por la misma (aparente) necesidad del argumentario previo (¿o también hay speech falaz y fugaz?). Podríamos hacer un ránking de los mejores ‘versos’ (como le decimos en Argentina) de seducción.
Seguro que en este mismo momento te acuerdas de alguna charleta masculina muy currada para ligar con buenas artes y allanar el camino hacia la cama. ¿A que hay alguna promesa ingeniosa que te sigue haciendo sonreír, por lo trabajada, cada vez que la evocas?
Hay algo que agudiza el ingenio de los hombres en ese momento (una treta evolutiva para resultar elegidos, quizá) y que a nosotras nos invita a jugar a que les creemos por ese ratito, siempre que compartamos las ganas de que su misión sea exitosa, claro. Y es posible que, mientras dura su cortejo, ellos también se estén creyendo un poco lo que dicen…
"Como lo sabe la mayoría de las mujeres, una vez que el varón eyacula, deja de trabajar por el sexo, lo que explica el rápido vuelco desde ‘te voy a llevar a París por tu cumpleaños’, en plena estimulación erótica previa hasta ‘no podemos permitírnoslo, de ninguna manera’, después de la eyaculación. Lo que incita a ponerse la ropa de Armani, a embadurnarse de fijador, a tirar de cartera, es el deseo sexual. Se trata de una conducta apetitiva y obtenemos una recompensa cerebral cuando la llevamos a cabo", escriben los investigadores Larry Young y Brian Alexander en Química entre nosotros. Amor, sexo y la ciencia de la atracción.
En este juego no solo entra al terreno nuestra experiencia social y de relaciones, sino un proceso hormonal inconsciente, que tiene lugar en el cerebro, según estos divulgadores. En realidad, hay quien le llama amor a la oxitocina, aunque esta no es la única hormona que desencadena la dilatación del cuello del útero para el parto, la dedicación de una madre con su bebé o las ganas de acariciar al otro, cuando sentimos amor romántico*. La dopamina también es necesaria, tanto como los opioides, que activan el sistema de recompensa. "El sexo nos administra una inyección de opioides en el cerebro, ese pico es lo que provoca que el sexo sea tan placentero", leemos.
Tan placentero y tan buscado, al punto de hacer a los chicos trabajar costosas sintaxis para piropearnos y proponer conceptos marcianos como bajarnos la luna, mientras coquetean con sus crestas bien peinadas y firmes de gomina hacia el cielo y te pagan la cerveza (esto último, en plan adaptativo de cortejo terrenal).
Del lado del deseo femenino: "la occitocina facilita el acercamiento. Los opioides actúan en sus receptores para crear la euforia del sexo. La dopamina ayuda al cerebro a enterarse exactamente qué es lo que provoca esa euforia, a base de grabar una asociación entre el estímulo –un macho en particular- y la recompensa", escriben Young y Alexander.
Todo, y el disfrute del discurso romanticón, del que sospechamos cada sílaba (pero seguimos asociando idílicamente a ese chico), se acaba con la eyaculación. Las ideas exóticas, los piropos, las profusas propuestas creativas que hemos escuchado parecen disolverse en el líquido orgásmico del hombre.
Lástima, porque a nosotras nos gusta tanto la ternura del después (probablemente porque nuestra fisiología nos permite seguir listas para nuevos juegos por bastante más rato). En la mentada meseta femenina de los genitales irrigados en sangre y el cerebro inundado de occitocina y opioides, queremos más mimos con promesas (que ni la más lista pondrá en duda en ese momento).
Por eso, y de tanto que nos conocemos el proceso, según un grupo de científicos sociales dirigidos por Joshua Ackerman del Instituto Tecnológico de Massachusetts, a las mujeres "les hace más felices oír la expresión ‘te quiero’ de boca de su pareja después de tener relaciones sexuales que antes". Efectivamente, como observan los investigadores, tenemos la sensación de que cualquier palabra será dicha con más honestidad después de hacer el amor, "lo que implica que las mujeres otorgan un mayor grado de confianza a sus hombres después de acostarse con ellos".
Recomendadísima película: ‘El gran hotel Budapest’ de Wes Anderson, con Ralph Fiennes en el papel de Gustave H., un galán de los que exhiben sus mejores armas lingüísticas con las damas, a quienes cuida y respeta de palabra y acción, aunque a ninguna le puede dedicar exclusividad.
Y aquí estamos de nuevo dándole vueltas al asunto de las hormonas que producimos en nuestro cerebro cuando tenemos sexo y que, al fin, nos hacen jugar a creernos las promesas previas de los hombres y a esperar el milagro de un piropo de después. Pero, ¿qué es exactamente lo que desencadena el torbellino químico del amor, la confianza y la euforia? Dicen algunos científicos que el pene del hombre ha evolucionado como una herramienta útil para estimular la vagina y el cuello del útero, a fin de que se libere occitocina en el cerebro de la mujer, ella aleje cualquier temor y ansiedad y se abra emocionalmente a su amante.
De ahí el particular vínculo que supone para la mujer la penetración.
