Sección 'Cagney & Lacey'
Decadencia de
mujeres policía
Extraño género aquel que escupe su obra maestra al inicio, y después todo va en picado hacia la destrucción. Eso es lo que ha pasado (está pasando) con la sub-rama femenina del policial. Empezó en 1974 con mucha fuerza, y ahora está boqueando tristemente de la mano alcohólica de Holy Hunter.
En medio, altibajos más o menos decentes (según la década, claro) pero nada del otro mundo. Angie Dickinson sigue siendo, después de 35 años, la única reina de ese carnaval en donde la mujer tiene pistola y viste de azul.
Aquí, cinco ejemplos más o menos previsibles de esta decadencia.
Police Woman (NBC, 1974)
Acción, Crimen, Drama
La agente Leanne "Pepper" Anderson, sargento de policía, trabaja para la unidad de investigación criminal de Los Ángeles. Es tan profesional, es tan buena en lo suyo que no tiene problemas en apelar a distintos disfraces para conseguir la información que necesita y así atrapar a los malos. Los casos con los que debe lidiar esta hermosa dama —que encarnaba la actriz Angie Dickinson— varían en cada historia, desde asesinatos a tráfico de drogas. El éxito de la serie fue monumental, y abrió el abanico para la producción de nuevas historias policiales protagonizadas por bellas mujeres policías.
Charlie's Angels (ABC, 1976)
Aventura, Crimen, Drama, Acción
Tres policías que además de intrépidas eran hermosas y elegantes fue la clave del éxito de esta mítica serie norteamericana. Estas bellezas iluminaron la pantalla de los televisores en los años setenta y parte de los ochenta con escenas que combinaban acción y glamour. El trío original de la serie estaba integrado por Jaclyn Smith, Farrah Fawcett-Majors y Kate Jackson. Las chicas trabajaban para un misterioso millonario llamado Charlie, del que no conocían, ni ellas ni nosotros, más que su voz metálica que brotaba de un teléfono. Bajo sus órdenes se ocupaban de diferentes y riesgosos casos, sin perder la linea.
Cagney & Lacey (CBS, 1982)
Crimen, Drama, Misterio
Las detectives Mary Beth Lacey y Christine Cagney, una morena y otra rubia, conformaban un equipo eficaz en la lucha contra el crimen. Lo hacían, pobres chicas, en un ambiente poblado por hombres duros y prejuiciosos. En esta serie, además de casos policiales, también se mostraban, con realismo, los entretelones de la vida íntima de estas dos mujeres, obligadas a realizar siempre un esfuerzo extra por pertenecer al "sexo débil". El personaje de Cagney, al comienzo, fue interpretado por otras dos actrices, pero Sharon Gless, sin duda, fue la que estuvo más tiempo y permanece en la memoria de los espectadores.
Cold Case (CBS, 2003)
Crimen, Drama, Misterio, Suspense
Lilly Rush trabaja para el Departamento de Policía de Filadelfia; su tarea consiste en reabrir casos de homicidios sin resolver, con la ayuda de nuevas pruebas o testigos. Para eso cuenta con su ingenio sagaz, la ayuda de los nuevos métodos científicos y la colaboración de sus compañeros: el detective Scotty Valens -su confidente-; el detective Will Jeffries, que lleva mucho tiempo en la brigada y recuerda los casos del pasado, y Nick Vera, un policía capaz de arrancar los secretos mejor enterrados de los sospechosos. Un drama bien armado que explora otra faceta de la investigación policial.
Saving Grace (TNT, 2007)
Drama
Se trata de una detective que va por el camino del vino tinto, el whisky, el vodka y todo lo que huela a gasolina, hasta que se le aparece un ángel llamado Earl (Leon Rippy) que la salva y le indica el camino de la redención. El ángel y ella se convierten en compañeros de aventuras. De los mismos creadores de The Closer, pero peor; mucho peor. El paso de la gran actriz de cine Holly Hunter (en el rol de la detective alcohólica Grace Hanadarko) no convence mucho. La trama general, con toques a lo Michael Landon, tampoco. Si quieres ver a Holly Hunter, descárgate cine. No televisión.
¿Hay más ejemplos, de primero orden? Dudábamos entre poner, o no poner, a Fringe. Pero decidimos que Olivia Dunham no es exactamente la estrella principal de la serie. Tampoco Dana Scully, por supuesto. Repito: ¿habrá más ejemplos de mujeres policías protagónicas?