Sobre el autor

Jose Luis Merino

Jose Luis Merino nació en Bilbao. Vive en esa ciudad. Es autor de 14 libros de arte y literatura. Trabaja en la actualidad en cuatro más, asimismo de arte y literatura. Ha tenido muchas edades. Ahora tiene la edad que representan sus palabras.

Sobre el blog

Como lo haría un fotógrafo de palabras, en este blog aparecerán retratos o semblanzas de gentes de la cultura. La mayoría de ellos son ladrones de fuego, en el sentido rimbaudiano del término. También se hablará de arte y poesía (el único ángel vivo sobre la tierra), en tanto se descubre cuánto hay de auténtico y de falso en esos dos universos.

Ladrones de fuego

Al vent, la cara al vent...

Por: | 30 de septiembre de 2013

ANDREU ALFARO (1929-2012)

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            Llamo enfelizado encuentro al ver por vez primera una esplendorosa escultura de Andreu Alfaro en uno de los paseos arbolados de la ciudad de Burgos. Se trata de una pieza de aluminio de grandes dimensiones. Una placa de bronce sobre la hierba dice: Burgos a las Américas, 1987. Dentro de un estilo racionalista, sus formas geométricas se yerguen como regidoras de modulaciones espaciales. Para su ejecución se utilizaron múltiples perfiles industriales cuadrangulares de metal, de 6 x  6 centímetros y 2 milímetros de espesor. En el desarrollo de la obra adquiere un valor máximo el juego dual de concavidades y convexidades, provenientes de fuerzas centrífugas y centrípetas. Mas la aparente frialdad de la pieza deja de serlo porque en su ideario constructivo ha intervenido la inteligencia emocional de  su creador. Y así, ese cuadrivio de fuerzas alternativamente contrarias, ha sido neutralizado y domeñado en función de una geometría humanizada, dando entrada a una serie de bucles y las ya apuntadas modulaciones espaciales.
    Toda esa multiplicidad de piezas de perfil cuadrangular, una vez se han acoplado a los ritmos  constructivos propios de la escultura, terminan en sus extremos proyectándose hacia el espacio exterior, de tal suerte que, aún siendo, como es, una pieza de abstracción geométrica, pueda sugerir afinidades con formas naturalistas, como por ejemplo los agitados aleteos de una mariposa estática, o bien tres olas a punto de romperse, e incluso como un grupo de aves que acaban de posarse en tierra (la imaginación descubre formas que la realidad deniega)...
     A un lado la lírica imaginativa, la escultura de Andreu Alfaro puede codearse en valor artístico con esculturas públicas de artistas de primera fila, como Henry Moore, Richard Serra, Claes Oldenburg, Jean Dubuffet, Jacques Lipchitz, Nicolas Schöffer, Alexander Calder, y otros.
                                                                     ***
     Conocí a Andreu Alfaro el mismo año de la aparición del disco de vinilo del cantautor Raimon. En el disco estaba Al vent, uno de los temas más célebres de la canción-protesta del franquismo. Hablo de 1963. Mi viaje a Valencia, lugar donde vivía el escultor, se debía a mi interés por ver las obras de Alfaro, de cara a la galería de arte que me disponía a abrir en Bilbao un año más tarde. Me gustaron sus trabajos. Volví a casa con la idea de contar con él para el nuevo proyecto galerista. En mi equipaje venía el disco de Raimon, tras la fervorosa insistencia de Alfaro para que me lo llevara.
                                                                    ***
     Han pasado cincuenta años desde entonces. En ese recorrido temporal, Alfaro se convirtió en un escultor de sólido prestigio. Hay esculturas públicas suyas en no pocos lugares del mundo. Intervino como impulsor del IVAM (Instituto Valenciano de Arte Moderno). La amistad entre él y Raimon fue acreciendo con el tiempo, hasta el día de la muerte del escultor, el 13 de diciembre de 2012.
                                                                   ***
     Todas las veces que acudí para analizar-degustar-disfrutar de la escultura de Alfaro en el paseo burgalés, me pareció escuchar al lado del trino de los pájaros de la arboleda, la emblemática canción que grabara Raimon hace muchos, muchos años: Al vent, la cara al vent, el cor al vent, les mans al vent, al vent del mon... 

