La novia de papá

19 jul 2012

Antónimos

Por: Paloma Bravo

Hienasdelreyleon

(Las hienas de "El rey León", que se reían histéricas de las desgracias ajenas)

 

Ayer me bajé del insomnio a las seis de la mañana.

Leí los tuits de mis poetas mexicanos favoritos y me puse a dar vueltas por Madrid buscando un taller mecánico y un poco de aire. Luego me arrastré hasta el trabajo, en vista de que el trabajo no se arrastra hasta mí y la cosa está muy chunga, y, agotada ya a primera hora, subí directa al despacho de mi amigo M para desahogarme y resetear el día y el milenio.

Me tumbé en su sofá y le tiré en la mesa mi dolor de cabeza y mi obsesión: "Es que no puedo pensar en otra cosa, M. Me paso el día currando aquí, y luego escribo, escribo y escribo, pero no publico el blog porque creo que los lectores esperan que hable de amor, de parejas y de familias, y yo últimamente sólo tengo en la cabeza y en el alma esta sociedad que se resquebraja y la crueldad con la que lo observan algunos, como hienas...".

M., aparentemente comprensivo, había salido de detrás de su escritorio y había acercado su silla hasta mí. Pero no. M. es fiel a sí mismo y lo que le pone es echarme la bronca:


- Ja, amiga, ahí te quería ver yo...

- ¿Dónde?

- En la expectativa.

- What?

- Vosotros los escritores, como los periodistas,vais por la vida con la marca personal por delante, pensando siempre en lo que se espera de vosotros, en ganar seguidores y devotos, en complacerlos, en conseguir retuits, en que os quieran... Y no, querida: sois mayores que vuestra imagen para lo bueno y para lo malo. Sois más grandes y más libres, y os tenéis que responsabilizar de vuestras palabras y de vuestros silencios...

- ¿Qué quieres decir?

 

Acorto la historia: a M. le gusta soltarme discursos sobre escritores sabiendo que yo no lo soy y no vivo de eso, pero, sobre todo, le gusta delegar en mí la insumisión.

Él cree que yo no tengo miedo a nada. Se equivoca: 

"Mi insomnio es miedo. Me da miedo mi jefe, me da miedo el desempleo, me da miedo la crueldad, me da miedo el amor, me da miedo la envidia, me da miedo la injusticia, me da miedo mi columna vertebral...".

 

- No te dan miedo.

- No me dan miedo, no. Me a-co-jo-nan. Lo que pasa es que no dejo que me paralicen.

- Pues eso.

 

No es lo mismo. Pero da igual, que eso ya nos lo explicaron de pequeños: valiente no es quien no tiene miedo, sino quien lo tiene y avanza. Y, a veces, hay que avanzar al otro lado, aunque también dé miedo, que a mí, ya puestos, me aterran también los antónimos, con su falta de matices y su carácter maniqueo.

Contra la sumisión, la resignación y la rendición, se recomienda resistencia, insumisión, desobediencia... ¿Excesivo? No. Los antónimos son extremos y, por desgracia, necesarios.

Mi amigo M., por ejemplo, es un liberal y cree que los recortes son un peaje y que no suspenden la democracia; yo discrepo: la salud, la educación, la igualdad y la dignidad no son recortables. Y, como sigamos así, vamos directos al estado de excepción.

Entonces M. se pone con las lecciones de historia, de contexto y de templanza. Y yo le digo que sí a algunas cosas y que no a otras. Nos peleamos y avanzamos: a ninguno de los dos nos gusta el silencio (al contrario que a algunos destacados miembros de la oposición), porque la primera forma de resistir es discrepar. Y, luego, dialogar, hacer, empatizar, seguir haciendo, caerse, levantarse, hacer más, reírse, querer, compartir, seguir haciendo...

Nada que no hagamos las novias y los padres, los hijos y los abuelos. Nada que no esté en nuestro derecho y nuestra obligación de ciudadanos comprometidos y exigentes. Entre hienas, vagos y maleantes, hablamos, hacemos y avanzamos, jodidos e insatisfechos, insumisos y resistentes, buenos y valientes.

