(Instrucciones para deconstruir búnkeres)

    Para deconstruir búnkeres
no basta con seguir
hojas de ruta
para ser miembro
de la OTAN
o de la Unión Europea,
ni convocar
conferencias de donantes
a programas de deconstrucción
de búnkeres,
ni formar en el Ejército
batallones de deconstrucción
de búnkeres,
ni contratar ingenieros
que deshagan
lo que otros hicieron,
o firmar con una empresa multinacional
un contrato de desbunkerización total
con garantía de cien años
y seguro de accidentes
incluido.

 

    ¿Cómo se deconstruyen los búnkeres?. ¿Quién sabe cómo?. ¿Acaso alguien?. El deconstructor que los deconstruya buen deconstructor será…

    Quien desde el veinte y tres de Abril del año pasado, día de Sant Jordi y del libro, haya seguido el recorrido que entonces en este blog iniciamos por la epopeya y el drama de la Albania contemporánea a través del proceso de construcción de los búnkeres por el régimen de Enver Hoxha y sus posteriores avatares, siguiendo el hilo conductor del poema Búnkeres de mi Guía poética de Albania, sabrá que está éste estructurado en partes – o movimientos, si siguiéramos la estructura de una obra musical – iniciadas por las que pudieran ser las consignas del régimen, que como perrulat se gravaban con piedras en las montañas o se escribían con grandes letras en las paredes de los edificios. Así, tras las estrofas primeras que nos relatan el inicio de la construcción de los búnkeres y el paisaje que provocan, reflejadas en las entradas Búnkeres en Sant Jordi y Búnkeres: la razón militar, seguimos bajo la consigna “Construir el búnker / construir Albania” el proceso de construcción de los búnkeres de fuera y los búnkeres de dentro, de bunkerización desde el poder total como expresión de la totalidad del poder – que relatamos en Búnkeres, consignas y poder; Todo para los búnkeres; La pesadilla de Enver Hoxha; Construir en secreto un búnker secreto; Decretar constitucionalmente la inexistencia de Dios; Albania: religión, política, identidad colectiva y construcción nacional y Encerrar el alma en un búnker -, y hemos abordado bajo la de “Matar al búnker / construir la vida” – en el recorrido reflejado en El Rey desnudo y el búnker caído; La huida; La anarquía. Destrucción creadora y transición en Albania; Albania: ¿transición o fundación?; El efecto placebo del factor internacional; Olvidados búnkeres y Nos aprietan todavía el alma – el derrumbamiento del régimen, la huida y la anarquía que consigo trajo, los retos de la transición o fundación y su dimensión internacional, el olvido necesario para construir el futuro y la vida y la pervivencia de esos búnkeres de dentro que, a veces sin que nos demos cuenta, nos apresan todavía el alma, y nos impiden ser quienes somos, quienes queremos y podemos ser. Si todavía siguen ahí, si nos apresan todavía el alma, si todos tenemos, de una manera u otra, búnkeres que nos habitan por dentro, dictan o condicionan el argumento de nuestra vida y nuestra esperanza, y no nos dejan ser del todo nosotros, se nos plantea la pregunta de cómo deconstruirlos.

    Una pregunta que no puede, sea cual sea su contenido, responderse con una consigna. Pues precisamente en ellas, en las consignas, se esconden y habitan los búnkeres. De ellos, de consignas están hechos los búnkeres que nos habitan por dentro; consignas son, en definitiva, los argumentos, los guiones y papeles por otros para nosotros – desde el poder, el mercado, o donde sea – escritos para que los interpretemos con nuestra vida en la gran obra del teatro del mundo.

    Y, precisamente por ello, para deconstruir los búnkeres necesitamos abandonar las consignas, enfrentarnos al papel en blanco e intentar en él escribir el argumento de nuestra vida, de nuestra esperanza. Lo que sea escribir. Lo que sea, pero por nosotros mismos escrito. Precisamente por ello no puede esta última parte de instrucciones para deconstruir búnkeres con que concluye y con él el recorrido en este blog acometido, con una consigna como las otras titularse, como una consigna como ella ser concebida y enunciada, como una consigna presentarse. Por ello más que una consigna es un susurro, una sugerencia, un secreto a media voz confiado. Por ello no pueden sino entre paréntesis ir. Por ello entre paréntesis van.

