En mi anterior entrada del blog destacaba el buen comportamiento relativo de la banca española frente a la europea en los últimos trimestres de 2016. Concluía en todo caso que el sector no acababa de despegar, simplemente flotaba. Ya conocemos los resultados de 2016 de los siete bancos que cotizan en el Ibex. Un ROE promedio ponderado de tan sólo el 5,7%[1], algo inferior al del anterior ejercicio, es bien indicativo de una situación lejos aún de la normalidad.
El cuadro adjunto recoge los resultados agregados de estas entidades tanto de sus estados individuales (indicativo de su negocio en España) como de sus estados consolidados (indicativo de sus negocios globales). En ambos casos agregando las siete entidades y, por otro lado, excluyendo de dicho agregado al Banco Popular, dado el efecto distorsionador que produce en algunas magnitudes sus adversos resultados.
Fuente: Afi a partir de la información proporcionada por las entidades
Esta agregación permite simplificar el análisis y derivar conclusiones relevantes respecto del comportamiento del sector en el pasado ejercicio. Las principales son las siguientes:
- Considerando el negocio global de las entidades de los siete bancos en 2016 su beneficio neto ascendería a 9.245 millones, nada menos que un 20,7% por debajo del año anterior. Excluyendo a Banco Popular de la comparativa este sería de 12.731 millones, y se transformaría en un resultado un 10,2% por encima. En cualquiera de los casos, y como señalaba anteriormente, el ROE del agregado seguiría estando muy por debajo del coste de capital (como también sucede, incluso en mayor medida en general, en la banca europea de los grandes países).
- Los resultados de los negocios en España son mucho peores; beneficio neto de tan sólo 1.321 millones en el agregado de los siete bancos, que asciende a 4.806 millones si excluimos al Banco Popular.
- En definitiva, el negocio exterior de las siete entidades (Santander y BBVA fundamentalmente) ha aportado en 2016 en torno a 8.000 millones de euros, lo que supone más del 80% de su beneficio total. Se reduciría a poco más del 60% si excluimos la distorsión que generan las pérdidas del Banco Popular cuyo negocio radica esencialmente en España. Dicho de otro modo, y en cualquier caso, los resultados de la banca cotizada española se generan mayoritariamente en el exterior.
- En el análisis de la cuenta escalar es destacable la caída de margen de intereses por el negocio en España (en torno al 8%), consecuencia del comportamiento de los tipos del euro. Habrá de pasar algún tiempo hasta que dicho margen remonte después de que los tipos empiecen a repuntar, como consecuencia del retraso con el que se ajustarán al alza una parte significativa de la cartera de crédito. La caída mucho menor de este margen en el negocio global (-1%) es debido fundamentalmente al efecto arrastre de su estrechamiento en España.
- La significativa reducción también de los resultados por operacionesfinancieras (ROF), sólo compensada parcialmente por una contención de los gastos, se traduce en un descenso notable del margen de explotación en el negocio España (14%) y menor en el negocio global (4%).
- Es a partir de aquí donde aparecen diferencias notables en el análisis si se excluye o no del agregado el Banco Popular, consecuencia de sus enormes pérdidas por deterioro anotadas el pasado ejercicio (casi cuatro mil millones) para sanear su balance. Téngase en cuenta que, por el contrario, el resto de bancos han reducido notablemente este epígrafe como consecuencia del saneamiento que ya habían realizado y de las evidentes mejoras de las condiciones económicas (particularmente en España) en las que están operando. Su inclusión lleva a reducir casi un 74% el beneficio neto del conjunto por su negocio en España, mientras que su exclusión hace que la caída sea sólo del 3%. También es significativo su impacto sobre el beneficio global (caída del 21% respecto a 2015) que, en el caso de exclusión del Banco Popular, resultaría incluso en un aumento del beneficio neto (aumento del 10,2%).
En definitiva, los resultados del 2016 del conjunto de la banca cotizada en el Ibex han sido globalmente malos, cayendo su ya reducida rentabilidad respecto a 2015 como consecuencia fundamentalmente de las extraordinarias pérdidas que se ha anotado el Banco Popular al sanear su balance. En todo caso, incluso si le excluimos de la evaluación, el negocio en España ha seguido comportándose adversamente (caída del 3,1% del beneficio neto), y ello a pesar de la ya cuantiosa reducción de las pérdidas por deterioro de los activos. No obstante, en el caso del negocio global el beneficio neto sí aumenta (un 10,2%). Ahora sí, no como consecuencia del aumento de los márgenes de negocio (que se reducen), sino básicamente por las menores provisiones para el deterioro de activos.
[1] Influenciado por los malos resultados del Banco Popular, aunque depurándolo solo aumentaría unas décimas.
Hay 1 Comentarios
Realmente nos quieren vender un reflote, pero se ve a la legua que queda muchísimo para volver a una situación financiera controlada. El crédito es la clave !!!!
Publicado por: Sabrina | 03/03/2017 13:53:36