Tres nombres yacen enterrados entre miles de documentos sobre la época colonial en el Archivo General de México: Gaspar, Miguel y Ventura. Detrás de ellos, la palabra “Xapon”. Se trata de tres hombres que viajaron hacia la Nueva España contra su voluntad. Fueron vendidos como esclavos en Filipinas a finales del siglo XVI y llegaron a México en 1597, tres siglos antes de que los registros modernos anotasen la llegada de los primeros japoneses en América.
El documento recién hallado, descubierto por Lucio de Sousa, investigador de la universidad de Évora (Portugal) y Mihoko Oka, de la universidad de Tokio, cuenta que los tres hombres pertenecían a un empresario portugués apellidado Pérez. El hallazgo es particularmente importante porque demuestra la presencia de japoneses en América antes de la época Sakoku, dictada por el shogunato en el siglo XVII y que mantuvo aislada a Japón del mundo por más de 200 años. Ningún japonés podía dejar el archipiélago bajo pena de muerte.
De Souza y Oka han reconstruido parte de la historia de los esclavos. Comenzó en Filipinas, entonces colonia española. A Gaspar, originario de Bungo (actual prefectura de Oita, al sur del archipiélago), lo vendieron por siete pesos a los ocho años, un peso menos de lo que costaba en la época una botella de aceite de oliva. De Miguel sólo se sabe que fue vendido en 1594. No hay más información sobre el pasado de Ventura.
La travesía hacia el Nuevo Mundo se produjo porque Pérez, el propietario de los tres esclavos, fue juzgado por un tribunal de la Inquisición por ser judío. Lo encarcelaron y lo expulsaron de Filipinas. La familia del portugués, sirvientes incluidos, cruzaron el Pacífico en 1597. El destino: la Nueva España, hoy México. Ahí continuaría el juicio. Gaspar y Ventura testificaron ante el tribunal sobre la religión de su dueño. Los registros descubiertos son documentos de ese juicio. Como premio por su colaboración, les concedieron la libertad unos años después.
Algunos testimonios de la época apuntaban que esclavos japoneses salían hacia América antes de la época Sakoku, pero hasta ahora no se había hallado evidencia alguna. El único antecedente documentado era la misión Tensho, enviada por Otomo Sorin —uno de los pocos señores feudales japoneses en convertirse al cristianismo—, que recorrió Europa en el siglo XVI y que recogió que niños y jóvenes eran enviados a América desde 1596. Tres siglos antes de que los primeros emigrantes japoneses —esta vez libres— llegaran a México.
Hay 15 Comentarios
Tengo cuentas en familytreedna y 23andme, mi haplogrupo paterno de acuerdo al mas reciente ISOGG 2017 es O1b2a1a , o tambien conocido como O-F1204, se encuentra mayormente en Japon. Mi correo electronico es [email protected] En 23andme calculan que hubo un antepasado Japones que vivio hace mas de 9 generaciones. Mi padre nacio en el 1947, mi abuelo en 1905, y mi bisabuelo en 1867. En los dos sitios, soy el unico con este haplogrupo, hay otros mexicanos con haplogrupos asiaticos pero son haplogrupos que mayormente se encuentra entre los chinos y de las filipinas.
Publicado por: Samuel | 20/01/2017 6:27:11
Japoneses esclavos en la Nueva Espana! Muy interesante. Ya habia leido acerca de un noble japones radicado en Guadalajara de apellido Irsio. Ahora, con esta nueva informacion, va muy a proposito sobre los analisis geneticos de mexicanos: En los analisis sobresale una curiosidad, o mejor dicho, un misterio: se trata de una componente genetica identificada como Asiatica, detectada en muchos mexicanos mestisos, que puede variar de 5 a 15% o mas. En un principio, se interpretaba que esa componente genetica asiatica seria mas bien de origen amerindio, ya que los indios pasaron a America desde Asia. Pero cada vez mas, los datos historicos sugieren otra posible explicacion alternativa, que parece hacerse mas y mas fuerte: Quizas, en realidad reflejaria una inmigracion nada insignificante de origen asiatico, especificamente, de Filipinas, y en menor grado de Japon, de China y de Indochina hacia la Nueva Espana, via Acapulco. Seria este el verdadero origen de nuestra herencia asiatica? Esta hipotesis merita ser investigada. Algunos voluntarios con contactos en 23&me o familytreeDNA?
