La novia de papá

11 nov 2011

Los paraísos perdidos

Por: Paloma Bravo

Levitt_4boys

(Foto de Helen Levitt. El título del post es una referencia a Milton y su Paradise Lost, aunque él hablaba de Adán y Eva y, para mí, el único paraíso, mi única patria, es la infancia; como dijo Rilke pero en versión feliz, porque mi infancia son mis hermanos, mis primos y un pueblo de Navarra).

 

El último puente largo ocurrió un milagro.

Nuestro valle de Larraun, los colores del otoño y, por primera vez en muchos años, una conversación en la que todos somos adultos.

No se había pactado así, pero sucede de repente: los abuelos secuestran a los niños para enseñarles no sé qué joya del románico ("¡para torturarnos, Sol, socorro!", gritaba mi sobrino Juan, que tiene fobia a la cultura), y mis hermanos y mis primos nos quedamos a solas, como cuando éramos pequeños pero siendo mayores.

Y hablamos.

Hablamos y jugamos, porque aún nos queda ese punto familiar, ese punto Beramendi, de perseguirnos, putearnos, hacernos daño, darnos cariño, reconocernos, querernos, descojonarnos...

Somos veinte; doce de sangre, más ocho en varios grados de relación política (alguno de primer matrimonio, otros de un buen asentado segundo turno, y hasta alguna incorporación reciente, especialmente en el caso de Mikel que, por alguna razón, se empeña en presentarnos a todos y cada uno de sus ligues).

De los niños no se habla, porque ya ocupan demasiado. De política, tampoco mucho, que estamos muy de acuerdo. Y, poco a poco, en ese grupo de entre 30 y 40, nos va lastrando la edad y la melancolía: quién hace deporte, quién está para el arrastre, quién se rapa para disfrazar la calvicie de opción estética, cuántos divorcios nos quedan, quiénes de los presentes (de los no sanguíneos) no estarán cuando nos reencontremos en Reyes...

(Un ejercicio bastante duro para las parejas, sí, pero alguno es verdad que sobra; y el mío, Pablo, tiene más hermanos que yo y no se amilana tan fácilmente).

Y es Jon el que se lanza contra la yugular de su hermana Mica, mi prima favorita, por alguna razón que se nos escapa a los demás. “Te quedan diez años, Mica; quince si te operas las tetas. A partir de ahí serás invisible”. Y su mujer, previsible como ella sola, le apoya tan firme como una receta del Cosmopolitan: “Cierto, a los 45 las mujeres nos hacemos invisibles y los hombres se hacen interesantes”.

Yo salto la primera (¡“Eso es una estupidez”!); y mis hermanos se alían con Jon, como han hecho siempre: “Y lo tuyo no son argumentos, Sol”. Pablo también los apoya: "Algunas de vosotras estáis al borde del precipicio. Os vais a quedar solas. A nosotros nos esperan largas colas de rubias de treinta; a vosotras... Nada".

 

-       Porque no tienen criterio.

-       Porque tienen mejores armas.

-       ¿Y qué pasa con lo que uno es, con lo que sabes dar, qué pasa más allá del cuerpo?

-       No pasa nada. O, sí, pasa con tu madre, tus hermanos, tus amigos. Pero más allá del cuerpo no se puede empezar una relación, con suerte sostienes una. Por eso os tenéis que dar prisa, sol-te-ro-nas.

-       ¿Y si no queremos estar en pareja?

-       ¿Y si las ranas volaran?

-       ¿Y si nadie quisiera estar con tipos tan frívolos como vosotros?

-       ¿Y si los mercados no gobernaran el mundo?

 

Ni quiero ni puedo creer que esto ocurra en mi familia, en ese valle en el que cada verano hemos jugado juntos los doce (seis hombres, seis mujeres, más uno que ya no está pero que nunca se fue), sin tópicos ni sexismos, pero ocurre.

Joder, cómo estamos.

A mí me encanta decir que prefiero estar sola que mal acompañada, y lo digo porque es cierto, y ahora está Pablo porque le quiero (aunque a veces...); pero miro a Mica, que es guapa como ella sola, dura, fuerte y capaz, miro a mi prima gemela, y, no sé, le siento la tristeza.

Me la llevo a un rincón y se confiesa: "Yo creo que no he tenido criterio, Sol, que he elegido siempre los tipos con los que no quería quedarme. Pero, vamos, que también te digo que no me voy a operar las tetas ni la cara, ni aunque me lo pague el imbécil de mi hermano".

 

- ¿Y si nos paga tu hermano un 2x1?

 

Mica me sonríe, pero sigue melancólica: "De todos modos, la próxima vez a ver si dejamos a los políticos en casa. Yo quiero saber qué dice Jon cuando no está delante su mujer".

- ¿Está operada?

- No sé, igual del cerebro. Pero te lo digo en serio: estaría bien vernos sin elementos ajenos.

Tiene razón Mica. A mí también me pasa con mis hermanos: los echo de menos y, sabiendo quiénes fueron, quiero saber quiénes son. Pero nunca los veo sin parejas y... con cariño a mis muchos cuñados y cuñadas, con muchísimo cariño, que... ¿ya, no? Y en ese momento, oportuna y directa como siempre, entra su cuñada:

- Oye, Mica, ¿cómo está tu ex?