 * En la imagen: Inauguración oficial de la escultura de Andreu Alfaro en el paseo El Empecinado (Burgos, 1987). Archivo fotográfico FEDE.  

                                    [siguiente personaje Groucho Marx: 7-10-2013]      

 

 

E. Poniatowska en el ordenador de sueños

Por: | 23 de septiembre de 2013

            ELENA PONIATOWSKA (1932)

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             La narradora, ensayista y periodista mexicana Elena Poniatowska, nació en París, en 1932. En sus inicios como escritora estuvo unida a la causa feminista y a la izquierda política. Es autora libros como La noche de Tlatelolco (1971), De noche vienes (1979), Nada, nadie (1985), La flor de lis (1988), entre otros. Ha obtenido varios premios, entre otros, el de Novela Alfaguara (2001), por La piel del cielo; el XV Rómulo Gallegos (2007), por El tren pasa primero; el Biblioteca Breve (2011), por Leonora (en torno a la pintora Leonora Carrington). En 1978 le concedieron el Premio Nacional de Periodismo en México. Les presento una reciente entrevista frente a mi ordenador de sueños:   

           ¿Al despojar a los personajes de parte de su sexualidad, se da más paso a su condición racional?
          
 No, no tiene nada que ver. El amor es lo más racional que tenemos.
          ¿Las palabras son símbolos-máscaras que propagamos sin descubrir el enigma?
    
     Las palabras son lenguaje y el lenguaje está hecho de símbolos. Octavio Paz las llamó putas y las hizo chillar.
        ¿Conoce algo tan alegre como el aleteo de una mariposa en verano?
     En México también hay mariposas negras y algunos mexicanos (incluso científicos) están persuadidos que anuncian la muerte. Así es la mariposa de obsidiana que encontró Hernán Cortés. Es más alegre un buen tequila en cualquier época del año.
      Si en los inicios el motor impulsivo de la escritura se nutre de presunciones-sobrestimaciones-pedanterías, ¿es el paso de los años quien se encarga de dejar a un lado al Gran Yo, para adentrarse en el Mini Yo? ¿Por qué a la larga siempre se impone el Mini Yo?
      
 Con el paso de los años todo se hace mini. El paso de los años te obliga a abrocharte tantísimos botones, creer que estás brindándole a tu interlocutor tu mejor sonrisa y se te quedó una espinaquita entre los dientes, fijarte dónde pones los pies, lo cual entorpece tu andar y le quita su gracia. El Mini Yo recibe saludables lecciones de humildad. Ya nada se impone al final, salvo ese largo trayecto que significa llegar de la mañana a la noche como el “Voyage au bout de la Nuit” de Céline.     
        ¿El lector no tiene que ver lo que el novelista ve, sino lo que el novelista quiere que vea? De otro modo: ¿el novelista enseña al lector lo que quiere, lo cual no es siempre lo que debe?
          
El novelista enseña lo que puede porque escribir cuesta mucho trabajo. El lector lo completa, camina a su lado, mejor dicho, lee con él, es parte del texto. Si no sucede nada, la novela se quedó solita, sin lector.
        ¿Llamaremos avance el haber salido de la cueva de Altamira para entrar de lleno en la del Hambre Universal?
    
    Ahora mismo, además del hambre universal, estamos en la cueva del espacio cibernético.
     ¿Mientras el novelista trata de abarcar la suma de la realidad, el poeta pugna por salirse de ella a toda prisa?
       
Los surrealistas inventaron otra realidad; Marcel Duchamp es un poeta, su escalera, una poesía. Leonora Carrington es una extraordinaria cuentista y nadie diría que Frida Kahlo no es una gran escritora. Pedro Páramo es poesía, Cien años de soledad también. La realidad es de quien la trabaja, también el amor es de quien lo trabaja.
      ¿Por qué nunca o casi nunca coinciden lo que nos pasa con lo que deseamos?
     
 Porque, como Margaret Mitchell le hacía decir a Scarlett O'Hara, en su novela Lo que el viento se llevó, “I’ll think about it tomorrow”. Mejor mañana pienso en esta pregunta tan difícil.