Publicado por: Pedro N.S. | 24/09/2016 6:20:10
SOUSA, LUCIO: The Jewish Diaspora and the Perez Family case in China, Japan, The Philippines, and the Americas (16th Century), Macau, Fundaçao Macau-Centro Científico e Cultural de Macau, I.P., 2015 (268 páginas). Revisión realizada por Manuel Pérez García (Associate Professor at School of International Studies, Renmin University of China, Beijjng, China).
La obra de Lucio Sousa sitúa las investigaciones relativas a la diáspora sefardí de época moderna en un nuevo estadio altamente innovador. De un lado, debido al marcado carácter transnacional del presente estudio y, de otro, la gran riqueza documental presentada en el mismo a través del cruce de fuentes de origen europeo, asiático y americano, son factores que hacen que está obra sea de un alto impacto científico. El hecho de que el autor haya desarrollado su carrera investigadora en Asia, en particular en Japón, actualmente como profesor titular de la Facultad de Estudios Internacionales, Tokyo University of Foreign Studies, y domine tanto la lengua japonesa como las europeas para la lectura de las fuentes de época moderna, explica el gran valor de la presente obra.
El carácter interdisciplinar de la obra de Lucio Sousa queda presente mediante el estudio que realiza sobre las redes comerciales, grupos familiares y circuitos tanto de grupos migratorios como de bienes de consumo en espacios concretos de Europa (España y Portugal), América (Nueva España) y Asia (Goa, Malaca, Manila, Macao, Nagasaki y Tokio). El enfoque transnacional del presente estudio queda patente mediante el análisis de la diáspora sefardí, a inicios del s. XVI, en el espacio asiático. El espacio global, queda enmarcado y conceptualizado de este modo, mediante un estudio de carácter micro-histórico a través del análisis de grupos familiares de judeoconversos y sefardís que, a partir del decreto de la Alhambra de 1492 y el edicto de Expulsión de 1496, se vieron abocados a un exilio forzoso, dispersándose estas comunidades no sólo a otros territorios europeos, sino también a otros espacios del Nuevo Mundo, caso de Bahía (Brasil), Ciudad de México (México), Lima (Perú), y Asia, caso de Macao (China), Nagasaki (Japón) o Manila (Filipinas).
Como bien se señala, y queda patente y demostrado a lo largo de la obra, la génesis de este libro parte de un caso concreto de estudio a través de grupos de origen sefardís instalados en Nagasaki, entre los que destaca la familia Pérez de origen judío. El descubrimiento de fuentes históricas inéditas y producidas en Nagasaki en 1601 hace que este estudio adquiera un carácter innovador. En tales fuentes se muestran los interrogatorios inquisitoriales y listados de testigos cuyo fin era hallar y encontrar familias con pasado judío que, tras su conversión al cristianismo, seguían practicando la Ley de Moisés. El análisis de la familia Pérez es el punto de partida del presente estudio a través del cual se puede observar para todo el s. XVI, y parte del s. XVII, la expansión y desarrollo de las comunidades sefardís en China, Japón y Filipinas, y cómo las redes sociales de estos grupos fueron construyendo y desarrollando sus conexiones y estrategias familiares con el fin de ocultar su identidad y pasado judío, por un lado, y por otro, consolidar su posición política, social y económica en los territorios donde se asentaron.