Y ya. Me vuelvo a mi cueva, que me molestan las risas y el "que se jodan" de las hienas.

 

P.D.: a quien pueda interesar, escribo, escribo y escribo porque en los próximos doce meses voy a publictar varios libros. Escribo porque la cultura, aunque le suban el IVA estos malditos, es otra forma de resistencia. Y resistiremos: en papel, en digital, en audiovisual y, si hace falta, volveremos a lo oral.

@PalomaBravo

 

 

 

Compartir

  • Eskup
  • Compartir en Facebook
  • Tuenti
  • Meneame
  • Bitacoras
  • iGoogle
  • My Yahoo
  • My Live

12 jul 2012

La malcasada

Por: Paloma Bravo

 

250px-Pirate_Flag_of_Jack_Rackham.svg

Estoy rodeada de gentes casadas que quieren lo que no tienen, y ni comen ni dejan comer, ni follan ni dejan follar, y que, encima, últimamente esconden sus requiebros detrás de una pantalla en vez de llamar, quedar, tocar y probar. Pero no, desde sus smartPhones y sus iPads, ni pecan ni rematan, que igual es de lo que se trata, de que el emisor se envalentone, el receptor se aburra y el mensaje se quede en lo virtual y no en lo carnal.

Qué pereza.

Hace unos días, justo cuando estaba a punto de explotar y soltar tres gritos, Diana me recordó otro poema de Luis Alberto de Cuenca. Así que, agradecida, perezosa y prudente, delego el blog en un maestro y lo ilustro con una bandera pirata porque en este mundo de mentiras en el que algunos queréis seguir viviendo, lo transgresor es ser sincero. Por eso y porque a este poema le puso música el loco (aquí).

 

 

LA MALCASADA

 Me dices que Juan Luis no te comprende,
que sólo piensa en sus computadoras
y que no te hace caso por las noches.


Me dices que tus hijos no te sirven,
que sólo dan problemas, que se aburren
de todo y que estás harta de aguantarlos.
Me dices que tus padres están viejos,
que se han vuelto tacaños y egoístas
y ya no eres su reina como antes.


Me dices que has cumprido los cuarenta
y que no es fácil empezar de nuevo,
que los únicos hombres con que tratas
son colegas de Juan en IBM
y no te gustan los ejecutivos.


Y yo, ¿qué es lo que pinto en esta historia?
¿Qué quieres que haga yo? ¿Que mate a alguien?
¿Que dé un golpe de estado libertario?


Te quise como un loco. No lo niego.
Pero eso fue hace mucho, cuando el mundo
era una reluciente madrugada
que no quisiste compartir conmigo.


La nostalgia es un burdo pasatiempo.


Vuelve a ser la que fuiste. Ve a un gimnasio,
píntate más, alisa tus arrugas
y ponte ropa sexy, no seas tonta,
que a lo mejor Juan Luis vuelve a mimarte,
y tus hijos se van a un campamento,
y tus padres se mueren.

 

 P.D.: este post es para Cé. Por todo lo demás.


@PalomaBravo

 


 


Compartir

  • Eskup
  • Compartir en Facebook
  • Tuenti
  • Meneame
  • Bitacoras
  • iGoogle
  • My Yahoo
  • My Live

09 jul 2012

La felicidad y la distancia

Por: Paloma Bravo

Hopper.summer-evening

('Summer evening', de Edward Hopper)


Mi amigo Carlinhos me invitó ayer a la exposición de Hopper a cambio de que le escribiera un post. Y, sí, yo se lo escribo, pero no es para él, sino para G&G.

G&G son un hombre y una mujer, y también son mucho más. Son una pareja luminosa y feliz que se nos van lejos y se quedan para siempre.

Yo conocí primero a G., un hombre inteligente y sereno que supo empatizar con la persona más exigente que conozco (él sabe de quien hablo). Y, unos meses más tarde, G., así, sin más, mientras hacíamos la revolución al sol, me presentó a su otra G.: "Te presento a la mujer de mi vida".

Con dos cojones. O cómo demonios se diga la certeza valiente en francés, que es su idioma materno.

