Por Arola Poch*
Tenemos tendencia a etiquetarlo todo. Cualquier moda enseguida adquiere una palabra que la define (desde el ya desfasado metrosexual hasta el hipster, lumbersexual o fofisano, por nombrar algunas). Y el mundo de la sexualidad no se queda atrás. Tendencias sexuales, relaciones, orientaciones se definen con infinidad de palabras, tantas y tan específicas que es difícil estar al día.
Fotografía de Irene Díaz.
Tenemos muy claro de qué van la heterosexualidad, la homosexualidad, el lesbianismo o la bisexualidad. A algunos les sonarán, aunque seguro que resultan más ajenas, palabras como asexualidad, pansexualidad, sapiosexualidad, demisexualidad, transexualidad, cisexualidad, homorromanticismo, birromanticismo, heteroflexibilidad, bicuriosidad, panromanticismo, arromanticismo, grisexualidad, alosexualidad u homoflexibilidad. Todas estas palabras existen y definen una realidad, un gusto o una tendencia sexual. No pretendo definir todas y cada una de ellas, la sexualidad es tan compleja que necesitaríamos varios artículos para concretarlas. Mi objetivo es más modesto y se centra en una pregunta: ¿por qué etiquetamos?
Hay quien piensa que es innecesario hilar tan fino en esto de los nombres, que nos gusta clasificarlo todo cuando resultaría mucho más bonito ser y sentirnos libres como somos, sin tanto encasillamiento. Cierto es, pero etiquetar tiene también su lado útil.
- Sirve para dar estatus de realidad y visibilizar tendencias y orientaciones. Con la visibilización se contribuye a la normalización, a la naturalización y con ello a la tolerancia.
- Hace que nos sintamos parte de un grupo. Las personas somos seres sociales y cuando descubrimos que hay más gente como nosotros nos sentimos incluidos y bien. Gracias a Internet, estar clasificados en un grupo puede ayudarnos a encontrar más gente con nuestros mismos gustos o tendencias.
- Ayuda a definirnos y autoafirmarnos. Lo que me pasa/siento/experimento tiene un nombre, existe. Eso permite entendernos un poco mejor a nosotros mismos.
En definitiva, nos resulta más fácil comprender o describir ciertas cosas si tienen un rótulo. Si puedes decirle a alguien, por ejemplo, "soy demisexual" le estás dando un concepto para que se informe, sin necesidad de tener que justificarte o explicarte. Además estás transmitiendo que eso existe, quiero decir, no es que seas "raro" (o sí, pero fundamentalmente es algo que tu interlocutor desconoce).
Por cierto, y ya que ha salido el tema, ¿qué me decís de la palabra 'raro'? Es de las peores etiquetas que se pueden poner, por su significado peyorativo, y porque excluye del grupo. Por cierto, es muy diferente que otros te definan como 'raro' a que tú te autodefinas. Que no sea lo que tú conoces no significa que sea raro, puedes argumentar. Significa solo que es algo que tú no conoces. Muchos dejamos de usar este término, sobre todo en el terreno sexual, para hablar de "menos habitual" o de "sexualidades minoritarias".
Fotografía de Irene Díaz.
Sin embargo, no todo iba a ser bonito. En muchas ocasiones las etiquetas llevan asociados estereotipos que solo sirven para prejuzgar. Una etiqueta define, visualiza, incluye, pero luego hay que gestionar las reacciones de los demás (y, ya sabemos, de todo hay en la viña del Señor).
No caigamos en el reduccionismo: las personas no somos compartimentos estancos y cada uno de nosotros es un mundo.
Somos, nosotros y nuestras sexualidades, tan variables y tenemos tantos recovecos que resulta difícil clasificarnos. De ahí que encontremos innumerables palabras para intentar definirnos. Si alguna de ellas sirve para que alguien deje de sentirse 'raro', para que sienta que no está solo y pueda desarrollar sus gustos y expresar su erotismo libre y naturalmente, bienvenidas sean las etiquetas.