La forma y método en que se forjó la diáspora judía en el Extremo Oriente, así como la progresiva metamorfosis de las redes sociales y grupos familiares que la componían, queda bien clarificada en la estructura del presente libro. Desde el capítulo primero, en donde se muestran los orígenes del exilio primero en la India y posteriormente en el sur de China (Macao), hasta el último donde la familia Pérez se vio nuevamente abocada al exilio en las Américas, en concreto Acapulco, hallamos un detallado análisis de estos grupos familiares en Macao (donde realizaron un proyecto para construir una sinagoga), como sobrevivieron en el ‘exilio chino’, en especial a las persecuciones inquisitoriales en Macao, para posteriormente exiliarse en Japón y Filipinas. En estos últimos espacios cabe destacar el análisis del mercado de esclavos, en donde para el caso de Japón durante el s. XVI desempeñaron un papel destacado los intermediarios, llamados correctores: 人商人 (rén shāngrén en chino o hitoakibito en japonés) que designaba a personas que compraba y vendía personas. Se vislumbra una red de comercio de esclavos que conectaba los espacios portuarios de Corea, Japón, sur de China, Filipinas y América. Al final del libro mediante un rico apéndice documental se presentan las principales fuentes analizadas, así como los archivos en donde Lucio Sousa ha realizado su investigación. Destacan entre otros archivos, el Arquivo Ultramarino de Lisboa, Archivo General de Indias, Archivo General de Simancas, Archivo General de la Nación de Ciudad de México, la colección Japonica-Sinica del Archivum, Romanum Societatis Iesu de Roma, National Archief de la Haya en Holanda y el Historiografical Institute (Shiryo Hensanjo, University of Tokyo, Tokyo, Japan).
Manuel Pérez García
http://www.elsevier.es/es-revista-investigaciones-historia-economica-economic-328-pdf-S1698-6989%2816%2930012-1-S100
Publicado por: Juan Dominguez | 25/05/2016 7:22:17
Sobre los esclavos:
Lucio de Sousa, The Jewish Diaspora and the Perez Family Case in China, Japan, the Philippines, and the Americas (16th Century), Macau, FM-CCCM, 2015.
Publicado por: Juan Dominguez | 25/05/2016 7:08:25
Bueno, pero ya hubo viajeros y comerciantes Japoneses en Mexico, y seguramente alguno se quedó, antes del Sakoku. Rodrigo de Vivero logró un tratado comercial que permitía a Japón enviar barcos a Acapulco para el comercio, y de hecho se enviaron 2 o 3 barcos en los pocos años que estuvo en vigor el tratado. Por no decir que la embajada Hagekure cruzó México de camino a Europa al seguir la ruta hispana y no la portuguesa.
Publicado por: Kasha | 23/05/2016 22:27:07
Yo soy de padres mexicanos y mi haplogrupo paterno, gracias al analysis de adn procesado en www.23andme.com, es O2b* , que se encuentra en japon y en corea. Mi analysis de ADN me da menos de un por ciento de Japones y si de veras es cierto, mi porcentaje coincide ya que han pasado mas de 16 generaciones desde ese entonces. Mi padre es de Colima, cercas del puerto de Acapulco.
Publicado por: Samuel | 31/07/2015 8:20:07
Efectivamente, se cree que eran filipinos y no japoneses.
Publicado por: spainryugaku.jp | 01/04/2015 7:42:15
Me lama la atención que no se menciona el nombre del galeón que trajo a los japoneses en 1597. Ese dato es importantísimo, porque sólo dos viajes al año realizaba la nao de china.
Los japoneses cristianos que salían de su país, debieron hacerlo de algún modo particular, sin permiso, pues eran perseguidos por el emperador Toyotomi Hideyoshi, quien murió en 1599. No era posible salir de Japón sin claras razones.
Por lo anterior creo que lo más probable es que no sean japoneses, sino Filipinos confundidos con Japoneses, se debe recordar que a los filipinos se les confundió mucho y llamó "indios chinos".
Publicado por: Raypadilla | 09/08/2013 9:08:47
Hay investigaciones que señalan que japoneses que huyeron de Japón cuando se prohibió el cristianismo llegaron a Morelia en la Nueva España y uno de ellos adapto el nombre de Juan Rodríguez y era carpintero. El arte que practicaba mezcla española y japonesa le llaman ARTE NANBAN. Ahora tanto en Japón como en Morelia se fabrican cajas laqueadas muy similares así como juguetes. Saludos
Publicado por: Ricardo Pérez Ôtakara | 07/08/2013 7:17:12
En verdad que está interesantísima la aportación de hoy al blog de Historias. En alguna revista histórica publicada en México leí que algunas familias japonesas llegaron a Nueva España en el siglo XVII cuando el Shogún gobernante en aquellos tiempos emprendió el exterminio de los habitantes cristianos (nativos o no) de Japón. Se supone que algunos japoneses convertidos al cristinanismo pidieron a los españoles llevarlos consigo a donde fuere para no terminar ejecutados por el Shogún. ¿Hay alguien que pueda reconfirmar esta versión de la historia de la inmigración japonesa a América durante la colonia?
