Pablo Ordaz

Roma rota

Por: | 17 de octubre de 2011

Virgen

La imagen de una virgen destrozada sobre el pavimento. La de los adoquines desperdigados en la plaza de San Giovanni como piezas de un puzle sin acabar. La vergüenza de ver su nombre manchado en los telediarios de medio mundo. La impotencia de gritar y no ser escuchada porque el odio y las sirenas gritan más. El fuego. Las explosiones. El miedo a saber quiénes se esconden bajo las capuchas negras. Roma rota. Roma triste. No la del sábado por la noche, aún bajo la conmoción de la batalla campal. Ni siquiera la del domingo por la mañana, perpleja bajo el sol de octubre, mirando de reojo los periódicos como quien no quiere enfrentarse a un espejo demasiado sincero. La del lunes por la mañana. La que se despierta y todo sigue igual: un presidente rijoso con el norte perdido, una oposición que más que alternativa es comparsa, unos jóvenes sobradamente preparados que tienen que emigrar para soñar futuro, una sanidad pública que ni funciona ni se le espera... Una ciudad y un país, en fin, parecidos a los demás en que hace mucho tiempo que dejaron de recibir buenas noticias. La diferencia está --¿estaba?-- en la proporción. En el orden desordenado. En gustarse para gustar. En la simpatía y en el respeto. En no dejar caer jamás, se sea creyente o no, a una virgen azul sobre el pavimento.

Hay 27 Comentarios

No se si habeis visto una foto en la que se ve a unos cuantos miembros del black block mientras estan siendo detenidos..

se ha roto la Virgen, ya en un gran film. un Antonioni sin sentido, Itaiia 2011.

Lo que quiero decir, y pido disculpa por repetir, es que se había construido en Italia una sociedad y una cultura laica y moderna. Y civilizada. Que no necesitaba romper estatuas, ni escaparates. Le bastaba la palabra y el ejemplo. Por supuesto esto no abarcaba toda la sociedad italiana, per sí mucha parte de ella. Quedan libros, vidas, ejemplos.

Lo de la virgen rota, yo lo veo con otros ojos. Ojos de italiano lejos de su país de origen, pero atento y con memoria. Italia y Vaticano sí que son dos estados distintos. Quizás no en la imagen exterior y seguramente no en los cálculos políticos. Pero en la realidad de la vida social si. Yo nací a mitad de los años 60 en la roja Emilia Romagna, y muchos de mis amigos, familiares coetaneos no están bautizados. Italia arrastra un pasado de que parece no pueda librarse. Y esto lo digo con todo el respeto hacía los catolicos. Pero vamos, en Italia en los ultimos 20 años se han roto simbolos mucho más importantes que una virgen, por muy azul que sea.

Lo de la virgen rota, yo lo veo con otros ojos. Ojos de italiano lejos de su país de origen, pero atento y con memoria. Italia y Vaticano sí que son dos estados distintos. Quizás no en la imagen exterior y seguramente no en los cálculos políticos. Pero en la realidad de la vida social si. Yo nací a mitad de los años 60 en la roja Emilia Romagna, y muchos de mis amigos, familiares coetaneos no están bautizados. Italia arrastra un pasado de que parece no pueda librarse. Y esto lo digo con todo el respeto hacía los catolicos. Pero vamos, en Italia en los ultimos 20 años se han roto simbolos mucho más importantes que una virgen, por muy azul que sea.

No se si habeis visto una foto en la que se ve a unos cuantos miembros del black block mientras estan siendo detenidos...y la casualidad hace que vistan todos las mismas botas que la policia. A mi eso me huele muy mal. Ahora habria que reprocharselo a ciertos emdios de comunicación a ver que opinan.

La belleza de las palabras que expresan la destrucción y la belleza de la imagen. Las leo en mi mente con la voz que sólo suena en la cabeza, e intento imaginar el sonido de la Virgen al caer y romperse en pedazos, pero no escucho nada, y pienso al ver los comentarios repetidos que se trata del eco escrito del sonido que no puede escucharse.
¿Alguna vez aprenderemos a progresar en paz?

Pero qué bien escribe, señor Pablo! Qué amargo era seguirle en México -pobre México- pero qué ganas de observar Roma a través de su mirada.