Y así aparecieron el viernes en mi casa, casi dos horas tarde, pero llenos de luz, de amor y de valor, queriéndose bien y multiplicando la cuota de felicidad que todos le debemos al mundo. Tanto que, cuando se fueron, nos dejaron en casa la caja de sushi y una especie de primavera que no se va a ir nunca hasta que no vuelvan.

Porque, eso sí, se van a otro continente y dejan atrás enfermedades, juicios, embarazos y malos rollos. Se llevan con ellos, también, un grupo de amigos que, como siempre ocurre en torno a Carlinhos, crece en comunidad y en conexión.

Es irrelevante que G&G se conocieran hace unos meses y ya tengan un hijo de diez años, que G. haya sido "novio de mamá" y G. una madre coraje, que su hija vaya a nacer en otro idioma... G&G son una pareja perfecta y una inmensa familia: ellos y sus alrededores.

Desde "la novia de papá", puedo asegurar que hay pocas cosas mejores que los maravillosos novios de algunas madres que conozco: Carlinhos y G., gracias, todas, por mí y por todas mis compañeras.

Y, a G&G, estéis donde estéis, vamos con vosotros; volváis cuando volváis, aquí estaremos.

 

P.D.: ya me jode hacer un post baboso y romántico, pero este amor es de verdad. Para compensar, y como con G&G hemos hecho risas y revoluciones, aquí, una de las risas del verano pasado, porque de las revoluciones no puedo hablar sin liarla y... Otro día.

 

@PalomaBravo

 

Compartir

  • Eskup
  • Compartir en Facebook
  • Tuenti
  • Meneame
  • Bitacoras
  • iGoogle
  • My Yahoo
  • My Live

05 jul 2012

Egoístas

Por: Paloma Bravo

Yoyo1
(Aquí un yoyo, aquí unos amigos).

 

A mi amigo Koldo no le gusta nada que le saque el diccionario, dice que lo uso como arma y no como herramienta. Y yo le contesto siempre lo mismo (porque sé que le molesta que me repita y también porque es verdad): un arma es una herramienta de guerra.

Pero dejando al margen nuestras rutinas, hoy hemos partido del diccionario y hemos acabado en la filosofía. Hablábamos de alguien, de alguien egoísta.

egoísmo.

(Del lat. ego, yo, e -ismo).

1. m. Inmoderado y excesivo amor a sí mismo, que hace atender desmedidamente al propio interés, sin cuidarse del de los demás.

2. m. Acto sugerido por esta condición personal.

 

Y discutíamos si alguien egoísta es tonto, mala persona o solo eso, egoísta. Mi teoría -depurada con los años- es que el egoísmo extremo es una forma muy extendida y demasiado tolerada de maldad. El egoísta hiere y se cree que es listo porque no se sacrifica, o incluso es rematadamente tonto y se cree una víctima, sacrificado y solidario.

No, hombre, no: eres malo, y te mereces toda la soledad del mundo, que es mucha y muy larga.

Cuando pisas a alguien sin necesidad, cuando piensas sólo en tu satisfacción más inmediata, cuando te resbala el dolor de los demás, cuando pretendes que tu yo gobierne otros mundos, cuando careces de la más mínima empatía, te empequeñeces, te embruteces y te pudres.

Eres un mierda, vaya.

Y así nos va a Koldo y a mí, que tenemos un egoísta particular, dedicado, activo y voraz.

Qué asco.

Qué pena.

Qué rabia.

Y qué pereza.

Andábamos en ésas, cuando me ha llegado el mail de Mario, un viejo cliente que busca desahogo y consejo: su ex, Isabel quiere que vuelvan a estar juntos. Ya. Porque sí.


"Me dice que no ha encontrado a nadie mejor que yo. Y que me ha perdonado.

Sic.

¿Y sabes lo que pasa? Que yo tengo muy claras las razones por las que nos separamos. O, mejor, la razón: ese egoísmo feroz e imperturbable.

Ella lo mantiene, claro, y el que ha cambiado soy yo: ya no soy tan imbécil ni tan crédulo.

O sí, yo qué sé, pero, la verdad, prefiero que me rompa el corazón otra mujer; prefiero estrenar un error y no repetir una estupidez. ¿Tiene sentido?".