Manipular los pezones también está ligado con la producción de occitocina. En fin, que no pocos investigadores sugieren que los hombres utilizan su pene y los pechos de sus parejas para incitar a las mujeres a que cuiden de ellos (porque en algún lugar queda el recuerdo inconsciente del bebé amamantado y protegido por una hembra).
Tampoco hay milagros en el después del hombre, aunque hay indicios sobre el rol de otra hormona en dicha conducta, a partir del estudio de diferentes especies de mamíferos (por ejemplo, algunos tipos de ratones se quedan con su chica tras la cópula y otros le hacen una caricia amable a su compañera y parten inmediatamente después de eyacular, hacia otros rumbos). Ya se ha demostrado que la vasopresina cerebral que se libera durante el apareamiento influye directamente en la conducta de estos mamíferos después de la eyaculación… ¿Habrá individuos humanos que liberen y/o bloqueen más o menos vasopresina?
Por supuesto, nuestras locuritas culturales y otros factores ambientales hacen el resto, que no solo de química vive el hombre. Dejo las hipótesis hormonales y sociales en vuestras manos, o las de vuestras parejas, mientras seguimos inventándonos (unos y otros, unas y otras) ‘versos’ para hacer el amor con el/la que nos gusta.
*Paréntesis final para los negacionistas y evangelizadores contra el amor romántico: también hay razones hormonales y de química cerebral para estas sensaciones que no se pueden eliminar a fuerza de explicación racional, aunque quizá un libro estampado contra el cráneo del enamorón consiga romper esos circuitos del amor.
Hay 24 Comentarios
lo del chicle es abominable, desde luego a quien le ponga un chicle debe estar mal mal
Publicado por: Juguetes casposos, ambientes casposos | 03/05/2014 15:21:12
Un buen post, os recomiendo http://sexologiafemenina.wordpress.com/2014/03/25/reflexiones-preliminares-de-empoderamiento-femenino/
Publicado por: Daniel | 25/04/2014 21:26:47
Había una famosa frase, no recuerdo de quíen que decía algo así como: "a una persona se la conoce por cómo te trata cuando ya no te necesita". Alguno (y alguna) extienden muchos cheques en blanco que luego sus fondos no pueden cubrir...http://locosdeamor.org/2014/04/23/por-que-no-encuentro-pareja/
Publicado por: Cris | 25/04/2014 17:06:41
Había una famosa frase, no recuerdo de quíen que decía algo así como: "a una persona se la conoce por cómo te trata cuando ya no te necesita". Alguno (y alguna) extienden muchos cheques en blanco que luego sus fondos no pueden cubrir...http://locosdeamor.org/2014/04/23/por-que-no-encuentro-pareja/
Publicado por: Cris | 25/04/2014 17:06:19
Las caricias tras el sexo están sobrevaloradas. Francamente si el hombre es como debe de ser, te deja tan satisfecha, tan plena, tan agotada que hasta que te bese está de demás. Esas tres o cuatro horas mínimo que se entrega para el goce mutuo, le dan el derecho de pasar de ti y tu de él tras la experiencia plena sexual. Ahora bien, hombres que aguante al cien por cien tres o cuatro horas mínimo, no hay muchos. Así que tras esa corta media hora tres cuartos que pocos consiguen, dar mimitos a tu pareja no está de mas. Es mas, es casi obligado por tener tan poco aguante delante de una hembra que se confroma con lo que tiene y poco mas.
No es ser feminista ni machista, pero, aunque seamos el sexo débil, el ser multiorgasmicas nos diferencia de todos aquellos que tras uno,... se quedan sin aliento. Por eso, rozar, besar, acariciar, hacernos sentir un poco mas tras el orgasmo,... debería ser obligado sólo para consolar a nuestros cuerpos de que lo poco que hemos obtenido, vale la pena si luego va acompañado de besos, caricias, dedos perdidos en la piel desnuda.
Os paso un relato erótico de los mios para alegraros este viernes. Deseo que os guste: http://sonrrise.blogspot.com.es/2013/10/la-nota-relato.html
Publicado por: SORRISE | 25/04/2014 13:14:35
Si ya lo digo yo, que los hombres están hechos para joder...en todos los sentidos.
Publicado por: brrfff | 24/04/2014 23:19:12
El sexo no nos gusta.
La prueba es que nos importa más tener una relación sexual que la calidad de esa relación.
Aunque nos parezca evidente que perseguimos el placer erótico, el verdadero objetivo es el morbo de la posesión; el hacer al otro nuestro.
¿En qué consistiría, realmente, “el sexo por el sexo?:
http://www.contraelamor.com/2013/09/propuesta-erotica-i-designificacion.html?zx=a937cbdebf66bbf4
Publicado por: contra el amor | 24/04/2014 20:14:13
Los hombres son hombres y van por el mundo perdiendo la baba con tal de "pillar cacho", aunque hay que reconocer que el que lo hace bien, con clase.... es realmente excitante. Desgraciadamente no hay muchos de este tipo, pero aún queda alguno! ;-)
Publicado por: Masajes Trebol | 24/04/2014 19:59:38
Buenísima la película Gran Hotel Budapest! No veo mucha relación con el artículo, pero la verdad es que es una maravilla!