    * Elena Poniatowska fotografiada por Gianluca Battista

                                        [siguiente personaje Andreu Alfaro: 30-9-2012]

Ramiro Pinilla y los dioses

Por: | 16 de septiembre de 2013

RAMIRO PINILLA (1923)

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     Ramiro Pinilla es uno de esos raros individuos clasificados como “bartleby de la narrativa española”, o sea, esos escritores que hacen oídos sordos a la fama literaria y demás purpurinas del estrellato escriturario.
    Después de obtener el Premio Nadal en 1961, por Las ciegas hormigas, y quedar finalista en el Premio Planeta en 1971, Pinilla convirtió su vida en un peregrinaje hacia su paisaje interior. Se dedicó por entero a literaturizar la vida del pueblo vasco. Escribió novelas cortas y libros de relatos, además de la biografía Antonio B... “el Rojo”, ciudadano de tercera (el testimonio sobre un marginado social).
    
A finales de los ochenta emprendió la construcción de una novela mastodóntica, de título Verdes valles, colinas rojas. Siempre sobre esa inmersión buceadora hacia las raíces del pueblo vasco. En los veinte años invertidos en escribirla, a menudo pensaría si valía la pena indagar sobre esas raíces, y si en ellas podía encontrar paradigma alguno de carácter universal. Pero le mantenía la creencia de que cualquier colectivo lleva dentro de sí un trozo de universo. Alguien ha dicho que lo local es el guante que nos ponemos para alcanzar el universo. En tanto creía y dudaba, su mano iba tejiendo el trenzado de las historias creadas bajo signos antitéticos: inicios y rechazos, audacias y miedos, en un continuo poner y quitar, restar y sumar, etcétera y más etcéteras.
    La editorial Tusquets de Barcelona editó la obra en tres tomos. Fue recibida en el mundo de las letras como un gran acontecimiento narrativo. Alguien ha definido Verdes valles, colinas rojas como una obra monumental, de las que nos reconcilian con la gran novela del aliento humano e histórico.
    Uno de los aspectos sorprendentes de ese trabajo lo constituyen esos veinte años de paciente e ininterrumpido laborar. Las vivencias del escribir forjadas cada día, hora a hora, minuto a minuto, sobre un territorio de papel en blanco llamado País Vasco.
    Si alguien sintiera una cierta compasión hacia el autor de Verdes valles, colinas rojas, por esas dos décadas invertidas entre los sombrajos de papel, deje de sentirlo así. Para Pinilla esos son los veinte años mejores de su vida. Ha podido vivir en ese tiempo metido de lleno dentro de un oficio que ama...
    Digo más: es tanto el disfrute alcanzado cuando se llega al final de una idea, de una secuencia o de una frase, como cuando se rechaza una y otra y otra vez ideas, secuencias, frases o incluso tal o cual única palabra. Esa solución, que el autor considera válida y definitiva, viene a ser parecida a aquella palabra justa que perseguía Flaubert para cada frase.
    Cuando en alguna ocasión me he encontrado en mis paseos cerca del mar con Pinilla, le preguntaba cómo iba con su novela, cómo la llevaba. “Sigo en ella”, era su lacónica respuesta. Por su persistencia en el trabajo acrecía mi admiración por él. Admiraba esa entrega incondicional e intensa del escritor bilbaíno en la seguridad de que era consciente de estar cambiando por palabras su propia vida.
    La escritura está sola, está sola y de camino. El que escribe queda entregado a ella. Esto comprende a escritores como Ramiro Pinilla, para quienes R. L. Stevenson vaticinó: “ Si un hombre ama cualquier oficio sin preguntarse por el éxito o la fama, es que los dioses le han llamado”.

