Sección 'Lisa Edelstein (Cuddy)'
Cuddy, la mejor de todas
las fantasías secundarias
Aquí vengo con la segunda entrega de Grandes Secundarios, la nueva sección de Espoiler. Tenía pensado seguir con Dwight Schrute (Rainn Wilson), el personaje fronterizo de The Office, pero en medio de ese cronograma ocurrió el increíble final de House M.D., y entonces no me pude resistir. Hay que hablar de esta mujer ya mismo. Sin no lo hago, los dioses me castigarán.
Hablo, por supuesto, de Lisa Edelstein, una actriz que nació en Boston, en mayo de 1966. Su primer trabajo para el cine fue una aparición brevísima en la película The Doors (de Oliver Stone). En TV, su debut ocurrió en Mad About You. Desde entonces pasó por la mayoría de las grandes series de los '90, Seinfeld incluido. Su salto definitivo a la fama ocurrió de la mano de Aaron Sorkin, en The West Wing (donde mostraba un culo maravilloso en los primeros dos episodios).
Y entonces llegó House M.D. Allí, su personaje de la doctora Lisa Cuddy se hizo inmenso y popular, generando en el espectador masculino un deseo irrefrenable de enfermar de algo para que ella aparezca con su bata blanca.
Hay dos teorías respecto a la relación de la doctora Cuddy con el doctor House. La más arraigada indica que entre ellos existe tensión sexual. Es decir, que en algún momento caerán ambos desparramados en una cama por primera vez. Los más osados sospechan que esto ocurrirá, incluso, en el último episodio de la serie. Yo no creo en esta posibilidad.
La segunda teoría (que me pertenece y pienso patentar) indica que lo que hay entre House y Cuddy es "memoria" sexual. Lo que significa que ellos ya se han revolcado en el pasado, largamente, y que finalmente lo que harán los guionistas es brindarnos esta información velada.
Si no malinterpreto las miradas cruzadas entre ambos (sobre todo las de ella) puedo intuir que en sus ojos de gata veterana, más que necesidad uterina hay una ternura preexistente, algo caduca, en donde todavía pervive una chispita mínima. Son ojos de ex amante, de mujer que sufrió ya lo suficiente pero no ha dejado todavía de amar. Cuando Cuddy mira a House, lo ve en el pasado.
El bastón verdadero
Cuddy representa, en la serie House M.D., a la madre edípica. A ella hay que acudir para pedir permiso, ante ella hay que agachar la testa cuando ocurre un desliz mortal, ella acaba siendo siempre la de las decisiones salomónica cuando los demás no pueden llegar a una por sí mismos. Su permanente, e infructuoso, deseo literal de ser mamá no es más que un guiño de la trama hacia esa condición metafórica. Cuddy es una madre. La de Gregory House, principalmente; la que lo cuida cuando él está de verdad enfermo, la que le cuenta cada pastilla de vicodina con gesto cauteloso, la que lo saca de la oscuridad y del cinismo.
Todos los secundarios de la serie podrían desaparecer para siempre (de hecho, algunos que parecían imprescindibles en la segunda temporada se han difuminado en la cuarta). Hasta Wilson podría desaparecer. Pero el persona de Lisa Edelstein es fundamental en la respiración de la trama. Sin ella, House sería otra clase de doctor insoportable (pienso en Becker, en Ted Danson). Cuddy es el verdadero, el único bastón del médico cojo. Y también, la única mujer en toda la serie capaz de sacar a Gregory de su ámbito médico y llevarlo hacia sentimientos humanos básicos.
Ella misma se lo dice durante un sueño, en el penúltimo episodio de esta temporada, y lleva razón:
"—Te estoy distrayendo."
Botón de muestra
Aquí vemos esa escena completa, que es también la que elegí para ilustrar a uno de los mejores secundarios femeninos de estos tiempos. Y no sólo porque Lisa sea una gran actriz, sino por sus otras virtudes naturales. No es de este mundo que esta mujer permanezca tan firme de carnes a los 42 años (los cumplió la semana pasada). Feliz cumpleaños, Cuddy. Dios te mantenga con vida en el mismo frasco que a María Luisa Parker.