Sección 'The Corner'
Los pintores
de la aldea
Mientras esperamos con ansiedad que el gran David Simon termine de rodar la primera temporada de Treme, la historia de un grupo de músicos que transcurrirá en la New Orleans post-Katrina, hicimos una maratónica sesión de The Corner; la premiada miniserie que sirvió como sala de ensayos para la monumental The Wire.
Antes de llegar a la televisión, The Corner fue un libro escrito por el propio David Simon y su compañero Ed Burns, la extraña pareja de HBO.
Breve digresión: es fascinante la historia personal de estos dos señores. Un periodista de la vieja escuela, el primero, para quien los bajos fondos de Baltimore son algo así como el patio de su casa; y un detective de homicidios con curiosidades librescas, el segundo, de pronto devenidos en una de las mejores duplas de guionistas de los últimos tiempos. Sólo el planteo de sus vidas puede servir de argumento para una serie buenísima.
The Corner es el primer trabajo que ambos realizaron juntos y, como The Wire, es un retrato conmovedor, implacable y extremo de la verdad, y nada más que la verdad, de los suburbios devastados al oeste de Baltimore. Combina el drama de personajes descarriados con la técnica objetiva del documental.
Como una imagen satelital en zoom que parte de la geografía de Estados Unidos, se acerca a la ciudad, luego al barrio y después a sus calles, la miniserie desgaja capa tras capa para examinar el núcleo más pequeño y concentrado de la naturaleza urbana: la esquina.
"Si quieres que te vean, éste es el lugar. Para muchos es el centro de información del barrio. Si quieres saber quién tiene buena droga, a quién mataron anoche, por qué, quién lo hizo, vienes aquí", dice al comienzo de la historia Charles Dutton, el director de la miniserie que se interpreta a sí mismo, y que cada tanto irrumpirá en la vida de los protagonistas para recoger testimonios directos a la cámara.

The Corner narra en seis episodios el drama de una familia sumida en la miseria: Gary McCullough (T.K. Carter), un heroinómano caído del mapa de la clase media que pasa sus días en la calle robando chatarra; su ex mujer, Denise Francine (Khandi Alexander), cocainómana que vive junto a su hermana, también drogadicta, y sus dos hijos; y DeAndre (Sean Nelson), el vástago mayor, que trafica con sus amigos en una de las esquinas del barrio.
La vida de esta familia se enlaza con la de los personajes del lugar, una galería de criaturas creíbles y varias de ellas conmovedoras, como el viejo Fat Curt, un drogadicto sin remedio encarnado con maestría por el actor Clarke Peters, o la altruísta Ella Thompson (Tyra Ferrel).
En The Corner, la mirada de la cámara evita juicios; no muestra buenos ni malos, sino personas que sobreviven como pueden justo donde se acaba el mundo civilizado. Paredes grises, chatarras, casas destruidas y ocupadas, calles heladas en invierno y sofocantes en verano, el barrio donde transcurre esta historia es un llaga tercermundista, sucia y criminal, en la piel del imperio.
¿Todavía no la vieron? Échenle una mirada a The Corner. La miniserie tiene casi diez años, es anterior al atentando de las Torres Gemelas, pero se mantiene en forma y casi no ha envejecido en todo este tiempo. Mérito de los guionistas y los actores, sin dudas, aunque la realidad también ayudó bastante.