 

Lo tiene. Creo.

 

@PalomaBravo

 

 

 

 

 

Compartir

  • Eskup
  • Compartir en Facebook
  • Tuenti
  • Meneame
  • Bitacoras
  • iGoogle
  • My Yahoo
  • My Live

02 jul 2012

Érase una vez

Por: Paloma Bravo

Writing450

Me encantaría escribir hoy un post, pero...

Estoy en la cama, escribiendo, perezosa y feliz.

O no, o estoy en mi mesa, trabajando, aburrida y feroz.

O estoy en mi mundo, más probable, más inseguro.

El caso es que no estoy porque no puedo, pero soy, y estoy llegando.

 

 

 

 

@PalomaBravo

 

 

 

Compartir

  • Eskup
  • Compartir en Facebook
  • Tuenti
  • Meneame
  • Bitacoras
  • iGoogle
  • My Yahoo
  • My Live

28 jun 2012

Desayuno con poemas

Por: Paloma Bravo

MAX

(La ilustración es de Max y salió publicada en Babelia hace unas semanas).

 

Para los que entienden que querer es querer bien, y para los que no entienden nada pero quieren. Para Belén, que me descubrió este poema de Luis Alberto de Cuenca, brillante y luminoso como el amor bueno antes de romperse.

 

Me gustas cuando dices tonterías,
cuando metes la pata, cuando mientes,
cuando te vas de compras con tu madre
y llego tarde al cine por tu culpa.

Me gustas más cuando es mi cumpleaños
y me cubres de besos y de tartas,
o cuando eres feliz y se te nota,
o cuando eres genial con una frase
que lo resume todo, o cuando ríes
(tu risa es una ducha en el infierno),
o cuando me perdonas un olvido.

Pero aún me gustas más, tanto que casi
no puedo resistir lo que me gustas,
cuando, llena de vida, te despiertas
y lo primero que haces es decirme:

«Tengo un hambre feroz esta mañana.
Voy a empezar contigo el desayuno».

 

 

@PalomaBravo

 

 

Compartir

  • Eskup
  • Compartir en Facebook
  • Tuenti
  • Meneame
  • Bitacoras
  • iGoogle
  • My Yahoo
  • My Live

21 jun 2012

Impotencia

Por: Paloma Bravo

Viagra

 

Mi amigo Edu me ha pedido que me deje de filosofía y de política y que haga, otra vez, más veces, la vez definitiva, una entrada sobre sexo.

 

- Claro, mira qué listo...

- Pleaseeeee...- y pone su mejor cara de santo (gran actor, mi amigo Edu).

- Edu, es que me sería más fácil si lo practicara, pero el sexo me pilla muy lejos.

- Pero tía, que vives con tu novio...

- Pues por eso. Lo que tengo es un novio estresado y con un millón de excusas, pero ninguna realidad.

- A ver, a ver... ¿Cómo es eso? ¡Si no lleváis tanto tiempo como para haberos agotado...!

- No me hagas generalizar, Edu, que no es mi estilo.

- Pues explícate en particular y no en general.

- Quiero decir, y digo, que a mi novio, desde que su jefe le empezó a gritar, y se vio venir el ERE, no se le pone dura, vive con miedo y sin sexo, qué le vamos a hacer...

- Pues a mí se me ocurren mil cosas que hacerle.

- Y las he probado todas, esas mil y las otras mil que no se te han ocurrido a ti.

- ¿Y nada?

- Nada.

- ¿Y tu autoestima?

- En el psicoanalista.

- ¿Y la suya?

- Con La Roja.

- Hostia...

- Hostia, sí. Así que, si quieres, yo te escribo un post de sexo, pero cuéntame algo que me inspire...

- ¿Te lo cuento o te lo hago?

- De momento, cuéntamelo.

 

Y, con esto y unas pastillas azules, Edu me ha convencido para intentar un post con mucho sexo. Próximamente... O sea, cuando acabe la Eurocopa. Pero Edu no ha acabado conmigo:


- Sol, perdona, ¿y no será la edad?