- Otro día, ¿vale?, que hoy estamos en el paraíso.

- Con las serpientes...- digo, y su cuñada se alela, y yo me pongo a picar hielo, y... Ya no cuento más, que continuará.

 



 

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Hay 13 Comentarios

pues ahora que lo pienso seria precioso un encuentro con mis herman@s, sin los politicos...

Que al final, lo único necesario son tener pequeños paraísos a los que volver, y estar segura de una misma para poder ser feliz. A los 20, a los 30 o a los 80.

Yo nací por ese mismo vallle, precioso el pirineo Navarro, precioso el Irati... nostalgia por todos lados.
Todos los secretos para seducir mujeres clickando sobre mi nombre.

Creo que todo en el carácter de las personas se acentúa con la edad: defectos y virtudes. Lo que pasa es que los hombres huyen despavoridos porque no pueden afrontar las realidades así, y las mujeres tienen más paciencia y capacidad de comprensión con ellos, así que omiten los defectos y los quieren con más edad

...hombres sin criterio, vale de acuerdo, pero casi todos o la inmensa mayoría?...triste, patético...solo "consuela" aceptar esa "falta de criterio" cuando la anatomía y la fisiología intentan explicar esas diferencias con nosotras y esos comportamientos de ellos, con bases cientificamente contrastadas...nos consuela? o nos resignamos?...
Como Sol, secundo estos dias esa máxima "mas vale sola que mal acompañada..." y como dice Alejandra, a ciertas edades las mujeres intimidamos a los hombres porque solas hemos conseguido lo que necesitábamos y queriamos y casi les puedo asegurar que NO hubo ninguna intención de intimidarlos ni nada parecido, simplemente hicimos realidad sueños, ilusiones, objetivos, planes,deseos humanos, naturales, legítimos, femeninos y más...qué de malo hay en ello?...
Saludos, Alejandra, un gusto "oirte..." hasta luegooooo...

Qué gran verdad!! Yo el año pasado tuve uno de esos momentos, incluía padres, pero los cicno solos, sin mujeres ni niños... mis padres, mis dos hermanos y yo... buah... ¡¡duró poco pero fue la leche!!

Paloma, te sigo leyendo y me alegré tanto de tu regreso!
Ya pienso que más allá de las edades, llega un punto en la vida en que se necesita que alguien te resucite, almenos esa
es la impresión que tengo después de ver gente que pide cosas a cambio de poco por no decir nada...
Alejandra!! qué ilusión reencontarte, siempre me alegra leerte,
no desaparezcas!!

¿Viste la peli aquella de Diane Keeton, Jack Nicholson -mmm- y Keanue Reeves -mmmmmmmm-?
Se llama "Alguien tiene que ceder" o algo así.
Pues eso, las mujeres a cierta edad intimidamos a los hombres, porque somos más listas, más autosuficientes, menos dóciles. Menos tontas.
Y ellos, los hombres viejos, no quieren sentirse viejos, claro, como si ver la cara y el cuerpo de una veintiañera fuera verse ellos mismos en un espejo, ja,ja,ja,ja,ja
Pero ellos no saben lo mejor de todo esto: las rubias o castañas jóvenes, ambiciosas y tontas, están con esos vejestorios por eso, o para que les suelten la plata -la mayoría de las veces- o porque son unas idiotas.
Pero los hombres jóvenes que se enamoran de mujeres mayores, GENERALMENTE, léase bien, GENERALMENTE, son muchachos cultos, inteligentes, listos, que quieren y se sienten bien con mujeres como ellos, con mujeres con lo que saben dar; no con tontuelas que los aburren y a lo mucho, sólo les provocan una erección.
¿Qué tal Jon?, te vas a ver fantástico cuando te dé un ataque cardíaco en plena acción con una muchachita.....

Miiiiiira, Paloma, La mujer de Jon está operada del cerebro, igual que tú. Podríais intercambiar impresiones. Quién sabe, igual salta la chispa...

Los paraísos perdidos ya no son lo que eran. Algunos incluso nunca fueron lo que eran.

Valle del Larraun!!!! Desvela el pueblo!!! ;)

Pues de continuar que continue mañana niña, no nos puedes dejar asi.

Awesome really good!

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Sobre la autora

Paloma Bravo
Soy madrastra, periodista y autora de “La novia de papá” (Plaza&Janés). Este blog no lo escribo yo, lo escribe Sol Beramendi, la protagonista de mi novela. O sea, que es ficción y, por lo tanto, absolutamente real.

Paloma Bravo

SOBRE EL BLOG

Según la RAE, madrastra es una “cosa que incomoda o daña”. ¡Y una mierda! “Tía buena (buena en todos los sentidos), lista e inmejorable” es lo que debería decir. ¿O no? El caso es que me ofrecieron crear una plataforma de “madrastras sin fronteras”, pero mis bestias me necesitan en casa, así que nos hemos quedado en un blog. Para hablar de vuestras familias y otros animales.

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