    ¿Cómo se deconstruyen los búnkeres?. Puede resultar técnicamente posible destruir o deconstruir los búnkeres de fuera, enviar al ejército que los hizo a deshacerlos, diseñar y ejecutar programas de deconstrucción de búnkeres. E incluso convocar conferencias de donantes para financiarlos, contratar ingenieros y firmar con una empresa multinacional un contrato de desbunkerización total con garantía de cien años y seguro de accidentes incluido. Aunque tal vez fuera ello, paradójicamente, una manera de seguir construyéndolos, el esfuerzo y la energía colectiva a su construcción absurdamente dedicados absurdamente a su deconstrucción dedicar. Absurda e inmerecidamente…

    Pueden haber también hojas de ruta colectivas que señalen el horizonte al que nos dirigimos, que nos muestren el camino seguido por otros y la experiencia por ellos en su propio proceso de transición y transformación adquirida. Horizonte de la democracia, el Estado de Derecho, el desarrollo, la economía de mercado u otros paradigmas orientadores de la construcción de modelos políticos y socioeconómicos de las sociedades contemporáneas, articuladores del consenso colectivo como ideas a realizar en la Historia y fuentes de legitimación. Horizonte e ideal, también, de inserción internacional, de integración en aquellas organizaciones que expresan la normalidad o el mundo de valores y bienestar compartido de las sociedades europeas en el orden construido tras la Segunda Guerra Mundial, que ha constituido el sueño y la luz para aquellas sociedades del continente que, de uno u otro signo, han vivido la noche oscura del totalitarismo – o, según los casos, el autoritarismo. Como, muy especialmente, la integración en la Unión Europea. Y también en la OTAN. Pues no es, como señalábamos en El efecto placebo del factor internacional, la democracia y el Estado al que se quiere transitar un Estado cualquiera, sino un Estado miembro de la Unión Europea. Y para eso, para la integración en la Unión Europea o en la OTAN, existen hojas de ruta, informes de progreso y planes de acción, listas de deberes y acciones a acometer y cumplir. Y pueden llevándolos a cabo conseguirse esas metas, realizarse esa transición, conseguirse esa transformación colectiva, esa metamorfosis, ese sistema político y económico en que no resulten posibles ni tengan sentido los búnkeres.

    Pero no basta. No basta, no, con deconstruir los búnkeres de fuera, transformar lo que por fuera pueda verse, percibirse o sentirse, para deconstruir los búnkeres que nos habitan por dentro. Ni hay fuera hojas de ruta, informes de progreso, planes de acción, recetas o instrucciones que puedan decirnos o enseñarnos cómo deconstruirlos. Solo dentro se encuentra lo que pueda deconstruir lo que nos habita por dentro. Y solo dentro se encuentra lo que puede construir lo que nos habita por dentro. Solo uno, cada uno y cada una, frente a sí mismo o sí misma, y en sí mismo o sí misma. Tal vez haya razones que la razón no alcanza. Mas tal vez sí el corazón, tal vez sí la intuición nos ayuden a buscar el alma y alumbrarla. Tal vez la poesía.

    Tal vez por ello no puedan expresarse en prosa estas (Instrucciones para deconstruir búnkeres) – así, entre paréntesis -, sino en verso. Tal como de la inspiración en verso salieron para concluir el poema Búnkeres y el camino en él recorrido. Con ellos, solo con ellos, podría concluir y concluye este viaje. Y con su conclusión inicia, como con la de todo viaje, el viaje del viaje.

    Gracias por haberme en él acompañado…


    Para deconstruir los búnkeres
mírate al espejo
y pregúntate
dónde te duele
el alma,
pregúntate
quién eres,
quién quieres ser,
qué obra quieres
escribir
con tu vida,
en quién quieres
ser tú
y quiénes quieres
que sean
en ti,
pregúntate
qué,
para qué,
por qué
quieres vivir;
y armado
o armada
con esas preguntas
y cualesquiera otras
que te haga el espejo,
date la vuelta a los ojos
y mira dentro de ti:
hacia dentro
navega,
hacia dentro
está Itaca,
dentro
tú,
dentro
el mundo,
dentro
todo
lo que eres,
dentro
todo
lo que puede llegar a ser,
dentro
mi yo
que te busca
dentro
de mí,
dentro
la respuesta
a las preguntas
que está
en buscarla
dentro.
    Para deconstruir los búnkeres
cierra lo ojos
y mira
con el corazón,
mira con el alma:
escucha
lo que te digan
y vive
con ellos
la vida,
mira
con ellos
el mundo,
mírame
cuando te miro
con el corazón
o con el alma,
escribe
o lee
poemas
sobre búnkeres,
escribe
o lee
este poema
con la vida
o en la vida,
escribe poemas
con tu vida
en el mundo,
escribe poemas
con tu vida
en la vida,
escribe poemas
con tu vida
en mi vida,
escribe poemas
con tu vida
en tu vida.