13 mayo, 2007 - 12:43
13/05/07
Por fin un candidato se ha atrevido a equiparar al adversario político con el tabaco, tan perjudicial. Eva Cañete mandó a El País un anuncio del candidato del PP, Delgado, a la alcaldía de Vélez-Málaga. Se publicó ayer, casi en el mismo momento en que Hollywood decidía tratar "la exaltación del tabaco" con el mismo criterio con que considera el sexo y otras drogas antes de darles nota moral a las películas. Según el anuncio electoral de Vélez, el PP es aire limpio, y el candidato socialista, Souvirón, es humo, sucio, malo, de tabaco. La publicidad antitabaco va sumando piezas interesantes. Yo colecciono. Tengo recortado, por ejemplo, el anuncio del centenario de Jean-Paul Sartre. Le quitaron a Sartre el cigarro de la mano, borrado, dentro de la tradición de las fotos manipuladas y falseadas para el bien común. Los retocadores le dejaron al filósofo una mano absurda, vacía, sin cigarro, en el aire, y Sarte parecía más desnortado, o idiota, que meditabundo a propósito del ser y la nada. El tabaco servía para confraternizar con el enemigo, intercambiando la petaca o los cigarros. Ahora se identifica al adversario con el tabaco, lo perjudicial. El tabaco se ha comparado con cosas muy distintas. Las cigarreras de la ópera Carmen cantan así en el primer acto: "El dulce hablar de los amantes, ¡es humo! Sus promesas, ¡son humo".
Pero no fuimos los socialistas los de la polémica ley del espacio sin humo para proteger a los no fumadores, entre ellos nuestros menores, y no es Aznar, señor del pp, el que la criticó,porque a el no le dice nadie donde puede fumar, igual que tampoco le puede decir nadie si puede conducir ebrio.
Publicado por: adelina | 14/05/2007 12:48:36