- Edu, corazón, que yo tengo un pasado y me he tirado a tíos de sesenta que la tienen como piedras.

- Mira que eres bruta.

- Mira que eres tocapelotas.

- Oye, Sol...

- (...)

- Estoy seguro de que al jefe de tu chico sólo se le levanta si grita, así que igual podías tirártelo a él y matabas dos pájaros de un tiro, o te tirabas a los dos, y me hacías una entrada, y...

 

La conversación empeoró y os la ahorro, pero es evidente que la crisis contribuye a la impotencia, y que la impotencia contribuye a la crisis. Entre los que andan mal follados porque son infollables, y los que andamos mal follados porque no nos dejan follar, estamos todos reteniendo hormonas y sembrando mala leche. He dicho.

(Y perdón por la zafiedad, pero la culpa es de Edu. Si queréis su mail o su teléfono, no tenéis más que pedirlo, que además está cada día más bueno).

 

P.D.: sobre la impotencia y la prepotencia (que a veces son simultáneas y siempre son dolorosas), os dejo un discurso de Martin Amis.

 

@PalomaBravo

 

 

 

Compartir

  • Eskup
  • Compartir en Facebook
  • Tuenti
  • Meneame
  • Bitacoras
  • iGoogle
  • My Yahoo
  • My Live

18 jun 2012

Tu hueco

Por: Paloma Bravo

  Desierto2

 

Por las noches,

cuando acabo con mis trabajos,

mis escritos,

mis lecturas,

mis deberes,

y mis líos,

justo antes de empezar con mis sueños,

te hago un hueco:

 

Pienso en ti,

en el tiempo que hace que no te veo,

en el tiempo que queda para verte,

en lo que haces tú

con tu tiempo.


Cierro los ojos y,

sobre ese fondo negro,

te imagino

(no te veo)

e intento imaginar qué piensas tú,

adivinar si me piensas.

 

No.

No lo creo.

 

Cada vez te veo más lejos.

Es demasiado silencio.

Tú no quieres querer.

Creo.

O no quieres quererme.

O no me quieres.

O no lo sé.

O no lo veo.

 

Y te alejas.

Yo me quiero acercar,

verte,

olerte,

conocerte,

probarte,

morderte.


Despertar tu sonrisa,

provocarte el sexo,

averiguar si podría quererte.


Y tú te vas,

(siempre te estás yendo).

 

Te callas,

te alejas.

Y a veces vuelves,

casi incapaz de no hacerlo.


Vuelves,

te vas,

te vas.

Te callas.

Te vas.

 

Los dos sabemos que

podrías quedarte,

un poco,

bastante,

más.

 

Podrías arriesgarte a

querer.

A querer estar lejos

y a disfrutar estar.

A estar cerca.


Los dos

sabemos

que

que

¿Qué?

que no,

que no vamos a poder,

que no podemos querernos.

O que no queremos.

O que ya no sabemos.

 

Que nos da miedo.

 

 

Este poema lo escribió mi prima. Que no es poeta, pero sí es buena. Con vosotros, Mica, que pasaba por aquí.

 

 


Compartir

  • Eskup
  • Compartir en Facebook
  • Tuenti
  • Meneame
  • Bitacoras
  • iGoogle
  • My Yahoo
  • My Live

14 jun 2012

"¿Hoy qué? ¿Champán?"

Por: Paloma Bravo

Beatles3

 

El lunes de la semana pasada escribí un post sobre la tristeza pensando en alguien que no soy yo, ni mi alterego, pero que en muy poo tiempo se me ha metido dentro. A veces hago eso: tiro los posts a la web como mensajes en una botella, a veces vacíos, a veces llenos, a veces míos, a veces ajenos, para que cada cual encuentre lo que quiera.

Cada cual o mi madre que es la única que me lee con un exceso de fidelidad y la dosis justa de escepticismo, como debe de ser: si yo titulo "días tristes", mi madre ya sabe que estoy bien. O que no, pero que no se lo voy a contar.