       * Ramiro Pinilla, quien el pasado viernes cumplió 90 años, fotografiado por Luis Alberto García

                         [siguiente personaje Elena Poniatowska: 23-9-2013]

Tina Silc: voz de Eslovenia

Por: | 09 de septiembre de 2013

TINA SILC (1982)

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     Con voz cálida y un sentido profundo en el fraseo, la mezzosoprano eslovena, Tina Silc, estuvo soberbia en el papel de messaggiera en “L’Orfeo” de Monteverdi. La ópera se llevó a cabo en el Teatro Principal de Burgos, la noche del 20 de julio de este año. Al día siguiente volvió a confirmar su calidad expresiva, en el Stabat Mater, de Pergolesi, junto a la soprano Susana M. Dudoignon, en el concierto de la Academia Internacional de Música Antigua, celebrado en la Iglesia del Hospital del Rey (Burgos),  actuación merecedora de efusivos braveados. Realmente, Tina Silc mostró en la obra de Pergolesi su voz de bella y profunda sensitividad, evidenciando que la línea de la voz grave apenas sube, para permanecer tendida sobre las notas largas, de tal suerte que la asunción de la dramaticidad doliente, no deja espacio alguno para la alegría.
     Tina Silc nació en la capital eslovena de Liubliana. Comenzó su formación musical a los ocho años en el Conservatorio  Fran Gerbic, donde estudió piano y canto, siendo galardonada en dos ocasiones. Se trasladó a Madrid, donde continuó su formación vocal. Tuvo como maestros a la soprano checa Eva Novotna y al británico David Mason. Amplió su formación en los géneros  de Lied, Ópera y Oratorio en el Curso Magistral de Viena, con el tenor alemán Schreier.
      En torno a la música antigua ha recibido enseñanzas de especialistas, como Gerd Türk, Stephan van Dyke, José Hernández Pastor, Manuel Minguillón y Gabriel Menéndez. Ha participado en recitales sobre canciones eslovenas del siglo XIX, junto a obras de Schumann, Dvorak, Fauré y Bellini. En su repertorio atesora con admirativo fervor  arias del Magnificat, Oratorio de Navidad y Misa en Si menor, todas ellas de Juan Sebastián Bach. Tiene en proyecto un concierto de música sacra del organista y compositor esloveno Dalibor Miklavcic, Dvorak (Stabat Mater), sin olvidarnos de la invitación expresa del Telemann Ensemble, para interpretar cantatas de Telemann.
     La conversación con Tina Silc en torno a la música se convierte en un inconmensurable deleite. Destila amor a la música, y lo refrenda con acuciosa pasión, no en balde la música es la razón máxima de su existencia. El encuentro discurrió con suma fluidez. Hablaba de lo que constituía su manera de ser y respirar. Es como si hubiera estado esperándome desde hacía mucho tiempo.
      He ahí algunas de sus respuestas tomadas a vuela pluma o en puro azar mallarmeano (el azar es el mejor de los vuelos posibles): “La música añade al vivir lo bello y lo sublime” ...  “La pasión es perpetuum mobile, pero hay que saber dosificar al interpretar un papel; primero debe pensarse en emitir un buen sonido, sacar el máximo provecho al texto cantado y a los recursos del canto, escuchar en todo momento la orquesta, prestar atención a la afinación, y la actuación entraría en el segundo plano. Por eso es un gran reto coordinarlo todo y ser una buena cantante y poseer excelentes dotes de actriz al mismo tiempo” ... “En el alma existe una voz interior, con la necesidad de expresarse e intensificar el vivir” ... “La voz de mezzosoprano alcanza su esplendor en el siglo XIX, con las grandes papeles de femme fatale como Charlotte de Massenet, Carmen de Bizet y Dalila de Saint-Säens, Rosina y La Cenerentola de Rossini, o Azucena de Verdi; aunque el Mozart maduro de la Clemenza de Tito, también supo crear un memorable trouser role tal el de Sextus” ... “Ciertamente, la voz de soprano es una encantadora compañera sine qua non” ...
      La cantante eslovena pone en la cima de sus predilecciones a las mezzosopranos Christa Ludwig, Marylin Horne, Susan Graham, Sarah Connolly, Elina Garanca, Bernarda Fink, entre otras, sin dejar de hablar con orgullo patrio de los compositores de su tierra, Kamilo Masek, Fran Gerbic, Benjamin y Josip Ipavec, Emil  Adamic, Josip Pavcic, Lucjan Marija Skerjanc...

     * Ha recibido recientemente un Diploma en Interpretación Musical (Canto), otorgado por la Royal School of Music de Gran Bretaña.