*Psicóloga, experta en sexualidad y blogger.
Hay 11 Comentarios
it have to be art in sex. sex is a art. http://masseurporn.com
Publicado por: Massage sex | 08/03/2017 12:09:56
Eres muy grande Arola, como siempre fantástica!
Publicado por: Juguetes Sombras Grey | 01/03/2016 22:37:49
ME QUEDO CON ESTO: No caigamos en el reduccionismo: las personas no somos compartimentos estancos y cada uno de nosotros es un mundo.
No creo que existan las suficientes etiquetas para todos nosotros, y por desgracia por muchas etiquetas que existan sigue habiendo muchísima gente que solo conoce la de "raro" , sobre todo cuando hablamos de BDSM y de sus juguetes...
http://www.divinaslocuras.com/fetish--bondage-lp-1-50-familia-198/
Publicado por: DJL | 26/02/2016 21:24:33
Las etiquetas siguen condicionando a muchas personas, en mi opinión es un atraso.
Me gusta mucho el artículo, interesante y bien escrito.
Qué triste que en todos los blogs vinculados a prensa escrita aparecen, como en los diarios, comentarios avinagrados. Amargados, los blogs son otra cosa, aquí los comentarios suelen ser cosntructivos y los vuestros rechinan.
Publicado por: Jacinto | 25/02/2016 20:30:30
Lo de "raro" por suerte cada vez se escucha menos, aunque todavía hay gente que califica así a otras personas. Lo que es de desear es que algún día desaparezcan los etiquetados en el sexo, y que cada uno disfrute de ello como más le gusta, siempre que no se meta con otra gente
Publicado por: DULCE | 24/02/2016 18:07:59
Mira Carlos no es tan inocuo, simple y banal, yo creo que dice cosas importantes que a mucha gente les puede servir; hemos pasado de un extremo a otro, antes todo era heterosexualidad y pobre de aquel que no lo fuera porque ya era el bufón de todo el mundo, ahora hemos pasado al otro extremo, por educación, sensibilidad, etc..., la moda ahora es que se lleve la homosexualidad o al menos que lo parezca, porque hay chicos que no son homosexuales y se depilan enteros, se depilan las cejas, se quitan el bigote, etc..., pero los tiempos cambiarán, a lo mejor nosotros no los veremos, y cada cual será como sea, su autenticidad, se verá de todo, variopinto, ni habrá tanto hetero como antes ni tanto homo como ahora.
Publicado por: Mar | 24/02/2016 13:56:50
Sinceramente, vaya articulo más inicuo, simple y banal. El contenido brilla por su ausencia y parece escrito con la levedad y rapidez de un glotón de comida rápida...ay, el signo de los tiempos
Publicado por: carlos | 24/02/2016 7:35:20
No, Mar, tengo la sensacion (respetuosa) que el mundo será mayoritariamente gay e nosotros los heteros seremos los raros. Todo está tan gay...
Publicado por: Paula | 24/02/2016 0:05:40
Ya lo sé Paula pero ya se les pasará y luego todo será más normal ¿no te parece?
Publicado por: Mar | 23/02/2016 23:41:06
Mar, la verdad és que hoy es pasa un estraño fenomeno: algunos grupos de homossexuales que ayer han sido discriminados y sufrido bullyng, hoy quieren que tu, heterosexual carga sus banderas, sus vestimientas, etc, etc, etc. Quieren imponerte cosas que tu no quires.
Publicado por: Paula | 23/02/2016 23:38:29
Sí, la verdad es que la sexualidad es muy complicada pero cada uno la lleva a su manera; en los años 60 y 70 era un aspecto que se controlaba muchísimo, sin embargo ahora, y, sobre todo, la gente jóven me parece que tiene menos problemas con tanto etiquetado y no marcan tanto como raros, exceptuando algunos grupos de gente especial, pero , en general, ven la sexualidad con más naturalidad.
Publicado por: Mar | 23/02/2016 22:42:56