Ladrones de fuego

A Marguerite Yourcenar, con admiración

Por: | 03 de marzo de 2014

MARGUERITE YOURCENAR    (1903-1987)

Marguerite Yourcenar 4       Aunque seamos impenitentes admiradores de Jorge Luis Borges, o quizá por eso, no podemos perdonarle que haya cometido el solecismo intelectual de olvidarse de la escritora belga Marguerite Yourcenar (1903-1987).
    Resulta extraño que no nos informara nunca de esta talentosa mujer, cuyos múltiples ensayos resultan lacónicas obras maestras. En su libro ensayístico El tiempo, gran escultor, abarca muy diferentes siglos y temas. Como en los ensayos del propio Borges, los escritos de Marguerite están poblados de referencias cultas. Si en Borges la actitud del escritor es más distante, en cuanto a los temas, en Marguerite se vive con especial pasión. Se pone a favor de una parte determinada, y se empeña en que esa parte acabe por interesarnos vivamente a nosotros, lectores atentos.
     Los temas son variados: Buda, Durero, Miguel Ángel, Andalucía o las Hespérides, Mishima y un sinnúmero de entrecruzamientos, a cual más cautivadores.
     Quien lea estos ensayos se verá bañado de una esplendorosa experiencia. Será testigo de una lucidez asombrosa, unida a unas preciosas gotas de poesía de máxima calidad. Lo recibirá al modo de simples confidencias, como si se lo contaran de manera conversacional. Como si lo que Yourcenar sabe no fuera otra cosa ya sabida por el lector.
      De los muchos autores que Borges ha hecho referencia en sus libros y entrevistas, parece inconcebible que no mencionara nunca, siquiera de pasada –y lo digo por segunda vez–, a esta extraordinaria creadora.
     Otro libro del que Borges no ha querido dar señales de apreciarlo es el libro de ensayos A beneficio de inventario. Libro en el que Yourcenar habla de Thomas Mann y de Kavafis, explicándonos parte de sus obras, con acentos personales de ambos. También nos cuenta la historia de un castillo en Francia, llamado Chenonceaux. A su través vamos enterándonos de trozos de historia (Diana de Poitiers, Enrique II, Catalina de Médicis...). Es un contar ameno, profundo, hermosamente narrado.
     Para algunos será un descubrimiento cuando les hable del grabador italiano Piranesi (siglo XVIII, el de las prisiones imaginarias). Artista que fue todo un símbolo admirativo para Víctor Hugo, Coleridge, de Quincey, Goethe, Keats, Byron, entre otros...
    En un momento dado se vuelca cariñosa y lúcidamente para mostrar el genio de la sueca Selma Lagerlöf, adentrándose en su obra como pocas veces hemos visto hasta entonces. Por otro lado, hay que mencionar especialmente el ensayo corto, pero intenso, sobre los biógrafos de veintiocho retratos de emperadores romanos. A la cabeza de todos, Adriano, tan caro a la propia Marguerite, autora memorable de su libro Memorias de Adriano. Con el recuerdo del poeta francés, Agrippa d’Aubirné –“uno de los poetas más grandes, pero también uno de los menos leídos entre los poetas franceses del Renacimiento”–, Yourcenar despliega sus amplísimos conocimientos de la historia, poniendo ante nuestros ojos su prosa admirable.

                               [siguiente personaje Antonio Gamoneda: 10-3-2014]

Hay 6 Comentarios

A la falta de ¿generosidad, conocimiento, oportunidad? de Borges, Merino despliega un abanico apasionado de referencias, con libros esenciales y un elenco vertiginoso de temas tratados (más las ineludibles "Memorias de Adriano"). Y adorna su homenaje con una encantadora fotografía de Yourcenar, que nos invita a quererla, además de admirarla.
La inteligencia, la sensibilidad y el talento, por suerte, no son privativos de nadie. Y cuando aparecen, refulgen por sí solos.
Como pequeño grano de arena, quiero añadir a las obras citadas en el artículo las hermosísimas "Nouvelles orientales".

del libro memorias de adriano, recuerdo el pasaje, donde lei,..................... hay que eliminar los enemigos fisicamente para conservar, o llegar al poder, siempre esta en la mente de los que, .............. el fin justifica los medios, solo que maquievelo, existio muchos siglos despues.