      ** Firma la fotografía Irene Bujalance 

                                       [siguiente personaje Ramiro Pinilla: 16-9-2013]

Iker Casillas y la honda de David

Por: | 02 de septiembre de 2013

IKER CASILLAS (1981)

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    También en el fútbol se visten de corto ángeles y demonios. Está sucediendo con  la suplencia de Iker Casillas como guardameta del Real Madrid. El origen de esa suplencia viene dado porque al entrenador del equipo, José Mourinho, no le gustó que Casillas hablara con los jugadores del Barcelona para limar asperezas entre los componentes de uno y otro equipo. El entrenador lo tomó, no como lo que fue, un gesto de noble sensatez, sino como una traición disciplinaria. A partir de ese momento, castigó al "traidor" a ser suplente en la portería. A la temporada siguiente, tras la marcha intempestiva de Mourinho, el club madrileño contrató un nuevo entrenador, quien asimismo ha relegado a la suplencia al cancerbero damnificado. Según se rumorea, su decisión lo es por motivos puramente deportivos. No siendo una ecuación matemática, lo razonable sería explicarlo argumentalmente. No hay tiempo para las palabras. Solo el silencio de un muñeco sin brazos.
    Entre tanto, la disyuntiva futbolera agita corrillos y tertulias. Los adeptos a Casillas le animan a marcharse cuanto antes a otro club. Para que vean lo que vale un peine (dicen los castizos) y de paso para poder estar en forma de cara al Mundial de Fútbol de Brasil del año próximo.
    Los aficionados más conspicuos ven errónea la salida del club, puesto que rompería una trayectoria sin fisuras, cimentada por un hacerse a sí mismo, mediante un continuado esfuerzo individual encomiable. Aseguran: debe continuar firme y responsable en su actitud. A lo que añaden: todavía puede dar lecciones de ética a más de uno, empezando por el presidente de la entidad, Florentino Pérez.
    Los sociólogos del fútbol señalan a Florentino Pérez como responsable máximo de la suplencia de Iker Casillas. Aquel gesto de noble sensatez expresado por Casillas fue el detonante. En vez de valorar esa acción, a partir de ese instante le otorgó al entrenador portugués todos los poderes imaginables. Con tales poderes, llegó el castigo mencionado. Mas ese proceder vengativo tiene un precedente avieso. Aconteció durante un encuentro de fútbol entre los dos equipos  (Barcelona y Madrid). De pronto, y por sorpresa, el vengativo entrenador agredió al segundo entrenador del Barcelona, metiéndole un dedo en el ojo. En lugar de solicitar una cita con el psiquiatra de guardia, el presidente del club blanco tomó esa contumaz agresividad como una señal inequívoca de amor al club.
    Ante estos precedentes, nadie con dos dedos de frente le pediría a Casillas una visceral y precipitada marcha del equipo. Su permanencia supondría una contundente prueba más sobre quién posee un verdero amor filal al Club. La cátedra futbolante de mayor rigor ha ido más lejos, al afear la conducta del presidente por no acercarse hasta Casillas, ni ante ni ahora, para animarle a llevar la situación de la mejor manera posible. Lo refrendan de esta guisa: quien ha defendido con reconocida eficacia y honestidad durante tantos años el escudo del club, merece una alentadora mano en el hombro. Por mínima que sea.
    Termino con un par de  remates entre los tres palos:
    *  A la larga, y sin llegar a los penaltis, la honda de David siempre vencerá a Goliat. ** Los dineros invertidos en fichajes millonarios, por parte de los dos clubes todopoderosos, como el Madrid y el Barcelona, les dan la seguridad de ganar muchos títulos, en lo concerniente a las competiciones españolas. Pero esos títulos los consiguen enfrentándose, año tras año, a equipos más modestos y, por tanto, de inferior calidad futbolística. Un puñado de pájaros (¿debería decir pajarillos?) dispara contra dos misiles. Luego, todo ese triunfalismo viene a ser de filfa y capulí. Ajilimójili: con todo, lo verdaderamente obsceno y denigrante son esos fichajes millonarios llevados a término en un país de niños desnutridos, donde la tasa de paro va por cifras espeluznantes e inadmisibles. Esa es la España de pan y fútbol que nos vive. Este mismo artículo, aunque de manera involuntaria, es parte de ese cloroformismo panfutbolero.  

                                        [siguiente personaje Tina Silc: 9-9-2013]

El País

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