Por cierto, para pasar otro buen rato..: http://orgasmix.es/
Publicado por: OrgasmiX.es | 24/04/2014 19:58:25
Interesante reflexión sobre la "honestidad" de nuestras palabras tras el coito. Nosotros sentimos esa satisfacción tras la eyaculación, en la mayoría de los casos, sin propósito de continuidad.
El climax es el momento en que la satisfacción de un hombre encuentra la de la mujer, antes nada y después tampoco...
Leyendo también vería más probable que la satisfacción- en cuanto al sexo- sea más fácil encontrarla en parejas de mismo sexo.
Por cierto, dibujos muy chulos!!
Publicado por: gafasparamujeres | 24/04/2014 19:19:17
Apruebo el texto porque es verdaderamente creíble para la sociedad entera. Enhorabuena.
Publicado por: Torito | 24/04/2014 17:55:08
Eso se llama "prometer hasta meter", todo un clásico que el hombre utiliza para conseguir sexo.
En cualquier caso, hay muchos chicos que por mucho que prometen nunca meten y chicas a las que le prometen cosas tan absurdas como la luna, que se lo creen.
Con el tiempo, creo que todos aprendemos a no creer lo que nos cuentan.
Digo yo.
Publicado por: JuguetesEroticos365 | 24/04/2014 17:08:56
Vamos, que por mucho que digas que no al principio del texto, la verdad es que os tragáis (con perdón) hasta el fondo lo que os dicen al oido.
Siempre lo he creido. A muchas se les gana por el oido. Punto débil, muy débil.
Publicado por: Mich | 24/04/2014 16:27:06
Visita http://www.intimamente.es para realizar todas tus fantasias
Publicado por: dala | 24/04/2014 13:58:44
Quienes se suponen qué son charlatanes? Ellas no se quedan cortas solo hablan un poquito de aquí, un poquito de allá y cuando te das cuenta te ha arreglado el fondo del celebro. Ellos sí se lo creen pero y ellas?
Publicado por: Lasañ | 24/04/2014 13:56:02
vamos en el placer ya vamos colocados sin necesidad de meternos nada, ayyyyy ese que vive en la azotea no despierta hasta que se coloca. XD
Publicado por: celia | 24/04/2014 12:04:06
Todas estas estupideces pseudo científicas obvian los simples y gratificantes impulsos vitales que nos llevan al sexo por la búsqueda elemental de placer sin mas. Pulsión sabida por los siniestros inquisidores moralistas que determinaron que; "en vista de que el asunto de la jodienda no tiene enmienda, a todo aquel que folla, se le cortará la polla"... y ni aun así.
Publicado por: Sh | 24/04/2014 11:57:16
Carlos, tienes más razón que un santo...jejej, La sinceridad no es habitual hoy en día, preferimos una mentira piadosa y creernos los/las reyes/reinas del mambo.
Publicado por: rita | 24/04/2014 10:59:39
Esto es lo del dicho sobre los hombres "prometer hasta meter y después de meter, se acabo lo prometido", eso si, aquí se plantea en plan científico.
http://www.i-love-sexy.com
Publicado por: I Love Sexy | 24/04/2014 10:52:44
Dejate de hormonas ni ciencia de salón y vamos a lo que vamos. Las chicas se la pasan exigiendo sinceridad ante todo pero el fantasma es el que se las lleva al catre antes que nadie. Con lo que lo que quieren en realidad son buenas trolas para calentar.
¿Acaso no poneis una foto en las redes sociales para que os colmen de GUAPA aún sabiendo que CORRIENTITA incluso FEA es mas real?
¿Crees que alguno que dijera la verdad tendría alguna posibilidad?.
"Sinceramente" uno espera aplausos después de este comentario "sinceramente". Vamos, que me mientas ó te calles.
Publicado por: Carlos M | 24/04/2014 10:27:51
Esta claro que los hombres somos capaces de decir cualquier cosa con tal de mojar! jeje
http://viciosillos.com/
Publicado por: Viciosillos.com | 24/04/2014 10:13:06
Hay algo que supera esa barrera de la que habláis, y es la experiencia, el saber llevar a la mujer hasta el final sin perder la compostura. Es verdad que para llegar a eso tampoco se puede presentar uno en la cama con demasiada ansiedad, porque así sólo consigue eyacular al primer toque.
http://goo.gl/IqpQqi
Publicado por: Robertti Gamarra | 24/04/2014 9:57:44
La verdad es que si, hay que ver que cuando una está más cariñosa después de hacer el amor, es cuando menos cariño recibe. Hayyy, paradojas de la vida y de los hombres!!
Ni con el catsuit que me compré hace unos días...
https://sorprendeatupareja.es/store/index.php?id_product=939&controller=product&id_lang=1
Publicado por: Sorprende | 24/04/2014 9:31:22
Ostras, tanta informacion sobre la occittocina me abruma ja, ja, yo pensaba que al tocar los pezones simplemente "gustaba" ;-)
http://elbuhonero.es/infieles-en-la-red.html
Publicado por: REDes Infieles | 24/04/2014 9:13:41