No como mi ex, que con esa misma fidelidad pero mucha más credulidad, grita, "¡Bien! Eso es que últimamente le falta sexo, mucho sexo". Mi novio, en cambio, puestos a ser fiel, es fiel a la ignorancia: no dice nada porque procura no leerme, no vaya a ser que se entere de algo, a él que tanto le gusta no saber...

El caso es que yo escribo porque mis amigos no me leen. Y, si me leen, no me creen. Ni Manolo, ni Koldo, ni Domingo, ni M., ni Carlinhos, ni Mario. Me leen sólo si salen en el post y quedan tan maravillosos como son, y yo les copio la url en un mail con acuse de recibo. O ni aún así.

O al menos eso creía yo, siempre tan lista, porque resulta que no, que uno de ellos, leyó la verdad justo donde mi ficción pretendía ser mentira. Muy listo el chico. Mucho. Tanto que se tomó el tiempo de redactar un mail largo e iluminarme en todos los sentidos.

Aquel lunes, a mí me habían despertado en casa con ironía y felicidad ("¿Hoy qué? ¿Champán?"), y luego publiqué el post y empecé a recibir ánimos, y negué necesitarlos, y me fui a yoga, y adelgacé, y compré unas tartas, y trabajé un poco, lo justo, y, cuando ya no daba más de mí, recibí el mail ese que cito.

O sea, éste:

A veces los días alegres son todos, o casi todos.

No por optimismo, ni por esas ganas de vivir que nos hemos echado encima para levantarnos porque no nos resignamos. A veces los días son alegres porque alguien se empeña en quererte, cuidarte y recomponerte con trocitos muy pequeños. Tan pequeños que aunque pierdas alguno puedes pegarlos sin importar el nuevo puzzle y volver a ser mejor aún que lo que eras.

A veces los días son alegres porque puedes quedarte y, si quieres, puedes irte. A veces los días son alegres porque alguien, creyéndose dios, se empeña en que su tormenta caiga sobre los demás pero no ve que los rayos le caen encima y que por encima de nuestras cabezas luce el sol. Y recuerdas que él no sabe que si quieres puedes irte. Y sonríes. 

A veces, digo, muchas veces los días son alegres por capricho y por necesidad.

Entonces, encuentras una canción, como ésta, y la gritas con los amigos de siempre y con los amigos nuevos, y les dices a los cobardes que se vayan a tomar por culo, con mucha educación y mucha calma, y no te quedas a gusto, para nada, pero sí que alivia, que dignidad sólo tenemos una y no se regenera. Para conocer los días alegres, que son todos, hay que pasar un rato gritando, pero solo un rato que nadie se merece otra cosa que nuestra alegría. 

 

Y los que lean y entiendan este mensaje, están invitados el sábado a la fiesta del champán. Y los que no lo lean, porque son amigos míos, también. Es jueves y "Here comes the Sun".

 

@PalomaBravo

 

 

 

Compartir

  • Eskup
  • Compartir en Facebook
  • Tuenti
  • Meneame
  • Bitacoras
  • iGoogle
  • My Yahoo
  • My Live

11 jun 2012

Silencio

Por: Paloma Bravo

Silencio-buenos

La foto la he pillado aquí.

 

Compartir

  • Eskup
  • Compartir en Facebook
  • Tuenti
  • Meneame
  • Bitacoras
  • iGoogle
  • My Yahoo
  • My Live

Sobre la autora

Paloma Bravo
Soy madrastra, periodista y autora de “La novia de papá” (Plaza&Janés). Este blog no lo escribo yo, lo escribe Sol Beramendi, la protagonista de mi novela. O sea, que es ficción y, por lo tanto, absolutamente real.

Paloma Bravo

SOBRE EL BLOG

Según la RAE, madrastra es una “cosa que incomoda o daña”. ¡Y una mierda! “Tía buena (buena en todos los sentidos), lista e inmejorable” es lo que debería decir. ¿O no? El caso es que me ofrecieron crear una plataforma de “madrastras sin fronteras”, pero mis bestias me necesitan en casa, así que nos hemos quedado en un blog. Para hablar de vuestras familias y otros animales.

TWITTER

El País

EDICIONES EL PAIS, S.L. - Miguel Yuste 40 – 28037 – Madrid [España] | Aviso Legal