Y qué decir de su obra Opus Nigrum...una obra maestra que no ocupa el lugar que merece en la lista de clásicos. Una pena el desconocimiento de esta escritora en nuestro país.

Un magnífico escrito dedicado a la gran Marguerite, a pesar de que nuestro amado Borges la tuviera secuestrada. No así Julio Cortázar. Por cierto, la foto que acompaña al artículo tiene la virtud de trasmitir paz y alegría la mismo tiempo.
Leí uno de sus libros “Las memorias de Adriano” hace más de veinte años, recuerdo que una persona, ya entrada en años, me comentó que yo no podía captar el verdadero significado del libro, que era necesario tener más experiencia vital, haber reflexionado más sobre la vida y la muerte,… Han pasado los años y sinceramente creo que tenía razón.
¿ Qué es lo que yo no podía entender del libro? ¿ de qué trata?
El emperador romano Adriano al ver próxima su muerte, decide narrar su vida en un escrito dirigido a Marco Aurelio. La narración, en primera persona, describe con un estilo poético su vida. Marguerite ilumina pasajes con estilo culto y refinado, a veces acercándose a lo poético e intenta reproducir las reflexiones de un hombre próximo a su fin : … “Esta mañana pensé por primera vez que mi cuerpo, ese compañero fiel, ese amigo más seguro y mejor conocido que mi alma, no es más que un monstruo solapado que acabará por devorar a su amo”
Es un escrito denso. De principio a fin es un continuo e inteligente monólogo. En definitiva, una de las grandes obras que yo he leído.
Gracias José Luis por tus escritos, me han recordado el paso del tiempo y lo insignificantes que somos “ como un arañazo en la faz de la tierra”
Un saludo
Santi

Yourcenar es una de mis escritoras preferidas; en l'oeubre au noir, nos introduce en una época de peste y desigualdad, donde el personaje Zénon se esfuerza como médico en amortiguar el sufrimiento. Zénon de ideología progresista, se suicida para no renunciar a sus convicciones. En todas sus obras refleja la realidad de cada momento con maestría, resultando el texto, enriquecedor y ameno.
Los creadores pueden ser más, o menos afines a sus colegas, posiblemente Borges no conocía la obra de Yourcenar, o le era indiferente.

Yourcenar, anagrama de Crayencour, su verdadero apellido, fue una de las mujeres más interesantes y cultas del siglo pasado. Poesía, ensayo, historia, incluso traducción de Woolf o James, casi nada resistió su sensibilidad y talento. "Memorias de Adriano" fue un primer aldabonazo en mi juventud, el descubrimiento de otra manera de ver la historia y sus grandes personajes. No voy a decir nada mejor sobre su obra y talento que lo magníficamente expresado aquí por José Luis, pero aprovecharé para reivindicar algo especialmente importante en los tiempos oscuros en que vivimos. Por mucho que les pese a algunos admiradores o pseudo-biógrafos, Yourcenar no era bisexual, sino lesbiana. Una mujer con tales conocimientos de la historia, literatura y cultura clásicas y mundiales no debería sufrir semejante falsedad, intencionada o no.

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Sobre el autor

Jose Luis Merino

Jose Luis Merino nació en Bilbao. Vive en esa ciudad. Es autor de 14 libros de arte y literatura. Trabaja en la actualidad en cuatro más, asimismo de arte y literatura. Ha tenido muchas edades. Ahora tiene la edad que representan sus palabras.

Sobre el blog

Como lo haría un fotógrafo de palabras, en este blog aparecerán retratos o semblanzas de gentes de la cultura. La mayoría de ellos son ladrones de fuego, en el sentido rimbaudiano del término. También se hablará de arte y poesía (el único ángel vivo sobre la tierra), en tanto se descubre cuánto hay de auténtico y de falso en esos dos universos.

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