Publicado por: Jalisquillo72 | 06/08/2013 22:41:59
Desde el otro lado del charco, me quito mi sombrero a los autores de este blog - muy fascninante el cuento de estos japones (aunque hay tristeza para su situacion como esclavos). Tendre que poner un enlace en mis favoritos para el blog.
Publicado por: DougEEUU | 06/08/2013 18:57:07
Como casi siempre, interesantísimo el blog. Y señor Casas Viejas, me parto de la risa.
Publicado por: Jaime | 06/08/2013 5:35:25
Veronica Calderon, permitame expresarle que su blog es interesantisimo. Yo lo vi en "El Pais" mientras miraba otras informaciones y cuando fui a buscarle ya alguien lo habia quitado de la pagina, entonces, como recordaba el titulo lo intente en el buscador del periodico, pero salia otra cosa y a Dios gracias, le encontre gracias a Google en internet. Lo interesante de su blog es que a la emigracion asiatico en Cuba le dicen "chinos" y en Santiago de Cuba tenemos una calle en forma de escalera que parece una copia de las antiguas ciudades coreanas que hoy se destruyen para levantar edificios de manera que esto avala el hecho de que la tal emigracion asiatica no solo fue de China sino al parecer de gran parte de los paises asiaticos de los cuales nos quedo la costumbre en Cuba de tener en la vitrina del comedor un juego de tacitas de café con motivos chinos, siempre de porcelana, para invitar a las visitas de importancia a tomar café como agasajo, el tener un buda y elefantes en la sala y hasta ciertos usos del lenguaje vinculados a la charade china. Le sugiero que prosiga porque vale la pena el esfuerzo que usted hace en este blog. Sin mas, agradeciendo su atencion, Gualterio.
Publicado por: Gualterio Nunez Estrada | 27/07/2013 15:25:48
Lo que son las cosas. Ironias del destino, carambolas de la hostia. Esta es la historia. Un adivino de la Fundación "Guru-Gú" acaba de entregar el informe semestral que le obliga los estatutos. En uno de sus puntos tratados dice esto: "Algún dia aparecerá -será la leche en verso- en algún archivo remoto una frase que hizo estragos en su época.Una frase que fue motivo de estudio para prestigiosos antropólogos y sociólogos del mundo conocido.Desde Estrabón al gol de Iniesta (el de la supercopa) no había aparecido nada igual. Precisamente este año se cumple el 26 aniversario y tiene plena vigencia.Su autor,el responsable de la citada frase/"sentecia" es uno de los mejores "retratistas" que tiene esta tierra de conejos,no superado ni por Goya. La "sentencia" es: En España la justicia es un cachondeo. Sin comillas, el que las ponga es un bellaco.Su autor es el ilustre jerezano Pedro Pacheco.Su célebre frase será grabada en oro macizo y colocada debajo del reloj de la Puerta del Sol, en la calle Sierpes de Sevilla,en el Tubo de Zaragoza,en las Ramblas de Barcelona y en el nacimiento del Cuervo.En otro punto del informe el adivino dice que algún dia se hablará del siglo de "Alaya", igual que en su dia se habló del siglo de Pericles. La nueva "Pericla" es Mercedes Alaya,una magistrada y un interventor,un tal M. Gómez que tienen los huevos cuadrados como los osos y pegados al culo como los tigres.Tierra de conejos.Estado fallido. Que tiene como marcha España el Cante por peteneras.O como irse de rositas.Y en ese plan. Ninguno.
Publicado por: Casas Viejas | 26/07/2013 10:07:09
Me encanta este blog y sus historias. También conozco otro blog que cuenta temas históricos apasionantes por si os quereis pasar: http://xurl.es/6ya04
Publicado por: Susi | 25/07/2013 12:09:39