Pablo querido: ¡Qué bien escribes! Mucho cariño, A

Roma se ha roto muchas veces, pero siempre ha renacido. Se recompone, se levanta, se lava milagrosamente la cara y se echa a la calle. Roma eterna, ¿no?
Lo que es más inusual es ver a la Madonna por los suelos. Pero ni aún así me atrevería a asegurar que las dos orillas del Tevere no forman parte del mismo todo. Que nadie lo dude. Italia y el Vaticano no son, por el momento, dos Estados distintos. Por eso, por muy antisistema que fueran los encapuchados, seguro que ninguno ha tirado la Virgen: se les habrá caído.

Roma se ha roto muchas veces, pero siempre ha renacido. Se recompone, se levanta, se lava milagrosamente la cara y se echa a la calle. Roma eterna, ¿no?
Lo que es más inusual es ver a la Madonna por los suelos. Pero ni aún así me atrevería a asegurar que las dos orillas del Tevere no forman parte del mismo todo. Que nadie lo dude. Italia y el Vaticano no son, por el momento, dos Estados distintos. Por eso, por muy antisistema que fueran los encapuchados, seguro que ninguno ha tirado la Virgen: se les habrá caído.

Roma se ha roto muchas veces, pero siempre ha renacido. Se recompone, se levanta, se lava milagrosamente la cara y se echa a la calle. Roma eterna, ¿no?
Lo que es más inusual es ver a la Madonna por los suelos. Pero ni aún así me atrevería a asegurar que las dos orillas del Tevere no forman parte del mismo todo. Que nadie lo dude. Italia y el Vaticano no son, por el momento, dos Estados distintos. Por eso, por muy antisistema que fueran los encapuchados, seguro que ninguno ha tirado la Virgen: se les habrá caído.

También vuelvo de un hospital inhóspito y sucio. Los baños, sin comentarios. No era nada importante, pero he visto lo suficiente como para saber que, si que si me sucede algo, regreso de inmediato a España.
Me ha encantado tu reflexión sobre la Virgen, Pablo. Es una imagen, la de la Virgen rota, que lo dice todo de la ignomina de algunos seres humanos. Sigue asi, ánimo!!!

También vuelvo de un hospital inhóspito y sucio. Los baños, sin comentarios. No era nada importante, pero he visto lo suficiente como para saber que, si que si me sucede algo, regreso de inmediato a España.
Me ha encantado tu reflexión sobre la Virgen, Pablo. Es una imagen, la de la Virgen rota, que lo dice todo de la ignomina de algunos seres humanos. Sigue asi, ánimo!!!

También vuelvo de un hospital inhóspito y sucio. Los baños, sin comentarios. No era nada importante, pero he visto lo suficiente como para saber que, si que si me sucede algo, regreso de inmediato a España.
Me ha encantado tu reflexión sobre la Virgen, Pablo. Es una imagen, la de la Virgen rota, que lo dice todo de la ignomina de algunos seres humanos. Sigue asi, ánimo!!!

También vuelvo de un hospital inhóspito y sucio. Los baños, sin comentarios. No era nada importante, pero he visto lo suficiente como para saber que, si que si me sucede algo, regreso de inmediato a España.
Me ha encantado tu reflexión sobre la Virgen, Pablo. Es una imagen, la de la Virgen rota, que lo dice todo de la ignomina de algunos seres humanos. Sigue asi, ánimo!!!

También vuelvo de un hospital inhóspito y sucio. Los baños, sin comentarios. No era nada importante, pero he visto lo suficiente como para saber que, si que si me sucede algo, regreso de inmediato a España.
Me ha encantado tu reflexión sobre la Virgen, Pablo. Es una imagen, la de la Virgen rota, que lo dice todo de la ignomina de algunos seres humanos. Sigue asi, ánimo!!!

Estupendo texto. Ahondando en el Caos Armónico. O pretendidamente Armónico. Es decir, probablemente Caos, sin más.

Gran texto, Pablo.

Gran texto, Pablo.

Gran texto, Pablo.

Bravo, Pablo. En Internet y poesía. No siempre se consigue

Bravo, Pablo. En Internet y poesía. No siempre se consigue

Bravo, Pablo. En Internet y poesía. No siempre se consigue

Bravo, Pablo. En Internet y poesía. No siempre se consigue

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Sobre el autor

, ahora corresponsal para Italia y el Vaticano, fue durante los últimos años el corresponsal para México, Centroamérica y el Caribe. Desde principios de los 90, escribe reportajes en EL PAÍS.

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